Katarina

Preparé la cena y estuve esperando a Michael por horas, el no llegó y me sentía una tonta en este momento.. necesitaba de el y el ni siquiera ha vuelto a casa cuando se suponía que debia. Derramé todo mi maquillaje con mis lagrimas y solo opte por ir a recostarme, no quedaba mas que hacer aqui y si lo esperaba sabia que no me escucharía y fingiría estar cansado. Esto no va nada bien.

- ¿Que hora es, Bri? - oí provenir de la calle.

Me asomé y vi a Michael venir con dos hombres hacia la entrada de la casa, parecía algo desalineado y borracho... esto no esta nada bien, lo repito.

- Adiós, amigos. - dijo cuando al fin pudo abrir la puerta.

Tomé valor y bajé hacia el, estaba tan molesta con el ahora mismo y sé que no está en condiciones para pedirle explicaciones pero de todas formas lo haré.

- Hola, amor. - dijo mirandome con una sonrisa. - intenté llegar temprano, pero me encontré Brian y Lance.

- No me importa lo que haya pasado, ¿te das una idea de lo que pasé esperandote? - negué varias veces abrazandome a mi misma. - queria que tuvieramos una cena y tal vez pasariamos el rato, pero no llegaste.. Fabian vino a maquillarme para ti y no llegaste..

Me di la vuelta y estaba por subir las escaleras cuando el me tomó la mano haciendome volver hacia el.

- Perdón, no tengo mas que decirte. - acarició mi mejilla. - podemos cenar ahora y hacer el amor..

Intentó besarme pero me aparté.

- Michael, estas comportandote como un niño. - le dije mirandolo con asco. - ¿crees que no sé porqué estas comportandote como un idiota?

- No sé de que hablas, solo quise tener un tiempo con mis amigos, ¿no lo merezco?

- Ese no es el problema, te comportas asi porque te dije que no queria hijos, ¡por dios, Michael! - tomé su mano.

- ¿Y que si es por eso? amor, sabes lo mucho que deseo eso.

- Y tu sabes lo mucho que deseo conseguir un trabajo y no depender de ti, se suponía que ibamos a cumplir nuestros sueños.

- ¡Este es un sueño!

- ¡Es tu sueño! - le dije y el solo frunció el ceño. - No eres un niño.

- Sé que soy un adulto, y lo unico que quiero es tener un hijo.

- Deberias preguntarme que quiero yo, esta relación no solo se trata de complacerte a ti o a mi. - me senté en el sofa. - me molesta que te comportes como un caprichoso, debes entender mi posición como mujer.

- La entiendo, sé que tienes sueños y metas.. pero una vez en mi vida te estoy pidiendo algo y no lo quieres.

Se quitó la corbata y comenzó a subir las escaleras.

- ¿Por qué de la nada lo deseas tanto? - le dije con curiosidad.

- ¿Sabes lo que es ir a ver a tus hermanos  y que tengan hijos y ver como se dan cariño?

Lo miré inexpresiva, debí haber sabido que se trataba de eso.

- Me siento vacio, te tengo a ti y pensé que era suficiente pero aveces tambien me gustaria ver a mi niña corriendo por los pasillos de la casa o jugar futbol con mi hijo. - bajó la mirada.

Sentí algo de lastima por el, creo que estoy siendo un poco dura con el.

- Lo siento, no sé que mas decir..

Me senté a un lado de el en la cama.

- Me encantaría hacerte feliz con eso, pero aun no es el momento, al menos para mi... sabes que deseo tener un trabajo y que tengas una casa en el futuro.

- Tenemos todo lo que necesitamos aqui. - dijo tomando mis manos.

- Michael, quiero que tengamos una casa propia.. sé que amas estar aqui, pero es la casa de tus padres y deberias dejarsela a Janet.

- No, no... - frunció el ceño otra vez. - ¿Que hay de malo con mi casa?

Se puso de pie y comenzó a caminar de un lado a otro.

- No tiene nada de malo tu casa. - dije mirandolo.

- Hay algo, tiene que haberlo como para que no quieras quedarte aquí. - se dio la vuelta. - ¿Acaso no tiene los lujos a los que estas acostumbrada? mira que no puedo darte todo lo que quieras, pero aun asi lo intentó... te dije que..

- ¡Callate! - me puse de pie sintiendo que me herbía la sangre. - ¿en serio crees que no me gusta tu casa por que no tienes lujos y esas estupideces?

Me sentía mal al oirlo decirlo como si yo estuviese interesado en las cosas materiales que el tiene.

- Dejé a mi familia por ti, dejé todo lo que tenia y es mas, deje toda mi vida por estar contigo y ahora me dices estas cosas.. no te reconozco, no lo hago.

- Jamás te pedí que dejarás algo por mi.

Para mi esa fue la gota que rebasó el vaso, jamas le he demostrado ser una interesada y mucho menos me quejé por haber dejado mi vida. Lo amo, pero no puedo entender como a estas alturas me dice estas cosas sin pensar.

- Al diablo con esto. - dije y me arrodillé para sacar de abajo de mi cama mi maleta.

- Katarina, no seas tonta.. lo siento.. - dijo intentando hacerme parar.

- No quiero que digas nada, no puedo creer que despues de todo lo que pasamos estas tratandome de esta forma.. - lo empujé y el se tambaleó un poco debido a la borrachera.

Guardé todas mis cosas en la maleta y el solo me miraba desde la cama, lo amo mas que a cualquier cosa y el lo sabe pero entiendo como es que Michael se pone en esta posición de presionarme como si fuese cosa de embarazarme, dar a luz y continuar con nuestras vidas.. no es asi de facil y no lo quiere entender.

- ¿A donde irás? - preguntó poniendose frente a la puerta.

- Me voy a casa de mi tia, muevete. - dije empujandolo un poco.

- No voy a dejarte ir, eres mia. - dijo y me tomó entre sus brazos.

- Michael.. yo no soy de nadie. - dije intentando apartarlo.

- Tu eres mia asi como yo soy tuyo.. - susurró en mi oido. - solo debes pensar bien, verás que todo saldrá bien.

- ¡Ya basta! - lo aparté de mi. - No quieres entenderme, no quieres escucharme y no voy a permitir que solo tus deseos deban ser cumplidos.

Lo hice a un lado y pase por su lado, es tan insensible de su parte hacer esto. Salí de la casa y tomé una copia de la llave por necesitaba volver, dudo que pueda estar mucho tiempo lejos de el pero quiero una disculpa, quiero su amor.. no quiero mas que eso y su comprensión por sobre todo.

- Michael, me haces sentir como si tuviera la culpa de todo y yo no soy la mala.. - susurré.

Crucé la calle mirando para ambos lados, estaba tan oscuro y me daba tanto miedo estar aquí. Mis ojos estaban llenos de lagrimas y me sentía frustrada, solo quiero que el venga por mi y me ruegue.

- ¡Katarina!

Sentí un impacto en mi cabeza y caí al suelo sintiendo que todo se oscurecía y ya no sentía mas, estaba confundida.

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Espero que lo disfruten.

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