Michael

Estuvimos preparando todo para nuestra primera marcha en conjunto, mucha gente se unió a la causa y ya eramos mas de cien personas. Katarina, se ha mantenido fuerte y decidida y eso es lo que mas me hace feliz.. nuestra relación es genial, hemos estado practicando cosas nuevas y poco a poco vamos teniendo esa confianza que necesitabamos para hacer cosas nuevas. Hoy era nuestra ultima junta antes de la marcha, Katarina tenia el cabello muy esponjado y tenia ojeras, pero aun asi no queria parar porque ella se habia prometido preparar todo para esta fecha especial.

- Recuerden que mañana será una marcha revolucionaria, no solo vamos a pedir por Daisy, pediremos por todas las personas que fueron asesinados a manos de personas que no tuvieron compasión por ellos. - me tomó la mano y tenia lagrimas en sus ojos. - Pelearemos por la igualdad, tanto como para hombres y mujeres, tambien para parejas interaciales y distintas. - sonrió.

- Pelearemos para que nuestros hijos puedan tener un buen futuro y puedan amar y expresarse sin tener que sentir vergüenza por quienes son, ya no dejaremos que el racismo, la homofobia o las injusticias reinen en nuestro pais. - dije con toda la seguridad del mundo.

Todos aplaudieron y con todos me refiero tambien a mis hermanos, todos ellos estaban a excepción de Jermaine. Me dolía un poco, pero no puedo obligarlo a ser parte de algo que no le gusta. Apuesto a que a mi mamá le encantaría ver que estoy haciendo un futuro junto a mi novia y todas estas personas excluidas e insultadas por sociedad, tanto blancos como negros.

- Mañana, vamos a cambiar el mundo. - dijo Fabian.

Asentí con una sonrisa, estoy emocionado y muy contento de saber que aunque esto empezó como algo minimo esta comenzando a ser mas grande con el tiempo, todas estas personas estan hartas de la sociedad y sus desprecios, pero haremos que ellos tengan voz.

- Nos vemos mañana, recuerden llevar familiares u otras personas que quieran unirse. - miré a Katarina.  - te amo. - le susurré.

- Yo te amo mas. - besó mi boca. - mira lo que estamos haciendo. - me abrazó. - le doy gracias a dios por tenerte.

- Eres todo lo que necesitaba en una persona, te juro que el amor que tengo por ti, amor, es increible.. - la miré a esos ojos cristalinos.

La besé con tantas ansias, la amo y ella lo sabe. Esta es la mejor experiencia de todas, cinco meses de una relación llena de cosas increibles y felicidad, cumplió dieciocho hace unos dias y aunque no quiso festejarlos la llevé a un paseo por el parque. Estoy tan decidido con ella y no pude esperar para comprarle un anillo de compromiso, estaba nervioso y sé que fue lo mas tonto del mundo pero no he podido darselo desde que lo compré.. quiero esperar el momento indicado, quiero que sea especial y que podamos disfrutar la proposión, No puedo esperar.

Katarina

Suspiré luego de haberme quitado el vestido, estoy emocionada por lo que pasará mañana y no puedo esperar para que todo nuestro sueño se haga realidad. Sentí unas manos acariciar mis hombros y levanté mi mirada, sus mejillas estaban rojas y estaba algo nervioso al estar frente a mi, sin ropa.

- Pensé que podriamos darnos una ducha juntos. - susurró sonriendo y mirando hacia abajo. - Espero que mi cuerpo no te espante.

- No, claro que no. - tomé sus mejillas. - ¿estas seguro que esto es buena idea?

- Sí. - sonrió.

Asentí y entré a la bañera mirando su cuerpo disimuladamente, era hermoso y el avance del vitiligo en su cuerpo estaba haciendolo ver distinto pero interesante. Asi es, el lo tiene y no es algo que pudimos controlar asi que solo se resignó a vivir asi, aunque he notado su inseguridad con respecto a eso, para mi es perfecto asi.

Mordió su labio y me miró a los ojos, algo ocurría.

- ¿Que pasa? - pregunté algo confundida.

- No puedo esperar, ¿sabes por todo lo que he pasado intentando no acceder a mis deseos?. - se hincó en una rodilla. - ¿Te casarías conmigo?

Lo miré inexpresiva, creo que esto es real.. no puedo creerlo.

- Lo.. lo dices en serio, ¿no? - el asintió.

- He estado pensando en esto toda la semana. - sonrió. - Creo que esta noche será especial.

Lo miré a los ojos, creo que se refiere a lo que yo creo o quizas solo a otra cosa. Solo sé que estoy nerviosa y emocionada a la vez.

- Acepto, claro que acepto. - dije sonriendo.

Me puse de pie, dejé mi cuerpo al descubierto frente a el como si fuera algo nuevo para mi. Su mano lentamente se posó en mi mejilla en mi miró fijamente a los ojos.

- Prometí que no lo haria hasta el matrimonio, pero no sabes lo dificil que es resistirse a alguien como tú.. - se mordió los labios.

Sentí mariposas volando en mi estomago y calor, era la sensación mas hermosa del mundo. Sus labios se pegaron a los mios, y sus manos acariciaron mis brazos lentamente haciendome sentir segura y protegida con el.

- ¿Prometes que no te arrepentirás si algo no te gusta? digo, sabes a lo que me refiero y si no.. - me interrumpió.

- Shh.. jamas me arrepentiría de esto, pero necesitaremos de ambos para lograr hacerlo bien y sentirnos bien. - besó mi frente. - Prometo que te cuidaré, no voy a lastimarte y te gustará.. pero habla si algo no te agrada.

- Michael, no puedo creerlo. - susurré sonriendo. - Claro que me encantará, eres tú.. y siempre soñé esto contigo. - acaricié su espalda lentamente. - solo dime que me amas, y estoy dispuesta a todo. - relamí mis labios.

Nuestra proximidad hacia que mi cuerpo temblara de necesidad y nervios, podia sentir su respiración acelerarse antes que siquiera me tocara. Solo sabia que estaba apunto de darlo todo, darle todo de  mi chico de mis sueños. Estaba tan nerviosa que solo  sonreí mirandole a los ojos, sus mejillas estaban rojas al igual que las mias y sus manos se acercaban lentamente a mi rostro...

Continuará..