Katarina

Lo miraba con detenimiento y atención esperando a que dijera algo, lo mas minimo acerca de lo acababa de decirle a nuestras amigas. Lo notaba nervioso ignorando mi mirada y fingiendo jugar con sus dedos, le he preguntado unas quince veces "¿Que fue eso?" pero solo se limita a sonreir mirando hacia distintas direcciones.

- Bueno, creo que no vas a hablar. - me puse de pie y tomó mi mano.

- ¿Que es lo que esperas que diga?

Me quedé en silencio, me daba vergüenza decirle que esperaba una propuesta ahora mismo para hacer real lo que acababa de afirmar frente a las chicas. Solo lo miré por unos minutos, sentí mis mejillas quemar de la vergüenza y entonces hablé.

- Yo esperaba que me dijeras porque dijiste eso frente a las chicas.

- ¿Acerca de que? - dijo fingiendo no saber de que hablo.

- Ya lo sabes, eso de que soy tu novia o algo asi.. no me has dicho nada acerca de eso. - crucé mis brazos.

Él, mordió su labio intentando ahogar una sonrisa que fue inevitable y entonces me dijo.

- ¿Acerca de que?¿de ser mi novia?

- ¡Oh, vamos! - rodé los ojos. - Jackson, dime de una vez "¿quieres ser mi novia?".

- Claro que no lo haré. - sentí un dolor en el pecho al oír eso. - Ya lo eres.

Me quedé boquiabierta al oír eso, esto es repentino y muy atrevido de su parte pero ¡Dios mio!, no puedo creer esto.

- ¿Com.. cuando? - dije con el ceño fruncido.

Oirlo decir eso me hizo sentir una tremenda felicidad que deseaba ocultar para no parecer tan infantil, por dentro todos mis arcoiris estaban saltando y celebrando, es tonto pero asi lo siento.

- Katarina, no quiero ser el tipico chico que te pide ser su novia.. eso está muy pisado. - sonrió - Espero que estes de acuerdo con nuestro noviazgo, porqué no te dejaré arrepentirte. - se acercó a mi y besó la punta de mi nariz.

Sentí como todo dentro de comenzó a florecer, ese gesto hizo que mis mariposas despertaran y comenzaran a volar pordoquier dandome a entender que literalmente, el ya me tiene.

- ¡No puedo creer que estes con el chico negro y no me hayas dicho! - Zoe hizo un gesto de desaprobación.

- Yo.. por favor, ni siquiera me lo preguntó solo me dijo "ya lo eres" o sea, me tomó por sorpresa pero aun asi me hizo sentir tan bien... - mordí mi labio.

- Asi que, tienes novio. - dijo mi amiga sonriendo de lado. - Tienes que contarme cuando tengan el tiempo a solas.

- ¿El.. tiempo a solas? - dije algo confundida.

- Ya sabes, besos, besos y de la nada ya estas.. ya sabes.. - me guiñó un ojo.

Me sonrojé al instante, aveces puedo ser tan ingenua que me sorprende. El tan solo hecho de pensar en eso me hacia sentir mas avergonzada.. no sabia si eso pasaria en algun momento, pero comencé a sentir algo de miedo gracias a lo que dijo Zoe.

- ¡Zoe, jamás! - dije cubriendome el rostro. - ¿Como se te ocurre? es vergonzoso.

- Claro que no, yo te contaré si llega a pasar algo con Genna.

- ¿Algo como que?. - pensé un poco. - Okay, no me cuentes porque sabes que me lo imagino y me hace sentir algo asqueada.

- Pero pensar en rizitos de esa forma no. - levantó sus cejas sonriendo de lado.

- ¡Ya basta! - reí como una loca. - Zoe, ya no quiero hablar de esto.. ¿como estas tu?¿como está Genna? - intenté cambiar el tema.

No me apetecía hablar de eso con ella, se que es mi mejor amiga pero esto es algo nuevo para mi. No debo pensar tan rapido es relaciones sexuales, ni siquiera llevamos una semana de novios.. es mas, ni siquiera se desde cuando Jackson me ha tomado como "su chica", habiendo tantas chicas preciosas justamente viene a elegirme a mi, que soy un veinte de cien.

- Yo estoy muy bien, no he hablado con mi madre acerca de Genna, pero hemos hablado acerca de la sexualidad y bueno.. - suspiró. - Ella se siente asqueada acerca del tema, y yo simplemente siento que nunca podré salir de mi zona de comfort.

- Por dios, Zoe.. estamos entrando a la decada de los cincuenta, debes dejar atras el pasado, tienes que vivir el dia de hoy e intentar cambiar la mentalidad de todas esas personas, podemos demostrar que ser diferentes no esta mal. - ella solo bajó la mirada con una sonrisa.

- ¿Cuando les diras a tus padres que estas saliendo con un chico negro?

Esa pregunta hizo un eco en mi mente, ella tenia razón ¿como haría para hablar de eso con ellos? es decir, no me he dejado influencear  por ellos en ningun aspecto, pero es mi padre y mi madre y creo que deberan estar al tanto de eso o tal vez.. ¿debería esperar el momento indicado?.

- Tengo que pensarlo. - susurré.

- Lo mismo te digo, puede que ella me guste y todo, pero contarle a mi madre que está mas loca que una cabra que estoy enamorada de una chica sería como decirle a un perro que haga tus compras. - suspiró.

Su humor no tan gracioso siempre estaba por mas que se sintiera mal, puedo entenderla perfectamente. El mundo ha tenido una idea horrible acerca de varias cosas y creo que merecemos demostrar que nosotras podemos cambiar el mundo y romper las reglas, quizas asi podriamos darles la libertad a varias personas que se sienten oprimidas por la sociedad. Podemos cambiar el mundo si lo intentamos todos juntos, debo hablar con Michael e intentar crear algo. Las horas de clase fueron tan eternas, no pude ni siquiera ver a Michael en receso ya que por lo que me dijeron estaba metido en la organización de los eventos escolares de este año, cosa que me sorprende y me da algo de curiosidad a la vez ¿acaso Michael tenia un talento?, no lo conocía muy bien, pero tenia que averiguar de que se trataba todo esto. El timbre de salida sonó y aproveché para salir lo mas rapido posible, me dolía las piernas y el trasero, no estaba en forma para nada.

- ¿Como está la chica mas linda de la escuela? - levanté mi mirada con el ceño fruncido. - Te estoy hablando a ti, oh nueva novia mia.

- Se oye tan raro. - sonreí - Estoy bien, un poco agotada y estaba buscandote justamente a ti. - me acerqué a el. - ¿Que harás tu en el evento de caridad de la escuela?

- Bueno, señorita, creo que eso es algo confidencial. - enredó su brazo alrededor del mio. - Pero verás que te gustara.

- ¿Bromeas? no puedes dejarme con la intriga. - fruncí el ceño.

- Claro que puedo y lo haré, quiero darte una sorpresa o al menos intentarlo. - puso uno de sus dedos debajo de mi menton. - Te ves muy linda hoy, por cierto.

- ¿Recien ahora me miras? - arqueé una ceja.

- Estaba algo apurado, tu sabes.. pero ahora podemos ir por un helado o algo ¿te parece?

- ¿De chocolate con nueces?

- Me parece que si, o tal vez de vainilla. - el sonrió - Es broma, claro que te compraré de chocolate.

Yo sonreí y continuamos caminando, parece tan loco decir "Voy a comer helado con mi novio" nunce he tenido uno y siento que cada momento es crucial, no quiero arruinarlo por mas que sea la relación mas rara del mundo. Lo miré de perfil, era tan lindo y sus ojos fijos en el camino le daban un toque divino, el era encantador. Demasiado encantador.

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Espero que lo disfruten.

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