CAPÍTULO XXIX (EPÍLOGO PARTE II +18)
Dahyun: Si te lo doy ¿Lo cuidarás?- La pequeña asintio- Es muy importante para mí, en serio debes cuidarlo- La pequeña levantó su mano prometiendo que lo haría. Dahyun se quitó su anillo para dárselo a la pequeña. Me miro.
Sana: También quieres el mío- Asintió sonriente. Me quite mi anillo y se lo di. Sonriente se fue hacia el interior de la casa.
Dahyun: Es tan tierna- Dijo tomando mi mano y con su mano libre tomo la bolsa de comida.
Sana: Lo es- Bese su mejilla y ella me miro.
Dahyun: ¿Ya te recordé hoy que te amo?- Me preguntó y sonreí.
Sana: No- Me tome el pecho fingiendo dolor.
Dahyun: Te amo, más de lo que imagine, te amo- Bese sus labios está vez- Necesito dormir entre tus brazos Ya- Exclamó mientras rodeaba su cintura con mis manos.
Clementine: ¡Tengo hambre!- Dijo mientras se sentaba en la mesa.
Dahyun: Claro- Dijo riéndose mirándome a los ojos. Nos separamos para dirigirnos a la mesa del comedor.
Clementine: ¿Por qué el anillo de mi mamá Sana tiene tu nombre mami? Y ¿Por qué el tuyo tiene su nombre?- Tome la bolsa sonriente, Dahyun se sentó a su lado.
Dahyun: Porque tú mamá Sana es mi esposa y yo soy su esposa- La niña tomo la mano de su madre.
Clementine: ¿Va aquí?- Dahyun asintió- ¿Y el de mi mamá Sana?- Le pregunto. Yo me senté enfrente de ella y deje los platos de comida justo enfrente de ellas.
Dahyun: Su mano izquierda en si dedo anular- Extendió su mano y me miró, deje mi mano sobre la suya.
Clementine: Son lindos ¿deberíamos tener algo que diga que yo soy su hija y ustedes mis madres?- Dahyun y yo nos miramos, no lo dudamos, asentimos.
Dahyun: Podemos ir de compras en nuestro siguiente descanso ¿Que dices?- Con emoción asintió- Ahora mi amor come- Tomo sus palillos.
Pasamos nuestra comida hablando de asuntos de trabajo, mientras la pequeña comía con alegría mirándonos. Después de un rato me quedé ordenando las cosas de la cocina, mientras que Dahyun junto con Clem tomaban un baño. Cuando subí de nuevo hacia la habitación de Clem note que ella cepillaba sus dientes.
Sana: ¿Mamá?- Señalo la dirección de nuestra habitación- Cuando estés lista para dormir dime- Asintió y salí de la habitación para ir a la nuestra.
Dahyun: ¡Hey!- Me miro saliendo del baño, cerré la puerta.
Sana: La llevaré a la escuela- Le dije mientras me acercaba.
Dahyun: Pero...- Negué mientras ponía mi dedo sobre sus labios.
Sana: Si pudieras ver lo cansada que estás entenderías porque lo hago- Ella se abrazo a mi. Acaricie sus mejillas- ¿Te lo habías imaginado así? Yo he soñado con momentos así desde que decidimos adoptarla pero no entendía lo hermoso que era esto, no se a quien debo agradecer lo que tengo así que te lo agradezco a ti, eres tú el motivo del porque sonrió cada mañana aunque todo ha cambiado siempre puedo girarme a verlas y entender que ustedes son mi motivación para todo- Ella beso mis labios, camine hacia atrás para caer junto con ella sobre la cama. Se acomodo mejor sobre mi, con una pierna a cada lado estaba sentada sobre mi abdomen. Después de ese beso y cuando la vi con detalle, note que su bata ya no estaba cerrada y me dejaba ver algunos detalles de su cuerpo, mordí mis labios y cuando subí a ver sus rostro ella sonreía, me sonroje desviando mi mirada de la nada.
Dahyun: Aún me miras con deseo- Afirmó, rei un poco apenada- Lo pienso todos los días e Incluso mi parte humana se pregunta si lo he estado haciendo bien, tengo que cuidar de ella, pero también estás tú, se que no debo cuidar siempre de ti pero me preocupas demasiado porque ya eres parte de mi, también debemos cuidar nuestro matrimonio ¿Estoy haciendo un buen trabajo con eso? Siempre me lo pregunto cada mañana mientras te veo dormir y cuando llegó cada noche para estar con ustedes, para estar a tu lado y de pronto me dices esto, es posible que lo este haciendo bien ¿Verdad?- Me miro recargandose con sus manos a cada lado de mi cabeza.
Sana: Yo...- Baje mi mirada- Nosotras ¿Que estoy diciendo?- Volví a mirarla a los ojos, ella se reía de mi- Sí, estás haciendo todo bien y cuando sienta que estás haciendo algo que no es bueno, voy a detenerme para ayudarte, siempre fue así no es así- Tome su cintura y le di la vuelta sobre la cama, quite el nudo de la bata para abrirla más mientras acariciaba su hombro- ¿Por qué te sonrojas? Ya te he visto desnuda muchas veces- Ella soltó una pequeña risa.
Dahyun: Te das cuenta cuanto tiempo ha pasado desde que nos conocimos hasta ahora, mi cuarto ha cambiado, ya no tengo 28 Sana- Le sonreí.
Sana: Pero si...- Me acerque a su oído- Cuando estamos juntas parecemos adolescentes, me pides que te deje sin aliento- Lami su oreja y escuché un pequeño gemido. Tocaron la puerta me levanté de ella, Dahyun cerró su bata mientras traba contenerse.
Clementine: Mami- Dijo en cuanto abrí la puerta, su mirada llena de lágrimas hizo que mi corazón presionara mi pecho- Yo no quería romperlo...- Me mostró aquel oso de peluche con un poco de su rellenó fuera por una de las aberturas.
Sana: Doctora Kim- Tome el oso y gire a ver a Dahyun cerca del armario dispuesta a ponerse algo de ropa.
Dahyun: Doctora Minatozaki- Me miro.
Sana: Necesito asistencia- Miro el peluche en mis manos. Me acerque a ella- No te vistas- Le dije al oído. Vi su piel erizarse.
Dahyun: Si...- Dijo con un hilo de voz.
Sana: Bien ¿Que opina Doctora?- Ella tomo el oso de peluche y lo miro.
Dahyun: Será un procedimiento difícil- La pequeña se asomó por la puerta.
Clementine: Solo lo tome y cuando me di cuenta estaba así, no se cómo paso- Dahyun le pido que se acercara.
Dahyun: No llores mi amor, estás cosas pasan, este eso ya tiene muchos años de vida pero creo que mamá y yo podemos solucionarlo- Beso su frente.
Sana: Ahora no soy tu esposa, soy la doctora Minatozaki- Dahyun sonrió, mientras abría uno de los cajones de los muebles a lado de nuestra cama.
Dahyun: Seguro, tenemos un paciente con una herida profunda, necesitaremos transfusion de algodón y sutura- Dijo mirando a la pequeña.
Sana: Haré la transfusión- Dije acercándome de nuevo a ella por la espalda.
Dahyun: Sana...- Dijo en voz baja mientras la tomaba de la cintura y con mi mano libre tomaba el algodón.
Sana: ¿Esta lista doctora?- Me aleje de ella y tome el peluche- No querrá ver esto señorita Minatozaki- Le dije a mi hija que un se limpiaba sus lágrimas.
Clementine: Quiero ayudar- Dijo acercándose al centro de la cama.
Sana: Okey, toma un poco del algodón, no mucho- Ella tomo un poco del algodón- Ahora abre un poco la abertura no queremos que siga abriéndose ¿Verdad?- Negó- Bien ahora que está así con tu otra mano pon el algodón empujándola un poco hacia dentro- Me asintió Dahyun se sentó a lado de nosotras a la orilla de la cama- Un poco más cariño- Le pedí a la niña y mire a mi esposa su pierna descubierta me invitó a poner mi mano sobre ella, la acaricie, ella la tomo para evitar que siguiera subiendo.
Clementine: Y ahora- Dahyun me soltó para tomar al oso.
Dahyun: Voy a cerrarlo, no se volverá abrir pero debes tener cuidado- Le pidió a la pequeña que se lanzó a mis brazos. Miramos lo que su madre hacia. Cuando termino Dahyun le devolvió aquel oso y la niña se separo de mi para dejarle un beso en su mejilla.
Clementine: Gracias- Le dijo abrazándola.
Dahyun: De nada mi amor- beso su frente- Es tarde y alguien debe irse a dormir- Asíntio.
Clementine: ¿Me llevarán a mi habitación?- Dahyun se levantó con ella en brazos.
Dahyun: Vamos- Me pido estirando su mano que alegremente tome. Salimos de la habitación.
Clementine: ¿Me quieren?- Preguntó de pronto mientras abría la puerta de si habitación. Dahyun me miro con una sonrisa.
Sana: Es más que solo quererte pequeña, te amamos porque eres nuestra hija, eres lo más importante que tenemos, no lo olvides- Dahyun la dejo sobre la cama.
Clementine: Te amo- Me dijo y miro a Dahyun- Te amo- Le dijo.
Dahyun: Buenas noches cariño- Beso su frente de nuevo- Te amo- Le dijo mientras la cubría mejor con las mantas.
Sana: Te amo- Bese su mejilla- Te amo- Bese su frente y ella me dio una sonrisa- Descansa- Me acerque a Dahyun y tome su mano.
Clementine: Descansa- Dijo abrazando al oso, cerró los ojos.
Sana: Enciende su lámpara- Le dije al oído. Dahyun la encendió dejando una luz tenue para que no la molestará. Salimos de la habitación encerrando la puerta.
Dahyun: Pensaste que iba atesorar ese peluche de esa manera- Negué rápidamente.
Sana: Pensé que se iba a quedar en tu oficina de por vida- Asintió.
Dahyun: Sabes que debo asegurarme que sigue ahí- La mire curiosa abrió la puerta de nuestra habitación- Tu deseó de hacerme tuya- Sonreí, cerrando la puerta.
Sana: ¿Por qué haces esto?- Tome su mano, poniéndola sobre mi cuello para que ella sintiera mi pulso.
Dahyun: ¿Un beso es suficiente?- Negué. Volví a quitar el nudo de su bata.
Sana: Mi amor, te necesito a ti- Bese la acerque a mi, tomándola de la cintura pasando mis manos entre la bata. La acorrele entre la puerta puse el seguro de la manija. Bese sus labios, puse pierna entre las suyas. Mordí sus labios, tome su pierna subiendola a la altura de mi cadera. Nos quedamos en esta posición un tiempo entre besos y caricias. Me quitó la ropa con delicadeza mientras besaba sus hombros, hasta dejarme desnuda. Me miro a los ojos mientras jadeaba ella me dio la vuelta dejándome a mi entre ella y la puerta beso mis labios pero no tardó mucho en besar mi cuello mientras acariciaba mi espalda. Cuando me di cuenta ella bajaba- ¿Dahyun?- Se inco enfrente de mi mirándome. Beso mi abdomen con la punta de la lengua acaricio mi clítoris. Me aferre a la manija mi respiración estaba agitada, lamió y succiono haciendo que de mi agitada respiración sacará gemidos. Se separó de mi subió lamiendo hasta mi cuello, me llevo a la cama quedando ella encima de mi.
Dahyun: ¿Estás lista?- Dijo jadeante, totalmente enloquecida y excitada, tome su mano e hice que entrara en mi.
Sana: Dahyun...- Tome sus mejillas mientras me embestia bese sus labios para calmar mis gemidos y evitar llamar la atención- Te amo...- Dije mirando sus ojos, ella me dio una sonrisa y aumento la velocidad, sentía que podía ser más ruidosa, así que busque sus labios, me aferre a ella clavando mis uñas en su espalda hasta que llegue. Ella a plazo mi orgasmo aún estimulamdome.
Seguimos demostrando el amor que nos teníamos hasta altas horas de la noche, el tiempo había hecho que ella estuviera agotada, me veía con una sonrisa directamente a los ojos, la tenía abrazada a mi aún desnuda, acaricie su espalda, ella aferrada a mi cintura cerró sus ojos para que minutos después si respiración se volviera regular, relajada y constante. Es posible que ella lo supiera, pero después de casi diez años, es ella lo más hermoso de mi vida y puedo confírmalo con esta sonrisa que me deja cada vez que esté conmigo y seguirá siendolo hasta que la muerte nos separe.
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