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Capítulo 26

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BLACK CAT
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«Descubrí que soy muy buena en esto de las organizaciones criminales»

⎯⎯ Historia de Web of Spider-Man ⎯⎯

La noche comenzaba a cernirse en la ciudad de Nueva York.

La oscuridad que esta generaba era perfecta para realizar cualquier robo. Sobretodo, con la situación actual que está pasando la ciudad.

Los Maggia han caído.

Ni siquiera la policía, o los grandes héroes, habían podido derrotar a los Maggia. Black Cat lo había logrado.

Hammerhead se encuentra muerto... por lo que era el momento perfecto para deshacerse de cualquier cosa que podría generar un intento de regreso de los Maggia.

En eso se encontraban la banda de Black Cat, junto con los demás matones de sus compañeros.

Destruían cada una de las bases que Hammerhead tenía repartidas en la ciudad, acabando con los tipos que intentaban oponerse a ellos... y reclutando a los que querían unirse.

No eran tontos. Si podían aceptar a más miembros a la banda, entonces lo harían. Aunque esto significara que se quedaría menos espacio en el escondite.

Debían de buscar un lugar nuevo. El Merodeador se estaba encargando de eso... mientras que Black Cat dirigía estos ataques a los Maggia.

Ella observaba como sus hombres entraban a un almacén, lleno de Maggia, empezando a liquidarlos y a robar su tecnología.

Pero no se limitaban a eso.

— ¿Cómo van? — preguntó Felicia.

No hay nada aquí — respondió Boomerang, desde su comunicador — Ningún indicio de Wilson Fisk.

— Rayos... nos quedamos sin opciones...

— Estoy seguro que el Kingpin sabe que iremos tras él — dijo el Merodeador, a su costado — Aún si encontramos su escondite, seguro se habrá ido a otro...

— No lo creo... — dijo Felicia — Él es muy obstinado y confiado. Le gusta enseñarle a los demás quien es el que manda. Estará esperándonos para que lo ataquemos y así él pueda vencernos.

— Pero eso no pasará... nosotros seremos quienes acaben con él.

— Así se habla — dijo Felicia — Boomerang. Acaben con los que puedan y regresen al escondite.

Tengo unos siete reclutas nuevos, jefa — dijo Boomerang, pero entonces se escuchó una explosión — Bueno... ahora son seis.

— Que lleguen en una pieza, Fred.

Ella cortó la comunicación, dándose la vuelta.

Pero entonces, recibió otra llamada.

— ¿Hola? — preguntó Felicia.

¡Jefa! — dijo la voz.

— Phil Urich... ¿qué cuenta mi nerd favorito?

¡Creo tener una pista para encontrar la ubicación de Wilson Fisk! — le dijo — ¡Venga al escondite! ¡Rápido!

El tipo cortó la llamada sin previo aviso.

Felicia volteó y miró al Merodeador, quien alzó los brazos, también confundido.

No sabían como había descubierto esa pista... pero no tenían nada que perder.

Así que saltaron y fueron directamente al escondite.

***

— ¡Norman Osborn! ¡El Duende Verde! — expresó Urich, emocionado.

Felicia y Aaron se encontraban sentados en un sofá, mientras Phil mostraba una diapositiva con la imagen del Duende Verde.

La peliblanca miraba, algo incómoda, la imagen del Duende. Mientras que Aaron presionaba algunos botones de su guante, sin prestar mucha atención.

— ¡Se sabe muy bien que Osborn tuvo tratos sucios con Wilson Fisk, ¿no?! — dijo Phil, emocionado — ¡Eso le permitió crear esa increíble, sorprendente y fabulosa fórmula de la Globulina Verde!

— ¿Cómo sabes todo eso? — preguntó Felicia.

— No es importante... ¡Gracias a Fisk, logró construir unos laboratorios secretos! ¡Así pudo fabricar el Aliento del Diablo!

— Ya sabemos esa historia, Urich... — dijo Merodeador — Ve al grano.

— Bien, bien... una reportera anónima logró encontrar unos documentos escondidos en una estatua, justo en uno de los museos de Fisk — dijo Phil — Estos documentos poseían información sobre Osborn y los trapos sucios que tenían.

Felicia sabía esa historia.

Ella fue quien encontró esos documentos y los publicó en el periódico. De hecho, fue por ella que la vida de Osborn se fue al caño.

¿Qué hubiera pasado si no hubiera rebelado esos documentos?

— Fisk tenía información para perjudicar a Osborn por si él llegara a traicionarlo — dijo Urich — Pero Norman Osborn, aunque me cueste admitirlo, era un genio. No era un idiota, así que... es muy posible que también tuviera información que perjudicara a Wilson Fisk.

— ¿Qué? — preguntó Aaron.

— ¡Tiene sentido! Podría poseer información de todo tipo. Desde algunos datos bancarios, hasta... la ubicación de sus escondites.

— ¿Lo dices enserio? — volvió a preguntar Merodeador — Nos dijiste que tenías una pista.

— Esta es una pista.

— Ni siquiera estamos seguros si la supuesta información de Osborn posee la ubicación de sus escondites — expresó — Además, Norman era el dueño de Oscorp. Si poseyera esa información, pudo haberla escondido en toda la ciudad.

— No olvides que no era el único que trabajaba en Oscorp — dijo Phil, señalándose.

— ¿Tienes alguna idea de dónde está? — preguntó Felicia.

— La torre Alchemax, anteriormente llamada Oscorp — respondió — Cuando trabajaba allí, siempre había una zona que no me permitían ir... "la zona principal".

— ¿Zona principal?

— En el último piso subterráneo de la torre. Es una zona donde se encuentra toda la información de los servidores — dijo Phil — Si Osborn ocultaba algún trapo sucio de Fisk, allí estará.

— ¿Quieres que vayamos a Alchemax y busquemos allí la ubicación de Fisk? — preguntó el Merodeador.

— Claro... yo puedo guiarlos en ese lugar.

Felicia miró al Merodeador, algo dudosa.

Los dos notaron lo entusiasmado que parecía Phil Urich, con la idea de querer ir hacia la torre Alchemax.

Incluso, más que ellos...

— Aunque sigamos atacando lo que quedan de los almacenes de los Maggia, no creo que encontremos la ubicación de Fisk — dijo Felicia — Puede que Osborn haya guardado esa información.

— Entrar a Alchemax no será tan difícil — dijo Aaron — Puedo hackear los sistemas de vigilancias y ponerlos en bucle.

— Debemos actuar rápido sin que se den cuenta...

— No será un problema para nosotros.

— Entonces... ¿sí iremos? — preguntó Urich.

— Sí... no veo porque no.

— ¡Bien! — expresó Phil, alzando el puño — Les debo una, chicos.

— C-Claro...

Phil tomó su laptop y se fue de allí, rápidamente.

— ¿No tienes el presentimiento de que esto va a salir muy mal? — preguntó Hardy.

— Totalmente.

— Aún así, lo haremos...

— Totalmente...

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El atraco empezó.

El Merodeador aterrizó en una de las paredes del edificio y se conectó a los sistemas de seguridad.

No le tomó mucho tiempo el terminar de piratear todos los protocolos, hasta ponerlos en bucle.

— Está hecho — dijo Aaron.

Felicia asintió y disparó un gancho. Con Phil abrazándola, se balancearon hasta el edificio, aterrizando justo al costado de un conducto de ventilación.

Allí, quitó la rejilla y empezaron a entrar, seguidos por el Merodeador.

Se arrastraron por los conductos, quedándose quietos cada que escuchaban como alguien pasaba por debajo.

Así siguieron hasta finalmente terminar enfrente de la rejilla del túnel del elevador.

Hardy quitó esta rejilla y observó el túnel.

El elevador estaba debajo de ellos, por lo que sigilosamente, aterrizaron enfrente.

El Merodeador quitó la tapa del techo del elevador y los tres entraron en este.

— ¿En qué parte de la zona principal se encuentran los archivos? — preguntó Felicia.

— No se preocupen por eso... — dijo Phil, colocando un código en el tablero del ascensor — Yo los guiaré allí.

Black Cat observó al Merodeador, quien también la miró, con el mismo pensamiento.

Algo andaba mal en él.

Urich terminó de colocar el código, comenzando a descender hasta el último piso.

— ¿Ahora nos dirigimos a...? — preguntaba Hardy.

— La zona principal — respondió Urich — Allí están todos los juguetes que tenía Oscorp.

— Dijiste que lo único que se encontraba allí eran los servidores — dijo el Merodeador.

— Dije que los servidores se encontraban allí — refutó — No dije que fuera lo único.

— Ya veo...

— ¿Y desde cuando te sabes los códigos de seguridad? — preguntó Felicia — Creí que no te permitían entrar...

— Claro que no me permiten entrar... — dijo Phil — Pero eso no significa que no sepa los códigos.

Más sospechas.

El elevador descendió hasta el centro de una habitación. Una gran habitación circular que se encontraba dividida en dos. 

La mitad de esta mostraba lo que buscaban. Una gran cantidad de servidores repletos de información almacenado.

Mientras que la otra mitad mostraba lo que parecía ser seis habitaciones. Cada una sellada por grandes puertas de metal.

Cuando las puertas se abrieron, Phil Urich fue el primero que salió, observando una de estas habitaciones selladas.

Fijándose únicamente en una de estas.

Pero, inmediatamente después, se dio la vuelta y caminó hasta los servidores.

Los otros dos lo siguieron, cautelosos.

Siguieron por un pequeño pasillo, generado por el tamaño de los servidores de Oscorp... y llegaron hasta una computadora.

Allí, Phil la encendió y colocó un usb. Esto provocó que una pantalla azul se generara, la cual desapareció de inmediato, mostrando una descarga.

— Se encuentra descargando todo lo relacionado con Wilson Fisk — dijo Phil, haciéndose a un lado.

— ¿Lo dices en serio? — preguntó Felicia, acercándose a la computadora.

El Merodeador también se acercó, presionando una tecla.

De pronto, la previsualización de los documentos que descargaban se abrió. Se podía ver un montón de datos financieros. Tratos sucios y la corrupción que Wilson Fisk tenía con la policía de Nueva York.

Toda esta información era del pasado.

El poder que Fisk tuvo era impresionante. Más de lo que imaginaron.

Incluso había tenido infiltrados en el gobierno.

Pero esto de aquí no tenía ninguna importancia con la situación actual. Se era bien sabido que Kingpin había perdido poder.

— Espera, espera... — dijo Felicia, mientras bajaba un poco — Esto de aquí...

Final de la calle West 29th... — dijo Aaron, viendo la imagen de un mapa — ¿Por qué está marcado?

— Lo único que hay allí es un almacén de envíos — dijo — Si Osborn lo marcó...

— Allí debe estar el escondite de Fisk.

— ¡Bingo! Lo hicimos — dijo Cat, dándose la vuelta — Gran trabajo, Phil... ¿Phil?

Pero ya no estaba allí.

El Merodeador se dio la vuelta y corrió rápidamente hacia afuera de la zona de los servidores. Pero al instante que intentó salir... terminó chocando contra una especie de campo de fuerza.

Estaban atrapados.

Y al otro lado de este... se encontraba Phil Urich.

— ¡Traidor! — gritó Aaron, golpeando el campo.

— ¡Oye! ¡De todas las personas, ¿tú me dices eso?! — exclamó Urich — Si que eres un hipócrita.

— ¡¿Nos atrapó?! — preguntó Felicia, aún en la computadora.

— ¡Sí! — respondió Merodeador.

— ¡Lo sabía!

— ¡Fueron de gran ayuda! ¡Lo digo enserio! — dijo Phil, dándose la vuelta — La última vez que logré entrar a este lugar, no pude hacer nada. Me descubrieron y me despidieron.

Este empezó a caminar por todo el lugar, dirigiéndose hasta la puerta que había observando con anterioridad.

— Pero Hammerhead había obtenido la información que necesitaba. Parece que planeaba robar lo que vine a buscar después de terminar con Kingpin...

— ¡¿A qué diablos te refieres?! — preguntó Merodeador.

— Mi gran premio... pero dejen de preocuparse de mí — dijo Phil, alzando un botón — Sino por ellos...

Y lo presionó.

Una fuerte alarma se activó, mientras las puertas de las habitaciones comenzaban a cerrarse con un metal muy resiste.

Phil logró entrar a la habitación que se dirigía, mucho antes de que esta se cerraba.

El Merodeador intentó romper el campo de fuerza, pero el metal apareció, separándolo de este.

— ¡Fuimos engañados! — exclamó Aaron — ¡Tenemos que irnos de aquí!

— Espera... — decía Felicia, mientras veía como la descarga terminaba de efectuarse.

— ¡¿Qué estás haciendo?! ¡Ya tenemos la ubicación!

— Sí, pero la demás información nos podría servir — dijo Felicia, sacando el usb — Más de lo que crees... ¡Es hora de irnos!

El Merodeador cargó una gran cantidad de energía de sus guantes, disparando un gran rayo láser, destruyendo la pared de metal que había caído.

Así pudieron observar como, detrás del campo de fuerza, habían varios tipos armados, apuntando a cada una de las habitaciones, incluyéndolos.

— Esto no es bueno... — dijo Merodeador, viendo a todos los tiradores — Nos atraparon...

— ¿No puedes destruir el campo de fuerza? — preguntó Felicia.

— Es muy fuerte...

— Entonces... solo nos queda una opción — dijo Felicia, observando arriba — ¿Listo?

— Sí.

Aaron Davis levantó sus guantes, apuntando al techo. 

Liberó un poderoso rayo que logró destruir el tejado, formando un gran agujero en este.

Así fue como lograron escapar de la zona de servidores.

Subieron a ese piso y comenzaron a correr hasta el elevador, el cual empezaba a abrir sus puertas, mostrando a dos tipos armados.

Estos, ni bien los vieron, empezaron a disparar, tratando de matarlos.

Felicia y Aaron esquivaron los disparos, acercándose hasta los dos sujetos, golpeándolos y dejándolos inconscientes.

Luego, subieron hasta el techo del elevador.

Cat accionó sus garras y cortó los cables de este, tirando el elevador al último piso.

Después de eso, comenzaron a subir por el túnel, tratando de volver al conducto por donde entraron... pero este poseía rayos láser que impedían la salida.

— ¡Dijiste que habías puesto los sistemas de seguridad en bucle! — se quejó la peliblanca.

— ¡Lo hice! — le dijo Aaron — ¡Urich debió anular mi hackeo!

— ¡Maldita sea!

Felicia saltó y aterrizó por debajo de algunas puertas, abriéndolas lentamente.

Allí, pudo escuchar como los soldados comenzaban a subir por las escaleras del costado.

No iban a tardar en llegar hacia ellos.

Black Cat y el Merodeador salieron del túnel del elevador y comenzaron a correr por las instalaciones, mientras una gran explosión se escuchó por debajo de sus pies.

No entendieron que fue eso que escucharon, pero no tenían tiempo para averiguarlos.

Los guardias habían llegado.

Estos empezaron a dispararles, obligándolos a esquivar las balas. Ambos saltaron y entraron en una oficina, buscando ocultarse de estos tipos.

Pero otra gran explosión se pudo escuchar, esta vez en su piso.

Ellos voltearon y vieron como los guardias salieron volando por el pasillo, aterrizando en el suelo.

Hardy salió hasta el pasillo, tratando de ver que era lo que había provocado esa explosión... logrando divisar a alguien caminar por el humo del pasillo.

Alguien salió de ese humo... y solo pudo soltar un pequeño grito de asombro.

Era...

...el Duende.

— No es cierto... — murmuró Felicia, observándolo.

— ¡Finalmente, poseo el poder que Norman Osborn no supo utilizar! — exclamó, mientras alzaba una granada calabaza — ¡Ahora! ¡Podré hacer las cosas bien!

Este lanzó las granadas en dirección de Felicia, pero antes de que le impactaran, el Merodeador saltó y la salvó, moviéndola hasta un costado.

Las granadas aterrizaron en el suelo y estallaron, llenando aún más de humo el lugar.

Antes de que pudieran hacer algo, pudieron escuchar el sonido del Planeador cruzar rápidamente por el pasillo.

Este lanzó más granadas calabaza a la pared, creando un gran agujero, escapando por este.

Los dos compañeros no lo pensaron mucho y también escaparon de la torre Alchemax, listos para perderse en la oscuridad de la noche.

Era expertos en eso.

— Bueno... eso no salió como esperábamos... — dijo Felicia, aterrizando en un edificio.

— ¡Por supuesto que no! — exclamó el Merodeador — ¡Fuimos traicionados por Urich! ¡Nos engañó para llegar hacia la fórmula del Duende Verde!

— Es interesante como Alchemax se quedó con esa fórmula... — dijo Felicia — Ahora tiene su tecnología... podría causarnos problemas.

— Debemos de estar atentos a alguno de sus movimientos — exclamó Merodeador — Si quiere atacarnos o algo parecido. 

— O si quiere repetir lo mismo que intentó Osborn... — dijo — La Nación Duende...

— Eso sería un gran problema.

— Uno a la vez — expresó — Tenemos la información que buscamos. Debemos reunir a los nuestros para hablar del plan de ataque.

— Debemos planear un plan de ataque.

— Sí, bueno... algo se nos ocurrirá mientras vamos al escondite.

Los dos saltaron de allí, empezando a avanzar... 

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— ¿A qué te refieres con que Urich nos traicionó? — preguntó Boris.

Él y Felicia se encontraban en la oficina. La peliblanca quería salir de allí, pero su compañero se había puesto enfrente de la puerta, evitándolo.

— Sí, se llevó el suero Duende y demás cosas — le respondió Felicia — ¿Me dejas pasar?

— ¡¿Cómo puedes decir eso sin más?! — exclamó — ¡Tuvimos un traidor en nuestras filas! ¡¿Quién sabe lo que pudo hacernos sin darnos cuenta?!

— Pues nadie explotó, así que todo bien...

— ¡Eso no lo sabes! ¡Tú...!

— ¡Boris! ¡Por favor! ¡¿Puedes dejarme en paz por una vez?! — le reclamó — ¡Cada vez que nos vemos, no paras de criticarme y de decirme las cosas que hago mal! ¡Yo sé lo que hago con mi vida! ¡No me digas que tengo que hacer!

— ¡¿Por qué crees que te digo todo esto?! ¡No se supone que debería estar pasando esto! — dijo el científico — ¡Tú dijiste que todo acabaría luego de lo de Hammerhead:..!

— No de nuevo...

— ¡Dijiste que todo acabaría! ¡Que te concentrarías en tu hijo! — dijo — ¡¿O acaso lo olvidaste?!

— ¡No lo hice!

— ¡Entonces, ¿hasta cuándo seguirá esto?! ¡¿Cuándo mates al Kingpin?! ¡¿O cuándo algún tipo en traje ajustado venga a meterte a la cárcel?!

— ¡Nadie me meterá a la cárcel!

— Todos los que vivimos esta vida terminamos en prisión, tarde o temprano — dijo Boris — Yo estuve en prisión. Bruno lo estuvo... no quiero que tú acabes de la misma forma.

— Hablas igual que mi padre... ¡ambos creen que no soy lo suficientemente cuidadosa!

— ¡Claro que no! Hardy, eres incluso más hábil que Cat, el ladrón, pero... él no terminó bien — dijo — ¡Vas a terminar repitiendo la historia si sigues por este camino!

Cat miró hacia otro lado luego de escuchar eso.

Ya quería acabar con esa conversación. No tenía tiempo que perder.

— No soy mi padre... logré mucho más que ese perdedor — gruñó la peliblanca — Tú mismo lo dijiste... soy mejor que él. Más fuerte. Hábil. Poderosa... ¡no dejaré a mi hijo solo como él lo hizo!

— ¿Lo dices en serio? Entonces, dime... ¿cuándo fue la última vez que lo viste?

— ¿Qué?

— ¿Cuándo fue la última vez que viste a tu hijo?

— Eso no te incumbe.

— Claro que sí — exclamó — El otro día fui a tu penthouse, ¿sabías?

— ¿Hiciste qué?

— Había una chica pelirroja. Estuvimos hablando por un rato... me dijo que no te había visto en un buen tiempo.

— E-Estuve ocupada...

— ¡Liderando una banda de criminales!

— ¡Oh! ¡Déjame en paz! 

— ¡No me voy a quedar parado mientras veo como arruinas tu vida!

Entonces, Felicia accionó sus garras.

— Muévete... o te muevo... — le dijo.

— ¿Me estás amenazando?

— Soy tu jefa, ¿lo olvidaste? Puedo expulsarte de mi banda si así lo quiero.

— ¿Qué?

— Perderías protección. Aún hay Maggia por allí con sed de sangre. Ellos podrían buscarte y...

— ¿Me lo estás diciendo en serio?

— Muy en serio...

Felicia caminó y empujó a Boris hacia un lado.

— ¿Qué diablos te pasó? — preguntó Korpse.

— Descubrí que soy muy buena en esto de las organizaciones criminales — le respondió — ¿Y sabes qué? Creo que me gusta esto de ser mala...

Exclamó la villana... mientras salía de la oficina.

Dejando a Boris solo.

Este golpeó la pared, furioso. 

Él no quería nada esto. Aunque no lo admitiera, le preocupaba mucho Felicia.

Desde que la conoció siendo una simple niña, siempre estuvo preocupado por ella. Sabía muy bien que nada de esto le iba a traer algo bueno...

Fue entonces que sacó su celular, buscando un número.

Uno que había logrado guardar la vez que fue a tomar unos tragos con ese chico en el hospital.

El nombre del contacto era claro...

"Hombre Araña"

***

Una vez Felicia salió de la oficina, se apoyó en una pared, soltando un gran suspiro.

Sentía como sus piernas temblaban. Por alguna razón, las imágenes de los asesinatos que había provocado venían a su mente.

A pesar de decir que le gustaba... algo no iba bien con ella. No se sentía bien en ese momento...

Tal vez Boris tenía razón... había cambiado

Por un lado, sentía que no estaba haciendo las cosas bien. Que se había equivocado. No quería estar más allí. Quería volver a casa y ver a su hijo.

Pero por otro lado, ya había llegado muy lejos. Dejarlo ahí sería como si todo el esfuerzo que hizo no hubieran significado nada. Además, de alguna forma, sentir que podía obtener el poder de Kingpin... la animaba.

Llenaba ese vació que sentía.

Antes, se había dicho que tenía que elegir uno de los lados en los que su alma se dividía.

Volteó y miró la puerta de su oficina. Lugar donde se encontraba Boris.

Después, volvió a girar y miró las escaleras, las cuales bajaban hasta la sala donde se encontraban todos reunidos.

Este era el momento para tomar su decisión.

Una decisión que tomó en segundos, los cuales se sintieron horas.

Una decisión... que, aunque no le gustara admitir, fue relativamente fácil.

Bajó las escaleras.

Bajó hasta encontrarse con todos.

Los compañeros líderes... y aquellos a quienes habían reunido.

Los Diablos. Una pandilla que opera en Harlem. Llegó a causarles problemas a Luke Cage en el pasado.

Los Ángeles. Una banda de motociclistas que se encontraban involucrados en el comercio de metanfetamina. Para volverse miembro, tienes que cometer al menos una violación. Punisher intentó acabar con el líder de estos, Bob Lee, pero falló al momento de hacerlo.

La Pandilla de la Calle Yancy. Unos matones que causan problemas en el centro de Mahattan. Son humillados por La Mole una vez a la semana, pero siempre regresa e intentan seguir causando destrozos.

Las Black Cullens. Una pandilla conformada enteramente por mujeres. Lideradas por Lori Cullen, son una pequeña mafia irlandesa que opera al oeste de la 7th avenida. Participan en actividades de protección, usurpación de préstamos, política, bienes robados y drogas.

Los Garra Doradas. Pandilla japonesa que lograron enfrentarse a Shang-Chi, perdiendo en el combate por sus pocos conocimientos de artes marciales. Intentaron vengarse hasta que este mismo salvó al líder de la pandilla, terminando en paz.

Los Bratva Boys. Pandilla rusa que opera en Meatpacking District.

Los Card Killers. Un grupo de sujetos que se encargan de asesinar a sus oponentes usando naipes afiladas.

Todos estos, y más, se encontraban reunidos alrededor de una mesa, esperando a que Black Cat llegara al lugar.

Ella caminó hasta la mesa.

Posó sus manos.

Y sonrió a todos los presentes.

— Muy bien... — dijo Felicia — ¿Están listos?

Hola!

Por fin hay un poco de contexto con como se empezó con la Nación Duende y el Rey Duende :D.

Es lo divertido de escribir historias interconectadas ;).

Espero les haya gustado este capítulo, jujuju.

Si así fue, pueden darle a la estrellita y compartir ^^.

Nos vemos!!

Publicado el 12/12/21

[DANIKAST]

"Hola a todos. Este podcast será un poco más corto y serio de lo normal. Si han estado pendientes de los rumores, un fuerte ataque podría llegar a ocurrir en Hell's Kitchen. Después de la gran destrucción que dejó la batalla de las Personas-Araña contra esa mujer victoriana de otra dimensión, uno no esperaría que pasara algo malo... de nuevo. Por favor, no se arriesguen y hagan caso a estos rumores. No deseo que ninguno de mis oyentes o viewers resulten heridos. Si vives cerca de la calle West 29th, te pido que, por favor, evacues y dejes que las autoridades... o algún héroe se haga cargados. Y si llegan a salir heridos... busquen ayuda. Y recuerden que su salud mental es tan importante como la física. Chao."

***

Que intenso está la cosa en Nueva York, no??

Bueno señores, como hice una vez, esto no es una escena post créditos.

Me etiquetaron en algo, más específicamente ItsDRAKO01 me etiquetó en esto, así que me toca hacerlo.

Disculpen por la calidad HD de la imagen.

1. Pues, no lo diré, porque... doxxeo y bla, bla, bla... aunque, si lees mi nombre de perfil con detenimiento... te darás cuenta cual es uno de mis nombres.

2. Pos... curiosamente, en todos los lugares me dicen Chuck.

3. Heterosexual.

4. En relación, señor!

5. No tengo ex.

6. Bueno, por fin puedo responder esto... seria Gone, Gone, Gone.

7. El 08 de noviembre.

8. Tú, bb!! Jajaja, es broma.

9. Pues no, no me gusta.

10. Tampoco me gusta.

11. La verdad no tanto.

12. Sí, bb!

13. Calor, la verdad.

14. Por supuesto, bb.

15. No tengo tantos amigos, así que...

-ladylex No sé si haces estas cosas, pero si algún día te animas, aquí está ;).

Eirien90 Porque sé que te gustan estas cosas >:D.

CRAZYRED25 Holi!

LuisOrtiz565984 Hello!! Its me!!

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