Luke's Pov

Escuchar las constantes bromas de Michael hicieron que mis ojos dolieran por haberlos puesto en blanco varias veces, se podría decir que sus chistes eran pierde amigos.

Mi mejilla estaba apoyada en mi mano siendo un puño, haber bebido varias sodas de todos los sabores fue mala idea, era tan tonta la idea de no dejar ningún sabor de fuera, mi mente me decía que podría sentirse mal ese sabor, pero no era más que un sentimiento compartido, pues el que se sentía así era yo.

La verdad era que me sentía perdido en cualquier situación que sucediera, Michael ya me había dicho que mi expresión era como si pasaran música de ascensor en mi cabeza, no lo negué, tal vez era cierto, algunas fans lo decían también. Tenía cara de tener música de ascensor en mi mente. Lo admitía.

—Tu actitud me está matando, Bro. — escuché decir a Michael, enfoqué mi mirada en él y asentí a medias. — ¡Basta! Me estás hartando, es como si hablara con la pared, y eso no es divertido. — espetó, se cruzó de brazos, recobré la postura, pasé ambas manos por mi cabello para arreglarlo y le miré, sintiéndome mal.

—Lo siento, Michael, pero no puedo tener el mismo humor que vos. — expliqué en un murmuro. Me sentía tan desgraciado, ni siquiera podía hablar bien.

—Todos están ocupados en sus "cosas" — gruñó Michael como un niño que no lograba llamar la atención. — Ashton habla con Casey sobre no sé qué, Calum está tan sumido en su teléfono que pareciera que entre poco entrará ahí, Miranda, Nia y Rena están en la habitación de Ashton con Misty haciendo travesuras... — le miré a los ojos y sonreí al ver cómo su cara se quedaba petrificada. — Diablos, eso se escuchó tan mal, me refería a que las chicas están haciendo estupideces. — corrigió inmediato, a lo que reí algo fuerte. Me di cuenta que Michael había pasado conmigo todo el tiempo que llevábamos en casa de Ashton, y agradecía que él no se hubiese rendido conmigo.

—Okay, Michael, ¿Qué quieres hacer? — le pregunté, él me quedó viendo por un momento en silencio y negó.

—Realmente nada. — contestó, le observé incrédulo y negué, ya no me importaba si él se quejaba de algo. — Hablemos de ti. — ofreció el teñido.

— ¿Hablar de mí? No quieres escuchar la vida de un chico tan miserable. — dije, dejé escapar una risa amarga, entrelacé mis manos y enfoqué mi vista en estas.

Ambos nos encontramos sentados en el sillón de la terraza de la casa de Ashton, los demás, a como dijo Mike estaban en lo suyo, dentro, en la sala o habitaciones. Se suponía que esto era una reunión de amigos con los de Hey Violet y Misty, para ella siempre había un pase libre para todo, era como de la familia, Calum había puesto una regla de no traer novias, por eso Arzaylea y Bryana no estaban con nosotros, supuestamente era para no distraernos de los amigos, pero me sentía confundido, pues Misty estaba aquí y me tenía distraído y con un sentimiento horrible.

Habían pasado algunos días desde que nos acostamos, la había llamado, y sí, ella contestaba, pero hacía como si nada hubiese pasado y eso dolía.

— ¿Me estás escuchando? — preguntó mi amigo mientras me zarandeaba del hombro. — ¿Qué ocurre con Misty? Pensé que todo estaba bien entre ustedes.

Arrugué la nariz y entre cerré los ojos al mirar el cielo, pensé en una respuesta que me salvara de las posible preguntas de Michael.

—No ocurre nada, estamos bien, ¿Qué te hace pensar eso? — hablé, de cierto modo rápido.

—Bueno, parecen como si todo fuera raro entre usted, ¿tensión sexual?

Inmediatamente abrí los ojos a tope, le miré asustado, a lo que él rió, llevándose las manos a su estómago por la misma risa, este chico me iba a matar.

— ¡No! — exclamé, fruncí el ceño confundido, me crucé de brazos al sentir mi estómago doler, me arrepentía por haber consumido todos esas bebidas y ahora con todo el asunto de Misty, todo yo era un desastre.

Michael asintió lentamente, mirando al frente, hice lo mismo, necesitaba tranquilizarme un poco.

Justamente cuando sentí que estaba más tranquilo y relajado, un grito se escuchó por toda la estancia. Michael y yo nos miramos asustados, pues sabíamos de quien era ese grito, o por lo menos yo.

—Vamos. — él me golpeó en el brazo para aligerarme, me levanté del sillón, yendo al interior de la casa. Todos estaban confundidos por el grito, que habían dejado de hacer lo suyo.

— ¡Oh por Dios! — se escuchó otro grito provenir desde el pasillo que daba a la habitación de Ashton.

—Alguna locura. — dijo Calum, volteando los ojos, le miré atento y decidí ir donde él y sentarme a su lado, lo que hizo que gruñera. Parecía que él estaba un poco gruñón hoy.

A los segundos apareció Misty en la sala, con una mano en la nariz, totalmente exaltada, su cabello estaba suelto, llevaba unos jeans de tiro alto y una camisa de los Sex Pistols blanca que le quedaba floja y unos botines altos negros.

Todos en la sala le prestaron atención. Ella se quitó la mano de la cara, mostrando su nariz, que estaba tan roja que parecía un tomate. Pero entonces miré con suma atención y pude observar un aro plateado en el orificio derecho.

— ¡Tengo una perforación! — gritó y comenzó a señalarse la nariz. Todos rieron por su emoción, detrás de ella aparecieron las demás chicas. — Miranda lo hizo. — la rubia mencionada sonrió mientras hacía una reverencia.

La mirada de ella chocó con la mía, me sonrió, pero no supe cómo sentirme, si bien o mal.

***

Ver a Michael haciendo sus chistes pierde amigos estaba mejor para mí que ver a Misty, mi Misty hablando amistosamente con Calum. Aquello me tenía mal, Rena había ido conmigo para cerciorarse si "estaba bien", sabía que todos los presentes ya se habían percatado de mi humor de los mil demonios.

Misty tenía miles de amigos, no podía culparla, ni tampoco quererla solamente para mí, era injusto, pero estaban esos impulsos tan grandes que me hacían querer ir donde ella y separarla de Calum. El muy idiota coqueteaba con ella, no era mi imaginación, lo juraba. Luego que Misty presumiera su nueva perforación, el moreno había salido con una de sus típicas frases de: "Hey, Misty, las chicas con perforaciones son mi tipo."

No lo soportaba más.

Sentí mi mejilla doler por la presión que ejercía con mis dientes, en un intento de calmarme. A lo lejos visualicé a Ashton observarme divertido, él se suponía toda la miseria por la que estaba pasando y el muy desgraciado se reía de mí, bien, tal vez me lo merecía.

Calum, mi amigo de la infancia, llevó una de sus manos a la oreja de la pelinegra, esta reaccionó encogiéndose en su asiento. Él estaba tocando su parte débil; debajo de la oreja, en el cuello. Por un momento él rió y fruncí el ceño. Pensaba que estaba enojado, o eso mostró durante toda la mañana, pero ahora que Misty se sentaba a su lado, era todo un Don sonriente, lo hacía para joderme.

Fue ahí cuando me levanté de mi asiento, traté de controlar mis celos, ambos me miraron mientras me acercaba a pasos lentos.

—Hola, Luke. — la chica me sonrió animadamente, mi pecho dolió y asentí en forma de saludo.

— ¿Qué seduce? — preguntó Calum, enfoqué mi mirada en él, lo evalué y negué con una sonrisa cínica en mi rostro. Él frunció el ceño al no comprender mi mueca y entre cerró los ojos.

— ¿Podemos hablar? — me dirigí a Misty, ella abrió la boca para articular alguna palabra, pero se quedó corta y terminó asintiendo.

Antes de irme a la terraza en compañía de la pelinegra, giré mi rostro para evaluar a Calum y este me fulminaba con la mirada.

Se podría decir que le había ganado, pero esto no era ninguna competencia.

— ¿Estás bien? — la voz de Misty me sacó de cualquier pensamiento e hizo que la mirara a los ojos. Ella se había sentado en el sillón, en el cual había pasado con Michael más temprano.

—Realmente no. — fui sincero, la acompañé, apoyé mi codo en el brazo del mueble y la observé detenidamente. Vaya que sí lucía hermosa con su nueva perforación.

— ¿Por qué? — preguntó y no pude evitar soltar una risa, una risa llena de dolor, amarga.

¿En serio ella acaba de preguntarme eso? Era increíble.

—Preguntar es tan tonto, ya sabes la respuesta. — protesté, ahora más dolido de lo normal. Ella asintió estando de acuerdo y soltó un gran suspiro cansado.

—Está bien, lo siento. — dijo en un murmuro. — Esto es mi culpa, siento ponerte así y no aclarar las cosas desde un inicio, siento haber hecho como si nada hubiese pasado esa noche, pero Luke, debes entenderme también. — se llevó ambas manos al rostro, cubriendo su semblante de exasperación. — No puedo con esto.

—Por favor, define "esto". — supliqué, bajé mi mirada un poco para poder encontrarme con aquellos orbes azules, pero sus manos me lo impedían.

—Esto, Luke, lo nuestro. — Alzó las manos frente de ella e hizo una seña extraña, indicando "lo nuestro" — Sé que jamás va a pasar algo entre nosotros, eso es obvio, digo, ¿En qué mente cabe que dejarás a tu fabulosa novia por mí? Una chica más, que conoces desde hace tiempo. Es absurdo siquiera pensar que tenemos un final feliz.

Sus palabras hicieron un agujero dentro de mí, en mi estómago, haciéndome sentir mal, peor diría yo. Tenía miedo que tuviera la razón, no quería pensar igual que ella.

—Misty, no digas eso. — gruñí, frustrado.

— ¿Qué? ¿Dejarías a tu novia por mí? — preguntó, giró su rostro para verme frente a frente, alzó sus perfectas cejas y por primera vez no supe qué contestar.

Estaba en shock.

—Eso fue lo que pensé. — me mostró una sonrisa carente de felicidad. — Es por eso que prefería hacer como si nada hubiera pasado, estamos mejor así.

—Misty, yo... — musité, queriendo que no se fuera, la tomé de la mano cuando tuvo intención de levantarse, pero se me escapó. Su pregunta seguía corriendo en mi mente.

—Tranquilo, todo está bien, amigo.

Entonces se adentró a la casa, dejándome con un gran nudo en la garganta, sentía que todas las bebidas de todos los sabores que había ingerido saldrían en cualquier momento, mi pecho dolía demasiado y lo peor era que aquella pregunta no iba a salir de mi cabeza nunca.