Narra Lolo

Miro una vez más hacia la ventana. Desde que Rafael dijo que mi hermana había sido poseída y que iba a llamar a un ángel para que nos ayudara, no me he movido de aquí.

Rachel se acerca y me abraza por detrás —¿Cómo está? —le pregunto acerca de Camile y siento como sus manos acarician mi pecho.

—Está dormida ¿quieres ir a verla? Yo te aviso si llegan los ángeles.

Dejo de darle la espalda y la abrazo, posteriormente le doy un beso.

Me dirijo hacia donde tenemos a mi hermana y a medida que me acerco siento más la energía que emana en estos momentos su cuerpo. Abro la puerta y la veo ahí, amarrada a la cama y Rafael sentado frente a ella leyéndole la biblia, me duele verla así, pero toca; estaba muy agresiva y es mejor evitar, por fortuna ahora duerme.

—¿Has logrado que te diga su nombre? —Rafael niega y se quita los lentes y me observa.

—No, lo único que dice es que nos quiere matar y que a ti te va a arrancar los ojos y la lengua —Él sonríe y yo no puedo hacer lo mismo, estoy que me muero de miedo. -Es un demonio bastante poderoso por lo que veo, hasta sabe rezar y todo.

Me quedo callado, no encuentro palabras para decir que es lo que siento.

—¿Hay posibilidades de que muera si no hacemos algo pronto? —desde que empezó todo esto he querido preguntar y espero que sea una respuesta negativa.

—Pues que te digo. He visto pocos poseídos por demonios y la mayoría han muerto, pero no te desilusiones muchacho, contamos con ayuda de los ángeles y de Milufer.

«Milufer, Milufer ojalá puedas ayudarnos» asiento con la cabeza y me acerco a mi hermana. Su piel cada vez se pone más pálida y ya tiene los labios partidos. Estiro una mano y toco su frente, está ardiendo en fiebre.

Cuando ya estoy por quitar la mano abre los ojos y para mi sorpresa la parte blanca la tiene verde. Esta comienza a reír:

—Te voy a matar. —ríe y mueve sus pequeños pies, su voz cambia a la de un hombre —Me voy a comer tus ojos y también tu lengua. —por instinto retrocedo—¿Qué? ¿Me tienes miedo hermanito? —ahora habla con una voz tierna y angelical.

—No te tengo miedo. —espero que se lo haya creído.

Su risa se vuelve más intensa e intenta lanzarse sobre mí, retrocedo más y siento una leve corriente en la piel.

—¿Quieren que les diga algo que ustedes no saben? O mejor dicho ¿sintieron eso? ¿Saben que significa eso? ¿¡Lo vieron!?

Observo a Rafael con la intención de que él confirme lo que sentí y este asiente.

—Ustedes los demonios solo mienten, así que no tiene que caso escucharte. —dice Rafael y Camille se retuerce.

—Les diré la verdad. Están más que perdidos -se sienta sobre la cama y tira de las cadenas —El ángel que venía a ayudarlos cayó.

Rafael y yo nos observemos, no quiero creer lo que dice este demonio pero por la cara que tiene Rafael, al parecer es cierto.

Noto que Camille gira la cabeza lenta y tenebrosamente hacia la puerta, sigo su mirar y ahí está Rachel mirando con espanto a la criatura que ahora tengo como hermana.

—Ella viene a decirte que la que supuestamente también te va a ayudar ha llegado. —dice la poseída y la vista de todos vuelva a caer en Rachel.

Veo que ella toma aire e intenta hablar, me mira y luego a Rafael —Afu..a fuera, esta Milufer. Allá en el límite de la runa.

Volvemos a ver a Camille —Se los dije —dice esta y se me pone la piel de gallina.

Rafael verifica que las cadenas esten bien apretadas y posteriormente nos indica que salgamos.

—No me puedo mover más de aquí-dice estando parado bajo el marco de la puerta —Lolo ve a ver si es Milufer y, recuerda lo que te dije—asiento— Rachel ve a túnel con tu madre no y salgas hasta que uno de los dos vaya por ustedes.

Miro a Camile que me dice chao con la mano y salgo de ahí cogido de la mano de Rachel, la llevo hasta el túnel.

—Ten cuidado —dice ella después de darme un beso.

—No te preocupes, lo tendré—. respiro profundo y la miro —Entra ya.

Veo como ingresa y me quedo hasta escuchar que le pone seguro a la puerta.

Me dirijo hasta el límite de la runa y veo a Milufer del otro lado, me sorprende verla sola.

—Hola—. me dice cuando ya estoy lo suficientemente cerca. —Vine a ayudar a Camille, déjame entrar.

Recuerdo lo que me dijo Rafael. —¿Recuerdas nuestra palabra de seguridad? -ella asiente, al parecer animada —Dímela y te dejaré entrar.

En mi mente evoco la palabra Fuego.

—Fuego. —dice la demonio con delicadeza y sonrío.

—Acertaste, espera aquí, quitaré la runa.

Ella asiente y corro lo más rápido posible hacia donde Rafael, antes cierro todas las puertas a mi paso.

-No es ella -digo apenas ingreso al cuarto -Me pidió permiso y le pedí la palabra de seguridad, la cual no tenemos con Milufer.

Rafael asiente y mira a Camille —Que mentiroso eres, si ves Lolo porque no hay que creerles a estos demonios.

—¿Y ahora que haremos? -intento calmarme, pero no lo consigo si ese demonio consigue entrar aquí nos mata a todos.

—Primero que todo, cálmate —coge el radio y marca al túnel, contesta Maite —Estén atentas a cualquier cambio en el ambiente o en sus cuerpos, el demonio que está afuera no es Milufer, así que la única forma que tienen para entrar es a través de nuestros cuerpos.

—Bueno, cada veinte minutos te lo estaré comunicando, te amo.

Con esto último termina la comunicación —Y segundo, solo queda esperar. Milufer no nos va a fallar.

Solo espero que no lo haga.

...

Ha pasado una hora desde que salí a ver a la supuesta Milufer, Rafael salió a revisar la casa hace un rato y dijo que todo está bien, pero que aquel demonio todavía seguía ahí, al parecer, esperando por mí. ¿Será que me equivoqué con ella? ¿Será que lo único que ella hizo inocentemente fue leer mi mente y decir aquella palabra? Quiero averiguarlo, pero no me puedo arriesgar.

—Hermanito tengo hambre —escucho la voz de mi hermana en un susurro. Voy hacia donde está y la veo, cansada, con la mirada cada vez más apagada.

El demonio que tiene dentro la deja por unos instantes, cosa que aprovechamos para alimentarla e hidratarla.

—Aquí estoy. —busco un pan de queso, de esos que tanto le gustan y un vaso de leche.

—¿Qué tengo? Porque no me sueltas -dice entre llantos mientras le llevo un bocado de pan a la boca.

—¿Te acuerdas de la vez que un espíritu me golpeó? —ella asiente— Algo similar te pasó.

—Pero mis padres nunca te amarraron así, me duele todo el cuerpo. Suéltame por favor.

—Camille no puedo, cuando te cures ahí si lo podré hacer. -me parte el corazón verla así.

—Me voy a morir, ¿verdad? —niego—. Hay una voz que me dice que me voy a morir. No me dejes morir.

Hago un esfuerzo por mostrarle una sonrisa —No te voy a dejar morir, confía en mí.

Termino de darle de comer y me siento frente a ella. Estoy intentando usar todas mis habilidades psíquicas para intentar ver el rostro del demonio o lograr que me diga algo, pero como dijo Rafael, esto no es un espíritu y ya se sale de nuestro alcance.

—¡Lolo, ven al cuarto de Camile rápido! —escucho la voz de Rafael a través del radio.

Antes de salir me percato de que este bien amarrada y le digo que no tardaré.

Una vez en la habitación no me es imposible no mirar al suelo. En este se ha dibujado un símbolo que está ardiendo al rojo vivo.

—¿Eso qué es?

VNo sabría decirte a ciencia cierta que es, pero sé que es un sello y por el color y olor a azufre pienso que es el sello de algún demonio.

Me tenso y retrocedo, Rafael también lo hace cuando de este empieza a brotar humo de aquel sello. —Si algo corres hacia el túnel.

Dice Rafael y no creo que yo pueda dejarlo aquí solo con aquel ser que poco a poco va tomando forma entre aquel humo negro. Recuerdo que algo similar pasó cuando aquel demonio poseyó a Camille.

—Creo que es mejor que salgamos de aquí, algo así pasó cuando ocurrió lo de Camile.

Ambos caminamos hacia la puerta pero sin darle la espalda a la cosa esa de dos metros. Sin pensarlo dos veces salimos corriendo del cuarto, no sé si ir con Rachel y Maite o quedarme con Camille y Rafael.

—Ve al túnel, yo me quedaré con la pequeña —dice Rafael a lo que bajamos las escaleras rápidamente.

—No te voy a dejar solo.

Nuestra huida se detiene en seco al ver como aquel demonio de un brinco se posa frente a nosotros. Mi respiración cada vez es más pesada y la cabeza no deja de palpitarme a causa de la energía que emana este ser. Este lentamente va cambiando a una forma más humanoide.

—Biltrix —dice Rafael y el ser sonríe.

Ese nombre ya lo había escuchado no me quiero adelantar, pero algo me dice que tiene que ver con Milufer.

—Vengo a ayudarlos con Camille. —cierro los ojos y doy gracias a Dios. —Dale gracias a Lucifer, muchacho. No hay tiempo que perder.

Nos dirigimos al cuarto donde está mi hermana. Apenas nos ve sonríe de manera siniestra.

—Pero que tenemos aquí. —dice Camille con una voz más gruesa que la mía.

Biltrix ríe y se acerca a ella, él o lo que sea ahora Camille. —Te va a costar caro el haber entrado a este cuerpo.

—Eso es lo que tú crees, primero la mato a ella.

Estoy por intervenir, pero Rafael me detiene.

—Aquí el único que va a morir eres tú. —al finalizar Biltrix le da una cachetada y está le escupe en la cara.

—No seas patético Biltrix, los dos muy bien sabemos que no tienes la capacidad de sacarme de este cuerpo.

Biltrix asiente y se agacha junto a la cama y empieza a dibujar algo que no alcanzo a ver muy bien —Se me hizo muy difícil entrar aquí y eso que sabía que runa es la que los protege, no entiendo como pudo entrar este demonio.

—Yo tampoco entiendo como lo logró -responde Rafael.

—¿¡Que me hiciste!? —empieza a gritar Camile —Hermanito no dejes que me mate. -esta vez si habla con su voz.

—No la escuches, no es ella. —pide el recién llegado y eso intento hacer. -Será mejor que me dejen solo.

—No te vayas hermanito él me va a matar. Te lo ruego no me dejes -llora con nostalgia.

Y no sé qué hacer porque sinceramente temo por la vida de mi hermana —¿Quién me garantiza que no la vas a matar?

—Yo te doy mi palabra, nada le va a pasar a tu hermana.

Doy media vuelta para cerciorarme de que, si la escuche a ella y si, ahí está Milufer. Yo sabía que no me iba a fallar.

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Disculpen la demora. La semana pasada se me ocurrió la grandísima idea de cerrar sesión en mi celular y después ya no quería entrar y apenas hoy lo logré, además de eso se me borro gran parte del capítulo la cual subiré en el transcurso de la semana =(

Como ya vieron, posiblemente habrá bebe así que si gustan me pueden sugerir nombres (raros) prometo usar el que mas llame la atención.

Besos endemoniados