Desfuzia
Yo vivía y luego me acostumbraba. Estar sentada en un tablón de cemento, con líneas blancas y un tablero de dos metros en cada orilla. Miraba a mi celular y consumía mis datos. Estaba allí y comencé a grabar: El cielo amarillo, por tanto sol. Los árboles lejanos deshojándose. Me levante sin pensarlo, dando vueltas. Como si trajese música dentro de los inútiles de mis audífonos
Un sonido, un balón anaranjado. Y entonces recordé lo que era no confiar en alguien. Volteé, y el sonido me golpeo en la mano, la grabación se detuvo. El celular cayo de mi mano...desfuzia. La pantalla se quejo, rompiéndose, se torno negra...Pienso cosas extrañas... Si en la tienda hubiesen tenido esa funda en rosa, la había comprado. ¿Por qué tendría que ser de ese verde insoportable?.. Aunque pensándolo, debí comprarla igualmente.
¿Porqué los chicos pueden usar playeras blancas y los chicas no? ¿No pueden? Ah, no. Yo no puedo. A papá no le agrada ¿es así?...Aunque en ese momento pensaba, que al disculparse. Su boca era azul, y pensé que se estaba ahogando. Hasta ahora, pienso en la paleta que balanceaba entre su dedo índice y medio ¿Le gustarían las moras? Entonces, supongo que no se ahogaba. Era solo el color. No sé, solo supongo.
Me quedé solo un rato más. Cuando me fui, vi atrás y él también se iba. Es mi culpa, debí quedarme en casa.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro