El punto fuerte de West Spring en lo que a deportes respecta es el Basketball, pero aun así las gradas del campo de fútbol estaban repletas. Los chicos no mentían, este era realmente un encuentro entre rivales importantes.

Di una vuelta, mirando la gente alrededor. Me sentía un poco desorientada debido a que mi cabeza estaba en otro lugar, muy lejos del partido llevándose a cabo frente a mi.

Grace estaba a mi derecha, chillando de emoción con cada jugada, pero con su atención puesta también sobre su teléfono celular. Dave, a mi izquierda, estaba absorto en el juego.

El partido fue duro, pero el equipo de mi novio se llevó la victoria al final gracias a uno de sus impecables goles. Todos los simpatizantes lo vitorearon cuando se fue junto a sus compañeros al vestuario.

Logré sentirme lo suficientemente emocionada por él como para olvidar el resto de las cosas.

-Fue incluso mas emocionante que los partidos de primera categoría.

Comentó Dave con entusiasmo, caminando conmigo al campo mientras el resto delas personas iban por el lado opuesto.

-Es verdad.

Respondí, con una sonrisa sincera.

Grace parecía bastante inquieta por algo.

-¿Qué ocurre?

Inquirí.

Ella me sonrió.

-Alex vendrá a festejar con nosotros. Pensé que vendría a ver el juego,pero no sé donde puede estar.

Siguió escudriñando a la multitud que se alejaba.

-Quizás te escuchó gritarle cochinadas a los jugadores y decidió no perder el tiempo contigo.

Dave sonaba divertido, pero mi amiga lo miró con enojo.

-Al menos, no voy a ser la única sin pareja esta noche.

Atacó.

Mi mejor amigo mostró una sonrisa de suficiencia antes de girarse y gritar.

-¡Hola! Sky, estoy aquí.

Nuestra compañera del Departamento de Literatura se acercó a nosotros.

Miré a David con incredulidad. ¿En serio saldría con ella? Tiene tanto de diversión como yo de Física Cuántica.

Iba a hacer un comentario sobre eso, pero Crystal se acercó a nosotros en ese momento.

-¡Fue un partido increíble! ¿No es cierto?

-Si,de verdad lo fue.

Ambas nos sonreímos con idéntica ansiedad.

-¡Ahí! ¡Hola!

Grace saludó y se acercó corriendo a Alex, que acababa de llegar.

Se colgó de su cuello, lo que fue sorprendente porque habían tenido solo una cita.

Mis pensamientos sobre el raro comportamiento de mi amiga fueron interrumpidos por unos brazos que se enroscaron en mi cintura.

-No sé si fue buena idea hacerte llevar mi camiseta. Que te la pusieras con pantalones cortos hizo bastante difícil para mi poder concentrarme en la pelota.

El susurro ronco de Daniel y su aliento golpeando mi oído hicieron que mi piel se erizara.

Me giré y le regalé una sonrisa enorme.

Fuimos a un local de comida rápida y ordenamos toda la chatarra que pudimos. La mayoría de nosotros estábamos pasando un buen momento, enfrascados en conversaciones sobre el acontecimiento de la noche que se alternaban entre serias y divertidas.

Excepto Sky, quien no estaba cómoda en absoluto y Alex que parecía no importarle nada de lo que ocurría fuera de su teléfono.

-¡Vamos a Cougar!

Sugirió Gary.

Cougar era un club nocturno, y en otras circunstancias me hubiese alejado de ese lugar, pero estaba teniendo una linda noche y no quería terminarla.

No quería quedarme sola con mis pensamientos porque él estaba ahí.

Todos mostraron su aprobación. Incluso Alex. Dave le echó un vistazo al ceño fruncido de Sky.

-Yo paso esta vez, pero la próxima no duden en invitarme.

Dijo.

-Tengo que ir a cambiarme al apartamento.

Avisó Grace.

-Yo también.

Estuve de acuerdo.

-¿Vas a ir?

Preguntó Dave, mirándome con cierta incredulidad.

Asentí, sin querer encontrarme con sus ojos.

Una hora mas tarde, nos encontrábamos ingresando al club. La confusión del humo, la oscuridad y las luces intermitentes le dieron a mi cerebro un buen descanso. Nos sentamos en una mesa y pedimos nuestras bebidas.

La noche transcurría con rapidez. Cuando Daniel y yo nos pusimos en la pista el alcohol ya me había relajado bastante y bailé desinhibida, pero fue mas divertido que atrevido. 

Los dos nos reímos en cuanto él alejó con su pie una lata de cerveza con la que anteriormente había resbalado y lo abracé con fuerza. Estaba viviendo uno de esos momentos inolvidables de la juventud. Quería guardarlo en mi memoria y reproducirlo cada vez que me sintiera triste en el futuro.

Abrí los ojos que había mantenido cerrados hasta el momento.

Si bien todo estaba oscuro, lo reconocí muy fácil. Y también a la expresión furiosa de su rostro. 

Me alejé rápidamente de mi novio y miré consternada como Justin Bieber se alejaba de nosotros abriéndose paso en el lugar.

-¿Estás bien?

La voz de Daniel llegó a mis oídos.

Asentí, pero mi mirada seguía fija en el punto donde Justin había desaparecido.

Mi pareja me dirigió hasta la mesa y me ayudo a sentarme frente a Grace y Alex.

-Iré a buscar el auto, creo que es suficiente por hoy.

Anunció y luego se fue.

-¿Qué pasa? No bebiste tanto.

Quiso saber Grace.

No contesté. Era cierto, realmente no estaba bajo una influencia alcohólica. Si estaba embriagada de algo, era del pasado que todavía se cernía sobre mi como si tuviera derecho a hacerlo.

No sé cuanto tiempo estuve sentada con la cara entre mis manos, pero en algún instante Crystal llegó a mi lado corriendo, con su mirada llena de preocupación. 

-¡Es Daniel! ¡Lo han atacado en el estacionamiento!

Bieber is Back - Tatteana Pedernera.