Capítulo 15 "No debiste decir eso"
Esto debe ser una pesadilla.
—No puedo creer que trates de pensar que no soy yo—Murmuró frente a mi—¿Cómo demonios se te pudo ocurrir que huirías de mi por siempre?—Susurró mientras se acercaba más.
—Alejate o gritaré más fuerte—Dije alzando la voz.
—Y sabes que tus gritos solo me encienden, si sabes a lo que me refiero...—Susurró atrayéndome hacia él.
Asqueroso.
—Eres patética, justo como tu madre—Dijo y es fue todo.
Levanté mi rodilla y le di donde más le duele.
—¡Nunca menciones a mi madre!—Le grité mientras él se retorcía.
—¡Vas a pagar perra!
—¡Ya no me asustas Benjamin! Sé que no me puedes hacer nada.
—Puedo hacer mucho ahora que se donde vives.
—¿En serio? ¿Y eso a donde te llevará, Benjamin? Mi papá puede odiarme, pero sigo siendo su única hija, si regreso a halifax seré la unica heredera, no nos olvidemos que él te odia más de lo que le disgusto, ¿realmente quieres hacer esto?—Dije con palabras fuertes mirándolo a los ojos, por favor que caiga en esta falsa confianza, no me puedo dejar de mi asqueroso hermanastro.
—Desde que te fuiste entendí lo mucho que te amo.
Está jodido, está jodido de mil maneras.
—Me das asco Benjamin, dejarme en paz.
—¿Como voy a dejarte? Al fin te encuentro—murmuró malicioso.
No dejaré que me haga más daño, ya no vivo en la misma casa que él, puedo patear su trasero y no seré castigada por ello.
No puedo dejar que mi pasado me controle, si gano en esta situación, le ganaré a mi pasado.
Lo golpee en el rostro múltiples veces mientras él seguía dolorido por haberlo golpeado en su punto débil.
—Genil—Dijo.
Después retrocedió unos pasos.
—¡Suficiente! ¿Piensas que todo te saldrá bien? Esto es lo que le hace la gran ciudad a una chica ingenua como tu. Las hace pensar que serán libres como pájaros, pero no lo olvides, es cuestión de tiempo que el pájaro regrese a su jaula.
Estoy respirando con rapidez, su presencia me molesta, lo odio tanto.
—¡Loren!—Gritó una voz familiar.
Divise a un rostro familiar, Aleksandr. En aquel momento Benjamin salió corriendo perdiéndose entre la noche.
—¿Quién diablos era ese, Loren? ¿Estás bien?—Preguntó cuando me acerqué a él.
Oh Dios, ¿estoy bien?
—Esta bien Loren, puedes decirme que pasa—Habló Aleksandr con amabilidad.
Unas cuantas lágrimas salieron, pero hubo silencio, no puedo compartir nada de mi pasado o pensar en ello sin sentirme triste.
Odio la vida, pero ver a Benjamin hecho un desastre me hizo setir mejor, y no se si sea bueno o malo haberme sentido de esa manera.
Al sentir a Benjamin tan lejos me hizo sentir mejor, como si finalmente yo misma estuviese a cargo de mi propia vida.
Estoy agradecida de que Aleksandr haya llegado, pero realmente no quería que me viese de esta forma. Triste. Vulnerable. Sin esperanza.
—Esta bien, Loren, deja de llorar—Dijo con amabilidad acariciando uno de mis hombros.
Después de unos minutos me tranquilice un poco.
—No contestabas mis llamadas así que salí a buscarte. Estoy agradecido porque te encontré. ¿Quieres que te lleve a casa?
Asentí ante su pregunta.
—Mi auto está en la avenida, caminemos un poco.
—Bien—Respondí.
Alek tomó mi mano y comenzamos a caminar. Nunca me sentí tan segura, él es como la luz en un túnel. Caminar con él me da un confort que realmente necesitaba.
—Vamos—Dijo cuando llegamos a su auto.
Entramos y Alek comenzó a hablar mientras el auto seguía estacionado.
—Loren, gracias por haber venido a la fiesta conmigo, hubiera sido realmente aburrido sin ti.
—No fue tan mala Alek. Gracias por estar para mi con lo que acaba de pasar, estoy realmente agradecida—Admití.
—Realmente no es nada, viniste conmigo, así que eres mi responsabilidad por esta noche. Bueno, realmente no me importaría si siguieras siendo mi responsabilidad después de esta noche...—Cuando dijo sus ultimas palabras colocó una de sus manos en mis muslos y se quedó ahí mientras me miraba a los ojos.
Después él... Él me besó. Su beso es diferente... Diferente al de Justin, su beso es suave, con compasión, gentil, no rudo o apresurado.
Le respondí el beso sin pensarlo tanto, no se a donde nos llevará esto, pero ahora mismo me está haciendo sentir mejor. Me aleja de lo que acaba de pasar hace unos minutos.
—¡Alek!—Gritó alguien desde afuera, y ahí estaba él viéndonos por la ventana. Con él me refiero a...
—¿Justin?—Dijo Aleksandr. Alek y yo al instante nos separamos.
—¿Puedo tener a mi asistente de vuelta?—Dijo con el ceño fruncido en un tono molesto.
—Justin, ya nos íbamos a casa, iba a llevar a Loren a su casa.
—Cinco minutos señorita Evans—habló Justin fuerte y claro.
Dios.
Baje del auto, le di la vuelta por enfrente hasta llegar a Justin.
—Puedes irte a casa Aleksandr. Te veo el lunes—Dijo Justin.
—La iba a llevar a su casa, Justin.
—Haré eso yo—Respondió el ojos miel rodando estos.
Aleksandr sin decir nada más encendió su auto y se marchó.
—Trae el auto, Garret—Habló Justin por teléfono con su chofer personal.
Después de unos minutos llegó Garret con el auto.
—Suba señorita Evans—Ordenó Justin.
—Aprecio esto señor Bieber, pero creo que pediré un servicio de auto—dije tratando de ser firme, pero todo esto me parece incómodo.
—No me hagas cargarte y subirte al auto—Dijo de manera arrogante.
¿Qué acaba de decir? Él...
A todo esto, ¿por qué está aquí? ¿Dónde está su familia?
Antes de subirme al auto solo pude pensar en que oh Dios, será otro incomodo viaje en auto a lado del señor Bieber. A lado de Justin.
—Loren—Habló Justin después de unos minutos de viaje en el auto.
—Señor—dije tratando de ser profesional.
—¿Fuista a la fiesta con él? Incluso aunque te dije que no era la mejor idea que te asociaras con él. ¿Qué parte de mantener tu distancia con Aleksandr no entendiste?—Dijo con los brazos cruzados y el rostro serio.
¿En serio? Quiero rodar los ojos ahora mismo. No puedo tolerar esto.
—Nada de eso, no entiendo porque debería hacer lo que dices—contesté de la misma manera—Eres mi jefe en el trabajo, pero no te pertenezco.
—Eso es muy irrespetuoso, no debiste decir eso—murmuró con aires de superioridad.
—Estoy cansada de operar como maquina, tengo sentimientos los cuales pueden ser lastimados, señor Bieber—Tomé aire para seguir hablando—Un día me dices que te gusta que soy honesta y que tengo opiniones, al siguiente me dices que siga las ordenes y que no opine, otro día eres dulce y me salvas de locos en el club, luego en la cena te abres un poco, pero al siguiente día en la oficina tratas de evitar mis ojos, me pones en "mi lugar" haciéndome sentir estúpida, no puedo... No puedo lidiar con esto, no más señor Bieber.
—Cuando dije que te quería lejos de Aleksandr es porque realmente quería decir lo que dije, Loren. Y no te estaba evitando, estaba tratando de evitar que pasará de nuevo lo que ya sabes que pasó—Se refiere al beso, lo sé—Como dije antes, eres mi asistente, no debería involucrarme contigo.
—Oí fuerte y claro señor Bieber, ya me mostraste mi lugar, sé que no soy suficiente, sé que no soy suficiente para ti. Y no te digo que te involucres conmigo, pero entonces, ¿por qué no me dejas en paz? Si me vuelvo cercana a Alek o ha quien sea no te concierne.
—Realmente desearía que entendieras Loren.
—Aquí Garret—Grité para que el chofer me escuchara, he llegado a casa.
—Gracias por traerme a casa señor Bieber—Hablé de manera profesional y después baje del auto. Él solo me miró sin decir una palabra.
—Buenas noches, Garret.
—Buenas noches, señorita.
¿Por qué está la puerta cerrada con seguro? Murmuré para nadie en especifico mientras trataba de abrir la puerta de mi departamento, bueno, el de Camila.
Cuando por fin entré grité el nombre de mi amiga.
—¡Camila!
Demonios, ¿dónde está?
Después de estar unos minutos en el sofá me llegó un mensaje.
Hola mejor amiga, salí por unas bebidas con mis compañeros de trabajo, espero que te la estés pasando de lo mejor, si regresas primero que yo, cierra la puerta y ve a dormir.
Genial, al parecer voy a lidiar con esta horrible noche yo sola.
Después de bañarme, me puse una blusa casi transparente y algo corta con un pequeño short para dormir cómoda. Posteriormente me acosté en la cama con uno de mis libros favoritos, que es el que me acompaña en esta oscura noche, siempre he encontrado apoyo en los libros, me transportan a otro mundo donde ninguno de mis problemas importan.
Gracias al cielo que mañana es fin de semana, así que no veré ni a Justin ni a Alek, al menos dos hermosos días.
Especialmente no quiero ver a Justin.
Se escucho el timbre de la puerta, Demonios, odio cuando Camila olvida sus llaves.
Salí de mi habitación sin pensar mucho en lo que llevo puesto, a esta hora solo puede ser Camila, así que abrí la puerta sin darle vueltas al asunto.
—Soy yo.
¿Qué diablos?
Justin Bieber en este departamento a estas horas de la madrugada mientras yo soy un desastre con esta pijama tan pequeña. ¿Qué está haciendo aquí? Tengo que pellizcarme para confirmar que no es un sueño.
—Sé que es tarde, pero nuestra conversación no está terminada. Así que... ¿Puedo pasar señorita Evans?
Santa mierda, esto no es un sueño. Él realmente está aquí.
Él trae puesta una camisa negra básica, y luce como un sueño, demonios, ¿por qué tiene que ser tan guapo?
Entró al departamento.
—Te traigo algo de beber?—Pregunté educada.
—Estoy bien, Loren.
Él mantuvo sus ojos en mi por unos segundos, me siento pequeña bajo su mirada, después me miró de arriba hacia abajo y mis mejillas se calentaron.
Dios, pero él ni siquiera dice una palabra.
—No pude dejar nuestra conversación donde se supone que terminó, Loren. No me gusta cuando alguien se va y la conversación no concluye. Nadie me corta cuando hablo.
Rodé los ojos interiormente, por suepuesto. Así que todo es sobre su ego, claro que nadie lo corta cuando habla, es Justin Bieber, pero eso no le da ningún derecho de jugar con mis sentimientos ni de controlar mi vida.
—Pero pensé sobre eso Loren, y debo admitir que tenías razón, no tengo derecho de pararte o controlar lo que haces. Quiero disculparme.
—Esta bien señor Bieber, incluso yo no debí decir algunas cosas que dije. Los días pasados han sido problemáticos y no he podido controlar algunas cosas, pero realmente necesito este trabajo.
—El trabajo es tuyo, Loren—Se apresuró a decir—Y estoy agradecido de haber encontrado a alguien como tu, no puedo tener una mejor asistente. Eres buena en el trabajo, de hecho eres buena en todo.
—Pero no lo "suficientemente buena."
Oh Dios, ¿por qué dije eso?
—No digas eso, Loren. Eres realmente buena de cualquier manera.
Su voz sonó genuina cuando dijo eso, realmente diferente, es como si fuera su verdadero ser este día.
Quiero poner mi mano en su rostro, tocarlo, decirle que me consuele, compartir mis problemas e inseguridades con él y preguntarle sobre las suyas larga estar para él. Pero no puedo.
—No importa si trato alejarme de ti, algo me acerca más—Murmuró y parece tener una lucha en sus pensamientos.
¿Qué acaba de decir?
Él se acercó más a mi, estamos frente a frente, puedo sentir su respiración.
Miro a sus labios y todavía puedo recordar a que saben, puedo recordar como saben sus besos.
—Has estado llorando. Nunca quise hacerte llorar, Loren.
Él no lo hizo, él no es la razón por la que lloré en la ducha. No importa cuan irrazonable y molesto pueda ser Justin Bieber, no puedo odiarlo, me es imposible.
—Tu mereces más. No tengo mucho para ofrecerte, mereces a alguien que pueda... Ir contra el mundo para darte lo que esta bien para ti, yo no puedo.
Él no sabe lo que quiero, ¿por que asume cosas?
¿Por qué no puedo hablar?
—Lamento si te di la impresión de que podría ser, de que podría suceder algo entre nosotros.
—No sabes lo que quiero, Justin.
—Pero sé lo que mereces.
Esta es una discusión que no tendrá conclusión.
Si escucho una palabra más voy a romperme en lágrimas. Lo siento, así soy, odio ser tan sentimental. Y no lo haré, no me gusta llorar frente a las personas, llorar me hace ver vulnerable, y no quiero que él me vea de esa manera.
—Gracias por venir esta noche a disculparse señor Bieber—Dije sosteniendo el nudo en mi garganta—Realmente lo aprecio, pero no era necesario, soy su asistente personal y usted es mi jefe, no me debe ninguna disculpa.
Mantente fuerte Loren.
—No tomes lo que dije de mala manera, Loren. Vine aquí porque me preocupas.
—No necesito que lo hagas. Hemos tenido antes esta conversación y realmente estoy trabajando en lo que dijiste. Apreciaría si solo me dejaras ser.
—Sabía que esto no iba a ir bien—Dijo con expresión seria tocando su frente.
—Puede irse señor Bieber, lo veo el lunes.
—Lo siento, Loren. Bien, buenas noches.
Después de eso salió cerrando la puerta a su paso, y yo me quedé sola, sola en esta noche fría.
¿Él dijo buenas noches? Dios, esta no es una buena noche, es de las peores
Después me senté en el sillón, está noche definitivamente es de las peores, lágrimas y servidos es lo que me acompaña.
¿Por qué la vida es tan injusta? Cada vez que pienso que hay esperanza, la luz se escapa de mis manos.
Necesito dormir y escapar de mis problemas con una siesta.
—¿Qué? ¡De ninguna manera!—Dijo Loren mientras está sentada en el sofá frente a mi, es sábado por la mañana y le cuento todo lo sucedido de la noche pasada.
—Lo sé.
—Sales una noche y todo el mundo se derrumba.
—Usaste las palabras correctas para describir la situación.
—No puedo creer que el cerdo de tu hermano esté en la ciudad. Si me lo topo, lo mato—Dijo Camila en tono molesto y con cara de asco.
—Él no puede hacer nada. Estoy segura.
—Más le vale que no haga nada. Bueno, cambiemos el tema, no puedo creer que Justin Bieber bendijo el apartamento con su presencia ayer por la noche—Dijo Camila suspirando y moviendo sus pestañas—Estoy tan feliz de haberme ido ayer.
Rodé los ojos.
—Solo para decirme que no puede pasar nada, como si no lo supiera.
—A mi punto de vista, Loren, él parece estar luchando contra sus propios demonios.
—¿Qué quieres decir?
—¿Por qué es tan difícil para él mantenerse lejos de ti? Cuando él claramente dijo que quiere mantenerse lejos de ti, pero no te deja sola. Quien sabe que está escondiendo o que batallas esté luchando en su interior.
—¿Sabes? Estamos hablando del seor Bieber, ¿qué miedos podría tener? Me pregunto si tiene problemas mundanos reales, más allá de los negocios.
—Quien sabe Loren, las apariencias engañan. De cualquier manera, ¿Qué hay con el otro guapo? ¿Crees que quiera algo contigo?
—¿Aleksandr? Quien sabe, es como si nadie pudiese mantenerse profesional en Bieber Enterprises.
—Pero lo besaste de vuelta, tu tampoco estabas siendo muy profesional que digamos—Dijo Camila alzando las cejas repetidas veces, golpee su hombro.
—No se por que a Justin le molesta que este con Alek, ¿habrá visto el beso? Espero que no, ¿qué pensará de mi?
—Deja de obsesionarte con él, ¿a quién le importa lo que piense? el tiempo dirá.
Tiempo atrás.
—¡Odio este auto!—Gritó Camila mientras íbamos a la universidad.
—Camila, agradece que tienes uno.
—Debería enseñarte a manejar. Hoy empezamos.
Camila siendo espontánea como siempre.
Y así pasamos toda la tarde, yo aprendiendo a manejar. Después llegué a casa, entré a mi habitación y a los minutos llegó mi madrastra.
—Loren Evans, ¿donde estuviste todo el día y por qué llegas tan tarde?
—Dejame adivinar, por lo que mire, esa perra de tu amiga y tu estaban conduciendo.
—Eso es mentira, yo no...
—Te lo dije antes y te lo digo de nuevo, deja de ver a esa amiga tuya, no quiero verla cerca de nuevo.
Dios, ¿por qué mi madrastra se empeña en hacerme la vida imposible.
Presente
Lunes por la mañana, aquí vamos de nuevo, hora de trabajar y ver que sucede.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro