Capítulo 44 - Un nuevo capítulo
— Repite lo que dijiste. — Sus oídos aún no podían creer estar escuchando esas palabras después de tanto tiempo.
— ¡Te amo Park Jimin! Te amo...
¿Por qué los dos dejaban salir sus lágrimas? Quizás porque ese fue un momento que ambos anhelaron y por el cual esperaron mucho tiempo, tal vez porque a pesar de su optimismo lo vieron distante e inalcanzable, casi imposible y ahí estaban ahora, confesando lo que era un secreto a grito. Jimin intentó guardar su compostura y sentimientos, Nam por su parte no quería hablar de ellos hasta que no aclarara todo con Jisoo pero ahí estaban.
— Júrame que no es una alucinación lo que estoy escuchando y que dijiste que me amas de la misma forma que yo a ti. — Sollozó Jimin tirándolo de su abrigo.
— Te lo juro. Siempre has sido mi anhelo, mi paz, mi mayor verdad. Tú eres mi complemento perfecto, la felicidad de mi alma, sé que sin ti puedo vivir, antes creía que no tendría vida sin ti ahora sé que la hay, la hay pero no la quiero. Quiero una vida en la que estemos los dos juntos. Aunque seas la tempestad de mi alma porque tú eres el sueño tras el empeño que he tenido todo este tiempo convertido en realidad.
Los chicos que estaban en la habitación habían escuchado sus declaraciones, rieron sin subir el volumen de su risa y corrieron todos juntos a la puerta para observar lo que ocurría en el pasillo. Ver a sus amigos juntos, abrazados y llorando, sabiendo lo mucho que habían sufrido y se habían extrañado todo ese tiempo los colmaba de felicidad, disfrutaban con su felicidad. Jungkook tiró de cada uno de ellos y cerró suavemente la puerta para no hacer ruido, no obstante siguieron escuchando algunas palabras sueltas entre sus murmuraciones.
— No mentí cuando te dije que siempre te iba amar el día que te pedí que fueras mi novio, aunque en aquel tiempo éramos adolescentes. El tiempo podrá pasar y si no estás me tocará recordar esos momentos que me harán pensar que solo se trata de un sueño del que voy a despertar como lo pensé por tanto tiempo, con la esperanza de tener este despertar.
—No te dejaré pasar nuevamente por eso si de verdad deseas regresar conmigo porque no sabes lo mal que yo también la pasé extrañando todo de ti. Respirar en tu pecho, cubrir nuestros rostros con nuestros cabellos, poner mis manos en tu pecho como un delicado pañuelo que te acariciaba, recibir tus flores, esas que en cada pétalo resumían lo que en un papel o en palabras no podría expresar jamás. Extrañaba el sentimiento de nuestras miradas que se decían que se amaban aunque nuestras bocas con la costumbre dejáramos de decirlo. Sentir que soy el hombre de tu vida y no el mejor sexo de tu cama como siempre te empeñaste en hacerme entender y sentir.
— No llores más y no te muerdas los labios por favor, sabes cuanto eso me provoca, deseo besarte y no puedo. — Jimin realmente deseaba besarlo pero sabía que eso no ocurriría hasta que las cosas con Jisoo no estuvieran acabadas. — ¿Te digo un secreto? — Su ex pareja asintió. — Desde el día en el que me marché aprendí lo que era llorar sin lágrimas, no por complejos, sino porque te sentía cerca aún estando lejos. No te olvidé jamás, aprendí a vivir sin ti, sí pero jamás pude olvidarte.
Abrazado a su cuello Jimin posó su vista en los labios de Namjoon sin él mismo darse cuenta, viendo el movimiento de estos, sintiendo su respiración. Acercó los suyos y respiró en ellos, alzó sus ojos, viendo como Nam dejaba de hablar, sus manos se aferraban con fuerza a su cintura y su respiración se aceleraba de solo sentir su cercanía. No podían dejar de mirarse, estaban a segundos de lanzar todo por la borda pero Nam recobró su compostura.
— Pronto. — Tomó su cabeza y la enterró en su pecho. — Ya mañana hablaré con Jisoo y podremos dejarnos llevar un poco más. Deseo también besarte como un loco, desde hace casi año y medio que no sentía nada de esto, el deseo incontrolable por adueñarme de una boca, pensé que ese instinto salvaje mío se había desaparecido pero me doy cuenta que jamás se fue simplemente que eras tú el único que podía activar todas las facetas de mi carácter. Serás eternamente mi bebé hermoso porque así te comportas conmigo, como un bebé.
—Ya yo no soy así. — Replicó Jimin haciendo una mueca para reírse después con Namjoon. — No sé si tenga la cara para regresar adentro ahora. — Realizó una mueca señalando el salón de prácticas.
— Cierto, el ensayo aún no se ha acabado. Creo que los chicos pueden haber escuchado pero a mí la verdad no me importa, no me importa si hasta la última persona en este mundo se entera que te amo.
— ¿Ni siquiera nuestros seguidores? — Se sorprendió Jimin.
— Ni siquiera ellos, porque el que realmente me quiera y me apoye lo hará sin importarle qué sea o con quién esté, esos que me admiran por mi música y mi persona no creo que me den la espalda, los que lo hagan pues muy su problema. Podría renunciar a todo mañana si con eso te tengo en mi vida.
— Me tendrás siempre, sin importar qué... Ahora... Entremos. ¿Puedo? — Preguntó Jimin señalando su mano, Nam sonrió dándole a entender que no había problema alguno.
Tomados de las manos volvieron entrar al salón donde todos comenzaron a chiflar y vitorearlos cuando alzaron sus manos cogidas. Totalmente ruborizado Jimin intentó esconderse debajo de su gorra sin evitar sonreír. Todos los alzaron en brazos y lo que eran unos ensayos se convirtió en una fiesta. Namjoon les aclaró que todavía no eran novios hasta que no arreglara su situación pero cuando los chicos alegaron que en sus corazones ellos siempre fueron novios no pudo rebatir estas palabras.
...
— Mi amor, ¿qué te parece si hoy que tenemos la tarde libre aprovechamos para reunirnos con tu familia. Me dijiste que una prima tuya también estaba de visita. — Preguntaba Jungkook mientras le llevaba el desayuno a la cama a su esposo.
— Así es como se debe despertar uno. — Estiró sus labios a la espera de un beso de su pareja quien risueño no dudó en dárselo. — Me parece bien, cuando termine de desayunar le llamo a mi mamá para decirle.
Tomaron el desayuno juntos en la cama, escuchando a Jung Joonil mientras bromeaban y hablaban de cualquier tema. Tae como siempre se remoloneó cuando tuvo que entrar al baño pero una vez que vio a su pareja entrar corrió detrás de ella para ducharse juntos y bueno, alguien más, unas caricias por aquí y por allá para comenzar el día con buenos bríos.
Pasaron a comprar algunas flores para la señora Kim, su sobrina, algunas cosas para su niña y luego se dirigieron a la casa de ellos para ver como iba la remodelación que estaba casi terminada, tomaron algunas fotos que les pidió la madre de Tae y finalmente fueron para su destino.
Fueron recibidos con una gran alegría por parte de todos, principalmente de la señora Kim que solía ser siempre la más expresivas. Tras entregar los pequeños detalles Jungkook fue casi raptado por la niña quien no lo dejó libre en toda la tarde incluso comió sentada en su regazo por muchos que todos le dijeron que no.
Taehyung miró con cierta ternura la imagen de su pareja, había notado que se llevaba muy bien con los niños, siempre que había uno este iba a jugar con ellos olvidándose de los demás pero aunque le gustaba verlo en algún lado de su corazón se sentía impotente de no poder ser capaz de darle un hijo. Apartó esas ideas de su mente para no pensar demasiado en ello y estragar su buen humor para dirigirse hacia el suelo junto a su esposo para jugar junto con ellos.
Llegó la noche junto con su hora de marchar, habían pasado un tranquilo día junto a la familia, casi siempre iban a casa de Jungkook y aunque no lo dijera la señora Kim en ocasiones se ponía algo celosa por lo que su yerno quería alegrarla con su visita y había logrado su cometido.
— ¿Mi amor todo bien? Estuviste algo raro durante un rato pero no quise preguntarte delante de tu familia. — Le preguntó Kook una vez que estuvieron en el auto.
— ¿Te parece buena idea haberte casado conmigo?
— ¿A qué viene esa pregunta mi amor? Por supuesto que me parece buena idea, la mejor de todas, soy el hombre más feliz y afortunado de tenerte como esposo. ¿No te sientes bien a mi lado? ¿Hay algo que no te guste? — Negó con la cabeza.
— Yo soy el hombre más afortunado de tenerte a mi lado, tanto que a veces no me lo creo, parece una ilusión. — Se acercó a él para besarlo y después abrochó su cinturón. Su esposo le dirigió una sonrisa ladeada tras entrecerrar extrañado sus ojos.
— ¿Sabes que puedes hablar conmigo de lo que se cierto? Si hay algo que te aflija o preocupe no dudes en decirme, incluso si hay que matar a alguien yo haré el trabajo sucio por ti. — Puso un tono de broma para hacerlo sonreír. — Ese es el rostro que me gusta, con una amplia sonrisa. Merezco una recompensa.
— Pues por ahora solamente te daré un adelanto de tu contraseña, lo demás te lo daré en casa.
Zafó su cinturón y de una forma bien ágil se pasó de asiento, sentándose arriba de su esposo. Abrió sus piernas y se dejó caer hasta el asiento, haciendo presión en su entrepierna con un sensual movimiento mientras devoraba su boca con pasión. Por un momento se olvidaron que aún estaban dentro del garaje de la casa de los padres de Tae hasta que sintieron golpecitos en la ventanilla que los sorprendió. El hijo de esa familia quien había llegado al asiento de su esposo con gran agilidad no lograba regresar a su lugar ni siquiera sabía como había llegado allí tan fácilmente. Para suerte de ambos había sido la niña que no logró ver nada, no pudieron contenerse y soltaron una carcajada que les duró por algunos minutos incluso cuando una se calmaba, cuando miraba al lado y veía a su pareja volvían a estallar en risas, negando con sus cabezas.
...
"Monie, ya estoy llegando a tu apartamento, nos vemos en pocos minutos. - Tu ChiChoo"
No podía evitar sentirse nervioso, el momento de la verdad había llegado. No quería lastimar a Jisoo ni hacerla sufrir pero sabía que la lastimaría más de continuar con una falsa a la que él no contribuiría. Llamó rápidamente a Jimin para informarle y luego se dirigió a beber un vaso de agua. Ni siquiera habían pasado cinco minuto cuando le avisaron de la entrada que ella había llegado.
Sus manos le sudaban pero estaba extremadamente decidido a terminar con aquello, sabía que le sorprendería pero no había de otra. Dos minutos después y el timbre de su puerta sonó, respiró profundamente y la abrió, viendo tras esta a Jisoo, aún con su maleta. Ni siquiera había ido a su casa para dejarla y fue directo a ver a Nam. Intentó besarlo pero este se echó rápidamente hacia atrás con una sonrisa, la ayudó a entrar la maleta y luego la saludó besando sus mejillas.
— No puedo creer que hayas venido directamente sin dejar siquiera tus pertenencias en casa. Debes estar cansada. ¿Deseas beber agua?
— A veces al mal paso hay que darle prisa. Si tienes algo con alcohol te lo agradecería. — Dijo Jisoo quitándose el abrigo y acomodándose en el sofá alzando las piernas en él, luego de prender el televisor.
— Solamente tengo cerveza y vino. — Le enseñó dos botellas uno blanco y otro tinto. — ¿Qué deseas?
— El vino tinto me hace más rápido efecto. Así que esa creo que es la opción perfecta, necesito relajarme. ¿Cómo te ha ido en este tiempo.
Namjoon se acercó con dos copas para acompañarla al menos, brindaron con una opaca sonrisa cuando este se sentó a su lado.
— Me ha ido muy bien la verdad, estoy feliz de estar de regreso en mi país.
— Ya veo. — Respondió Jasso asintiendo sin mirarlo. Saboreó lentamente el vino y soltó un gemido haciendo que Nam sonriera. — Está delicioso, sabes lo que me gusta pero ahora sí, dime. Me mandaste un mensaje que necesitabas hablar conmigo nada más estuviera en tierras donde se entona "Aegukga" — Sonrió tras nombrar el himno nacional de Corea del Sur.
— Pues sí, necesitaba hablar urgentemente contigo. — Aclaró su garganta. — Es respecto a nosotros. Verás... Creo que deberíamos ponerle un punto final a esta relación como pareja que ambos sabemos que no va para ningún lado. — Jisoo sonríe y se termina de tomar toda la copa, vertiendo nuevamente más vino en ella. Namjoon la miró sorprendido, intentó detenerla pero esta lo detuvo.
— No voy a suicidarme por esto así que tranquilo. — Sonrió. — ¿Es por Jimin cierto?
Namjoon no pudo ocultar su asombro, jamás le dijo de su verdadera relación con Jimin porque sentía que no venía al caso y si eso se filtraba podía dañar la carrera de él, la suya no le importaba mucho pero la de Jimin sí por lo que no quiso arriesgarse. Si mal no recordaba su nombre salió a colación muy pocas veces, así que no entendía como ella dedujo aquello, intentó negarlo pero ella solamente sonrió y volvió a terminarse la copa.
— No soy ciega Nam. Te he visto como lo mirabas siempre que salía en las noticias o cuando veíamos los videos musicales, premiaciones y demás, tu mirada de cierta forma siempre se centraba en él y cambiaba totalmente. La foto inmensa que tienes de los dos en la otra habitación por mucho que dijeras que tenías esa como las de tus otros compañeros desde el tamaño de esta hasta tu forma de mirarlo era diferente. Tu apego a su familia, todo me hizo siempre sospechar de esa amistad con la que no hablabas pero siempre tenías presente.
Esta vez fue Nam quien se terminó la copa de vino haciendo que esta sonriera frente a la dulce vista que tenía delante, la reacción de él se lo confirmaba todo porque no solía beber y menos así.
— Quise pensar que realmente podía hacerte olvidar cualquier amor que tuvieras en tu corazón, ganármelo pero, algo dentro de mí siempre supuso que sería de este modo, aunque lo intentaras no te gustan las mujeres, me has visto de todas las formas habidas y por haber, más que respeto te desagradaba el hecho de verme desnuda por eso nunca fuiste más allá aunque yo lo quisiera, jamás me tocaste y tus besos aunque deliciosos, debo aceptar, eran vacíos, no transmitían nada.
—Jisoo, yo-
— Cuando me dijiste que regresabas a Corea presentí que se acercaba nuestro final. — Lo interrumpió. — Cuando me dijiste que teníamos que hablar me reafirmaste mis sospechas y ahora que te veo frente a mí y veo tus ojos lo sé, no hay duda de ello. Yo intenté todo lo que pude por que esto funcionara, al igual que tú, de eso estoy segura, por lo que no me quedan arrepentimientos ni te guardo rencor alguno.
— Gracias por... — No sabía que decirle, no se esperaba nada de aquello, no sintió que había sido de esa forma con ella porque en ese momento él realmente intentó tener una relación con ella, no esperó que ella dedujera su relación con Jimin tampoco y que lo tomara de esta forma, estaba preparado para hacerle frente a un escándalo y miles de reclamaciones de su parte. — Gracias por todo Jisoo.
— Solamente espero que seas feliz y que sigas siendo mi amigo porque en eso eres el mejor. — Nam asintió y ella sonrió. — Me alegro. A ver cuándo me lo presentas y ya sabes, si te hace sufrir se las verá conmigo.
— ¿Que te lo presente? ¿Hablas en serio? — Preguntó intrigado y sorprendido.
— Claro, necesito ver a los ojos a mi rival. — Bufó y carcajeó cuando Nam se tensó. — Tranquilo que solamente bromeaba, no le haría el feo al novio de un amigo mío.
— No te molestaría conocerlo. — Podría ser algo cruel para ella pero realmente esa le parecía una genial idea, para que Jimin también se sintiera seguro y cerrar ese ciclo todos juntos. — ¿Puedo llamarlo ahora?
A Jasso la tomó por sorpresa su rapidez pero asintió, cuanto antes los viera junto mejor sería para ella, nunca le dijo a Namjoon que lo amaba pero sí se había enamorado de él, aún así siempre supo que no era para ella y que no debía aferrarse, solamente disfrutar mientras duraba y lamentablemente ese barco ya finalizó su travesía. Escuchó como Nam lo llamó bebé y su pecho se estrujó, siempre fue un tanto seco con ella por esa parte, le dijo que no le decía esas palabras pero era claro que simplemente no les nacía con ella porque con Jimin salían solas. Se sirvió otra copa pero solamente se dió un pequeño trago mientras en su cabeza se despedían sus recuerdos juntos.
— Joonie estás loco de remate, yo no puedo aparecerme ahí así, sería muy raro e incómodo para todos. — Jimin había estado nervioso y preocupado sin saber como había salido la conversación de ellos dos estaba atendiendo la llamada repentina de su ex pareja.
— Por favor, nos hará bien a ambos. — Le rogó y Jimin asintió, mismo sin tener deseos de conocerla verdaderamente, no era muy atractiva la idea de ver a quien su pareja había estado besando todo ese tiempo.
Aproximadamente diez minutos más tarde, Jimin ya se encontraba en su edificio, como la distancia de su apartamento no era mucha no sería raro llegar tan rápido aunque este en realidad no venía de ahí directamente. Su ansiedad lo había hecho caminar hasta cerca del edificio de Nam, quedándose sentado en un parque, escuchando música. A pesar de que sabía que ella estaría ahí no pudo evitar estar sorprendido y algo nervioso, no sabía si la chica se volvería loca y le saltaría arriba para arrancar su cuero cabelludo, después de todo las mujeres eran impredecibles y si le pegaba no podía devolverle el golpe. Suspiró alejando todas sus locas teorías y entró.
— Lo mejor de todo esto es que encontré un buen amigo en una buena persona. — Dijo Jisoo observándolos, era claro que ese amor era correspondido. — Jimin, te pido que me permitas conservar su amistad, no me gustaría perderla también.
— No te preocupes por eso, además no soy quien decide esas cosas, no somos pareja aún y aunque lo fuéramos sería una decisión completamente de él. Si quieren ser amigos no tengo objeción alguna. — En su interior tenía vergüenza porque una parte de él se sentía como si estuviera rompiendo esa relación por otro lado no le hacía mucha gracia eso de seguir en contacto porque veía en sus ojos que ella estaba enamorada de Namjoon pero si el corazón de ese hombre era para él sabía que no importaba quién lo quisiera Nam se entregaba a una sola persona.
Nam no pudo contener su sonrisa ni sus manos, le sostuvo rápidamente su mano emocionado por la actitud de Jimin aunque él sabía que debía mantener cierta distancia con ella, no dejarse de hablar pero sí mantener el menor contacto posible para que ella no se fuera a confundir jamás.
— Mi consejo para ustedes chicos es que se quieran y cuiden mutuamente porque no es fácil encontrar a una persona cuyo corazón te ame y espere por tanto tiempo. La vida sí da segundas oportunidades pero muy rara vez da terceras y menos cuartas. En cuanto a ti Jimin aunque no sea yo, estoy segura de que hay muchas personas que darían todo porque este hombre les correspondiera de la forma que lo hace contigo, habrá siempre alguien a la espera así que valóralo. — Nam asientió con una sonrisa mirando a Jimin, enarcando sus cejas pero pronto lo tuvo que cambiar su actitud burlona causando que Jimin se riera cuando ella prosiguió hablando. — Lo mismo va para ti Nam, tienes un hombre hermoso y que te ama, así que cuídalo.
Hablaron durante un corto rato más hasta que Jisoo decidió que era hora de decir adiós y dejarlos solos, ellos la despidieron en la puerta con una sonrisa pero, después de su partida un extraño silencio y calma invadió el lugar.
Se acercaron lentamente sin despegar sus miradas hasta que se fundieron en un abrazo. Finalmente no había nada que les impidiera quererse y volver a estar juntos. Se sentía tan bien poder estar así, juntos, unidos, sin ningún problema después de aproximadamente dos años. Parecía poco tiempo pero no lo había sido, fue una tortuosa eternidad desde lo ocurrido en Busan hasta la fecha.
Permanecieron incontables minutos de esa forma, abrazados con lágrimas en sus ojos pero sin abrirlos, necesitaban disfrutar ese momento.
— Tal vez pueda parecerte algo pronto porque literalmente acabo de terminar una relación pero... ¿Quieres ser mi novio? — Preguntó Nam dando un pasa atrás para poderlo observar bien.
— No creo que necesites preguntar eso idiota, claro que sí. — Sonrió Jimin abrazándolo.
— Tan pronto te haces mi novio y ya me dices idiota. Me siento engañado. — Fingió caer al piso con una mano en el pecho hasta quedar de rodillas.
— ¡Oh amor mío, no! — Se arrodilló también fingiendo un inmenso dolor. Se rieron como niños nuevamente y sin darse cuenta sus labios se encontraron.
Namjoon lo alzó y atrajo hacia él, sosteniéndolo firmemente por la cintura pero acariciando delicadamente su cabello y rostro. Después de año y medio sus labios se encontraron nuevamente aunque hacía mucho más tiempo que sus lenguas no entraban en contacto. Se reconocieron lentamente, no había prisa, solamente había amor y muchas lágrimas en ese momento. Sus bocas no querían separarse a pesar de que se quedaban en ocasiones sin aire, respiraban sosteniendo los labios del otro pero no se separaban, cuando tenían la respiración nuevamente controlada se volvían a enlazar como el símbolo del infinito.
Sus besos continuaron y las temperaturas de sus cuerpos ya no estaban tan tranquilas, estaban en su apogeo, elevándose de a poco.
— Jimin... — Susurra Nam en sus labios. — Vayamos despacio. — Este asintió pero aún así continuó besándolo.
Sus manos tiraban suavemente de sus cabellos, los besos se habían vuelto más sugerentes. Lentamente Jimin coló su mano en el pantalón de Namjoon arrancándole un gemido. Hacía mucho tiempo que ninguno de los dos tenía intimidad de esa forma con nadie, a decir verdad desde la vez que estuvieron en el estudio de Nam, no habían vuelto hacer nada más allá de algunas caricias propiciadas por sus propios cuerpos de vez en cuando cuando necesitaban descargarse.
Namjoon apretó fuertemente sus nalgas pero Jimin tomó una de sus manos y tras haber desabrochado sus pantalones la introdujo en ellos, gimiendo bajo su tacto. Sus besos se detuvieron por unos segundos mientras que ellos inclinaban sus cabezas hacia atrás.
Intentaron sostenerse de pie pero torpemente perdieron el equilibrio cayendo en el sofá, aún durante la caída no se despegaron ni un segundo. Sus manos recorrieron el cuerpo ajeno, manteniendo los suaves movimientos en sus entrepiernas porque el ritmo no era para nada agitado, la agitación provenía de sus interiores. Juntaron sus cabezas, con grandes muecas que no pudieron contener sintiendo como sus cuerpos se tensaban. Ellos que se conocían bien sabían que esos jadeos eran nuevos, nunca los habían escuchado antes. Varios segundos después se encontraban temblando, el orgasmo que habían tenido en menos de cinco minutos los había abandonado lentamente.
El anhelo de sus cuerpos, de sus corazones que volvían a estar unidos física y emocionalmente habían colapsado, había sido demasiado para ellos, quienes ahora reían como bobos en el sofá, mientras Jimin intentaba esconder su cara en el cuello de Nam, no sabía exactamente por qué pero estaba avergonzado, feliz sí, pero avergonzado.
Namjoon preparó una tina de agua caliente, justo como recordaba que le gustaba a su novio y lo cargó hasta sumergirlo en ella. Tomaron un baño tranquilo, siempre sosteniendo una de sus manos y cuando estuvieron totalmente, limpios, satisfechos y casi hechos uvas pasas se dirigieron al dormitorio tomados de las manos.
— En estos momentos vamos a entrar a nuestro cuarto y ya eres oficialmente mi novio nuevamente. — Murmuró Nam bajo el umbral que separaba el baño de la habitación. — ¿Estás listo para vivir esa nueva vida a mi lado?
— Nací para ello mi amor.
Saltó a su torso, cubierto solamente por la camisa que Nam le había dado como pijama y este lo sostuvo sin dejarlo caer hasta que lo colocó en la cama para acostarse después a su lado. Por primera vez desde la vez que durmieron en casa de Jungkook antes que llegara ese tsunami a sus vidas pudieron dormir plácidamente en los brazos del otro, sin malos sueños o interrupciones por casi doce horas seguidas.
Definitivamente un nuevo capítulo e historia había comenzado en sus vidas pero esta vez con las experiencias que habían acumulado durante todos esos años y con el fuerte deseo de ser verdaderamente felices juntos hasta que uno abandonara ese mundo.
Pd: ¿Si tuvieran que hacerle preguntas de todo tipo a los chicos de esta serie qué les gustaría saber de ellos? Imagínense que todos son amigos y juegan verdad o reto... ¿Que preguntas corren por esas cabecitas? 😏😈🙈😘
Pd-2: Hoy publicaré más temprano el capítulo porque llevo más de 24h sin dormir y mi cuerpo exige descanso, por lo que como no sé si me despertaré antes de que se acabe el día aquí les dejo el capítulo de hoy.
Aprovecho también para informarles que puede que el capítulo de mañana para la noche de los que se encuentran en el continente Americano. No es totalmente seguro quizás y lo suelto normal o incluso antes pero cabe la posibilidad de que me atrase...
"Para que no se me pongan ansiosas😈"
Espero que les haya gustado este capítulo y ya saben, nos vemos mañana 🙈😘 Los quiero 😘
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