En la casa de una panadera...

—¡¡Está delicioso, mamá!!

—Gracias, hijo —le respondió ella con dulzura.

—Sí, mamá, está rico.

—Jajaja, corran que si no llegan tarde a la escuela.

—Ah, sí cierto —agarró su mochila y salió junto a sus hermanos— ¡¡Adiós, mamá!!

—Adiós, ¡Val!!

Se fueron corriendo a la escuela y se encontraron con el Director Shinoda.

—Hola niños —saludó—, me sorprende verlos aquí temprano.

—Creo que sólo está hablando por uno de nosotros —comentó Toko.

—Ajajaja, bueno, vayan a su clase.

—¡Sí, adiós!

Entraron al salón (respectivamente) y se sentaron en sus asientos.

*Salón de Valt*

—¡Hola chicos, ya llegué!

—Wow, me sorprende —le dijo Lui, un poco extrañado.

( •̀ ω •́ )✧

—Sí, bueno, la clase ya va a comenzar —les dijo Ken, hablando con su títere Keru.

Todos se quedaron callados cuando el maestro entró.

—Buenos días, chicos.

—Buenos días.

—Bueno, ¿que quieren hacer hoy? Tengo dos opciones: la primera, hacer equipos para trabajar y, si terminan rápido, vemos una peli; o la segunda: trabajar solos y, si terminan rápido, jugamos.

—¡EQUIPO!

—Bien, entonces, pueden juntarse con quien quieran y deberán hacer un resumen de la pagina 27, pueden empezar.

—A ver, a ver... con quién iré?? —Valt se fijó en todos los que había, pero ya se habían juntado todos, excepto uno— Bien, creo que será con la antorcha dientes de tiburón andante —se acercó al mencionado—. Creo que solo quedamos tú y yo así que... ¿quieres hacer equipo?

—Tch, lo que sea.

—Ok

Terminaron el trabajo justo a tiempo y se pusieron a ver una peli (cuál fue?? Mmm, Frozen ajaja). Terminó y las clases también.

—Nos vemos después, chicos.

—¡Adiós, MAESTRO!! —lo último lo dijo Valt.

—G-Gracias, Valt —dijo, mientras iba tapándose los oídos.

Salieron del salón y vieron que había muchos humanos afuera de los baños. Se encontraron a Shu.

—Hola, Shu —saludó Valt de una forma cariñosa.

—Hola Valt —le respondió él, volteándolo a ver.

—¿Qué paso? ¿Por qué hay muchos humanos aquí?

—Habla normal... —le susurró al oído, rápidamente volvió al tono normal—. No lo sé, creo que pasó algo.

Se asomaron entre todo el gentío y Valt vio que ahí estaban Ben y Jin.

—Oigan, ¿que pasó? ¿Ustedes saben??

—Creo que encontraron a alguien muerto en el baño... —le dijo Jin, tratando de asustarlo.

—¿¡MUERTO!?

—No, sólo esta inconsciente... —lo tranquilizó Ben.

—¿Y tú como sabes? —le dijo Shu con un tono frío. Después de todo, Ben había atacado a Valt semanas antes (porque se espantó); aunque Valt ya lo había perdonado, Shu todavía le tenía rencor.

—Pues, yo lo reporté con el Director Shinoda...

—Ah, fiu, ya me habías espantado... —le dijo Valt.

—Lo siento *no, no lo siento* —pensó Ben.

—¿Y quién es? —preguntó Shu.

—Wakiya.

—¿¡Wakiya!?

—Creemos que algo lo atacó, pero no sabemos qué.

—Deben irse a sus casas —anunció el director Shinoda—, mientras más rápido mejor.

Todos los chicos se fueron a sus casas y Valt esperó a Nika, la cuál apareció en unos minutos, pero buscando a Toko.

—Valt, ¿tú has visto a Toko? —le preguntó.

—No, ¿por qué? ¿está perdido?

—No sé, pero no ha aparecido desde la última clase.

—Umm, que extraño... —Shu llegó con ellos.

—Pues hay que encontrarlo, porque nos tenemos que ir rápido.

—Sí, los ayudaré.

—¡Gracias, Shu! — Nika lo abrazó—. Ahora sí, ¿donde empezamos?

—Hay que dividirnos, así lo encontramos más rápido.

—Sí —les dijo Shu—. Valt tu por allá, Nika tu por ahí, y yo por acá —señaló a diferentes partes. Los chicos se separaron.

*Con Toko*

—¡JAMÁS LES DIRÉ DONDE TENGO EL AMULETO!

—¿Ah, sí? Pues te obligaremos —sacó un frasquito de un bolso de cuentas que tenía un líquido transparente, como si fuera agua—. Abre grande... —hizo que se tomara el liquido a la fuerza—. Ahora, dinos donde está el amuleto.

(la bolsita)

—Está... está... —Toko intentaba resistirse— *¿Cómo me obliga a decir la verdad?* Está en mi habitación debajo de la cama —lo dijo todo muy rápido, pero los que lo ataron a la silla entendieron.

—Bien, el efecto pasara en unos minutos. Hay que ir a su casa. Eres un Azul, ¿no? —asintió—. Pues, vamos a la casa Aoi —pero, antes de irse, le dijo—. ¡Oublia! —

*Con Valt*
—¿¡TOKO, TOKO, DÓNDE ESTÁS!? Ay, dónde ta ese niño.

*Con Nika*

—¿Toko, Toko? Aaah, ¿dónde estarás, Toko?

*Con Shu*

Shu: ¿¡Toko!? ¿¿Estas ahí?? —se le ocurrió una idea— ¿¡Lobo estás ahí!?

Se escuchó un grito desde atrás de una puerta.

—Escuché algo... ¿¡TOKO, SI ERES TÚ GRITA!?

—¡¡¡HMHMHMHHMH!!!

—Creo que es él —abrió la puerta y lo encontró atado y con una cinta en la boca— ¡Toko! ¿estás bien? —le quitó las cuerdas y la cinta.

—Sí, pero tenemos que irnos, ¡¡RÁPIDO!!

Jaló a Shu del brazo y se lo llevo a la salida

—¡Espera, tus hermanos te están buscando...! Yo iré por ellos, tú puedes irte.

—Sí, ¡gracias! —y se fue corriendo a su casa.

—*¿Por qué estará tan preocupado?*

*Con Valt y Nika*

—*estornudo* Salud...

—Gracias, bueno, yo no encontré a Toko por ningún lado.

—Tampoco —Nika vio que Shu estaba corriendo a su dirección.

—Encontré a Toko, pero se veía muy alterado, ya se fue a su casa.

—Ah, fiu, gracias, Shu. Bueno, ya nos tenemos que ir nosotros también. ¡¡Adiós!!

Y los tres corrieron respectivamente y sus casas.

*En la Residencia Aoi*

—*No hay nada roto* —se escuchó un chillido en su habitación— *¿Qué fue eso?* —subió las escaleras a su habitación y vio a alguien sentado en su cama con un collar colgando de la mano.

—Niño malo. Esto no te pertenece~

—Claro que sí. *¿No se supone que los espíritus malignos no se pueden acerca a él?*

—Amm, no, no podemos, pero a este sí, ¿sabes por qué? Por que es falso —lo tiró al piso y se hizo polvo.

—¿¡Qué!?  Espera, ¿leíste mi mente?

—Amm, ¿obvio? Estudio la Legeremancia, y la domino tan bien como la Oclumancia —el chico que estaba sentado sonrió mientras se acercaba a Toko.

—Uuuumm...

—Agh, nada —aquél espíritu tomó la playera de Toko y se la levantó, empezó a lamer su abdomen.

—¡¡TOKO, YA LLEGAMOS!! —Valt gritó.

Toko pateó al espíritu, en el brazo, liberándose.

—Ah, que bien —Toko bajó las escaleras un poco agitado, alguien abrió la puerta principal— Hola, mamá.

—Hola, ¿niños? Llegaron antes de lo habitual.

—Es que tuvieron que evacuar la escuela por que dijeron que había un niño muerto ahí...

—¿¡MUERTO!?

—No, sólo estaba inconsciente —aclaró Nika—. No sabemos bien que pasó exactamente, pero no fue nada tan grave.

—Ah, fiu. Bueno, ¿quién tiene hambre??

—¡Yo~! —gritó Valt mientras Toko volvía a su habitación.

—Pues, vamos a comer.

Toko se tranquilizó al no ver al espíritu.

Cenaron una cena en la noche. (jeje.) Y cuando se iban a dormir alguien tocó la puerta.

—Amm, ¿quién podrá ser a estas horas? —abrió la puerta y vio al amigo de Valt— Ah, hola, Silas, ¿quieres ver a Valt? —éste asintió—. Está arriba en su habitación. Pasa.

—Gracias —pasó adentro y subió las escaleras en dirección a la habitación de Valt— ¿Valt?

—¡Silas! Hola, hace mucho que no te veo.

—Lo mismo digo —dijo el mayor, muy desanimado.

—Oye, ¿te pasa algo?

—No, sólo que... No, nada, es muy complicado... Y tú todavía eres muy inocente —susurró al final.

—¿Qué?

—Nada, nada. Ah —fingiendo sorpresa dijo:—, mira la hora, ya me tengo que ir. Adiós, Valt. Nos vemos en un rato.

—Sip, bai :3

—Oh, ¿ya te vas Silas? —dijo Chiharu cuando lo vio bajar por las escaleras.

—Sí, ya se hizo muy tarde. Gracias, señora Aoi. —Abrió la puerta y salió—. Espero no me toque esta noche con Infinite Curse —y se fue a su casa corriendo. Llego, se puso la pijama y a dormir.

*Con Valt*

—Qué extraño actuaba Silas... Parecía que le preocupaba algo. Bueno, está noche le preguntaré.

Se quedó profundamente dormido y una estela de luz cruza por la habitación.