Let's go to the Party
Las luces de los flashes cegaban a los importantes invitados que iban llegando esa noche a la magnífica fiesta del excéntrico Lex Luthor.
El primero el filántropo, playboy, aunque ya era mas bien un playman multimillonario. Bruce Wayne, como siempre atrayendo la atención de todos en un auto, tal vez, solo comparable a su ego en majestuosidad.
Luego Clark acompañado de Louise en representación de la prensa de Metrópolis. Ella lucia un precioso vestido negro, que resaltaba a la perfección su esbelta figura y que había dejado deslumbrado al hombre de acero.
Tiempo después en pleno apogeo, Carmine Falcone. El otro gran magnate de Gotham, que sin embargo no tenía negocios limpios, también hizo acto de presencia, y para ambos reporteros quedó más que clara la falta de escrúpulos de Luthor. Aquello rayaba en el descaro, y la morena pensaba hincar el diente sobre la jugosa noticia de esos dos haciendo negocios.
Clark por otra parte no apartaba la vista de Bruce, quien pidió su apoyo como una distracción esa noche, aunque no terminó de aclararle que pensaba hacer exactamente. Solo lo vió escabullirse y supo que esa era la señal para distraer al anfitrión cuando Lex bajó del podio, después de dar un efusivo discurso y aparentemente buscando a Wayne, entre la gente. Clark lo abordó en seguida, para hacerle un par de preguntas antes de que siguiera buscando.
Esa noche estaba particularmente ansioso sobretodo porque no había hablado con Diana, y le preocupaba que estaría haciendo su amiga, luego de la mala actitud del murciélago. Pero de momento tocaba representar el papel del tímido periodista ante Lex, e intentar descubrir sus planes.
Bruce mientras tanto, haciendo gala de su faceta detectivesca y con ayuda de los planos, que muy diligentemente Alfred le había facilitado, logró colarse hasta el lugar que buscaba.
Estaba convencido que Lex tenía algo que ver con lo de los metas y el robo en Gótica, pero no que fuese el responsable directo, y eso solo lo confirmaría robando la información encriptada de sus oficinas, cosa que habría logrado de no ser por la inoportuna secretaría de Lex, por culpa de la cual tuvo que salir del lugar fingiéndose perdido.
Luego otras personas y como no, invariablemente Lex intentando crear una extraña animosidad entre el reportero y Bruce, le hizo perder demasiado tiempo y para cuando logró llegar a la oficina el pen drive ya no estaba, pero curiosamente no habían dado alarmas. Lo cual significaba que lo habían descubierto sus hombres y pensaban atrapar al culpable durante la fiesta, o lo había tomado alguien más, pero quién ¿para qué?.
Su respuesta llegó cuando se dirigió a las salidas, solo para ver a cierta deslumbrante mujer, partir a alta velocidad en su costoso auto.
_____ Diana...___ no podía molestarse por su actitud y lo sabía, él ni siquiera se había disculpado aún. En realidad no sabía como hacerlo, con cualquier mujer era fácil, alguna joya costosa o unas flores. Pero esa mujer conocía más de él en solo unas semanas, de lo que podría conocer cualquier otra en toda una vida, además que ella era de todo menos alguien ordinaria.
En ese momento otro auto estacionó frente a él, quien lo abordó en silencio sabiendo que lo llevaría a la ubicación de Wonder Woman.
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