030
Capítulo dedicado a gigiadelgado y Taehyungie-hyung
No todo es siempre color rosa.
El apartamento de Jungkook tendría que estar vacío a esa hora por la mañana y, sin embargo, el azabache dueño de ese lugar estaba sentado en el sofá porque los licenciados de todas las facultades estaban preparando los exámenes de admisión que se llevarían a cabo dentro de unos meses, pero que tenían que estar listos sí o sí.
Se tendría que decir que Jungkook estaba tranquilo por estar en casa bebiendo una cerveza y viendo la televisión o alguna película en Netflix; lo cierto era que, estaba en su cama sin nada en las manos y observando intensamente a su celular. ¿Por qué? Porque esperaba una llamada de Taehyung, o un mensaje, pero los únicos que le hablaban eran sus inútiles amigos y Kihyun.
"¿Qué pasa?" preguntó a la pantalla, que, obviamente, no iba a contestarle. "¿Es que acaso ya lo aburrí?"
Jungkook tenía claro que no podía reclamar porque no eran nada y aún si lo fueran, tampoco tendría derecho porque Taehyung estudiaba y trabajaba, agregando que tenía un hijo por el cual preocuparse, si lo veía de esa forma, él era lo menos importante de su vida. Y aquello dolía. Soltó un suspiro y se colocó boca arriba hasta que luego tuvo la brillante idea de stalkear a su crush.
"Oh, Dios" exclamó maravillado y llamó a Kihyun, que le contestó con un suspiro. "¡Kihyun, tengo algo que decirte!"
"¿Tae ya te contestó?"
"¡No!" y sacudió la cabeza. "Pero no es eso, es increíble esto de estar enamorado."
"¿Te gusta que te ignoren?" preguntó confundido y Jungkook se pudo imaginar su rostro.
"No, Ki, tú sabes que yo jamás he tenido crush, ni he stalkeado nada, pues mira, ¡estoy a punto de hacerlo!"
"Eso es..."
"¡Maravilloso! Yo antes no entendía por qué la gente se la pasaba publicando 'estoy stalkeando a mi crush', quiero decir, ¿por qué mejor no dejarlo y cambiar de crush? Ahora lo entiendo, ¡es porque tienes esa enorme necesidad de saber qué está haciendo y si está pensando en ti!"
"Oh, Dios, Kook" murmuró el castaño. "Taehyung hace un par de días me dijo que parecías un robot descubriendo emociones y te juro que pensé que estaba loco ¡pero tiene toda la puta razón del mundo!"
"Sí, sí, voy a escribir un libro 'Cuando los cables no me funcionaban' y va a ser best-seller, apunta este día donde surge la idea del éxito."
"No es muy original. Estoy pensando seriamente en colgarte, Jeon."
"Lo haré yo, tengo que stalkear a Taehyung."
"Das miedo. ¿Tengo que advertirle a Taehyung que tenga cuidado contigo?"
"No. ¿Sabes cuál es su usuario de Instagram?"
"Te lo mando por mensaje" dijo antes de colgar.
Jungkook comenzó a preguntarse si fue buena idea stalkear a Taehyung; ¡su Instagram estaba lleno de fotos con ese tal Changkyun! Bueno, en realidad no. El 90% del Instagram de Taehyung estaba lleno de fotos de Jaechan con diferentes ropas y disfraces que lo hacían más adorable y lindo. Del 10% sobrante, había un 3% de selcas de Taehyung, un 7% de fotos con Changkyun y sus amigos, pero claro, a los ojos del azabache solo estaba el chico que casi le rompe la mandíbula.
Suspiró pensando en que debió haberse tomado fotos con Taehyung para al menos andar ahí y que los seguidores del peliplata supiesen que Jungkook estaba en su vida y que se alejaran. Sin embargo, no lo estaba. Pasó a otra foto de Jaechan donde estaba debajo de un árbol de navidad vestido de reno. Algo que a Jungkook le gustó mucho de las fotos de Jaechan, es que la sonrisa era enorme y verdadera, la sonrisa que él conocía bien. Jungkook estaba revisando las fotos de abajo hacia arriba así que ya estaba llegando a las más recientes y encontró a Jaechan en el parque de diversiones de Busan en el que él había estado y sonrió al recordar esos momentos.
La siguiente foto le tomó por sorpresa.
Era él. Jungkook estaba con Jaechan en sus brazos y ambos sonreían observando el show de un malabarista en monociclo. Recordaba ese momento; Jaechan y él habían corrido al ver al malabarista dejando atrás a los demás, pero sabía que ellos habían llegado detrás de ellos. Jamás pensó que Taehyung fuese a tomarles una foto, pero sí, ahí estaban él de perfil sonriendo y Jaechan con los brazos en el aire gritando emocionado.
"Las personas que cambian para entrar a tu vida nuevamente solo para hacerte feliz son las que verdaderamente valen la pena. Mis dos niños emocionados por el arte"
Eso era lo que rezaba en el pie de la foto y Jungkook se mordió el labio cubriendo sus ojos con su brazo y luego dejó escapar sonrisas. 'Mis dos niños.' Ahora era su niño y aquello simplemente lo llevó a sentirse el hombre más afortunado de la vida. De pronto, el timbre de su puerta sonó y se levantó rápidamente para ver quién era.
Se sorprendió tanto encontrar a su madre llorando en la puerta y su sonrisa se desvaneció suavemente.
"¿Mamá? ¿Qué te sucedió?"
"Jungkook" lloriqueó ella abrazando fuertemente a su único hijo mientras temblaba.
"¿Qué pasa mamá?" cuestiona sujetándola de los hombros.
"Tu padre... Tu padre es un imbécil" lloró más fuerte.
"¿Por qué? ¿Qué te hizo?"
Se veía destrozada, con el rostro empapado en lágrimas, su maquillaje algo corrido y su cabello deshecho. Su padre había estado insoportable y nadie entendía por qué, y lo más extraño es que no le había llamado para hablar sobre lo último que sucedió entre ellos. Aquello era muy extraño. ¿Será que había discutido con su madre? ¿Qué podía ser tan fuerte como para que ella corriese llorando a su apartamento?
"Tiene... Tiene cáncer de páncreas, Jungkook, tu padre tiene cáncer."
No era lo que esperaba.
"¿Qué?"
"¡Yo le dije que dejara de fumar!" exclamó ella tratando de molestarse, pero fracasando en el intento porque comenzó a llorar de nuevo. "Llamé al doctor familiar para organizar mi cita mensual y de pronto me suelta la bomba de si Kyunhan se ha decidido en empezar el tratamiento o no."
"No... no ¿no está en tratamiento?" preguntó con el estómago retorcido. De pronto, su celular comenzó a vibrar y miró rápidamente encontrando a Taehyung. Su madre se encaminó hacia la cocina mientras seguía llorando y supo que necesitaba estar sola. Contestó. "Tae..." su voz salió terriblemente temblorosa.
"Ugh, te pido disculpas, recién veo tus mensajes. Lo que pasa es que fui al salón a retocarme el tinte pues las raíces ya se veían y no andaba datos" explicó rápidamente. "Pero sí, estoy más que libre, podemos salir si aún quieres."
"Tae... yo..." escuchó como su madre abría la refrigeradora.
"¿Uh? ¿Estás bien? Te escucho mal..."
"Acabo de enterarme que mi padre tiene cáncer de páncreas" soltó y se sentó en el sofá con la mirada ida. "Me siento del asco... la última vez que nos vimos yo..."
"Shh, no digas nada. ¿Quieres que esté ahí?"
"Por favor..." susurró y observó a su madre salir de la cocina con un vaso de agua en su mano, se había limpiado la cara, pero seguía llorando. Sin maquillaje, su rostro se veía un poco más depresivo. "Dame un segundo."
"Claro."
Jungkook bajó el celular y miró a su madre.
"Mamá, deberíamos hablar con él y darle nuestro apoyo..."
La mujer le miró y negó suavemente dando otro sorbo antes de hablar.
"Me voy a casa, seguro tu padre ya no está ahí, vino el chófer conmigo, no te preocupes" Jungkook la miró sin expresión, estaba algo molesto, confundido, dolido y culpable. "Si quieres hablar con él... Que sea mañana, porque seguro hoy llega explotando." Ella niega y se acerca a darle un beso en la frente. "No me mires así..."
"No te estoy viendo de ninguna forma" le soltó algo frío, no quería enojarse con ella, porque entendía cómo se sentía; después de todo, era el amor de su vida. Sin embargo, ahí iba de nuevo a dejarlo solo.
Ella asintió y salió de la sala casi corriendo, porque su única misión ya había acabado; decirle a su hijo que su padre estaba muriendo y dejarle solo. Cuando escuchó la puerta cerrar, sintió el celular de nuevo en sus manos y recordó que Taehyung estaba en la línea.
"Tae..." llamó con esfuerzo; quería que Taehyung siguiera ahí para no sentir su mundo desmoronarse. Se sentía horrible.
"Aquí estoy" soltó el peliplata y su voz se escuchaba nerviosa "Ha pasado algo malo, ¿verdad?"
"Papá tiene cáncer de páncreas, Tae..." miró sus piernas. "Le dije que me dieron ganas de odiarlo, y que lo intenté y se está muriendo..." su voz tembló. "¿Quién quiere escuchar eso cuando tienes algo así...?"
"Jungkook, tienes que calmarte; tú no lo sabías" le recordó. "No es tu culpa, y necesitabas sacar todo eso de tu corazón, tenía derecho a saberlo, pero también tiene derecho para que sepa cuanto lo amas."
"Tae..."
"Llego en 10 minutos."
"Vale..."
Taehyung tardó más de diez minutos, porque había salido disparado de la casa y luego recordó que no conocía la dirección del azabache así que tuvo que volver a llamarlo. Una vez tuvo la dirección, salió corriendo de nuevo.
En cuanto llegó, el de seguridad le miró extrañado hasta que dijo su nombre y una palabra clave de Jungkook. Tomó el ascensor y de pronto, comenzó a sentirse nervioso. ¡Estaba yendo al apartamento de Jungkook! ¿Significaba que ya era algo más serio? Bueno, en realidad, no tenían nada, así que no podía catalogarlo de esa forma aún así, los nervios no se los quitaba nadie. Hasta que recordó la razón de estar ahí.
El padre de Jungkook tenía cáncer.
Y sus nervios dieron un giro en su estómago cerrando los ojos al pensar en Jungkook perdiendo a su padre. Kim Taehyung sabía de antemano qué era perder a alguien que amabas, lo había vivido dos veces y aunque nunca conoció a sus padres, podía tomarse de la misma forma y a todos los hermanitos que perdió de casa en casa.
Sí, Taehyung sabía lo que era perder a la gente, para su mala suerte.
Lo peor, es que no sabía cómo explicarle a Jungkook que es dolor era como morir él mismo.
El ascensor se abrió y caminó por el pasillo hasta dar con el número indicado de Jungkook, pero le encontró sentado en la puerta con la cabeza gacha y los hombros bajos. Su corazón se estrujó de manera agonizante y se acercó lentamente a él. El menor pareció sentirlo porque levantó el rostro y dio rienda suelta a sus lágrimas sintiendo los brazos de Taehyung rodearlo y escondió el rostro en su cuello mientras lloraba fuerte y desolado.
"Estoy aquí..." murmura contra su oreja antes de darle un beso en la mejilla empapada. Le ayuda a levantarse con cuidado y entran al apartamento. Ayuda su pequeño Jungkook a caminar porque no puede dejar de llorar.
Caen en la cama, frente a frente con las manos enlazadas. Ambos tenían los ojos abiertos, en contacto y las respiraciones tranquilas, acompasadas. La cama de Jungkook era matrimonial, y de tipo minimalista. El cerebro de Taehyung estaba trabajando a toda velocidad para hablar y decirle algo inteligente. Sabía que Jungkook no querría hablar de su padre, pero era necesario. Ninguno de los dos sabía cuánto le quedaba de vida. Taehyung llevó la mano libre hacia el rostro de Jungkook y él cerró los ojos ante el contacto, disfrutando la caricia.
Sus ojos estaban hinchados, y la punta de su nariz, roja. El mayor se inclinó para rozar sus labios con los de él, en una acaricia reconfortante antes de seguir mimándolo con su mano, acariciando su mejilla, su sien, su cabello.
"Tu cama es muy grande para vivir solo" murmuró y Jungkook sonrió.
"Lo dice el que tiene una cama Queen" se burló sin abrir los ojos, solo disfrutando del momento.
"Bueno, tengo un hijo que se mueve como pez fuera del agua cuando duerme conmigo" explicó, susurrando. "Entonces, me toca tener mi espacio."
"Uhmm" murmuró Jungkook sintiendo la mano de Taehyung acariciando su cabeza. "Me gusta cómo suena eso; tú y yo de esta forma y Chan entre nosotros" sonrió, sonrió en grande ante la imagen.
"¿Sí?" preguntó Taehyung con el corazón temblándole de emoción. "¿Sabes que me gustaría a mí también?"
Jungkook abrió un ojo y se río.
"Qué sucio eres Kim Taehyung..."
"No me refería a eso idiota" le 'regañó' si es que se regañaba con una sonrisa en el rostro. "Debes hablar con tu padre" empezó y Jungkook se tensó en un momento. "No digas que no puedes; ya te dije que tú no sabías."
"Sin embargo, debe haber una razón para no habernos dicho..." susurró Jungkook sin mirarle. "Tal vez no somos tan unidos, pero... Si yo me estuviese muriendo, se los hubiese dicho."
"¿Cuándo?"
Jungkook lo miró.
"¿Uh?"
"¿En qué momento lo hubieses hecho?" Jungkook frunció el ceño.
"No lo sé..."
"¿Te estás escuchando? Tú padre también podría estar actuando de esa forma" le explicó suavemente "porque quizá tiene miedo... No importa que tan grande seas, o cuanto hayas vivido, no todos pueden superar el miedo a morir. Quizá también por eso haya estado actuando de manera gruñona..."
Jungkook se encogió; jamás había visto a su padre temiendo a algo. No, él no le temía a nada. 'Arriesga y ganarás, Jungkook' era lo que siempre decía. ¿En qué momento todo había cambiado?
"¿Por qué está pasando esto, hyung?"
Taehyung se sorprendió, Jungkook jamás le había dicho 'hyung'. Sin embargo, lo entendía; Jungkook se sentía culpable, estaba dolido consigo mismo y quizá hasta se odiaba un poco. Su personalidad, su mente y su corazón estaban frágiles. No había barreras, en ese momento, las defensas de Jungkook se habían extinguido y se habían ido entre los susurros. Tenía a un Jungkook roto frente a él así que se acercó a él porque Seúl seguía frío y la habitación no era excepción. Enredó sus pies con los desnudos de Jungkook y los encontró helados. Su corazón estaría igual. Su cuerpo se acercó al de él y el menor entendió el mensaje; se escondió en el cuerpo de Taehyung con el rostro hundido en su pecho. Se acurrucó como un bebé y se refugió entre sus brazos.
Entonces, Taehyung recordó que Jungkook le había dicho que había pasado mucho tiempo solo.
Sonrió con amargura al descubrir que ambos eran parecidos en ciertos aspectos; ninguno de los dos recibió un abrazo reconfortante cuando lloraban preguntándose porqué lo malo estaba pasando. En la cabeza del peliplata, se mostraron diversas imágenes de él llorando en diferentes camas mientras escuchaba a los cuidadores gritando que eran insoportables y que jamás serían adoptados.
Y sí, ellos tenían razón; jamás fue adoptado.
Estrechó a Jungkook contra su cuerpo porque sabía lo horrible que era llorar sintiendo que todo el mundo se destruía ante ti y te preguntabas qué habías hecho mal.
"No sé por qué esto está pasando Jungkook..." pasó los brazos por su espalda y lo sintió temblar aún más. "Y tampoco quiero prometerte nada, lo único que puedo asegurarte es que estoy aquí, ¿sí?"
"Quédate... quédate conmigo, por favor" rogó suavemente.
"Me quedaré, ¿de acuerdo?"
"De acuerdo..."
Perdonen la tardanza, con esto de la cuarentena mis hermanas mayores han tenido que trabajar en mi laptop porque se arruinó la que ellas usaban, entonces casi que no he podido hacer nada:c
Por cierto, a BOM ya le queda poco, quedará aproximadamente de 36 capitulos, si mis cuentas no salen mal. En fin, veré si les puedo traer el otro cap.
Los amo, abejitas.
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