Al llegar a casa todo se encuentra en total oscuridad y me extraña porque Jin no me avisó que saldría pero cuando camino hacía mi habitación veo a mi tío de espaldas en el pequeño balcón fumando, a su lado varias colillas sin terminar y el encendedor que Min le regaló anteriormente.

—¿Qué haces ahí?— le pregunto acercándome, tiene la mirada perdida en el cielo. —¿Jin?

Él suspira profundamente y apaga el cigarro que tiene en la boca. —Estoy nervioso, sumamente nervioso.

—¿Es por la reunión en casa de los Min?— tomo asiento junto a él sorprendido de la manera en la cuál se ve tan ansioso.

SeokJin hecha la cabeza hacia atrás negando rotundamente. —No entiendo porque se le ocurrió la magnífica idea de presentarnos ante su familia.

—Pero eso es genial, ¿no?— desvió la mirada hacía el cielo mesiendo los pies. —Él quiere que sepan que somos su familia ahora.

—No entiendes, Tae— Jin vuelve a tomar otro cigarro y torpemente intenta prenderlo. —Por lo que sé su madre ya me conoce debido a mi relación con Jinwoo, no sé que pasará por su cabeza cuando sepa que ahora salgo con su hijo menor.

Es la primera vez en este tiempo que veo con tanta preocupación a Jin, usualmente bromea y se toma las cosas a la ligera pero ahora está tan nervioso de lo que pueda pasar, claro, es normal cuando tienes que presentarte frente a la madre de la persona que amas.

—No pienses demasiado en ello, sé que te preocupa pero el pasado debe estar ahí, en el pasado— tomo el cigarro de sus manos para apagarlo y sonrío. —Yoongi te ama y él no cederá si le piden alejarte. La historia no volverá a suceder dos veces.

Él me mira fijamente y al cabo de unos segundos sonríe más tranquilo mirando su cenicero. —Soy un desastre, no puedo creer que siempre seas quién me salve.

—Es al revés, sin ti yo...— me quedo callado pensando en todo lo que pude haber perdido si Jin no me hubiese rescatado del orfanato. Si él no me hubiese amado como lo hace ahora estaría completamente solo.

De pronto los cálidos brazos de Jin me rodean con amabilidad, mi cara contra su pecho y sus latidos suenan en mi oído de una manera graciosa. Como un niño me aferro sin querer despegarme, ahora que he recibido la respuesta de la universidad a la cuál postule, sé que SeokJin no lo tomara de la mejor manera ya que eso significa irme lejos y no volveré a tener de estos abrazos en mucho tiempo.

—Vamos a dormir, ¿si?. No volveré a preocuparte— él sonríe y palmeando mi hombro se va antes.

Me quedo unos segundos sentado tratando de pensar en lo mucho que Jin se enojará o quizás se sentirá triste  cuando me vaya pero estará bien, él tendrá al profesor Min. Y yo también lo estaré, supongo que no está bien que sienta tanto apego hacía mi tío.

Y finalmente el día de la reunión llegó, Jin se levantó lo más temprano que pudo o tal vez nisiquiera durmió en toda la noche. Nos pusimos un traje a juego y Min pasó por nosotros a las siete de la noche, estaba elegantemente vestido y pude notar cómo mi tío se sonrojó al verlo de esa manera pero trato de disimularlo de inmediato para que el profesor no se diera cuenta de ello.

La casa era una mansión, el jardín grande y luces por todas partes. Min estacionó su auto y a penas nos dirigíamos hacia dentro ví como con una seguridad total entrelazó sus dedos con los de mi tío.

—No dejarás que nos hagan nada, ¿verdad?— jalo la punta del traje de Min y el palmea mi cabeza con suavidad.

—Por supuesto que no— Yoongi me ofrece una gran sonrisa y estoy feliz de que está persona sea quién se robó el corazón de SeokJin.

A penas entramos nos encontramos siendo el centro de atención de todos, no son muchas personas y entre ellas puedo ver al hermano mayor de Min. Se ve más sereno sin esa mirada llena de tristeza que antes se notaba.

De inmediato una mujer se acerca a nosotros con la mandíbula apretada, ella debe ser la señora Min.

—¿Qué significa esto?— pregunta mirando sus manos entrelazadas.

Me quedo levemente detrás de mi tío respirando tranquilamente, él podría entrar en colapso.

Yoongi sonríe sosteniendo con más fuerza la mano ajena y nos observa a ambos. —Él es SeokJin mi prometido y Taehyung es mi hijo.

Casi dejo salir una carcajada ante la forma en que me llamó pero no porque sea absurdo es solo que suena de alguna manera cómico. De reojo veo a mi tío y robóticamente hace una reverencia así que lo hago también.

—Es un placer conocerla señora, soy Kim SeokJin, él es mi sobrino Taehyung— él sonríe pero estoy casi seguro de que está conteniendo la respiración.

La mujer sigue apretando la mandíbula y observándonos con desdén se da la vuelta para ignorarnos totalmente, rápidamente la perdemos en una de las tantas puertas.

—No sabía que tenía un padre tan joven— bromeo dejando salir una pequeña risa y Yoongi queda totalmente rojo sin poder decir nada.

Los tíos de Min fueron mucho más amables, incluso sus abuelos nos aceptaron mejor que la señora Min. Y Jinwoo, él parecía sonreír pero se mantuvo a distancia en toda la reunión, tan solo daba vagas miradas hacia SeokJin, supongo que pensando en lo pudo haber sido su vida si él hubiese sido tan valiente como su hermano para presentar a Jin como su prometido con la cabeza en alto.

Rápidamente los hombros tensos de Jin se disiparon y pudo sonreír sinceramente en la cena sintiéndose cómodo, me sentí feliz porque él se sentía feliz.

Después de ese día, un anillo similar comenzó a habitar en la mano de cada uno.

Y irremediablemente el día que tanto quise alargar llegó, SeokJin sostiene entre sus manos la carta de la universidad, sus ojos se llenan de lágrimas y me siento culpable del dolor que pueda ocasionarle.

—¿Te vas a una universidad lejana porque no te gusta vivir aquí?— me pregunta dejando la carta a un lado.

Niego con la cabeza apenado. —No es eso, sólo que pronto seré mayor de edad y pensé que al casarte con el profesor querrías tu propia intimidad.

—Sé que serás mayor de edad en muy poco tiempo pero no quería que te fueras— él se acerca hechando su cabello hacía atrás. —El casarme no significa que te quiera lejos.

—Ya lo sé, Jin. Pero hago esto por mi también— tomo su mano mirándolo fijamente y él se ve realmente herido. —¿Podrías perdonarme?

SeokJin baja la mirada negando con la cabeza y solo deja caer su cabeza en mi pecho. —¿Por qué siento que seré nada sin Taehyung cerca?

—El profesor Min se sentiría herido si te escuchará decir eso— acaricio sus cabellos pero rápidamente alejo mi mano manteniendo la distancia.

Basta de este apego a SeokJin.

—No, él lo entendería— murmura Jin sin moverse ni un poco.

Las siguientes semanas fueron un poco difíciles pero el día de marcharme, Yoongi y SeokJin me despidieron con la mejor sonrisa.
Y mientras más se aleja el taxi la pregunta egoísta que no pude hacerle a Jin se disipa con el viento.

¿No amarás a Yoongi más que a mí, verdad?

Antes de entrar a la universidad decidí que los fines de semana me encontraría con mi madre en una cafetería para intentar arreglar nuestra relación. No sería de golpe pero si poco a poco rescatariamos el amor que nos tuvimos en algún tiempo.

—Este será tu dormitorio, lo compartes con otro estudiante— el joven se retira después de lo dicho y al abrir la puerta me encuentro con una cara conocida.

Jung Hoseok me mira sorprendido.

—Esta debe ser la peor coincidencia— digo rodando los ojos y dejo mi maleta caer en el suelo.

Él se levanta rascándose la nuca y se acerca hacía mí. —No es una coincidencia, estoy aquí porque sabía que fuiste aceptado.

—¿De que estás hablando?— me alejo porque está invadiendo mi espacio personal. —¿Ahora eres un acosador?

—Estoy enamorado de ti.

Las palabras que salen de su boca me dejan mudo y estoy a punto de reírme ante la locura que acaba de decir.

—Lo estoy desde la preparatoria y te molestaba porque era un inmaduro pero ahora no, por eso estoy aquí— Hoseok intenta acercarse de nuevo pero extiendo la mano evitando que lo haga.

—No te acerques más, estás diciendo puras tonterías, ¿Qué clase de broma es está?— niego con la cabeza sentandome en el borde de la cama.

Él se agacha haciendo que lo mire a la cara. —No es ninguna broma, ¿Sabes lo que es sentir que tú amor no es correspondido?, No lo sabes por eso...

—Lo sé— lo interrumpo.

—¿Cómo?— él me mira confundido.

—Vine a esta universidad porque lo sé mejor que nadie— lo aparto sin brusquedad tomando de nuevo mi distancia.

Hoseok frunce el ceño mirándome con confusión. —¿Estás enamorado?

—Lo estoy por eso no planeo enamorarme de nadie más— le respondo con una leve sonrisa.

—¿Y él lo sabe?— al parecer está interesado en mi vida. Y no miente respecto a sus sentimientos.

—No, y nunca lo sabrá— respondo y cuando está por hacer otra pregunta salgo de la habitación para evitar que siga haciéndome hablar de eso, estoy aquí para olvidar.

Comienzo a avanzar por el pasillo cuando de pronto soy llamado por mi nombre, me volteo viendo a Hoseok parado fuera de la habitación.

—¡Haré que te enamores de mí!— exclama con la cara roja.

Y creo que estoy peor que él. Tremendo tonto gritando esto en nuestro primer día en esta universidad. ¿Cómo se atreve?. Qué mal momento para que Jung Hoseok se metiera en mi vida de nuevo.

Unos meses después la boda de SeokJin y Yoongi se llevó a cabo, fue fascinante ver cómo las dos personas que más quiero unían sus vidas en esa pequeña ceremonia. Y ese día juré llevarme a la tumba mis sentimientos mientras nos tomaban una fotografía en dónde sonreí feliz porque mi amado SeokJin lo era.

Y lo iba a ser cada día que despertara junto a Min Yoongi que tenía la dicha de amarlo libremente.

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Y bien, nos despedimos de "besos traviesos" con este epílogo que seguramente les dejo con la boca abierta debido a las confesiones de Taehyung, ¿Se lo esperaban?. En fin, gracias por el apoyo, votos y comentarios dados, nos vemos luego.