Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

09


Durante mi clase de matemáticas, Taehyung estuvo huyendo de mi mirada, se veía no molesto o irritado, más bien...¿triste?. Debería disculparme por lo que hice que viera, nunca fue mi intención herirlo de esa manera.

—Profesor Min— tanto yo como mis alumnos voltean hacia la puerta cuando otro profesor llama por mí.
—En la sala de espera hay alguien que lo busca.

—Oh, gracias, iré enseguida— asiento cerrando mi libro. —No tardaré chicos, continúen por favor.

Salgo del aula para dirigirme hacia la sala de espera, ¿quién será?, No creo que Jinwoo o mi madre estén por aquí cuando odian las escuelas de pronto al abrir la puerta alguien se abalanza a mis brazos y apenas puedo reaccionar para recibirlo.

—¡Yoonie!— exclama el chico de cabellos rubios.

Confundido parpadeo tratando de recordar quién es esta persona. —¿Tú eres...?

Él se aleja obviamente disgustado y suspira profundamente. —¿No me recuerdas?, ¿De verdad no recuerdas a tu querido mejor amigo?

Atentamente escaneo al muchacho frente a mí, es tan alto ahora, su cabello rubio cae sobre su frente y ya no luce como aquel chico que siempre se escondía detrás de mi espalda.

—¿Kihyun?, ¿De verdad eres Yoo Kihyun?— una sonrisa se forma en mis labios al reconocer esos ojos inigualables de este chico.

—¡Después de minutos me reconoces!— exclama ofendido y vuelve a abalanzarse a mis brazos aunque está vez le devuelvo el abrazo. —Te extrañé en todos estos años, y  perderte la pista fue lo peor que hice.

Si, perdernos la pista fue lo peor que ambos hicimos ya que en aquellos tiempos siento unos adolescentes sin rumbo éramos el sustento del otro. El apoyo mutuo siempre estaba presente y de pronto, desaparecimos de la vida del otro así que tener a mi mejor amigo de vuelta ahora que estoy tan confundido me hace sentir mejor.

—Profesor.

Dejo mi lapicero a un lado y levanto la mirada viendo cómo Taehyung juega con sus dedos, evidentemente apenado. —¿Podría regalarme un poco de su tiempo?

—Somos amigos, no deberías preguntar eso— sonrío señalando le con la mirada que tome asiento.

Él niega con la cabeza y en lugar de sentarse, se inclina hacia mi. —¡Por favor dígame qué relación tiene con mi tío!. Se que no me incumbe pero lo que ví fue...muy obvio.

—¿Relación?— pregunto apenado y aclaro la garganta. —No tenemos ninguna relación, nos besamos si pero eso no significa que tengamos algo.

Taehyung ladea la cabeza confundido y frunce el ceño. —¿De verdad?— vuelve a preguntar y yo asiento moviendo la cabeza. —Que alivio, pensé que usted me quitaría a Jin.

Trago en seco, intentando deshacerme de este extraño sentimiento que sus palabras han causado en mí, «Es obvio que para Taehyung todo su mundo gira alrededor de SeokJin, un pretendiente estaría de sobra»

Solo arruinaría su vida.

—Entonces...¿Volvemos a ser amigos, verdad?— me pregunta volviendo a ser el mismo chico risueño y amable de siempre.

Yo sería incapaz de destrozar a un adolescente adorable como él.

Siempre seremos amigos, Tae— palmeo su cabeza con mi mano y nos sonreímos mutuamente.

Aún así, quiero verlo una vez más.

Estoy por tocar la puerta cuando está se abre, Min Yoongi me mira fijamente y parece retener aire, «él debe estar nervioso de tenerme aquí».

—¿No me invitarás a pasar?— le pregunto con una sonrisa.

Él se mueve torpemente invitando me a pasar. —Lo siento, adelante.

Recorro con la mirada el departamento del profesor, sinceramente no esperaba una llamada de su parte y me sorprendió cuando llegó antes de lo esperado.

—¿Quieres beber algo?— me pregunta mirándome con atención.

Elevo una ceja quitándome mi chaqueta y la dejo sobre su sillón, todo el lugar tiene olor al perfume varonil de este hombre, y me gusta.

—¿SeokJin?— cuestiona nuevamente cuando no escucha respuesta alguna de mi parte.

—¿Estoy aquí porque querías conversar con alguien?— me acerco deslizando mi mano hacia su lóbulo derecho donde comienzo a acariciar suavemente. —O...¿Estoy aquí para tener sexo contigo?

Yoongi se sonroja considerablemente y debo admitir que me encanta que sea este tipo de hombre, tímido y reservado pero un total animal cuando de intimidad se trata.

—Quiero hacerlo contigo pero tambien me gustaría conversar— admite subiendo su mano hacia mí mejilla, cosa que me sorprende pero no molesta o disgusta.

Suspiro antes de tomar su mano de sobre mi mejilla para bajarla hacia mi cintura. —No me disgusta para nada su proposición, profesor.

Él sonríe antes de presionar sus labios sobre los míos, es un toque suave y gentil, como la portada que le muestra a todos. —¿Tienes condones?— murmuro abriendo con rapidez los botones de su pantalón.

—Tengo— responde entre jadeos mientras besa mi cuello y sus dedos torpemente buscan deshacerse de mi camiseta.

La manera torpe y tímida con la cual busca mi cuerpo se me hace tan similar a la suya.








Yoongi acaricia la piel desnuda de mi espalda y se inclina besando mi hombro, con pereza enciendo un cigarrillo llenando la habitación de humo, «esto es algo nuevo: acostado y relajado junto a un compañero sexual»; nunca lo he hecho.

—No sabía que fumabas— dice sin dejar de acariciarme.

Me doy la vuelta colocándome boca arriba y levanto la mano tratando de poner en su lugar los cabellos rebeldes que se levantaron. —No lo hago en presencia de Taehyung, ese mocoso podría matarme.

—Debe preocuparse por tu salud— responde con una pequeña risa. —Ese chico te adora, los acabo de conocer y puedo darme cuenta de eso.

Me quedo mirando con calma cada facción de su rostro y mi mirada se posa en su dedo justamente en dónde ese anillo brilla: —¿Porque lo sigues conservando?

Yoongi mira fijamente el anillo y su mirada rápidamente se apaga. —Ese día, en el cual te conocí iba a casarme pero fui abandonado.

—¿Y aún estás enamorado?— le pregunto curioso, para que aún siga conservando un objeto que significaría algo importante en sus vidas y que seguramente le recuerda a esa mujer, debe seguir estando lo.

—No lo sé— murmura cabizbajo, sus pequeños ojos totalmente apagados.

Me levanto y sin siquiera pensar dos veces en mis movimientos, hundo mi rostro en su cuello, es un lugar cálido y no cualquiera puede hacer sentir tanta calma.

Nisiquiera lo pienses, SeokJin.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro