
12. Genderbend
La jefe de Eiji se llamaba Rita. Era conocida por ser muy demandante en el departamento de fotografía y encargada de distribuir a los fotógrafos encargados en diversas áreas del periódico. Para desgracia del omega, él no tenía un lugar definido, en ocasiones trabajaba para la sección de deportes, economía o nacionales.
Aunque duro mantener el ritmo a veces, Eiji nunca se quejaba.
Hasta un día que tenía que hacer un proyecto que casi su contrato dependía de un hilo: un artículo sobre la no discriminación géneros, sexos, edad o condición física. Lo particular provenía de la visión de la campaña que el cliente quería: genderbender.
Cada idea que presentaba el equipo de Eiji, podía tomar caminos bifurcados: el cliente no le gustaba o Rita no le convencía.
Sin embargo, la propuesta dirimida por Eiji le encantó al cliente, haciendo que su jefa se quedara callada:
Una diversidad de modelos... tal y como son sus amigos.
—¿Entonces nos escogieron porque somos los raros? —Shorter preguntó con cierto malestar.
—Bueno, en realidad aceptaron la propuesta porque te volviste viral en Internet —Eiji sonrió felizmente ante todo el ajetreo. —, y les dije que si tomaban en cuenta a los demás, no aceptarías.
Al final el pelo pincho lo tomó como un cumplido.
Fue un día sábado el cual todos los amigos de Ash y de Eiji, incluyéndolos también a ellos dos, se hallaban en el set para la sesión fotográfica.
A primera instancia pudieron vislumbrar lo complicado que era montar un escenario para unas cuantas fotografías: productores, luces, maquillistas, equipo de cómputo, todo eso sumándole al estrés en el ambiente.
Todos, a excepción de Sing y de Blanca, estaban un poco cohibidos al no recibir instrucciones, dejándolos a la deriva esperando a que Eiji regresara por ellos. Por su lado, Ash notó como el hilo rojo se movía frenéticamente de un lado a otro y se sentía como un gato atraído por eso.
Sin embargo, Yut Lung ubicó a Rita de inmediato tras recordar sus gritos en aquella ocasión que paró la oreja cuando conoció a Eiji.
—La jefa se ve como una perra. —musitó, llamando la atención de los compañeros de apartamento.
Ash hizo un gesto burlesco.
—¿Entre perras se identifican?
—Ash... — Shorter silenció al percibir que su pareja emanaba humo por las orejas. Aunque debió admitir que su amigo se la echó buena.
En eso, Sing se metió en la conversación.
—Le debo dar la razón a Yut Lung — cruzó sus brazos y frunció lentamente su ceño. —. Eiji a veces se sobre exige en el gimnasio por la tensión que le provoca.
—¿En serio? — Ash concentró sus feromonas a ser un poco hostiles. En parte tenía la noción de la carga laboral en Eiji, pero no se imaginó que entre el ambiente laboral tóxico fuese por ella.
—Solo intuimos. —Blanca murmuró, viendo como Rita gritaba.
Dicha declaración lo dejó pensativo a Ash pero no por mucho tiempo en virtud que apareció la mujer beta frente a ellos con el grupo creativo, ahí estaba Eiji también.
—Quiero que los hombres los vistan y los maquillen como mujeres; de la misma forma quiero que lo hagan a las mujeres vístanlas de hombre... esa es la decisión del cliente.
Los amigos de Ash y Eiji se percataron que en ningún momento les dirigieron la palabra, exponiendo su actitud grosera y altanera.
—Por supuesto. — dijo uno de los empleados, anotando.
De ahí, Rita vio la presencia de Yut Lung, enfatizando sin escrúpulos al señalarlo.
—A este omega... — contempló los rasgos femeninos del chino. —, vístanlo de varón. Simularemos que es mujer, nos hacen falta.
—¡¿Qué?! —el omega chino se sobresaltó listo para alegar.
Sin embargo, la mirada suplicante de Eiji le hizo retroceder, provocando que suspirara con exasperación.
—Es tu proyecto, Eiji... ve a guiarlos en donde se pueden arreglar. Tienen diez minutos. No lo eches a perder.
—Ah, sí... — el japonés asintió y observó a Rita alejarse. —. Aquí, por favor...
Antes de irse al lugar, Shorter y Yut le dieron a Eiji unas palmadas, Blanca y Sing revolvieron sus cabellos y Ash se acercó a solo a sujetarle la manos por breves segundos debido a que no quería meterlo en problemas si descubrían si eran pareja. Aún así, el hilo rojo se extendió para que supiera donde estaba si se sentía abrumado.
Entonces, para levantar un poco el ánimo del omega, las señoras betas se le acercaron con una sonrisa serena.
—Y dime, ¿Blanca tiene pareja?
A Eiji se le dispararon las feromonas.
—¡Pero señora Owen! ¡Usted estaba casada!
—Tu lo has dicho, Eiji, estaba casada —pronunció de manera seria. —. No creo que el señor Owen le importe desde el más allá.
Eiji estaba un poco perplejo.
—Conmigo es Sing, querido —la señora Coleman agregó con cierto picor en sus palabras. —. Soy solterona y nunca creí que debía terminar de criar al amor de mi vida. Me siento como Madonna.
—¡M-Mejor apúrense!
A la hora de tomar las fotografías, Eiji se hallaba un poco nervioso. Las señoras estaban vestidas de un traje elegante de hombre de los años cincuenta junto con Yut Lung mientras que los demás... variaban. Shorter, al ser la sensación del momento, tenía puesto un vestido de rosa pálido de fresitas, con un pronunciado pero lindo escote que mostraba su musculoso torso; a Ash lo vistieron de enfermera y a Blanca y Sing en bikini porque no había ropa de mujer que ajustara a sus cuerpos. Tras verlos, la señora Owen y Coleman se pusieron de lado de sus crushes sin ninguna vergüenza.
—¿Me veo bonito en vestido? — preguntó Shorter, levantando sus anteojos de sol para mostrar sus ojos iluminados.
—Ni lo pienses, Shorter. — dijo entre dientes Yut Lung ya harto de todo.
Con los nervios de punta y sintiendo la respiración de Rita en su cuello, Eiji pudo lograr buenas fotografías, luciendo sus dotes de liderazgo y visión detrás de cámara. Hubo unos instantes que quería enfocarse solamente en ese mirada atrapante de su novio a través del lente, pero frenó sus deseos en actuar como un profesional.
Al final de la sesión, los amigos de Eiji y su pareja Ash lo celebraron al invitarlo a cenar.
Para su suerte el cliente le fascinó el resultado.
Para su desgracia, Rita intentó hacerle la vida imposible.
Para la molestia de Ash, decidió no estar de brazos cruzados.
N/A: este prompt fue el que más me costó desarrollar. En un principio no tenía idea qué escribir y, a pesar de que no hubo mucho Asheiji, enfoca mejor a este personaje que ha estado haciendo de las suyas tras bambalinas: la jefa de Eiji. En los próximos capítulos será un problema xD.
Muchas gracias por todo el apoyo ❤️❤️❤️❤️✨
Nos vemos mañana ❤️
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro