Abrázame.

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《—¡Bien hecho! —gritó Ladybug, estirando su puño para ser chocado con el de él.

Pero Chat era quien tenía su corazón en un puño.

Su Lady había arriesgado su vida por el bienestar de todos los parisinos, y él ni siquiera pudo salvarla. Claro, Chat sabía que ella podía hacerlo por sí sola; era valiente. Pero aún así, su corazón seguía latiendo desesperadamente.

¿Qué haría si la perdía?

—¡Ladybug! —dijo al momento en que se acercaba a ella y la rodeaba con sus brazos. —Estaba muy preocupado por ti —confesó, abrazándola más fuerte.

Sintió cómo ella correspondía al abrazo, y supo que todo estaría bien siempre y cuando estuviera a su lado.》