40
◆━━━━━━━◆❃◆━━━━━━━◆
Beom Tae Joo
◆━━━━━━━◆❃◆━━━━━━━◆
El reloj de pared marcaba la medianoche, pero en la elegante mansión, el ambiente parecía detenido, suspendido en un estado de anticipación. La mansión estaba iluminada tenuemente por candelabros de cristal que daban una luz cálida y suave. Los pasillos, adornados con tapices antiguos y estatuas de mármol, estaban en silencio, excepto por el suave sonido de sus pasos al caminar.
Beom Taejoo, con su imponente figura y su rostro serio, pero sin embargo, con una mirada llena de una pasión controlada, miraba la mesa del comedor. Había hecho que se preparara una cena especial para esta noche. El aire olía a lavanda y rosas blancas, mezclándose con el suave aroma de los platos exquisitos que habían sido preparados para la ocasión. Taejoo, con su cabello negro perfectamente peinado hacia atrás, su traje de tres piezas y sus ojos grises que reflejaban una intensidad propia, estaba esperando el momento exacto.
Este no era un aniversario común. Este era el primer aniversario desde que le había pedido a T/N ser su esposa, y todo en la mansión parecía hablar de esa solicitud, de ese cambio en sus vidas. T/N, su ex sirvienta favorita, había sido la figura que siempre estaba ahí, silenciosa pero indispensable en la vida de Taejoo, hasta que, finalmente, su relación dio un giro inesperado. No podía recordar exactamente cómo o cuándo ocurrió, pero se dio cuenta de que sus sentimientos por ella habían cambiado de una manera que ni él había previsto. Su mirada fría y calculadora se suavizaba en su presencia, y el control que ejercía sobre el mundo que lo rodeaba parecía desvanecerse cuando ella estaba cerca.
El recuerdo de esa noche, hace un año, le trajo una sonrisa a los labios de Taejoo. En ese momento, su corazón había latido con una emoción desconocida para él, como si fuera un hombre diferente, un hombre que no dependía solo de su poder, sino de algo mucho más profundo. T/N lo había mirado, sorprendida, pero había dicho que sí. En sus ojos se reflejaba una mezcla de amor y desconcierto, como si ella misma no pudiera creer lo que estaba sucediendo.
Y ahora, un año después, ella caminaba hacia él, su vestido de seda negra brillando bajo la luz tenue, como si su presencia fuera una manifestación del mismo tiempo. T/N se acercó, con una sonrisa suave en sus labios y Taejoo se sintió, por primera vez en su vida, completamente vulnerable.
—Feliz aniversario—Dijo T/n, su voz suave y cálida, pero con una firmeza que él había aprendido a admirar. Su mirada se encontró con la de él, y aunque su rostro permaneció impasible, algo en sus ojos cambió.
—Feliz aniversario, mi esposa—Respondió Taejoo, dejando de lado por un momento la frialdad que lo caracterizaba. Tomó su mano con una suavidad inusitada y la condujo hacia la mesa, donde los platos ya estaban preparados—Todo esto, lo hice para ti.
T/N miró la mesa, impresionada por la dedicación y el detalle con que había sido preparada. Sin embargo, lo que realmente la conmovió no era la cena en sí, sino el gesto de Taejoo. Sabía que, para él, esa clase de expresiones de afecto no eran fáciles. Era un hombre acostumbrado a obtener lo que quería a través de la fuerza o la manipulación, pero con ella todo era diferente.
Sentados frente a la mesa, compartieron una cena tranquila, pero cada gesto, cada palabra entre ellos, era cargada de significado. Taejoo la miraba con atención, sin apartar sus ojos grises de ella, mientras ella le sonreía suavemente. El vino tinto en sus copas brillaba a la luz de las velas y el sonido de la lluvia golpeando las ventanas creaba una atmósfera íntima, casi mágica.
—¿Recuerdas la primera vez que te pedí que fueras mi esposa?—Preguntó Taejoo en un susurro, su voz grave y cálida. T/N asintió lentamente, una sonrisa tímida en su rostro.
—Lo recuerdo perfectamente. Estaba tan sorprendida que no sabía qué decir.
Taejoo sonrió ligeramente—Lo supe desde el primer momento en que te vi, T/N. No importaba lo que ocurriera, tú serías la única persona que estaría a mi lado, sin importar lo que eso significara.
T/N tomó su mano, sosteniéndola con ternura, y sus ojos se encontraron nuevamente—Te amo, Taejoo. En todo este tiempo, has mostrado una parte de ti que no conocía, y eso... eso me hace sentir más cercana a ti de lo que imaginaba.
La mansión parecía desvanecerse a su alrededor, el tiempo había dejado de existir. En ese primer aniversario, rodeados de los vestigios del pasado, rodeados de recuerdos y promesas, Beom Taejoo y T/N no solo celebraban un año de amor, sino que también celebraban el viaje que los había llevado a este momento, uno lleno de comprensión, de aceptación y, sobre todo, de un profundo y verdadero amor.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro