"Nada dura para siempre, todo tiene un fin"

-¿estás bien? –indaga leo, mientras deja algunas cajas sobre la barra

-si –se limita a responder el peli rojo sin dejar de mirar a la nada

-no lo parece –manifiesta acomodándose al lado del peli rojo –desde hace un par de días estas muy distraído, ¿está todo bien? ¿Pasa algo con Matías o con a...........?

-todo está bien, deja de buscarle tres pies al gato leo –expresa con un tono de voz irritado

-yo ínsito en que estas muy raro, pero si no quieres decirme nada no te suplicaré más –hace un ademan para marcharse, pero justo en ese momento la voz temblorosa del peli rojo lo hacen detenerse

-¿crees que soy una porquería? –la pregunta del peli rojo deja extrañado al castaño

-¿Qué quieres decir con eso? La verdad no entiendo lo que...........

-yo si lo creo, la verdad es que llevo dándole vueltas a este asunto desde hace mucho tiempo y realmente no encuentro otra respuesta sino que soy una porquería –la voz del peli rojo sonaba tan afligida, que logro preocupar al castaño

-oye castiel si te refieres a lo tuyo con Alejandra, te aseguro que no tienes por qué sentirte culpable ni nada por el estilo, es más que comprensible que hayas decidido retomar tu vida –aunque las intenciones de leo eran hacer sentir mejor al peli rojo, sus palabras más que ayudarlo lo desalentaban

-¿y si es más que comprensible porque me siento tan mal? ¿Por qué no dejo de sentirme tan miserable? Me siento como una porquería, siento como si la estuviera traicionando, yo.............

-eso no es así –leo instala su mano con firmeza sobre el hombro del peli rojo para darle fuerza –deja de herirte de esa forma, tomaste la mejor decisión, no podías pasar el resto de tu vida esperando a que ella despertara

-pero...............

-pero nada, deja de comerte la cabeza por eso, y mejor tomate lo que queda de la tarde libre –golpea amistosamente la espalda del peli rojo, mientras le brinda una sonrisa de oreja a oreja

-tienes razón, esas son las ventajas de ser el jefe –justo en el momento en que castiel estaba a punto de marcharse, su celular comienza a sonar –diga

-castiel, soy Alejandra –la voz de la mujer al otro lado sonaba tan alterada, que castiel tuvo que pedirle que se tranquilizara, en cuanto la mujer logro serenarse, soltó las 2 palabras más atemorizantes que el peli rojo pudo haber escuchado –Adam Stone –La mujer no tuvo tiempo de decir nada más, ya que una vez dijo aquel nombre, el peli rojo colgó la llamada

-otra vez no, carajo, carajo, carajo -repetía golpeando el volante del auto con violencia

-no debe tardar mucho en llegar –manifiesta Adam mirando su reloj –estoy completamente seguro que debe estar hecho una furia

-ADAM STONE, DA LA CARA DESGRACIADO –grita a todo pulmón el peli rojo entrando en la sala de aquella casa -¿Dónde estás desagraciado? Muéstrate

-que ruidoso –manifiesta el hombre mayor parándose frente al peli rojo

-sin darle tiempo al hombre de decir algo más, castiel se abalanza sobre él tomándolo del cuello de la camisa – ¿Dónde está mi hijo? ¿Dónde está mi hijo?

-cálmate un poco quier..............

-¿Dónde está? ¿Dime donde esta Matías? –exige, zarandeando con fuerza al hombre

-él está bien, deja de hacer tanto show quieres, soy su abuelo y jamás le haría algo malo –Adam trate de zafarse del agarre del peli rojo, pero este lo sujeta con más fuerza

-yo a ti te creo capas de cualquier cosa, ¿acaso olvidaste lo que hiciste hace tres años atrás? Porque yo no, yo recuerdo perfectamente que estuviste apunto de sacar a mi hijo del país –la mirada asesina del peli rojo era tan aguda, que Adam desvía la mirada

-eso fue algo que paso hace tiempo, fue un error que no pienso volver a cometer nunca más, así que puedes estar tranquilo respecto a..............

-cállese, no diga nada más, solo dígame donde esta Matías, ¿Dónde está............? –los pasos de un pequeño corriendo en su dirección lo hacen enmudecer

-papi, papi –dice el pequeño con una gran sonrisa sobre sus labios

-estas bien, estas bien –repite tomando al pequeño entre sus brazos y besando su cabeza

-lo vez, te dije que jamás podría hacerle algo ma...............

-esta es la última vez que vuelve hacerme algo así, la próxima vez que vuelva a llevarse a mi hijo sin mi permiso, le juro que le romperé todos los huesos del cuerpo –la amenaza del peli rojo, provoca que Adam suelte una pequeña risita

-por lo visto no has cambiado nada, sigues siendo el mismo hombre altanero y violento que conocí hace 8 años, definitivamente no sé cómo mi hija se pu.............

-lo que usted piense me importa un bledo –al darse cuenta de la gravedad de sus palabras, castiel deja de hablar –Matías tapate los oídos –el pequeño obedece sin rechistar –voy a ser muy claro, tiene terminantemente prohibido acercarse a mi hijo

-tu no me puede prohibir que vea a mi nie.............

-claro que puedo, yo soy su padre y..............

-y yo soy su madre –el silencio en aquella sala se hizo presente, hasta que el pequeño grito lleno de alegría

-mami, mami –expresaba con una sonrisa, mientras estiraba sus brazos para que la rubia lo alzara

-azul –es lo único que sale de sus labios, la impresión era tanta, que su rostro comenzó a palidecer

-¡asombroso verdad! –afirma el hombre con una sonrisa victoriosa sobre sus labios

-¿Cómo es que.............? Tú estabas en el.......tú estabas...........tu...... -la sorpresa era tal, que no podía terminar una sola palabra sin balbucear

-estaba, bien dicho –manifiesta la rubia, tomando al pequeño entre sus brazos

-pero.....pero......... ¿Por qué nadie me dijo que tu..............? ¿Qué tu.............?

-claro que lo hicieron, pero como tú estabas tan ocupado con tu nueva vida, los doctores tuvieron que acudir a mí para decirme que después de casi 7 años postrada en una cama mi hija por fin había despertado, realmente fue un milagro –asegura Adam, fijando su mirada en los orbes del peli rojo

-esto parece un sueño, es que no puedo creer que tu estés aquí, tu estas aquí, estas aquí –repite con una risa nerviosa, mientras intenta acercarse a ella

-no es un sueño castiel, esto es real, es completamente real –afirma ella con un tono de voz áspero

-esto de verdad es un milagro, es un milagro –confiesa acariciando suavemente la mejilla de la rubia

-¿un milagro o una contrariedad? –las palabras de Adam, provocan que castiel se gire y le dedique una mirada aborrecimiento

-¿Qué quiere decir con eso? ¿Acaso esta insinuando que yo..........

-sí, claro que estoy insinuando eso, para ti que mi hija haya vuelto no es precisamente un milagro, todo lo contrario, tu hubieras preferido que ella siguiera en coma para que así tu pudieras seguir manejando y despilfarrando su dinero................-antes de que Adam siguiera destilando su veneno, azul llama a uno de los empleados para que se lleven al niño, en cuanto Matías es retirado de la sala, castiel se abalanza una vez más sobre Adam

-usted es un maldito, ¿Cómo puede decir algo así? Yo jamás, jamás querría algo así, usted sabe perfectamente lo mucho que anhele durante años que azul despertara, yo roge todos los días para verla, todos los días pedía para que ella.........yo........yo jamás............... -de repente la voz del peli rojo comienza a quebrarse

-no me vas a convencer con tus lágrimas de cocodrilo, claro mucho dolor y mucho amor por mi hija, y en cuanto tuviste la oportunidad empezaste una relación con otra mujer, pero no conforme con eso la EMABARAZASTE –Adam grita esta última frase, haciendo que resuene en toda la habitación