LUCHA DE FIERAS
-sabía que no podrías aguantarte las ganas de venir –sonríe samanta parada en la salida del bar
Azul ignora por completo a la mujer caminando precipitadamente para evitar una confrontación con ella, estaba a punto de golpear a alguien y ella no sería la excepción
-tranquila corre si quieres, probablemente lo único que quieras hacer en estos momentos es llegar a tu casa y tirarte en la cama para ponerte a llorar desconsoladamente, que patético de tu parte azul, realmente el amor te volvió por así decirlo más humana –cada palabra que salía de la boca de samanta solo avivaba la ira que en esos momentos azul trataba de contener
-no estoy para tu estupideces samanta –alega la rubia sin detenerse
-¿dime una cosa azul?, ¿Cuál fue tu reacción al darte cuenta que en realidad no te mentía? Fue frustración, resentimiento, pena, desolación, o tal vez pena por ti misma –las palabras de samanta logran que azul se detenga
- si no quieres ir esta noche al hospital es mejor que me dejes en paz –advierte la rubia sin dejar de caminar en dirección a su auto
-así que fueron todas esas emociones juntas, vaya que pena, bueno la verdad es que no, hubiera pagado lo que fuera por ver tu rostro completamente devastado, debió ser duro para ti el hecho de darte cuenta que no eres lo suficiente valiosa para el como para abandonar este mundo, ¿y quién lo culparía? Es lo único que sabe hacer, castiel está acostumbrado a vivir de las mujeres –samanta termina de echar su veneno esperando alguna reacción por parte de azul pero esta no se mueve ni dice nada -¿Qué pasa azul? Te comió el gato la lengua –pregunta con un tono de burla en su voz
Azul no le dirigió ni una sola palabra y sigue caminando como si nada, pero samanta no pensaba dejar esto así como así
- azul Stone cambiada no por una, sino por varias mujeres, ¿Qué te parece el encabezado? –pregunta la mujer con una sonrisa de oreja a oreja sobre sus labios
-azul se detiene unos segundos antes de girarse –digas lo que digas tus palabras no me afectan en lo más mínimo
-¿segura? Porque yo estoy convencida de que si te pincho un poco más explotaras –afirma logrando el los manos de azul se empuñen
-¿ah, sí? Mira que coincidencia, yo pienso lo mismo pero al revés, que te parece este encabezado, samanta benzol una mujer insaciable –indica la rubia con una pequeña sonrisa sobre sus labios
-¿de qué hablas? –pregunta fijando su mirada en los orbes de la rubia
-de esto –azul saca su celular y le muestra algunas fotos bastante comprometedoras donde la protagonista no era otra que ella
-¿Cómo conseguiste esas fotos? –samanta trata de arrebatarle el celular a azul pero esta es más rápida
-de la misma forma que tu conseguiste que castiel se acostara contigo, el dinero sí que hace milagros, ¿no lo crees? –explica la rubia alejándose un poco de ella
-dame ahora mismo ese celular si no quieres que yo...............
-¿tú qué? No te tengo miedo samanta –afirma la rubia parándose frente a ella
-deberías azul, deberías tenerme miedo, tu más que nadie sabe lo peligroso que puede ser acorralar a una cascabel –las palabras de samanta solo provocan que azul suelte una pequeña carcajada
-el hecho de que en ocasiones te diga víbora no significa que piense que eres una amenaza para mí, más bien eres tu quien debería tenerme miedo, no sea que en un pequeño impulso de ira mi dedo se resbale y accidentalmente termine enviándole esto a un contacto que tengo en la prensa rosa, ¿te imaginas lo que podría pasarte si Arturo llegara a ver estas fogosas fotos? –indica la rubia exhibiendo el celular muy cerca del rostro de la mujer
-Arturo no es ningún idiota, él sabe perfectamente que le soy infiel así que esas fotos no cambiaran en nada lo que el piense de mi –responde con una falsa sonrisa
-tienes razón, Arturo seguramente está al tanto de lo fácil que es su esposa, pero yo me imagino que tus socios y amigos no conocen lo que eres, ¿o me equivoco en eso? –pregunta azul mostrándole nuevamente las fotos a la mujer
-no te atrevas a publicar esas fotos azul, te lo estoy advirtiendo por las buenas, no quieres conocer mi lado malo –revela la mujer intentando una vez más quitarle el celular a la rubia
-yo no me dejo intimidar tan fácil, las amenazas de parte de mujeres de tu calaña no me provocan el mas mínimo miedo, mi instinto no me fallo, desde el primer momento en que te vi supe que no eras una mujer de fiar, y por eso redacte tu acuerdo de matrimo............ -sin darle tiempo de terminar samanta abofetea a azul
-y no sabes cómo te odio por eso, maldita desgraciada –maldice la mujer mientras azul le dedica una sonrisa de oreja a oreja
-de nada, no sabes lo feliz que me hace saber que cumplí con mi cometido–las palabras de azul pinchan tanto a la mujer que esta trata de abofetearla una vez más pero esta vez azul la detiene
-una segunda vez no ocurrirá –dice antes de alejarla con fuerza -¿Qué paso con toda esa calma que mostrabas apenas unos segundos atrás samanta? Ya sé, seguramente no puedes pensar muy bien por las fotos cierto, lo mejor será que guarde el celular para que.....................
-dame ese maldito celular de una vez por todas –samanta se lanza sobre azul para intentar tomar el celular pero antes de que poder hacer cualquier cosa alguien la sujeta
-¿Qué crees que estás haciendo? –pregunta el hombre que sostiene con fuerza el brazo de la mujer
-SUELTAME IDIOTA –gruñe tratando de zafarse
-lo hare si te calmas –responde el hombre apartando a samanta del lado de azul
-me estas lastimando, suéltame ya –protesta en vano
-lo mejor será que demos un pequeño paseo –sin darle tiempo de decir algo a samanta el hombre se aleja con ella
al ver como samanta era llevada casi arrastra azul no pudo evitar soltar una pequeña carcajada, pero esta seria borrada rápidamente al notar como la figura de un musculoso peli rojo se aproximaba a pasos agigantados, azul quiso huir, pero si lo hacía solo le demostraría que debilidad y eso era algo que no se debía permitir
-¿Qué no fui lo suficientemente clara unos minutos atrás? –pregunta haciendo que el peli rojo se pare en seco a varios pasos de ella
-probablemente sí, pero soy un masoquista –responde el con una sonrisa tonta
Ese simple gesto por parte de él estimulo de tal forma su corazón, que ella involuntariamente llevo una mano a su pecho para evitar que sus latidos fueran escuchados, en el fondo sabía que su reacción había sido estúpida e infantil y se detestaba por eso, pero ¿Cómo no derretirse teniendo al hombre de tu vida sonreír de esa forma?
-azul, oye azul, ¿estás bien? –preguntaba el mientras agitaba un mano cerca del rostro de ella
-sí, claro que est............ -al notar lo cerca que él se encontraba su voz se eclipso y sus ojos automáticamente se posaron sobre los labios del peli rojo
-¿segura? –preguntaba el algo inquieto
-claro que si –responde ella sin quitar su mirada de los labios de el
-azul............... -es lo último que puede decir antes que azul se abalance sobre él y comience a devorar sus labios
El peli rojo quedo tan sorprendido que durante unas milésimas de segundos sus labios no se movieron, al notar esto azul mordisqueo levemente el labio del peli rojo logrando despertarlo de su pequeño letargo. Las manos de castiel viajaron automáticamente hacia las caderas de azul aproximándola y convirtiendo aquel beso en algo más ardiente, mientras los minutos avanzaban las caricias y gemidos por parte de ambos no se hicieron esperar. En ese instante nada importaba, quien estuviera en esos momentos a su alrededor no existía, lo único que era real y necesario para ambos en esos minutos eran las ganas y placer que desde hace días se encontraban siendo reprimidas debió al giro que habían tomado sus vidas
Cada mordisco, cada caricia, cada gemido que escapa de ambos era la prueba reina de que ninguno de los dos podía vivir sin el otro, pero las cosas nunca son tan fáciles como se piensan, y antes de poder llegar a la verdadera felicidad hay que atravesar un camino lleno de espinas, porque bien dicen que no hay verdadera felicidad sin un poco de sufrimiento
-¿estás segura que te encuentras bien? –pregunta nuevamente el peli rojo al notar como las mejillas de la rubia se encontraban rojas
-¿eh? ¿Qué? –Azul parpadea un par de veces –solo fue un sueño –musita algo decepciona al darse cuenta que su imaginación había volado demasiado lejos
-¿Qué dijiste? –pregunta sin dejar de mirar las mejillas rojas de la rubia
-olvídalo, ¿Qué es lo que me querías decir? –trata de cambiar de tema cosa que afortunadamente funciona
-bueno yo.............
-qué bueno que aun estas aquí –manifiesta el hombre de hace unos minutos atrás acercándose a azul e ignorando completamente a castiel -¿nos vamos?
-si –le responde ella con una falsa sonrisa
-bien –cuando ambos estaban a punto de irse castiel toma la mano de azul
-tú de aquí no te vas hasta que aclaremos de una vez por todas nuestras cosas –suelta aquellas palabras sujetando con fuerza la mano de azul
-ya te dije que..............
-¿Qué crees que haces? Suéltala ahora mismo –exige el desconoció logrando que el ceño de castiel se frunza
-tu a mí no me dices lo que tengo que hacer, entendiste –alega fijando su mira llena de tirria en los ojos del desconocido
-no te estoy pidiendo nada, te estoy ordenando que la sueltes ahora mismo si no quieres tener problemas –las palabras del desconocido fastidian tanto al peli rojo que antes de pararse frente a él, castiel coloca azul detrás suyo
-será mejor que no me estés amenazando en vano, mira que hoy estoy de muy mal humor y podría............. – castiel deja de hablar en cuanto un fuerte golpe en su estómago lo hacen caer de rodillas
-yo no amenazo en vano –dice el desconocido mientras toma la otra mano de azul
NUEVAMENTE APARECIÓ EL HOMBRE DESCONOCIDO, ¿QUE CREEN QUE PASARA AHORA? Y LA PREGUNTA DEL MILLÓN ¿QUIEN ES ESE HOMBRE, Y QUE PAPEL JUGARA EL LA VIDA DE AZUL?
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