Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

¡DI MI NOMBRE!



-quería irme y dejar aquel imbécil con las ganas, pero a quien voy a engañar había quedado tan acalorado que no me iría de aquel lugar sin terminar lo que habíamos comenzado. Una vez termino su turno nos dirigimos a su apartamento, el cual no era la gran cosa, vivía en un barrio bastante común y en un edificio bastante terrible, aunque pensé que viviría en un lugar mejor, pero eso era algo que no me importaba en estos momentos lo unico que quería era apagar aquel fuego que me estaba calcinando por dentro

-espero que no te fastidie el desorden, la verdad no estoy acostumbrado a traer mujeres aquí-dice aquellas palabras mientras abre la puerta

-no te preocupes para lo que vamos hacer no necesitamos orden-fue lo último que dije, ya que lo tome por el cuello, para estampar mis labios sobre los suyos. Mientras nos besábamos descontroladamente, pude sentir la fría y rígida pared golpearme

-vaya se ve que estas llena de deseos-una sonrisa pícara se dibujó en el rostro de aquel peli rojo

-¡cállate! -exijo, mientras capturo nuevamente sus labios, esta vez con mucha más exaltación e ímpetu que antes, a lo que él responde cargándome sobre su cintura, mis manos rodearon su cuello, mientras que las suyas se trasladaron a mi trasero, sin dejar de besarnos pude sentir como que colocaba encima de una mesa

-sabes una cosa nena, tu peor error fue creer que podías ir a ese bar sin terminar en mi cama-dijo aquellas palabras con cierto tono de picardía en su voz

-rodeo los ojos ante sus palabras, el muy imbécil se sentía tan seguro de sí mismo que me fastidiaba ver aquella sonrisa sobre sus labios, regresarme el celular solo era un pretexto para poder estar conmigo, su plan era hacerme ir aquel lugar para luego estimular de tal forma que no pudiera negarme a pasar una noche más con él, pero aquí voy a engañar tampoco es que sea una tortura tener sexo con alguien como castiel, era un hombre bien parecido, su cuerpo estaba totalmente tonificado por donde lo miraras, sin contar con que sabía moverse muy bien, que digo bien se movía jodidamente genial, sabia como hacer feliz a una mujer y era algo que me enloquecía a tal punto que me hacía querer hacerlo una y otra vez con él, pero claramente no le daré el placer de verme tan necesitada de él claro que no lo haría. Un fuerte mordisco sobre mi cuello me saco de mi trance

-al notar como azul se había perdido en sus pensamientos castiel succionaba con fuerza el cuello de azul dejándole un gran chupetón-esto es para que me recuerdes nena

-¿Qué diablos te pasa idiota?-empujo con fuerza a castiel para luego pasar una mano sobre mi cuello

-castiel me mira con una sonrisa de lado-¿Qué pasa, acaso no te gusto?

-me bajo de la mesa-gustarme ¿estás loco? ¿Cómo se te ocurre hacerme esto?-señalo mi cuello

-castiel levanta los hombros-solo fue un simple chupetón, no exageres

-lo miro con el ceño fruncido-un simple chupetón, eres un idiota que no te das cuenta que no es un simple chupetón ¿Qué diablos pasa por tu cabeza?-lo empujo nuevamente pero esta vez con más fuerza

-castiel me toma de las manos-cálmate, solo es un pequeño recuerdo, para que cada vez que te mires al espejo y veas ese chupetón recuerdes que solo yo te puedo llevar al clímax final

-trato de zafarme de su agarre pero es imposible-suéltame idiota, este jueguito se acabó me voy de aquí

-castiel me dirige una mirada picara-¿enserio te iras?

-¡claro que sí!

-castiel me pega a su cuerpo-y dime una cosa, como harás para quitarte todo ese calor que te está quemando ahora mismo por dentro

-eso es algo que no te importa, ademas gigolos es lo que hay en esta ciudad, asi que por mí no te preocupes habrá quien quiera quitarme las ganas por un poco de dinero

-si probablemente tengas razón, gigolos es lo que hay en esta ciudad, pero hombre que te hagan gemir como yo pocos

-me zafo de su agarre-eso lo veremos-una vez me zafo de su agarre me dirijo a la puerta para abrirla, pero cuando mi mano toca la perilla siento una fuerte presión sobre mi espalda

-castiel me toma con fuerza del cabello y hace que me cabeza se doble un poco hacia atrás-tú de aquí no te vas hasta que hayamos terminado-susurra aquellas palabras sobre mi odio

-suéltame, ya te dije que no quiero hacer nada contigo

-castiel jala con más fuerza mi cabello, provocando que un pequeño gemido salga de mis boca-y yo ya te dije que de aquí no te vas hasta que haya terminado contigo-sus palabras tienen un tono demandante

-no seas idiota, suéltame de una vez

-castiel hace un chasquido con su lengua-que terca eres, ya te dije que no, si tanto deseas irte lo puedes hacer pero solo hasta que yo haya calmado este apetito voraz que tengo de comerte, luego si quieres puedes irte-después de aquellas palabras puedo sentir como sus labios demoraban poco a poco los míos, era tan placentero que a medida que los segundos transcurrían me deje llevar poco a poco. Mis manos rodearon su cuello, mientras que mis piernas se enredaban en su cintura

-eso es déjate llevar-decía castiel mientras nuestros labios aún seguían unidos. Podía sentir como nuestras lenguas jugaban la una con la otro, provocándose y dándose mutuo placer, cada beso, cada toque y cada mordisco me hacía delirar por completo, necesita sentir más, mucho más, asi que lo agarre del cabello estrujando con fuerza, mientras me movía lentamente sobre él, sintiendo como su miembro creía y creía con cada tacto, provocando varios gruñidos por parte del peli rojo

con cada gemido por parte de ambos, se podía sentir como aquella habitación empezaba a entrar un calor sofocante y asfixiante tanto asi que sentía que la ropa me estaba calcinando, pero yo no era la única que está sintiendo que la ropa nos estorba, asi que en un abrir y cerrar de ojos comenzamos a deshacernos de esas estorbosas prendas, las cuales volaban por todas partes, estábamos tan ardientes en deseo, eran tantas las ganas de que nuestros cuerpos se sintiera desnudos el uno con el otro que en nuestro arrebato varias prendas quedaron destrozadas, pero en aquel momento lo unico que nos importaba era poder apreciarnos, poder palparnos y seguir con aquel juego perturbados pero excitante. Castiel me empujo con fuerza sobre la cama. Castiel emprendió un camino de mordiscos por cada parte sensible de mi cuerpo, yendo de mi cuello, a mis senos, de mis senos a mi abdomen, de mi abdomen a mis caderas y de mis caderas a la parte baja de mi vientre, para luego comenzar a lamer cada parte de mi cuerpo, haciendo estañar de deseo y placer

-mientras me arqueaba de placer por cada roce de sus labios sobre mi cuerpo, mis manos recorrían su espalda dejando pequeños rasguños tras cada gemido que escapa de mi boca, estar con castiel era jodidamente excitante, este hombre sabía perfectamente cómo hacer delirar a una mujer, pero yo también sabia como hacerlo suplicar y no me quedaría con las ganas de escucharlo gemir mi nombre

-¿Cómo quieres que entre en ti? ¿Suave o duro?-pronuncio aquellas palabras mientras mordía mis labios

-le dedico una sonrisa traviesa-eso lo dejo a tu gusto pero primero-me gire rápido quedando sobre el

-¿Qué haces?-me mira con el ceño completamente fruncido

-esto-poso mis labios sobre su cuello para dejar varios chupetones sobre su cuello

-¿qu-ue.... Que es lo qu-ue.... Haces?-decía castiel entre gemidos

-clavo mi mirada sobre esos orbes grises-lo mismo que tú me hiciste a mí, dejándote un pequeño recuerdo-le dedique una sonrisa traviesa, para luego bajar lentamente sobre su pecho hasta llegar a su abdomen, comienzo a lamer en círculos cerca de su ombligo, lo cual hace que se estremezca aquel peli rojo

-no te atrevas a... -fue lo último que pudo decir, después de sentir como mano bajaba paulatinamente sobre su muy agitado y exaltado miembro

-¿Cómo quieres que lo haga castiel? ¿Suave o duro?-repite aquellas palabras con un tono de picardía en mi voz

-eres perversa ne-ena-gimio aquellas palabras, ya que antes de que el pudiera decirme algo, inicié unos ligeros movimientos sobre su amigo, el cual se sentía bastante rígido y recto tras cada movimiento de mi parte

-¡oh, sí! ¡Si, oh nena sigue!-suplicaba entre gemidos el peli rojo

-nene no, di mi nombre-exigí mientras tomaba entre mis manos su miembro y lo estrujaba con fuerza

-eres una... ¡ah!-gimió con más fuerza el peli rojo al sentir como clavaba mis uñas sobre su miembro

-vamos dilo, di mi nombre, suplícame que siga con esto

-el peli rojo se arqueaba de placer y a la vez de dolor al poder sentir mis uñas clavarse sobre su amigo, asi que sin más poder- no te.... No te....

-dilo castiel, vamos-exigí, mientras apretaba con más fuerza

-sigue... azul ¡ah!... Vamos sigue.... No.... te detengas.... azul-pronuncio aquellas palabras con la respiración entrecortada, no sabía si era por la fuerza que estaba colocando sobre su amigo el cual le estaba haciendo sentir dolor o placer, de lo unico que si estoy segura era que escucharlo gemir de esa amnera mi nombre me ponía más acalorada-termina con lo que empezaste azul-exigio el peli rojo

-una sonrisa de dibujo sobre mi rostro al verlo de aquella forma

-vamos sigue azul-suplico castiel con vehemencia

-haciendo caso a sus suplicas solté su miembro y comencé con unos un leves movimientos-oh, sí, sí! - al escuchar lo entusiasmado que estaba, masaje más rápido su miembro- ¡oh, si¡ ¡si oh! ¡siii!-grito con fuerza castiel

-después de terminar con su amigo me dirigí a sus labios para besarlos, pero castiel me dirigió una mirada maliciosa-ahora es mi turno de hacerte gritar mi nombre- inmediatamente se giró para quedar sobre mí-ahora vas a saber lo que se siente suplicar azul-castiel se dirigió a mi abdomen y con su lengua empezó hacer pequeños círculos en la parte baja de mi abdomen, haciéndome arquear de placer

-¡cas-stiel! ¡Ah!-era lo unico que podía decir debido al placer que me estaba llenando la sangre

-ahora suplícame que te penetre de una vez, suplícame que te haga mía, vamos azul suplícame -decía aquellas palabras mientras sus manos oprimían con fuerza mis pechos y con su boca me daba pequeños mordisco en la parte baja del abdomen. Era algo jodidamente deleitable y agradable poder sentirlo tan cerca

-vamos azul, suplícame

-¡ah, castiel! ¡Ah sí! ¡Castiel! ¡Ahhh!

-dilo azul, suplícame que te haga mía hazlo-exigía con ímpetu castiel, mientras presionaba con fuerza mis senos, podía sentir como sus uñas se clavaban lentamente sobre mis pechos haciéndome sentir una sensación extraña, era algo doloroso pero a la vez agradable

-hazme tuya, entra en mi de una vez, hazlo ya-exigí

-castiel me dedico una sonrisa placentera-¿Cómo tú digas nena? Tus deseos son ordenes-fue lo último que pronuncio, para luego entrar lentamente en mí, provocando que cerrara mis ojos y apretara con fuerza mis piernas sobre su cintura

-¡si castiel ¡ ¡ah, sí!-una vez entro por completo en mi comenzó a menearse lentamente

-¿te gusta?

-s-si...cla-aro qu-ue... s-si-mordía mi labio inferiros tras cada movimiento por parte de castiel sobre mi

-castiel capturo mis labios para morderlos dócilmente, mientras que sus iniciaba movimientos mas rápidos y enérgicos

-¡oh si castiel! ¡Ah! ¡Más, más! ¡Más rápido! ¡Ahhh!

-¿segura?

-¡sí!-clave mis uñas en su espalda como respuesta a que quería que fuera más rápido

-castiel tomo mis manos, las coloco por encima de mi cabeza como si fuera amararme y comienza a embestirme con más potencia-¡ah, me fascinas azul! ¡Oh!

-¡si, oh sí! ¡Me gusta, si castiel sigue! ¡Ah!-gemía tan fuerte, pero no me importaba en absoluto al fin y al cabo yo no vivo aquí. Castiel me daba embestidas rápidas y a la vez lentas que me hacían alucinar

-ya viene-gimió castiel sobre mi oído, dándome la última estocada llevándonos al orgasmo final

-¡ahhh, si! ¡Ah!

-castiel dejo escapar un gran gemido y luego de eso se bajó de encima mío, no sin antes darme un ligero beso sobre la comisura de mis labios

BUENO AQUI ESTA EL TAN ANELADO LEMON, SE QUE DEMORE PERO COMO SABEN LA QUE LO HACE ESTABA DE VACACIONES, ESPERO LES GUSTE Y DEJENME SUS COMENTARIOS SOBRE EL CAPITULO 

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro