Taehyung caminaba en la biblioteca de la mansión buscando algún libro para salir, como era de costumbre, hasta el jardín y leer bajo el viejo sauce que era su lugar favorito en la propiedad.

Cuando ya había conseguido lo que buscaba, se dispuso a caminar fuera del lugar, chocando de frente con un fornido cuerpo que reconoció de inmediato por su aroma.

Estaba algo cubierto de enfado pero aún permanecía reconocible, sabía que se trataba de su padre.

—Hasta que tengo la oportunidad de verte a solas Taehyung.

—¿Como- como entraste? Yoongi tiene prohibido tu paso aqui— hablo nervioso.

—Ese mocoso no puede prohibirme nada, sabes perfectamente que fui el líder de esta manada, solo los idiotas no me guardarían respeto.

Taehyung trató de pasar por su lado, evitando hablar a solas con su padre.
Si había una persona a la que temia, era el.
Había vivido en carne propia el enojo del hombre en reiteradas ocasiones, vivió el tormento de ser su hijo hasta que Yoongi decidió casarse con el, aún sabiendo que eran solo amigos y lo sacó del infierno que vivía.

El mayor evitó que se alejara sosteniendo con firmeza uno de sus brazos, presionando con fuerza sus dedos sobre la piel.

—Esta casa apesta a otro Omega que no eres tu.

—Ese no es tu problema — contestó con miedo pero tratando de verse tranquilo.

—¿Tan poca cosa fuiste para el que no lograste mantenerlo fiel?
No fuiste un buen Omega si tu esposo trajo hasta aquí a sus amantes— dijo burlesco.

— No es un amante y si así lo fuera no es de tu incumbencia, recuerda que estás hablando del líder de Daegu y que sigo siendo su esposo— fue valiente— podría ordenar tu muerte y nadie cuestionaría a la luna de la manada, aún sigo siendolo ¿sabes?

El viejo alfa lo tomó por los hombros y azotó el frágil cuerpo en la pared sin ningúna clase de compasión.

— Sigues siendo mi hijo, no tendrás autoridad sobre mi jamás y me encargaré de recordarte que estás bajo de mi siempre, sin importar que te hayas casado con ese alfa, siempre me deberás obediencia.

Un fuerte gruñido se escuchó en el lugar y el cuerpo de Taeyang salió volando por los aires hasta caer en el otro extremo de la habitación.

Yoongi estaba furioso, sus ojos solo destilaban odio hacia el hombre, quien se había atrevido a tocar a Taehyung.

El le había advertido, desde que tomó al Omega como su esposo le advirtió que no volviera a poner un dedo sobre el o solo conseguiría la muerte, una que estaba dispuesto a darle hoy, allí sin piedad para el.

Jimin corrió hasta Tae y lo envolvió en un abrazo cariñoso.

—¿Estás bien? Yoongi sintió ese aroma en cuanto entramos, dijo que estabas en peligro—decía acariciando los cabellos del contrario.

—Estoy bien ... Solo aparta a Yoongi, no quiero que tenga problemas por culpa de mi padre .

—Te lo dije Taeyang, te advertí que no volvieras a acercarte a el— sus ojos estaban rojos— irrumpes en mi casa y lo maltratas ¿Sabes que eso es considerado una falta grave? Podría matarte en este mismo instante, moririas por tu imprudencia.

Jimin haciendo lo pedido por Taehyung se apoyó en el brazo de su alfa para calmarlo, logrando que la acción hiciera que Taeyang se enfureciera.

—¿Esta es la puta que se mete entre tus pantalones?, veo que te reemplazaron por alguien Taehyung, siempre supe que serías inservible hasta para esto, no fuiste capaz de mantener a tu alfa a tu lado, te advertí que sin una marca solo eras su diversión personal —escupió — ahora te volviste un Omega reemplazable.

Aquellas palabras fueron lo último que pudo decir ya que el líder lo tenía sostenido del cuello, elevándolo de su lugar mientras forcejeaba por zafarse para poder respirar.

—Yoongi — llamó Taehyung — No quiero que te metas en problemas.

—No lo haré Tae, sabes que estoy en mi derecho de matarlo por la ofensa que acaba de hacerte, te lo dije, se lo advertí a él, que una vez venías conmigo el no podría acercarse, no podría dañarte, de lo contrario lo mataría.

El contrario no pudo más que asentir, sabía que Yoongi había tomado una decisión y el jamás iba a contradecirle, no después de todo lo que había hecho por el.

Se acercó hasta Jimin y tomó su mano con cariño, acariciando el dorso de esta.

—Vamos Jimin, esto no será agradable y es mejor que no estemos presentes, no creo que podremos soportarlo.

—Lo siento Tae...el es tu padre — habló triste.

—No te preocupes, el dejo de serlo hace mucho, que este aquí solo me demostró que el no cambiará, siempre será este ser despreciable—acaricio los cabellos del omega— no le guardo aprecio, el lo perdió, no pienses demaciado, la decisión de Yoongi está bien para mí —dijo simple.

El pelirosa asintió ante sus palabras y juntos comenzaron a caminar fuera del lugar, escuchando por última vez un fuerte estruendo y un gruñido de parte del líder, estaba claro la muerte estaba pronta a alcanzar a Taeyang.

—¿Estas cómodo padre?

—Sacame de aquí Jungkook, te lo ordeno.

—¿Desde cuando te sientes con el derecho de ordenar al líder de Busan?

—¡Eres mi hijo! Pase lo que pase me debes obediencia.

—Soy tu líder — habló calmado— no mezcles las cosas.

—Haces todo esto por ese Omega puta que no dudó en abrirse de piernas para Mín.

—Sigues tentando a tu suerte... Yo venía a dejar las cosas claras, pero en vista de que sigues en tu terquedad de ofender a Jimin, te quedarás aquí, por tiempo indefinido.

—¡No te atrevas! Me necesitas a tu lado.

—No lo hago, ya no más, hace mucho puedo hacer todo por mi cuenta, como ahora— respiró profundo — la manada está al tanto de los hechos, mi divorcio con Jimin es inminente y además de eso traere a mi Omega a vivir junto a mi.
Gobernará conmigo, será mi luna y tendremos nuestra familia aquí, en nuestras tierras.

—¡Estas loco!— grito colerico— Ofendes a nuestra familia, a nuestra gente con tus actos, eres una vergüenza.

—Puede ser padre, Pero soy feliz y eso es algo que nadie podrá quitarme jamás.

—Jamas pensé que serías tan crédulo, que te dejarías llevar por toda esa mierda de las parejas destinadas, ¡Son solo mitos!

—Mi lobo abrió sus ojos, reaccionó ante mi Omega ¿Como me explicas eso?

—No es posible...

—Lo es padre y no solo mi lobo despertó, también lo hizo el de Jimin cuando encontró a su destinado.
No estamos cometiendo ninguna falta, solo estamos devolviendo el orden natural a nuestra especie, volviendo a sentir, a ser uno con nuestros lobos, dejando de ser solo cascarones vacíos.

El viejo alfa observaba atónito, estaba furioso pero no podía evitar que  aquellas palabras dichas por su hijo le removieran en su interior viejos recuerdos que creía olvidados y que en ese momento estuviese escuchando a su lobo aullar, llorar a la diosa luna por lo que habia perdido.

El también, hace mucho, sintió como su hijo.

Y esa misma experiencia le hacía odiar todo lo relacionado con los destinados, aborrecer cada acción y cada palabra de Jungkook, porque el también las había recitado hace mucho, pero fue engañado de la forma más cruel, cuando aquella Omega, solo fingía ser su destinada para lograr contraer matrimonio con el hijo del líder, y grande fue su decepción al darse cuenta que se había equivocado, que había sido solo un truco para obtener el poder y que el matrimonio lo alejaba por completo de quién realmente era su mate, a quien decidieron llevarse lejos y hacer que solo fuese un recuerdo.

Sin poder evitarlo una lágrima cayó por su mejilla y sus rodillas tocaron el frío suelo mientras sostenía su pecho, llorando esos recuerdos que creía habían muerto, desaparecido de su vida, dándose cuenta que por siempre estarían ahí y que no quería que su hijo sufriera el mismo destino.

Jungkook se acercó a él, a pesar de estar molesto con su padre, no podía evitar que el estado en que lo veía ahora, le preocuparse y le hiciera querer auxiliarlo de alguna manera.

—¿Que pasa?

—Piensa las cosas hijo — su voz ya no era prepotente ni estaba cargada de odio, más bien se escuchaba dolida, muy triste— No quiero que sufras— reconoció.

—Este no es mi padre, alguien lo cambió — trato de bromear para aligerar el ambiente.

El mayor sonrió, por primera vez en mucho tiempo sonrió hacia su hijo.

—No debí lastimar a Jimin — se lamentó — la ira y la furia me encegecieron cuando lo ví con Min, recordé.... Recordé el engaño que yo mismo viví y me negaba a qué tú también tuvieras que sufrirlo — hablaba con la voz rota— No debí ofenderlo... Lo lamento...

—Siempre puedes disculparte con el, sabes que Jimin es un gran Omega, no es rencoroso.
Si le pides perdón de corazón el lo hará, te lo concederá.

—¿Y tu Omega?

—Es hermoso, es perfecto— dijo sin dudar.

—¿Estás seguro que se trata de el? Hijo yo....

— ¿Que no me estas contando Jaek?

El viejo alfa suspiro y por fin luego de muchos años dejo caer aquella careta que se había autoimpuesto, esa del alfa frío y sin sentimientos que todos temian.

—Esta bien, es momento de que lo sepas.

Jungkook se sentó a un lado del mayor, esperando en silencio, sin querer interrumpirlo, estaba claro que lo dijera, tal vez podría tener una explicación a su comportamiento, al menos esperaba que fuese así.

—Cuando tenía veinte años, conocí un bella chica, hermosa, atractiva a simple vista, pero más que esa atracción de primera impresión, no sentí nada, no al menos como tú, nada relaciónado con mi lobo.
En ese entonces los lobos ya se habían dormido, no había rastro de ellos, pero yo seguía con la fe intacta, esperando encontrar a mi Omega, soñando con la idea en que la diosa luna trajera hasta a mí a esa persona que me complementaria, que sería la otra mitad de mi y con la que sería feliz por siempre.

Jungkook asintió, comprendiendo lo que su padre quería decir.

—La chica que te mencioné, sería mi prometida, mi padre decidió que me uniría en matrimonio a ella y no tenía opción de reproches.
Me negué por mucho tiempo, ella era algo altanera y un tanto caprichosa, no me gustaba, ni siquiera nos llevábamos bien como amigos, pero ella seguía insistiendo en que me amaba, que su lobo le había hablado, habia despertado y le había dicho que yo era su alfa.
No podía creerlo — suspiró — se supone que yo debía sentir lo mismo, pero no fue así, no había nada, mi lobo no reaccionaba a ella ni de la forma más mínima— guardo silencio unos segundos antes de continuar — un día, todo cambio, ella era ... Diferente, actuaba como si fuese otra persona, su mirada era distinta y su aroma, el cuál siempre mantenía oculto, aquella vez estaba flotando en el aire —sonrio levemente al recordar — Sentía que mi lobo rasgaba mi pecho, completamente despierto, pidiendo salir, aullando y repitiendo que quien estaba frente a mi era nuestra Omega, nuestra destinada.
Lo que siempre esperé estaba frente a mis ojos, era la misma a la que yo había rechazado tantas veces... Era tu madre, la muchachita de mi historia es tu madre— reconoció — Estaba eufórico, feliz, nunca me había sentido así y solo deje que las cosas pasaran, la acepte, aunque a diferencia de otras veces, se veía triste, la muchachita altanera había desaparecido y en cambio estaba está hermosa mujer que irradiaba una luz tan bella, tan pura que me dejó embobado.

—¿Te enamoraste de ella porque tu lobo te lo exigió?

—Me enamore de ella verdaderamente, la corteje durante un mes, me arrodille y le pedí que fuese mi esposa— su semblante cambio— El día de la boda se veía distinta, había vuelto aquella actitud, la primera personalidad que conocí.
Su aroma estaba oculto, mi lobo se sentía molesto, a pesar de que muchas veces le pedimos que nunca lo ocultara, esa vez, justamente en nuestro matrimonio, lo hizo.

—Muy extraño...

—Si, pero estaba tan enamorado que no advertí nada, solo deje que las cosas pasaran y que el matrimonio se llevara a cabo— suspiró — cuando volvimos de nuestra luna de miel dijo que tenía una sorpresa.
Yo la había marcado, ya estábamos unidos de por vida, no había vuelta atrás... Tampoco la hubo cuando frente a nosotros estaba otra chica, idéntica a ella— sollozo mientras sostenía su pecho— tan solo con ver sus ojos lo entendí, la que convertí en mi esposa no era de quién me había enamorado, se trataba de su hermana, sus padres habían planeado todo aquello, al parecer Luna no era fácil de manipular y no tenía esa actitud, la que tenia Ana, tu madre, por eso me tendieron una trampa, y luego se burlaron en mi rostro por lo que acaban de hacer.
Se la llevaron lejos mientras yo quedé aquí, enlazado a alguien a quien no amaba— bajó su rostro.

—Yo lo lamento tanto....

—No todo fue malo, te tengo a ti, te convertiste es la razón que me mantuvo vivo y por lo mismo ahora cuando ví a Jimin, actúe de esa forma, me hizo recordar a Ana, ella y sus tantos amantes, no quería que tuvieras el mismo destino, no quería verte sufrir y mi lobo despertó, después de muchos años, despertó porque quería protegerte a ti... Lo siento tanto...

El pelinegro se acercó hacia su padre y lo rodeó con sus brazos, dando contención y haciéndole entender que estaba ahí, con el.

Haber crecido sin su madre le había generado este apego completo a su padre, no le afectaba que le hablaran de ella, era una desconocida y después de escuchar las palabras de su padre, quería que se mantuviera así, por siempre.

—Te aseguro que no es la misma situación— se separó para observarlo a los ojos— Jimin y yo tenemos este acuerdo desde siempre, nos acompañamos, seguimos siendo mejores amigos, hasta que alguno de nosotros encontrase a su pareja de vida — sonrió — lo cual ocurrió para ambos, el mismo día y con dos chicos que estaban en la misma situación que nosotros.
La diosa luna se estuvo divirtiendo está vez — dijo tranquilo— no debes preocuparte, padre, soy feliz, como nunca lo había sido, Taehyung es todo para mí y quiero que lo aceptes, que lo conoscas, que me apoyes y me ayudes, tengo un camino difícil frente a la manada y sería más fácil si estas conmigo — pidió.

Jaek comenzó a llorar, totalmente emocionado de las palabras de su hijo y feliz de saber que el había podido encontrar lo que por tanto tiempo estuvo buscando.

—Esta bien — asintió — Iremos por tu Omega, traeremos a mi nuevo hijo a casa... pero, antes necesito disculparme, necesito hacer las cosas bien.

—Ya lo haces, vamos a arreglar todo este embrollo y verás que todos podremos vivir en paz, como siempre debió ser.

Padre e hijo se abrazaron nuevamente antes de comenzar a salir de aquel frío lugar donde estuvo cumpliendo su castigo el viejo alfa, por aquel error que había cometido y del que se sentía por completo arrepentimiento.

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Muchas gracias por leer mi historia 💜

🌸 ErLith_🌸