Capítulo Especial
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Muchas gracias por todo su apoyo<3
les amo mucho, si quieren dedicación en el siguiente extra me dicen aquí >>>
Señalen errores por favor:)
[...]
(Harry y Jacob)
La noche era fría, solitaria y dolorosa.
Como cada día. Como cada noche, como siempre.
Se estaba haciendo tarde y Jacob empezaba a desesperarse en sus brazos, sabía que la comida de la noche anterior había sido escasa y ahora, su cachorro había despertado con más hambre de la que normalmente padecía por las mañanas. Su nariz se restregaba contra su pecho en busca de algo que Harry nunca podría darle. Bajos ruidos solían de su boca y sus pequeñas piernas se movían con entusiasmo. Las pequeñas manitas se aferraban a su camisa y tiraba de ella sin fuerza.
Harry cubrió su pequeño cuerpo con las mantas y lo envolvió con su aroma. Jake pareció calmarse lo suficiente hasta que volvió a quedarse dormido.
Le daría un poco más de tiempo, al menos; de conseguir comida para su cachorro de tan sólo ocho meses.
Aún era demasiado temprano para pensar en ello, pero Harry temía no encontrar lo suficiente en ésta semana para su bebé, sobretodo porque su celo estaba por llegar y esos días definitivamente eran los más difíciles que debía sobrevivir. No podía salir a las calles en busca de un sustento, ni para él y mucho menos para Jacob. Tenía que dejar todo listo antes de que fuese demasiado tarde, pero no era tan sencillo.
Y a Harry le aterraban esos días.
°°°°°
Acomodó cada sábana y edredón no demasiado lejos de donde él estaría. Era lo suficientemente cómodo y cálido para Jake, sabía que dormiría un largo tiempo si estaba perfectamente hecho, así que puso todo su esfuerzo en ello.
El frío ayudaba con la comida que finalmente había conseguido para los siguientes días, sobretodo con la comida que no estaba enlatada. Pero era difícil mantener tibia la leche de Jake. Harry se las había ingeniado hace un tiempo el cómo mantenerla a una buena temperatura y por fortuna, el cachorro no había enfermado desde entonces, debía ser algo bueno.
Se quejó en voz baja cuando un calambre le atravesó el estómago. Ya sentía su cuerpo caliente y empezaba a dolerle la cabeza, su celo llegaría justo por la noche y no había nada que él pudiera hacer para evitarlo más que afrontarse valientemente a ello.
No demoró mucho en hacer un nido para su bebé, lo marcó con su olor y acomodó el pequeño cuerpecito de su cachorro en el centro, sonrió cuando le vió ahí en medio entre todas las sábanas. Aún cuando se le desgarraba el corazón a cada momento.
Él no tendría que estar aquí. No es lo que merece.
Empujó el pensamiento lejos, como lo hacía cada día.
"Te amo tanto, cachorro." Harry susurró y besó sus pequeñas manitas. "Perdóname por favor."
°°°°°
Le dolía el cuerpo entero, las piernas las sentía como plomo y sus palmas ardían dónde había enterrado sus uñas con fuerza hasta que las manchó de sangre. Su miembro ardía, no sólo por la constante presión que se daba así mismo con tanta fuerza que sus nudillos quedaban blancos, sino también por no poder anudar ni una sola vez.
Estaba completamente destrozado físicamente, mental y emocionalmente como nunca cada que su celo acababa después de tres espantoso y largos días. Su cachorro estaba sorpresivamente en silencio, Harry se obligaba a creer que no tenía un motivo específico para estarlo, y no por los gritos de Jacob en los últimos días y que lo más probable era, que su garganta debía dolerle.
"Hey..." Harry se arrodilló frente a él y lo tomó en sus brazos. Jake buscó su calor de inmediato, balbuceando por lo bajo. "Lamento todo ésto, conejito. Pero papá está aquí, siempre estaré aquí."
°°°°°
"Papi, tengo frío." Jake se removió más cerca de él, sus pequeñas manitas escarbando debajo de su viejo suéter de lana de su padre en intento de conseguir algo más de calor, no le fue suficiente. El pequeño cachorro empezó a moverse hasta que consiguió meterse en el suéter de su padre.
"¿Qué haces, cachorro?" Una ligera risa salió de los labios del alfa, riendo más fuerte cuando una pequeña y despeinada cabeza rizada salió por el cuello de su suéter.
"Hola, papi." Harry le sonrió y abrazó tiernamente su cuerpo con más fuerza.
"Hola, bebé. ¿Estás mejor así?"
"Sí, papi. Huele bonito aquí." Jake dijo mientras su pequeña y ligeramente fría nariz le olfato el costado de su cuello.
"¿Te gusta?"
"Sí, papi. Me quedo toda la vida aquí."
"Cuando seas mayor no querrás dormir conmigo."
El cachorro gruñó.
"Yo me quedo siempre con papi."
"¿Y cuando ya seas mayor?" Harry le pregunta con una sonrisa divertida, su mano subiendo para quitar los rizos que caen en la frente de su hijo.
"Todavía quiero dormir con papi."
"Vas a querer tu propio espacio en algunos años." Jacob volvió a gruñir y Harry rió cuando los pequeños dientes de su cachorro se hicieron visibles, le faltan los dos de enfrente y uno abajo. Era tan tierno que el alfa tuvo que besar sus mejillas para deshacer su gesto molesto. Consiguió hacerlo reír en poco tiempo.
"¡Me hace cosquillas!" Jake rió con fuerza pero Harry le tiene consideración y detiene el feroz ataque de besos.
Estuvieron en silencio lo suficiente como para que Harry creyera que Jacob se había quedado dormido sobre su pecho y aún metido sobre su suéter. Estaría aún más estirado de lo que ya estaba pero a Harry no le importaba. Sin embargo, la dulce voz de Jake llegó a sus oídos.
"Papi."
"¿Si, cachorro?"
"¿Tomamos chocolate caliente hoy?"
Harry se mordió el labio, su corazón doliendo y sus brazos aferrándose al pequeño cuerpo de Jacob.
"Hoy no, Jake."
"Ok, papi."
Se durmieron en cuestión de minutos.
°°°°°
El día empezaba a oscurecer, estaba haciendo más frío y definitivamente no tardaría mucho en llover. Pero a cada segundo que pasaba, sentía que sus dedos se entumecian por el aire helado, le dolía la nariz y tenía a Jacob entre sus brazos, escondido bajo un enorme abrigo y algunas mantas, pero aún con eso; todavía sentía su cuerpecito temblar, removiendose en busca de calor.
Estaba siendo un día difícil, Harry no había conseguido comida suficiente para éste día, solo alguna barata papilla para Jake.
Él no se había alimentando correctamente desde hace tres días y empezaba a sentirse débil. Se sentía agotado de llorar y su mente no dejaba de pensar en cosas que le hacían doler el pecho, como si estuviera desgarrándose por dentro, quizás lo está.
Quizás se arrepentirá de ello el resto de su vida pero sabe que no puede continuar de esa manera, Jacob no lo merece.
Su corazón late como si estuviese a punto de entrar en un ataque nervioso o algo por el estilo, le pican la punta de los dedos y hay algo en su interior que le remueve el estómago.
Tiene miedo.
Pero está tan cansado.
Este día en particular, habían mucha más personas caminando de un lado a otro, algunos incluso lo habían empujado y Harry solamente tuvo que encogerse en su lugar y cubrir más a Jake con aquel abrigo. Sabía que había empezado a llover pero él creía que no era una justificación para la mala educación de las personas. Él tenía un niño en brazos, ¿por qué les era tan difícil el ser amable? No importa, se trató de convencer.
A partir de ésta noche ni él ni Jacob volverían a pasar ésto.
Sólo debía esperar unas cuantas horas más, horas en las que esperaba no retroceder, las últimas horas que tendría con su bebé. Realmente hubiera deseado pasarlas mucho mejor, pero ya no tenía tiempo para quejarse.
Había tomado la decisión de dejar a Jacob en una casa hogar hace unos días pero nunca había tomado el valor de hacerlo hasta hoy. Esperaba no retroceder, esperaba que nadie se interpusiera en su camino.
Trataba de verse a él mismo como un ave.
Un ave que sería libre, un ave que finalmente conocería el cielo y las estrellas.
Él finalmente podría despegar sus alas.
°°°°°
"Hey, tengan cuidado." Escucha su voz, lejana. Ni siquiera cree que le están hablando a él hasta que siente la presencia de alguien tan cerca suyo que todo su cuerpo se tensa. "Hey, hola." Harry está demasiado sorprendido como para responder, pero el chico no se da por vencido demasiado rápido. "¿Estás bien? Estas personas son groseras, ¿te han lastimado?"
Harry aún está indeciso, pero levanta su cabeza, dejando ver a Jake. Ve la sorpresa en sus ojos cuando examina a su cachorro, el alfa lo cubre más intentando disimular su incomodidad.
El chico se queda en silencio por varios segundos, ni siquiera está seguro de si es consciente pero parece estar analizando toda la situación y luego, cuando sus ojos lo observan una vez más; Harry puede ver algo en ellos y se convence así mismo de que simplemente se trata de pena. Pero entonces hay un olor entrando en sus fosas nasales, dulce y fresco como el aire en verano.
Un omega.
Observa al omega tragar con dificultad, puede ver sus ojos azules, grandes. En una pregunta silenciosa sobre lo que sea que esté pasando ahora mismo. Él ni siquiera sabe que decir, tiene una extraña sensación de querer echarse a llorar por alguna razón, su corazón duele, martillando fuertemente contra su pecho.
"¿Están bien?" Él pregunta de nuevo. Aún de rodillas, Harry abraza a Jacob contra él.
"Estamos bien." Harry dice y es un pequeño susurro que con gran dificultad ha logrado emitir, pero el omega parece haberle escuchado.
"Yo... sólo quería asegurarme de que éstas personas, no les habían hecho daño." El omega le sonríe. Se da cuenta entonces que las personas que estaban a su alrededor de repente se esfumaron y ya no hay tantas. La lluvia está más fuerte y sigue sintiendo frío.
"Está haciendo mucho frío, y yo..." Harry observa como el chico empieza a quitar su bufanda y luego el gorro que cubría su cabeza. "Creo que lo necesitas más que yo." El castaño le da una sonrisa dulce. Extendiendo las dos prendas hacia él, lo ve con mucha sorpresa, pero no hace el intento de recibirlas. "Tómalas, te ayudarán un poco." El omega insiste.
Su mano es grande y sus dedos son largos, para ambos es visible la manera en que tiembla hacia las prendas que el chico le ofrece, Harry no puede mentir, está asustado.
"Gracias." Ésta vez, su voz suena más alta, más fuerte pero sigue teniendo ese tono asustadizo y Harry odia sentirse débil.
"No es nada." El omega le sonríe. Brillante y parece iluminar todo a su alrededor, o al menos parece iluminar el solitario y oscuro callejón. Harry siente cómo su corazón se acelera. "Soy Louis, por cierto."
Todo lo que puede hacer, es asentir. Quiere decirle que le gusta su nombre, que es un bonito nombre para un bonito omega y Harry se sorprende de sus pensamientos, quizás murió y la persona frente a él es un ángel, no está seguro pero no consigue formular siquiera una palabra.
"Ten un bonito día, emmm. Ambos." Y de pronto Harry quiere reír.
Está nervioso. Es lo que piensa.
Cuando lo observa ponerse de pie, Harry siente cómo su corazón se rompe, un poco más mientras más se aleja a pasos lentos. La fragancia de su aroma es algo que se queda a su alrededor y el alfa desea más que nada, guardarlo en un frasco de cristal para olerlo todos los días a cada segundo.
Quiere llorar, así que baja su mirada para evitar verle marcharse. Coloca el gorro del omega sobre la cabeza de Jacob y la bufanda, él se queda con ella y su alfa ronronea al darse cuenta que tiene su olor. Es lo mejor que le ha pasado en semanas.
"Hola de nuevo." Su voz lo toma desprevenido y se asusta un poco. Louis está de pie frente a él de nuevo. Nervioso y sonrojado. "Y-yo... Está lloviendo." El omega se queda en silencio tres segundos. "Lo quiero decir es..." Él aclara su garganta. "Puedo ayudarte, ayudarles por ésta noche... Está haciendo demasiado frío y parece que la lluvia no se detendrá." Harry lo ve dudoso, sin comprender lo que quiere decir. "Solo por hoy, pueden quedarse en mi casa... s-sí quieres."
Los ojos de Harry se abren con sorpresa.
¿Acaso ha escuchado bien?
"No quiero molestar." Él dice.
"No, no... En serio, quiero ayudarte. Déjame hacerlo, por favor." Louis súplica.
"No te conozco." Él habla de nuevo.
"Lo sé, ni yo a ti... Ambos estamos haciendo un sacrificio pero si no te sientes cómodo, puedo traerlos devuelta aquí, o ayudarles a conseguir otro lugar." Él aclara casi con desesperación. "Realmente, realmente no quiero presionarte." Louis dice. "Pero se está haciendo tarde, y ya estoy mojado y tengo cosas que hacer en realidad." Él ríe con nerviosismo. "Así que..."
Pasan seis segundos, Harry los cuenta. Entonces se encuentra así mismo asintiendo, aún está asustado pero no del omega. Hay algo presionandose en su pecho y él no sabe lo que es.
Al menos, Jacob ha dejado de temblar entre sus brazos.
Quién tiembla ahora es él.
Y no sabe por qué razón.
[...]
holaaaaa ajsosk que gusto es volver por aquí 😭
que piensaaaaan de este cap? les gustó? díganme qué si por favor 😭
no es muy largo pero espero que haya sido suficiente para conocer algo de la historia de hazz y jake
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