Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 17: "Felicidad"

Ya había pasado un mes desde que Gokú fue aceptado por el padre de  Milk, los pelinegros ya habían cumplido un mes de falso matrimonio: Milk y Gokú desde que se casaron no habían ido a casa del joven de cabello alborotado justificando su actitud con que la pelinegra estaba muy ocupada en sus estudios y el joven de cabello alborotado con el campeonato que ya había empezado con la pre-selección en donde Gokú ya había clasificado a la siguiente ronda.

La relación de Milk y Gokú cada día se fortalecía más a pesar de no estar tanto tiempo juntos ambos buscaban algún momento para poder demostrarse lo mucho que se amaban, además Gokú le había propuesto a la pelinegra apoyarla para que esta termine la preparatoria por sistema abierto y pueda estudiar la carrera que ella desee en la universidad.

El padre de Gokú trataba de ponerse en contacto con sus suegros pues quería hacerlos sus socios en nuevo proyecto que tenía en mente pero los números que estos le dieron siempre sonaban ocupados o fuera de servicio lo cual generaba molestias en él.

Mansión Son:

El padre del joven de cabello alborotado platicaba con el primo de este en su despacho.

Tío es muy raro que Gokú desde que se caso no haya vuelto a venir con su esposa a la casa de sus padres, ¿tuviste algún problema con él tío?, decía Túrles intrigado.

Claro que no, dice que Milka anda ocupada con sus estudios y que él con ese torneo en el que se presentara, por eso es que no han venido por aquí, decía Bardock.

Cuando se casaron pensé que lo hacían con tanta prisa porque Milka estaba embarazada pero me equivoque, creo que tendré suficiente tiempo para casarme y darle el primogénito al abuelo que tanto quiere, decía Túrles riendo.

Así es te equivocaste y no sabes cuanto lo lamento porque me hubiese gustado que ellos me den un nieto pero con eso de que ella estudia y mi hijo se la pasa entrenando para ese estúpido torneo eso de un nieto lo veo distante, decía Bardock.

Entonces la herencia del abuelo será para mí, pero no te preocupes tío yo pienso invertir lo que herede el abuelo en tus empresas, decía Túrles.

Pues me alegra saberlo, pero no es por la herencia de mi padre que apresure el matrimonio de mi hijo, sino por que la fortuna de los Saiya sea nuestra, decía Bardock.

Vaya tío eres más ambicioso de lo que imagine, decía Túrles riendo.

Igual que tú sobrino, a veces pienso porque tú no fuiste mi hijo y no el vago de Gokú pero en fin, le perdonare todo porque se caso con una multimillonaria, al menos algo bueno tenía que hacer el vago de mi hijo en la vida, decía Bardock riendo.

Si tío tienes razón, decía Túrles riendo.

Coliseo:
Un grupo de jóvenes se encontraban reunidos platicando después de haber participados en sus combates de preselección.

Pues el que todos estemos en la siguiente ronda hay que festejarlo, decía Yamcha.

Si, es buena idea, decía Krilín.

Pues vamos a tomarnos algo, dijo Ten.

¿Vegueta, Gokú vienen?, dijo Piccolo.

Claro, dijeron los nombrados.

Minutos después: "Restaurante"

Que rápido se pasa el tiempo, ¿no?, Gokú ya lleva un mes de casado con su bella esposita, decía Krilín riendo.

Si es cierto, decía Piccolo.

Tienes razón, hoy cumplo un mes con Milk, decía Gokú sonriendo.

No me digas que se te olvido, dijo Vegueta riendo.

Pues la verdad si con la preselección se me olvido todo, decía Gokú riendo.

Hay Gokú ni el matrimonio te hace cambiar tu gran pasión por las artes marciales, dijo Ten riendo.

Las artes marciales son mi pasión, eso es muy cierto, pero mi esposa también lo es, tengo que pensar algo para celebrar nuestro primer mes juntos, decía Gokú mientras sus amigos sonreían al ver que su amigo ya tenía otra gran pasión en su vida.

Minutos después:

¿Qué les parece mi idea?, decía Gokú feliz.

Pues muy romántica, dijo Krilín riendo.

Nunca imagine verte así de enamorado, antes te la pasabas rechazando a toda chica que buscaba algo más de una amistad contigo, dijo Piccolo riendo.

Eso hacía porque no eran la indicada, dijo Gokú.

Pero llego Milka y le robo el corazón a mi amigo, dijo Vegueta riendo.

Si eso es cierto mi muñequita bella me robo el corazón, ahora ella es la dueña de cada uno de mis pensamientos, decía Gokú sonriendo.

Horas después: "Departamento de Milk"

La bella pelinegra platicaba con su padre mientras estaban sentados en su pequeño comedor.

Así es papito pienso retomar la preparatoria por sistema abierto, Gokú dijo que me apoyaría y juntos hemos estado buscando algunos lugares que dan esta modalidad, decía la pelinegra.

Pues me alegra saber que piensas retomar tus estudios y que ese joven te apoye, eso me demuestra lo mucho que te ama y que no me equivoque al darle mi confianza, decía el padre de la pelinegra.

Pues no papito, decía la pelinegra al tiempo que su celular empezó a timbrar.

Es él, dijo la pelinegra con una amplia sonrisa tomando la llamada.

Cariño, ¿qué se te ofrece?, decía Milk dulcemente contestando la llamada telefónica.

Te llamo mi muñequita bella para hacerte una invitación para está noche, tenemos que festejar nuestro primer mes de noviazgo, decía Gokú a través de la línea telefónica.

Pensé que se te había olvidado, decía la pelinegra sonriendo.

Pues la vedad si muñequita si no fuera por un amigo no me hubiese dado cuenta que hoy cumplimos un mes juntos, a veces soy un tanto despistado para las fechas, pero hay algo que nunca se me va a olvidar y eso es mi amor por ti, dijo Gokú dulcemente a través de la línea telefónica.

Lo sé, dijo Milk con la misma dulzura.

Paso por ti en un par de horas, dijo Gokú.

Esta bien, te espero mi amor, dijo Milk dulcemente dando por concluida la llamada.

Horas después:

Una bella jovencita pelinegra que vestía un bello vestido color granate y zapatitos de tacón se encontraba parada frente a su padre.

¡Estás bellísima hija¡ dijo su padre.

¡Gracias papito¡ dijo Milk feliz al tiempo que el timbre del departamento sonaba.

Ya me voy papito, dijo la pelinegra tomando su cartera y dirigiéndose a abrir la puerta.

Muñequita bella, dijo Gokú al tener a la pelinegra frente a él, sujetándola en sus brazos para besarla dulcemente.

Cof cof cof

Señor Ox, ¡buenas noches¡ dijo Gokú al separarse de la pelinegra.

¡Buenas noches¡ dijo el gigantesco hombre sonriendo.

Estaremos fuera unas horitas, yo mismo la volveré a traer a su casa, decía Gokú.

No te preocupes hijo, lo sé, yo confío en ti, se que sabrás cuidar muy bien a mi niña, decía el gigantesco hombre.

Así lo haré señor, dijo Gokú.

Gokú y Milk tomados de la mano salieron del edificio y subieron al auto del joven de cabello alborotado.

¿A dónde iremos?, dijo Milk dulcemente.

Al mirador de la ciudad, por cierto estás muy bella, dijo Gokú haciendo sonrojar a la pelinegra.

¡Gracias¡ tu también estás muy bello, dijo Milk dulcemente.

Minutos después:

El joven de cabello alborotado estacionaba su auto en la parte baja del mirador. Gokú bajo para abrirle la puerta a la pelinegra, luego de que la ayudo a bajar cerro su auto y tomados de la mano subieron por las gradas del mirador hasta la parte más alta de este.

La vista es hermosa, decía la pelinegra mirando la ciudad desde lo más alto del mirador.

¿Bailamos?, dijo Gokú sonriendo.

¿Cómo vamos a bailar si aquí no hay música?, dijo Milk sonriendo.

Claro que la hay, dijo Gokú sonriendo haciendo tronar sus dedos para que un pequeño grupo de músicos empezaran a tocar una pieza muy romántica mientras unos hombres colocaban una pequeña mesa, dos sillas, una deliciosa cena y dos copas con una botella de champagne.

La pelinegra sollozo de la emoción mientras el joven de cabello alborotado la abrazo y le dijo al oído: la idea era que sonrieras no que lloraras mi amor.

Lloro de alegría amor, de alegría, dijo Milk sonriendo dulcemente.

Pues ya no quiero que llores más así sea de alegría, dijo Gokú limpiando con la palma de sus manos las lágrimas que resbalaban por el bello rostro de la pelinegra y luego la beso dulcemente.

Así estás más bella, dijo Gokú al verla sonreír.

¡Te amo¡ dijo Milk.

Yo también, ¡te amo¡ no sabes lo feliz que me haces, dijo Gokú volviéndola a besar mientras bailaban al ritmo de la música.

Tú también me haces muy feliz, eres mi felicidad, dijo la pelinegra.

Y tu la mía, dijo Gokú.

Luego de bailar por algunos minutos el par de pelinegros se sentaron a degustar la deliciosa cena mientras platicaban.

¡Gracias me diste una linda sorpresa¡ dijo Milk con melancolía.

Pues parece que no te gusto tanto amor, dijo Gokú.

No es eso, es solo que yo no te he dado nada, decía Milk.

Como que no, tú me das tu amor y eso es lo más importante para mí, dijo Gokú.

Ya se, que te daré, dijo Milk sonriendo dulcemente.

¿Qué?, dijo Gokú intrigando viendo a su bella novia sacarse una cadenita que llevaba puesta.

Esto, es lo más valioso que tengo, era de mi madre, mi padre me la dio a mi y yo quiero dártela como símbolo de mi amor por ti, dijo la pelinegra entregándole su cadenita a Gokú.

¡Gracias¡ la llevare siempre conmigo, será mi amuleto, dijo Gokú sonriendo.

Una vez que el par de pelinegros terminaron de cenar ambos caminaron hasta el borde del mirador y desde allí abrazados miraron por algunos minutos más la ciudad. Luego Gokú llevo a la pelinegra hasta su departamento.

No sabes como me hubiese gustado que te quedaras conmigo, pero le prometía a tu padre traerte temprano, decía Gokú mientras la abrazaba y le daba suaves besos en su rostro a su novia en el pasadizo del departamento de la pelinegra.

A mi también me hubiese gustado quedarme a tu lado pero por ahora no puede ser, dijo Milk dulcemente.

Lo sé, creo que adelantare nuestra boda, ya no quiero estar separado de ti mi muñequita bella, decía Gokú.

Yo tampoco, dijo la pelinegra besando a su novio dulcemente.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro