Estaba amaneciendo en la ciudad de Orario, todo estaba tranquilo, en la habitación de Bell Cranel se encontraba el mencionado dormido profundamente, en eso ciento como algo lo abraza del pecho y eso lo despertó.

Bell: con sal marina.

El albino estaba algo confundido al enfocar bien sus sentidos pudo ver a cierta rubia que lo veía divertida.

-: soñando con comida otra vez?.

Bell: la verdad no se que estaba soñando, pero me alegra que estés aquí Ramm.

Ramm: ya terminé lo que tenía pendiente por lo que ahora tendré que vigilar a la diosa Deméter.

Issei: por cierto está noche atacaré el distrito rojo.

Ramm: tan pronto acabarás con esa diosa puta.

Bell: así es, ya que descubrí que está noche planea realizar un sacrificio para aumentar el poder de sus amazonas y estoy seguro de que comenzará una guerrera civil la cual evilus no desaprovechara para sus fines.

Ramm: por lo que quieres acabar con ella este día.

Bell: lo aré cuando el sol se este ocultando, de esa forma podré destruir sus esperanzas.

Ramm: maligno como de costumbre, me gusta, no quieres tener un mañanero conmigo?.

Bell: me gustaría, pero tengo que ir con mi hermana, tengo que mostrarle eso, merece saber por el momento sus nombres y de donde provenimos.

Ramm: está bien entiendo.

Bell: aunque cuando ataque está noche puede que me robe uno que otro afrodisíaco.

Ramm: eso me excita.

En las murallas de la ciudad se encontraba Nozomi entrenando con una rubia, aunque está última estaba algo pensativa.

Nozomi: Ais-san está todo bien?.

Ais: si, solo que ese chico es muy fuerte.

Nozomi: hablas de mi hermano?.

Ais: si, sabes cómo se hizo tan fuerte?.

Nozomi: no lo sé, cuando éramos niños el se fue con un conocido de nuestro abuelo para tratar con su enfermedad y solo nos comunicabamos mediante cartas, nunca me comentó como fue que se curó y lo único que me dijo respecto a su entrenamiento es que fue entrenado por los tres jueces del infierno.

Ais: jueces del infierno?, Quienes son?.

Bell: los espectros más fuertes que hay.

Ambas chicas voltearon a ver de donde provino la voz y vieron a cierto albino de ojos rojos, la rubia dió un paso hacia atrás, algo dentro de ella le decía que ese chico era peligroso.

Bell: Nozomi tengo que hablar conmigo en privado.

Nozomi: está bien, nos vemos Ais-san.

La albina comenzó a caminar en dirección hacia su hermano que veía seriamente a la rubia.

Bell: se lo que estás tramando, de una vez te digo que te alejes de mi hermana o sentirás las llamas del sol.

Con eso dicho el albino le dió la espalda a la rubia que se encontraba sorprendida pero sin pensarlo intentó acertarle un corte por la espalda pero se sorprendió cuando vió que el albino ya no se encontraba enfrente de ella sino atrás.

Bell: última advertencia espíritu, no colmes mi paciencia o no respondo.

Con eso dicho el albino comenzó a caminar siendo seguido por su hermana que estaba sorprendida por lo que acaba de ver, mientras que Aiz estaba sorprendida y temblaba un poco ya que sintió el instinto asesino del albino y no fue algo a lo que se allá enfrentado antes.

En las calles de Orario ambos albinos caminaban en silencio, aunque muchas personas se les quedaban viendo ya que el albino ya que se habían generado algunos rumores sobre el.

Nozomi: adónde vamos?.

Bell: a que conozcas a unas personas.

La albina permaneció en silencio y siguió a su hermano, aunque se sobresalto cuando vió el sementerio de aventureros, a lo que algo insegura comenzó a seguir a su hermano.

El albino estaba enfrente de dos lápidas y procedió a quitar la malesa que cubría las lápidas, la albina estaba algo inquieta pero quedó en shock al ver los nombres que estaban escritos en las tumbas.

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A lo que calló de rodillas y comenzó a sollozar, pero fue abrazada por Bell que también comenzó a derramar algunas lágrimas con ella.

Luego de estar así por casi una hora los dos albinos se tranquilizaron y se pusieron de pie.

Bell: Nozomi lo que te voy a contar posiblemente afectará tu relación con ciertas personas.

La albina permaneció con la cabeza gacha pero le pidió que siguiera.

Bell: nuestros padres eran aventureros, ellos pertenecían a las familias Zeus y Hera.

La albina vió fijamente a su hermano muy sorprendida y estaba por hacerle algunas preguntas, pero vió como su mirada se endurecia y su seño se fruncía.

Bell: nuestra madre no fue con su familia a cumplir con las tres grandes misiones ya que estaba embarazada de nosotros y nuestro padre logro sobrevivir a la batalla contra el dragón negro.

Nozomi se sorprendió por escuchar eso, pero se preguntaba que les pasó a sus padres.

Bell: al ver que la mayoría de los aventureros de las familias Zeus y Hera habían muerto Loki y Freya no desaprovecharon su oportunidad y enviaron a sus seguidores a exterminar a los sobrevivientes.

En este punto el albino estaba apretado sus puños hasta el punto en que unas cuantas gotas de sangre caían.

Bell: de alguna forma Loki y Freya se enteraron de nuestra experiencia, siendo que apenas que habíamos nacido, nuestros padres dieron sus vidas para que nosotros no fuéramos usados como títeres de los dioses de esta ciudad.

La albina estaba con la mirada ensombrecida pensando seriamente en todo lo que acababa de escuchar, el albino la tomó del hombro para sacarla de sus pensamientos.

Bell: volvamos a la mansión, esta noche tengo una tarea que hacer y me gustaría que estuvieras en un lugar seguro en lo que la realizó, mañana podrás venir para que hables con ello, esta bien hermanita.

La albina lo abrazo fuertemente mientras unas pocas lágrimas salían de sus ojos, luego de unos diez minutos los dos hermanos comenzaron a caminar hacia la salida.

No muy lejos de hay una elfa con el cabello castaño anaranjado los veía fijamente y cuando estaba por seguirlo se dió cuenta que no se podía mover.

-: es de mala educación espiar a las personas cuando están están en un momento privado.

Lefiya sintió como su cuerpo se movía en contra de su voluntad y comenzó a acercarse a un hombre con armadura oscura que movía extrañamente su mano y dedos.

Minos: tengo algunas preguntas para usted señorita elfa.

Lefiya: no diré nada sucio humano!.

Minos: señorita elfa acaso no se da cuenta que yo controlo su cuerpo ahora mismo, para mí usted no es más que una simple marioneta, ni siquiera puede mover un dedo.

Lefiya: que dijiste de mis dedos?!.

Minos: buena idea, empezamos con un dedo.

El albino hizo que uno de los dedos de la elfa se doblará en sentido contrario, lo que hizo que gritará de dolor.

Minos: ahora responderás mis preguntas o seguimos con el brazo completo.

Lefiya: esta bien hablaré, pero porfavor detente.

Minos: lo ves no era muy complicado.

Haci el juez comenzó a interrogar a la elfa, cada vez que Lefiya no respondía una pregunta Minos usaba su técnica marioneta cósmica para romperle alguna parte de su cuerpo, al terminar con el interrogatorio Lefiya tenía todo el brazo derecho roto, su pie izquierdo dislocado.

El albino cuando vió como un grupo de aventureros pertecientes a la familia Loki se asecaban a ellos corriendo, por lo que con poco cuidado les arrojó el cuerpo de la elfa mientras el se iba con mucha tranquilidad y desaparecía entre las sombras.

Con Bell; los dos hermanos habían llegado a la mansión chimenea, Hestia estaba sentada en el sofá, acababa de hablar con el dios Gobunyu sobre los últimos arreglos de la mansión, cuando vió a los hermanos Cranel estaba por saludarlos fue abrazada por Nozomi, en un principio eso lo sorprendió pero pudo entender el porque el abrazo y se lo devolvió.

El albino sonrió y para darles privacidad se fue a su habitación, al entrar vió una carta en su escritorio, pudo reconocer la letra por lo que de inmediato la comenzó a leer, al terminar de leer la carta tuvo que controlarse lo más que pudo para no destruir medía ciudad de un ataque.

Bell: después de destruir al traidor de Thanatos me encargaré de destruir la familia Loki, sobretodo a esa pulga rubia, nadie ve a mi familia como una herramienta o un estorbo.

En eso sale por su ventana y se para en el techo de la mansión y vé en dirección de la torre Babel hacia donde está la diosa Freya.

Bell: después seguirás tú diosa de las ninfomanas, yo mismo me encargaré de exterminar a todos tus seguidores frente a tus ojos.

En eso un resplandor oscuro cubre al albino y al desaparecer una armadura oscura apareció en su cuerpo.

En la torre Babel la diosa Freya estaba viendo fijamente al albino y sonrió aceptando el desafío teniendo plena confianza en que ganaría como siempre.

FIN DEL CAPITULO 4