
Ya no más.
Había pasado una semana desde que deje de ir a la práctica, mi padre aunque no le agradaba mucho el deporte me había pedido muchas veces que vuelva, ya no quería, mi yo estaba muriendo poco a poco.
Algún día me voy a Suicidar. Esto no es una broma, es que siento como que no podré seguir con la vida que llevo, maldita sea el día y la hora en que nací. Maldita sea mi vida.
-Estas demasiado débil deberías comer más -Comentó mi madre, la mujer me sirvió más de la cena.
-No tengo hambre, ya deja de servirme mamá, no tengo hambre-Protesté.
-Tienes varios días comiendo poco -Rode los ojos y me pare del asiento. Caminé a mi habitación-. Angelo si te sucede algo puedes contarmelo -Lo escuché pero no quise hacerle casó. Yo solo quería desaparecer del mundo y no volver jamás. Mi celular sonó, era él, pensé para coger la llamada pero tome la opción que más quería.
*Hola* Escuche su voz de fondo y me sentí más miserable. Más estúpido y más cobarde.
-Hola-.
*¿Que sucede contigo? Me dijeron que estás faltando a las prácticas, me dijeron que no estás comiendo, me dijeron que andas desanimado, por el amor de Dios Angelo quieres matarme del corazón*.
Su voz se oía enojada, cuando se enojaba se podía escuchar más gruesa de lo normal. Ese simple hecho me hizo sentir que no me merecía una persona como él, tan buen amigo confiable, cosa que confundí, su amistad verdadera con amor. Que Iluso pude ser yo.
-Solo déjame en paz, ya no quiero hablar contigo.
Decir aquellas palabras me dolió más a mí que a él, pero debía ser así, antes de hacerle daño con lo que traía en mis pensamientos hace día.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro