01:
Narra Aynea:
- Tenemos que hablar - pide Pierre y yo suspiro mientras cierro la puerta de casa - las cosas han cambiado.
- Me he enterado de su ingreso durante el entrenamiento - respondo mientras dejo mi bolsa - sé que es mi sangre y todo lo que querías, pero ellos renunciaron a mi, presentarme ahora en ese hospital es una idiotez.
- Tu abuelo me ha llamado y me ha pedido que te llevara y sabes que estoy obligado a hacerlo, porque es tu tutor legal - comenta y yo niego con mi cabeza - Aynea ya perdiste a tus padres, no los pierdas también a ellos.
- Los perdí por su culpa, el tío Carlos no dejó a mamá tener una segunda oportunidad para ser feliz contigo y la tía Leyre me abandono a mi suerte - protesto y el francés suspira - así que ahora no me pidas que vaya y que me comporte como si estos años nada hubiera pasado, tuvieron la oportunidad de cuidarme, eran mis tíos mi vida debería haber dependido de ellos, ellos deberían haber pedido mi custodia si de verdad les importaba y les importo tanto como dicen, pero claro en ese entonces era un estorbo.
- Aynea - intenta hablar y yo niego con mi cabeza - no puedes seguir pensando en el pasado, Carlos está ingresado ahora y no sabemos lo que puede pasarle mañana, y sino vas a verlo tal vez te arrepientas toda la vida, tal vez sientas lo mismo que todos ellos cuando tu madre falleció.
- Si están esperando a que este estorbo se presente en ese hospital con cara de niña buena, que sigan esperando porque no pienso ir, y es mi última palabra Gasly, esas personas dejaron de ser mi familia en el mismo momento en que dejaron de recordar que tenían a una sobrina.
Narra Carlos:
- ¿Has podido encontrarla? - pregunto y Leyre niega con su cabeza - ¿se habrá enterado de lo que ha pasado?
- Seguramente papá le haya llamado, después de todo es el único Sainz con el que sigue manteniendo relación - responde antes de suspirar - voy a ir a por un café, porque esto va para largo.
- ¿Me das mi teléfono? - pido y ella me mira dudosa por unos segundos - si Leyre quiero asegurarme de que papá le ha avisado de que estamos aquí.
- Aynea tiene todo el derecho de no querer venir a verte - comenta mientras me lo da - ya sea porque papá se lo haya dicho o porque ni siquiera se interesa por nuestra vida, al final nos lo merecemos, porque hemos sido nosotros quien ni siquieran la felicitaban por su cumpleaños.
- Soy mayor que tú, así que no me reproches nada que encima vamos a acabar mal en mitad de un hospital - protesto mientras ella camina hacia la puerta - ¿vas a tardar mucho?
- Hasta que te hagan efecto los calmantes no vuelvo a entrar - informa y yo ruedo los ojos - y si por algún casual Aynea se apiada de nosotros y decide venir, deberías calmar tu genio porque no hay quien te aguante la verdad.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro