Dongmin despertó a las siete de la mañana de ese mismo día y se sorprendió por un momento al ver a Moonbin durmiendo en el otro lado de la cama, con las mantas enrolladas en sus piernas.

Se levantó de la cama y rápidamente logró salir de la habitación para volver a la suya, por lo que Miyeon se despertaría en cualquier momento y encontraría su lugar de la cama vacío.

Todo lo que pasó hace un par de horas con Moonbin siguió corriendo por su mente mientras se sentaba en la cama y esperaba a que se despertara.

Dongmin se dio cuenta de que en realidad era su cumpleaños y mañana Navidad. Le hacía sentirse mejor acerca de toda esta situación.

Miyeon se despertó alrededor de las nueve, y todo el mundo tenía que salir a mediodía. Cuando vio a Moonbin en la recepción, el chico mayor le envió un guiño descarado y todo lo que Dongmin podía hacer era voltear la cabeza.

Había sido la mejor noche que había tenido, y las imágenes todavía se ejecutaban a través de su cabeza.

Tuvo la cena de Nochebuena, como de costumbre, y sus hermanos menores fueron a la cama entusiasmados al día siguiente, Dongmin sabía que probablemente iba a obtener una gran cantidad de dinero para Navidad, ya que ya tenía su coche.

Dongmin tenía razón, porque a la mañana siguiente se encontró un sobre con su nombre bajo el árbol, al lado de otra bolsa llena de dulces. No se sorprendió al ver una nueva tarjeta de crédito American Express Centurion en ella. Había un papel impreso con cosas pequeñas allí también, con el número PIN y otros detalles.

Dio las gracias a sus padres y su padre le hizo saber que le iba a cargar 30 mil dólares al mes, para que pudiera ahorrar para el futuro. Dongmin tenía todo planeado de todos modos; viajaría a Londres y se compraría una casa, también una en la playa en la Isla de Canvey, donde pondría el yate que siempre había soñado.

Comenzó a nevar más tarde y no se detuvo hasta después de dos días, cuando Myungjun lo llamó para decirle que fueran a almorzar.

Dongmin les dijo como excusa a sus padres, que iba a salir con Miyeon. Se vistió para arriba en un suave polo Lacoste azul, un par de pantalones vaqueros azules y su chaqueta de cuero. Decidió ir con zapatillas, ya que no podía encontrar sus botas.

Se reunieron en la comida china en el centro comercial y, normalmente, Dongmin habría detestado ese lugar, pero se había acostumbrado a ello. Todo el mundo en su grupo estaba allí, y Sunwoo se unió también, con Chaewon. Así que pasó de ocho a diez personas, y Dongmin no tenía ningún problema con eso porque los dos eran divertidos y estaban enamorados.

"Entonces, ¿Qué haremos para año nuevo?" Jinwoo preguntó después de que habían ordenado su almuerzo.

Dongmin se sentó entre Jinwoo y Sanha, justo enfrente de Moonbin, y era su primera vez en la historia comiendo comida china.

"Fiesta en tu casa ¿no?" Preguntó Minhyuk y Jinwoo se encogió de hombros.

"Si eso está bien para ustedes."

"Lo hacemos todos los años, Jin." Moonbin habló y todo el mundo parecía estar bien con la idea de tener su fiesta de año nuevo donde Jinwoo.

Dongmin solía ir a Times Square con su familia en su jet privado. Así que todo lo que en realidad preferiría era pasar el último día del año en casa de Jinwoo. Sabía que no había manera de salir del viaje a América.

"¿Necesitas que lleve un poco de hierba?" Preguntó Moonbin mientras la camarera vertía agua en el vaso. Ella le hizo una mueca, pero Moonbin ni siquiera pareció darse cuenta.

"Si puedes entonces sí. Pero todo el mundo debe llevar sus propias cosas" Jinwoo respondió y tomó un sorbo de su bebida.

"¿Vas a venir Dongmin?" Myungjun preguntó cuándo su comida llegó y todo el mundo empezó a comer.

Él levantó la vista de su comida y se encontró realmente debatiendo la respuesta.

"Uh... no lo sé. Quiero decir, por lo general me voy con mi familia".

"¿Dónde?" Preguntó Minhyuk y Dongmin sabía que Moonbin se burlaría de él tan pronto como respondiera.

"Um, Times Square."

Moonbin resopló. "¿En qué? ¿Tu jet privado? "se burló.

"En realidad, sí."

"¿Hablas enserio?"

"¡Deja de burlarte!" Dongmin protestó y Moonbin negó con la cabeza, volviendo a su comida.

Dongmin se sintió un poco avergonzado de que Moonbin se hubiera reído de él delante de todos. No podía creer que realmente se preocupaba de lo que estas personas pensaran de él.

"Creo que puedo hacer una excepción e ir donde Jinwoo." Se encontró diciendo unos minutos más tarde, y ahora todo el mundo lo miraba fijamente. "Si me dejan quedarme en casa para Año Nuevo puede ser que lo hagamos en la mía."

Ok, ¿Qué?

"¿En serio?", Preguntó Jinwoo, emocionado.

Dongmin se encogió de hombros y asintió, sabiendo que las posibilidades de que eso ocurriera eran nulas.

"No puedo prometer nada sin embargo."

"¡Eso sería tan jodidamente genial, porque tu casa es enorme!" Jinwoo continuó con la boca llena. "Y podríamos tener la música a todo volumen sin que la oiga nadie."

Dongmin se sintió orgulloso, se sentía como si estuviera realmente empezando a encajar en su nuevo grupo de amigos. Lo cual era al mismo tiempo confuso y excitante.

Después de que terminaron su almuerzo y dejaron el dinero sobre la mesa, Jinwoo sugirió que se fueran al parque junto a su escuela para terminar los dos cigarrillos de marihuana que le quedaban.

A Dongmin le resultaba un poco raro que casi todas las veces que se reunían, ellos bebían, fumaban o se drogaban. No le importaba que fuera así, pero era un cambio drástico el pasar de escuchar música clásica y comer migas de pan de salmón a beber alcohol y fumar marihuana.

No estaba seguro de si le gustaba el cambio o no.

Dongmin estaba sentado en uno de los columpios mientras que el resto de ellos se sentó en el suelo cubierto de nieve o el banco junto a los columpios. Chaewon se unió a él en el otro columpio mientras que los otros encendían sus cigarrillos.

"Todo lo que ustedes hacen es beber y tomar." Dijo Dongmin y Moonbin le lanzó una mirada.

"Es mejor que hacer la tarea y escuchar Sebastián Mozart." Respondió el castaño mientras dejaba escapar el humo de sus pulmones.

"En primer lugar, no lo es, y en segundo, es Sebastian Bach."

"Por supuesto que lo es."

Moonbin puso los ojos y Dongmin quería abofetear esa expresión de su rostro de inmediato.

"Deja de mirarme como un idiota." Él rompió cuando Moonbin no paraba de mirarlo con sus ojos vidriosos.

"No lo hago."

Dongmin terminó quedándose en silencio durante el resto de su estancia en el parque. Salieron a las cinco, cuando empezaba a oscurecer y una tormenta de nieve se estaba acercando.

Todo el mundo excepto Moonbin y él (oh, que suerte) se dirigieron en dirección opuesta, así que terminó caminando por la calle con el más alto a su izquierda.

"¿Así que te irás a casa ahora?" Moonbin le preguntó cuándo doblaron en la esquina. Dongmin no podía creer que en realidad estaba caminando por la nieve en sus zapatos mientras que era casi de noche.

"Supongo que sí. Voy a tener que tomar un taxi, no sé muy bien el camino a casa desde aquí".

Moonbin puso los ojos.

"Te vas a quedar atrapado si sigues rodando tus ojos."

Moonbin los rodó de nuevo sólo para que Dongmin se enojara. Se rió cuando vio el resoplido del muchacho más joven.

"Tengo hambre." anunció y se detuvo justo en frente de un restaurante que tenía PIZZA sobre la puerta de luces de color naranja.

Dongmin también se detuvo, enterrando sus manos en los bolsillos y Moonbin señaló el local.

"Comeré pizza. Puedes unirte a mí si quieres, ya que nunca la has probado. "

"Huele divertido aquí." Dongmin le dijo una vez que entraron en la pizzería.

"Huele bien. ¿O es que tus fosas nasales ricas no toleran el olor a campesino?"

"Eres muy molesto."

"Eso no es lo que decías cuando tenía tu polla en mi boca." Respondió Moonbin y el más bajo se puso rojo, mirando rápidamente alrededor para ver si alguien lo había oído. Había una pareja de ancianos en la esquina compartiendo una pizza y un hombre mal vestido justo enfrente de ellos bebiendo lo que era probablemente chocolate caliente. Había otro grupo de adultos justo en el medio y dos niñas en la cabina detrás de ellos.

Se sentaron uno frente al otro en una cabina que Moonbin había elegido, y Dongmin se preguntó si la comida era realmente buena, a juzgar por los clientes y los precios.

"Es un poco barato, ¿no?". Preguntó mientras examinaba el menú.

"Ese es el punto."

"No creo que tenga billetes pequeños." Dongmin habló y Moonbin negó con la cabeza.

"Yo puedo pagar."

"¿Tienes dinero?."

"No soy tan pobre como crees, Dongmin."

"¿Así que, qué es bueno aquí?"

"Normalmente pido la pizza de pepperoni." Respondió Moonbin y Dongmin miró el nombre en el menú.

Antes de ordenar, sacó su iPhone de su bolsillo y buscó la cantidad de calorías en una pizza de pepperoni.

"¿Qué estás haciendo?", Preguntó Moonbin.

"¿Hay ciento ochenta y un calorías en una porción de pizza? ¿Cuántas rebanadas vienen? " Dongmin preguntó sorprendido.

"Ocho... y ¿a quién le importa?"

"Um... eso es... casi seiscientas calorías. "

"No tienes un trastorno alimenticio ¿cierto?", Preguntó Moonbin y Dongmin frunció el ceño.

"¿Qué? No."

"Porque pareces realmente obsesionado con la comida y piensas que estás gordo."

"Moonbin, no tengo un trastorno de alimentación."

"Entonces, ¿por qué te preocupas por esas cosas?"

"Por costumbre." Respondió Dongmin y bloqueó su teléfono. "No necesito que mi culo se haga más grande."

Puso su teléfono en la mesa. Los ojos de Moonbin se posaron en él.

"Probablemente lo voy a robar cuando no estés mirando." Dijo Moonbin con una sonrisa y Dongmin lo hubiera tomado en serio si no hubiera visto su cara.

El camarero finalmente vino, y tomó su orden (Dongmin ordenó la misma pizza que el mayor), y no pudo dejar de notar la manera en que Moonbin se quedó mirando al chico mientras se alejaba.

"¿Te gusta?" Le preguntó directamente.

"¿Quién? ¿Ese chico? Nah. Quiero decir, probablemente lo haría mierda si una noche estoy aburrido."

"Ah, y ¿qué es lo que hace que en este momento no estés aburrido?" Dongmin preguntó burlonamente y Moonbin se inclinó, apoyando los codos sobre la mesa.

"Tú."

Dongmin se sorprendió de su respuesta. "¿Y-yo?"

Moonbin se encogió de hombros. "Eres interesante."

Dongmin no sabía cómo se sentía al respecto. Nunca había sido llamado interesante y le gustaba.

"Pensé que era aburrido y rico." Él contestó, levantando una ceja.

"Eso fue antes de ver tu polla".

"No tienes vergüenza ¿verdad?"

Moonbin negó con la cabeza y sonrió, recostándose contra el cuero.

"¿Así que todavía tienes la idea de que el sexo sólo debe ser practicado después del matrimonio?"

Dongmin asintió.

"Entre un hombre y su esposa, al igual que la Biblia dice."

"¿Dice la Biblia algo acerca de dejar que otro tipo te chupe la polla?"

"No." Dongmin habló, sonrojándose y mirando hacia abajo la mesa.

"Así que me estás diciendo que nunca has hecho nada aparte de darte besitos con tu novia." Moonbin dijo.

"¿Estás tratando de hacerme sentir como un perdedor a propósito?"

"Sólo estoy preguntando, no es gran cosa."

"Sí, nunca hemos hecho nada más."

"¿Y quieres algo más? ¿Nunca sentiste la necesidad de hacer más con ella?"

"No con ella." Respondió Dongmin y Moonbin sonrió.

"¿Estás diciendo que harías más conmigo?"

"No estoy diciendo nada. Deja de poner palabras en mi boca".

"Prefiero poner algo más en tu boca." Respondió Moonbin y Dongmin sintió que un escalofrío le recorría la espalda porque... WOW.

"¡Deja de hacer que todo suene sucio!" Le dijo al de ojos más rasgados.

"Quise decir la pizza pervertido." Moonbin sonrió y señaló a las pizzas que estaban siendo llevadas por el camarero.

"No, no lo hiciste."

"Está bien."

Dongmin miró la gigante y redonda cosa delante de él.

"Vamos, que no muerde." Moonbin le dijo.

"Es grasienta y huele raro."

"Huele bien."

Dongmin miró a Moonbin tomar una rebanada triangular en la mano y luego morder la punta de la misma.

"¿Así que comerás con las manos? ¿Al igual que esas hamburguesas y papas fritas?" Dongmin cuestionó, colocando una servilleta en su regazo para no manchar sus vaqueros.

"Las cosas que puedes comer con las manos son las mejores." Respondió Moonbin. "Incluyendo la polla."

Dongmin le había dicho que parara con las insinuaciones, pero en realidad se rió de él.

"Vamos, pruébalo."

Dongmin abrió la boca y le dio un mordisco.

"Es realmente buena." Admitió.

Terminó de comer toda la pizza en veinte minutos y se sentía un poco avergonzado después de que Moonbin acababa de presenciar lo que hacía.

"Estoy tan lleno." Dijo, y palmeó su barriga que era ya evidente a través de su polo. "¿No pensarán que ahora soy un cerdo gordo, verdad?"

"¿Desde cuándo te importa lo que pienso de ti?", Preguntó Moonbin mientras tomaba el resto de su coca cola.

Dongmin no le respondió, se aflojó el cinturón y suspiró contento. Fue sin duda una de las mejores cosas que ha comido, aunque no se lo admitiría a Moonbin.

Él pagó por su comida y después de que consiguiera el cambio, se volvió a ver que estaba completamente oscuro afuera y estaba nevando muy fuerte. Dongmin podía ver la nieve cayendo a la luz de las lámparas de la calle y en realidad estaba hipnotizado por eso.

Moonbin había sacado la chaqueta naranja que había estado llevando alrededor de él, y Dongmin se quejó de sus oídos congelándose.

Se detuvieron en una tienda de ropa que parecía un poco barata a opinión de Dongmin, pero decidió que se callaría porque necesitaba algo para taparse los oídos.

O era una especie de orejera o un sombrero, pero Moonbin le llamaba 'Beanie'. Dongmin se fue con una gorrita tejida, ya que cubría todo su pelo.

"Me veo como una persona sin hogar." Dongmin dijo cuándo se puso en el espejo.

"No, no lo haces, tengo como cinco de esos."

"Ese es exactamente mi punto."

Hicieron un giro a la izquierda de la tienda y Dongmin reconoció la cadena de pequeñas casas como la calle de Moonbin.

"Debería llamar un taxi." Dijo cuándo Moonbin finalmente se detuvo frente a su casa. Era hecha de ladrillos, y Dongmin podía ver una ventana arriba y una abajo. Parecía pequeña y estrecha.

"Puedes entrar, si quieres."

"¿No está tu madre en casa?"

Moonbin negó con la cabeza. "Ella tiene turno de noche."

"No son más que las siete."

"Ella no está aquí, Dongmin."

"¿No harás nada?, violarme en tu casa o algo ¿verdad?", Preguntó mientras Moonbin abría la puerta principal.

"Ese es exactamente mi plan." Dijo el más alto sarcásticamente y abrió la puerta, caminando.

Dongmin cerró la puerta tras él y miró a su alrededor cuando Moonbin cerró con llave. Había dos puertas de la planta baja, una que conducía a una pequeña sala de estar y otra que conducía a una cocina pequeña. Había escaleras junto a la puerta, las que probablemente conducían a los dormitorios.

"Me cambiaré de ropa." Moonbin le dijo y Dongmin lo siguió escaleras arriba.

Había un baño por las escaleras y un dormitorio con una cama de matrimonio al lado de él. Moonbin fue a la otra habitación.

"Tienes una pequeña casa." Dongmin dijo.

"Lo sé."

La habitación de Moonbin era definitivamente más pequeña que la de Dongmin. Tenía una cama de matrimonio sencilla sin hacer en la esquina junto a la ventana, un escritorio con un antiguo portátil justo al otro lado de ella, y un armario de madera en la esquina de la puerta. La habitación estaba sucia; tenía ropa por todas partes. En la cama, en la mesa, en la silla y en el suelo.

"¿Ese es el cesto de ropa?" Dongmin preguntó y señaló la cesta de plástico blanca al lado del armario.

"Sí."

Así como Moonbin buscó algo de ropa para vestir, Dongmin se encontró recogiendo cada artículo de ropa que no estaba en su lugar tirándolo en la cesta.

"¿En realidad estás limpiando mi habitación?" Preguntó Moonbin y se quitó los pantalones vaqueros.

"No soporto el desorden." Respondió el menor.

Moonbin se vistió con un par de pantalones de chándal grises y una polera de cuello V blanca lisa.

"¿Quieres hacer mi cama también? ¿O estás familiarizado con que las empleadas lo hagan?" Preguntó Moonbin.

"Uh... Puedo hacer eso."

Moonbin resopló, en realidad no creyéndole.

"¿Puedo poner mi chaqueta en la silla?" Preguntó Dongmin, y se quitó su gorrita y chaqueta.

"Claro."

Moonbin se reía de él, él lo sabía.

"No hay razón para reírse de alguien que está tratando de ser amable." Dongmin le dijo.

El menor metió las sabanas adecuadamente hasta que estuvieron lisas y sin arrugas, antes de inclinarse sobre la cama para ajustar la manta. Estaba a punto de dar un paso atrás correctamente cuando sintió a Moonbin presionando su entrepierna contra su espalda baja.

Respiró hondo y finalmente se puso de pie con la espalda recta. Era tan difícil mantener una postura indiferente cuando Moonbin estaba respirando en su cuello y sus manos estaban agarrando sus caderas.

"Me encantaría que te inclinaras sobre el escritorio para follarte." Moonbin le dijo y le dio la vuelta. "Pero prefiero tenerte de rodillas en este momento."

La boca de Dongmin se abrió y sus mejillas se calentaron. Odiaba el hecho de que Moonbin siempre lo hacía sonrojar.

"Pero no sé cómo-um, hacerlo."

"Voy a guiarte." Moonbin le aseguró y se apoyó en el mostrador.

Dongmin tomó aire y cayó de rodillas en frente del chico mayor, mirándolo.

"Toma mis pantalones." Moonbin instruyó y Dongmin hizo exactamente eso. Se mordió el labio cuando la larga polla de Moonbin casi lo golpeó en la cara.

"¿Te gusta? ¿Que mi polla este dura para ti?", Preguntó Moonbin y Dongmin sintió que su estómago caía por las palabras sucias que salían de su boca.

Puso su mano izquierda sobre el muslo de Moonbin, y utilizó la otra para envolver el pene de el contrario.

Una de las manos de Moonbin descendió sobre Dongmin y lentamente guiar sus manos arriba y abajo, mostrándole a este mismo cómo se hacía.

"Tómalo con tu boca y cubre el resto con la mano."

Dongmin obedeció y fue sorprendido por la forma en que la polla suave de Moonbin se sentía contra sus labios, y luego en la boca.

"Mierda." Moonbin respiró y miró hacia el techo por un momento.

Dongmin cerró los ojos y pronto encontró un ritmo entre su boca y su mano. Moonbin era pesado y grueso, y Dongmin se aseguró de chupar la punta roja, al igual que Moonbin había hecho con él.

La mano del más alto llegó a enredarse en el pelo suave de Dongmin y lo guió. Luego sostuvo su cabeza constante mientras se levantaba correctamente y comenzó tirándolo hacia su boca.

"Mírame mientras me la estás mamando."

La voz de Moonbin era ronca y Dongmin no podía hacer otra cosa que escucharla. Miró a Moonbin con los ojos vidriosos mientras seguía chupando.

"Mierda, métela lo más profundo que puedas."

Dongmin abrió su boca lo más que pudo y tomó la polla de Moonbin hasta que sintió el pincel de su punta contra su reflejo nauseoso.

"Buen chico." Moonbin elogió y Dongmin se inclinó hacia su toque, orgulloso de sí mismo por agradar al opuesto.

Ahuecó las bolas de Moonbin y dejó que el chico mayor se fuera en su boca, literalmente, para que se tragara todo de él.

"¿Todo bien?" Preguntó el mayor y levantó la barbilla de Dongmin hasta mirarlo. Dongmin asintió y envolvió sus dedos alrededor del eje de Moonbin otra vez, decidido a hacer que se viniera.

"Voy a... tienes que dejar..."

"No quiero." Dongmin respondió y miró a Moonbin mientras lo tiraba fuera.

"No creo que quieras que me vaya en tu boca."

"¿Por qué no?"

"Debido a que no serás capaz de tragarte todo y debes hacer una investigación sobre la cantidad de calorías."

Dongmin pasó su lengua por los labios y asintió con la cabeza, pidiéndole a Moonbin si se podía venir en su rostro. Moonbin se sorprendió de la proposición, pero lo hizo de todas formas. Se vino en toda la cara de Dongmin, en la mejilla, la frente, en todas partes.

Después de que el castaño retiró el semen de los ojos de Dongmin, los abrió, parpadeando. Moonbin maldijo, porque los ojos de Dongmin con semen en su cara y rojos, y sus labios carnosos eran absolutamente increíbles.

"¿Fue bueno?"

"Sí." Dijo Moonbin y tan pronto como Dongmin se puso de pie, deslizó su mano derecha en sus pantalones, la otra apoyada en su cadera.

Le tiró rápidamente e hizo a Dongmin venirse en un lapso de dos minutos.

"Parece que la oración no es la única cosa que sabes hacer de rodillas." Moonbin observó mientras se limpiaba la mano, y Dongmin se mordió el labio.

"Probablemente deberías llamar un taxi."

Dongmin asintió y buscó el número en su lista de contactos. Llamó a la compañía y rápidamente se puso su chaqueta después de que la había colgado.

Moonbin lo acompañó hasta la puerta de entrada, y le recordó hablarles a sus padres acerca de la fiesta de Año Nuevo.

Dongmin llegó a casa a las nueve y le dijo a sus padres que no durmió donde Miyeon, porque había olvidado unas cosas. Le creyeron, por supuesto.

Se acercó a ellos para hablar sobre la fiesta al día siguiente, cuando se encontraban en la mesa del desayuno y su padre había abierto el debate para hacerles saber que iban a salir al día siguiente.

"Uh, ¿puedo preguntarte algo papá?" Dongmin preguntó mientras cogía su panecillo.

"Um... ¿Me preguntaba si podía quedarme en casa para Año Nuevo? Escúchame por favor. Tengo un poco de trabajo extra para hacer de crédito en álgebra y Sanha está lanzando una fiesta de Año Nuevo. Y me ha estado yendo bien en la escuela, por no hablar de que tengo dieciocho años".

Su padre lo miró y Dongmin contuvo la respiración para el veredicto. No estaba seguro de cómo su familia iba a reaccionar.

"¿Qué piensas tú sobre esto, cariño?" Su padre le preguntó a su madre.

"Creo que tiene razón. Quiero decir, le ha estado yendo bien en la escuela y está bastante grande, puede cuidar de sí mismo y sus amigos".

"Está bien. Puedes quedarte en casa, pero si veo algún cambio en tu comportamiento o en la escuela, te quitaré el coche." Su padre advirtió y Dongmin sonrió.

"Gracias. Ah, y una cosa más. Las camareras no tienen que venir el día 31 y primero, porque voy a estar donde Sanha de todas formas. Solo por si acaso."

"Por supuesto que no van a venir."

Dongmin sonrió aliviado y terminó su desayuno rápidamente para que pudiera correr escaleras arriba a su teléfono.

Abrió WhatsApp (Jinwoo lo había instalado por él para que pudieran hacer un grupo) y escribió un mensaje para los otros siete miembros.

Dongmin: ¡Puedo hacer la fiesta en mi casa el miércoles! :)

Jinwoo: ¡FUCK YEAH!

Myungjun: ¿Por qué?

Dongmin: Les dije que iba donde Sanha.

Sanha: :))

Jinwoo: ¿A quién invito?

Dongmin: Todo el que quiera venir

Jinwoo: ¿Nadie de tu escuela?

Dongmin se mordió el labio y decidió que no quería que nadie de su escuela supiera.

Dongmin: Solo Sanha, Myungjun, Sunwoo y Chaewon.

Chaewon: :*

Sunwoo: ¡Yay! :D

Jinwoo: ¡Entonces voy a enviar a todos un texto compañero!

Jinwoo adjuntó un emoticón chistoso y Dongmin se echó a reír, antes de que cerrara su teléfono y se acercara a la mesa. Tenía un poco de trabajo extra por hacer.

Mientras resolvía ecuaciones no pudo evitar sonreír al pensar en la fiesta. Finalmente, se sentía como un adolescente normal que era divertido y tenía amigos que realmente les gustaba por ser quién era y no por su dinero. Le encantaba.

¡Gracias por leer! Si ven algún error ortográfico o de nombre pueden decirme.