🐻Capítulo 23🐻
Jungkook dormía plácidamente hasta que unos brazos rodeando su cintura los despertaron. Era Taehyung, había llegado muy tarde del trabajo.
-Ya es tarde –Dijo el castaño con voz soñolienta.
Taehyung no respondió, simplemente se acurruco junto a su pareja para luego cerrar los ojos sin dormirse del todo.
-Taehyung –Llamó - El contrario respondió con un quejido para que el menor procediera a hablar- Estoy algo preocupado por soobin.
-¿Por qué?- su voz se escuchaba ronca y cansada- ¿Ocurrió algo?
Jungkook se acomodó de mejor manera para estar frente a frente con su esposo.
-Me contaron que últimamente ha estado muy inquieto, además no se puede concentrar, se distrae por cualquier cosa y …. Habla solo.
Kim suspiro pesado. - Es algo preocupante –No pudo seguir hablando porque su marido lo interrumpió.
-Yoongi me dijo que tal vez sean inicios de algún trastorno.
-No se qué decirte.
-No quiero que lo internen, Taehyung, lo tendrían que medicar y no se ….
-Deberíamos llevarlo para que lo revisen, tal vez solo está haciendo eso para llamar la atención.
-Espero que sea por eso.
-Muy bien. –Suspiró Hoseok mientras miraba al pequeño – Soobin tus papis me contaron de qué tiraste la cuna de tu hermano ¿Eso es verdad? –el infante sentía que Hoseok lo estaba regañando así que solo asentía con su cabeza agachada - ¿Qué hablamos la última vez viniste?
El mayor no lo estaba regañando, solamente quería que el menor se diera cuenta de su error.
-Dijiste que tendría que tratar de controlarme –susurrando – Pero no fue mi culpa.
-Pero soobin, fuiste tú quien empujó la ….
-Lo hice porque ellos me lo dijeron.
Hoseok se quedó perplejo, no sabia que decir.
-¿Cómo soobin? No comprendo.
-Me dijeron que tenía que empujar, pero no lo hacía y me empezaron a decir cosas feas y no quería más y lo empuje. –Estaba hablando con un tono paranoico y eso asustó al mayor. El dialecto del menor era algo raro.
-¿Y qué te dicen?
-Me dicen que nadie me quiere, que debería irme y que soy un estúpido estorbo, pero después viene mi mejor amigo para darme ánimos.
-Está bien, déjame hacerte una pregunta más –Hizo una pausa - ¿Has visto algunas cosas raras?
-No. –mintió, había visto cosas extrañas, Yeonjun le decía que no eran reales, pero él las veía ¿Cómo es que Yeonjun no las veía?
-Papis, no me den más esas pastillas feas. –Reprocho Soobin sentado en la mesa junto a sus padres y hermano menor.
-Debes tomarlas, soobin, te hacen bien para … curarte. –Dijo Taehyung con un tono bajo.
-Pero no estoy enfermo –El menor notó que su papi Kook tenía los ojos llorosos y su nariz estaba colorada. - ¿Papi estuviste llorando?
-No mi amor, come que se te enfría la comida. –en realidad sí había llorado. El saber que su hijo tenía un trastorno y nada más por no haberle puesto atención necesaria lo hacía sentir culpable y eso le generaba un enorme cargo de conciencia. Taehyung no se quedaba atrás, se sentía igual de destrozado que Jungkook, su mundo logró desmoronarse por completo cuando al pequeño le diagnosticaron el trastorno.
Todos estaban en silencio. El ambiente era algo tenso e incómodo, pero una dulce y tierna voz, terminó con el silencio y la mala tensión.
-B.. Binnie .. –Dijo con dificultad. – ¡Binnie! –repetía feliz, alzando sus bracitos.
-Kookie, su primera palabra –dijo Kook, entusiasmado a su esposo quien se acercó con una enorme sonrisa. –Binnie, fuiste su primera palabra.
-ese no es mi nombre –enojado al escuchar que aquella cosa no sabía decir bien su nombre.
-No, pero nosotros te decimos Binnie de cariño, él aún es pequeño.
-Ven Binnie. –Llamo Taehyung.
El menor los ignoró y se fue a su cuarto.
-Dijiste que iríamos a ese lugar pero no fuimos. –le dijo enojado a su amigo.
-Lo siento Binnie, prometo que esta noche nos iremos.
-¿Lo prometes? –agrando sus ojitos-
-Lo prometo
Soobin dirigió la mirada hacia la puerta de su habitación, que era abierta por sus dos padres.
-¿Qué pasa? –pregunto el pequeño sin interés.
-Venimos a darte tu besito.
-Dénselo a Taemin. –se dio la vuelta para darles la espalda, pero sus papás en vez de irse se acercaron y se sentaron junto a él.
-Binnie, papi Kookie y yo te queremos mucho, es verdad que le estuvimos dando más atención al bebe que a ti y lo sentimos. – acariciando la espalda de soobin.
-Lo sentimos, bebe, estuvimos mal, te prometemos que de ahora en adelante le prestaremos la misma atención a los dos.
El menor se dio vuelta para ver a sus papis con los ojos llorosos y por instinto los abrazo.
-Te amamos mucho, nunca dudes de eso. –le aclaró Tae.
Luego de ese tierno momento, los mayores habían arropado al menor y luego se fueron a dormir.
“Sabes que lo que te digieron es mentira, ¿no?”
“nadie te quiere”
-cállense, hoy me iré con Yeonjun y así me dejaran en paz ustedes también.
-Soobinnie –Llamó una voz conocida para el menor.
-Yeonjunnie, que bueno que viniste –dijo alegre.
-¿A dónde habías ido hoy? –preguntó el mayor.
-Fui a un médico y me dieron unas pastillas para que las tome.
-Qué raro.
-Hoy te pregunte en la escuela cuando nos íbamos a ir y me miraste raro y dijiste que no me entendías.
-Debí estar distraído lo siento.
-Desde que tome esa pastilla no viniste, voy a dejarlas así vienes a verme cuando esté triste.
-Tranquilo Binnie, nos iremos esta noche y ya no estarás más triste.
El pequeño niñito le hablaba a la nada mientras esperaba a que sus padres se durmieran profundamente y así poder irse a ese espectacular lugar que tanto menciona su amigo.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro