Esto lo iba a hacer en Au, pero luego de ver el ultimo capitulo de Episodio G Requiem, preferí esta idea. Tio Ikki es tan lindoooo. Y hot  (?)

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Desde hace años Ikki se había hecho cargo de sus 2 sobrinos junto a su hijo, ocultos en una de las deshabitadas del archipiélago Griego que Saori arreglo personalmente para que el pudiera habitarla y entrenar a los 3 jóvenes muchachos en busca de las Cloth de Orión, Pegaso y Dragón. Tanto había pasado, pero eran recuerdos que solo podía expresar con nostalgia.

Moviéndose por los pasillos de la casa busco en su habitación una caja donde había resguardada un viejo recuerdo que sus amigos le habían dejado para sus hijos. Algo que habían empezado en sus tiempos cuando apenas estaban empezando la adultez. Una idea que tuvo Shun para guardar sus recuerdos, como si de una caja del tiempo fuera.

Ahora mismo entendía porque, eran bastantes preciados en este momento. Vaya que traía recuerdos, bastante amargos la mayoría ya que eran el recuerdo de haber fallado, quedando solo él con vida entre todos sus compañeros. Siendo Santo, Padre y tío preparando a 3 jóvenes para un destino ya marcado.

Era bastante claro que la paternidad o el solo hecho de cuidar a un niño pequeño nunca podría ser fácil.

Para Ikki los años vayan que lo habían cambiando tanto física como mentalmente. Actualmente era el Santo dorado de Leo, un hombre maduro que con solo verlo se notada la experiencia exudando de cada foro de su piel, haciéndolo intimidante ante quien no lo conociera.

Hasta se había dejado crecer la barda, aunque de una forma más sutil a lo habitual. 

En las páginas de esos 3 libros llenos de fotos que abarcaban 5 años donde el, sus compañeros, prácticamente hermanos, habían instalado una vida tranquila y cotidiana, esperando descansar de todos los encuentros bélicos que estuvieron enfrentando desde muy temprana edad, y ninguno se arrepentía de haberlo hecho.

Dejando sus pensamientos de lado, Ikki sujeto los cuadernos, Llevándolos juntó con él con la intención de entregárselos a los jóvenes a su cargo.

Más específicamente sus 2 sobrinos. Lo más seguro es que a casi 10 años que empezó a custodiarlo ninguno debería tener el mayor recuerdo de sus padres debido a que rara vez lo había escuchado hablando de ellos, más bien, la única vez que los escucho tocando el tema, eran ellos pensando en obtener sus armaduras y que pasaría después, dispuestos a obtener un destino como Santos, a pesar de que supieran que actualmente el santuario estaba casi inactivo.

Ni siquiera Saori estaba allí, ella se había quedado en Japón, usando el poder político y económico que tenía tras ser adoptada por Kido para ejercer su labor de Athena de otras formas.

Era lo correcto entregárselos.

Vaya que la paternidad lo había ablandado mucho. De adolescente siempre fue distante con sus compañeros, un completo lobo solitario que para su desgracia o fortuna es un carácter que su hijo heredó, pero teniendo una completa nobleza y bondad que este mismo no admitía con palabras.

La última vez que los vio estaban entrenando el control de su cosmos, ya habiendo terminado los 3 habían entrado para cambiarse la ropa de entrenamiento por una más normal.

- Ryuho. - Le llamo. El joven de cabellos negros se volteo hacia la voz de su tío, residiendo lo que este le entregada. - Uno es tuyo, el otro es de Koga. Mis hermanos junto conmigo lo hicimos hace unos años, antes de que nacieran.

Le tomo solo unos 3 minutos terminar de analizar la situación, mirando los objetos en su manos, sonriendo con cierta nostalgia.

- Muchas gracias tío. - Sin penas ni remordimiento, el joven Ryuho se atrevió a abrazar Ligeramente a su tío, dejando a este incómodo pero a la vez agradecido. Acariciando el cabello del menor por un momento.

Le recordaba tanto a Shun por momentos.

- Ya niño que son simples fotos. Ve a entregarle el suyo al burro con alas junior. Luego me encargo de ti.

- Jajajaja. Ya. Iré, creó que debía tener unos 5 años cuando me separé de ellos. Deben ser viejos.

- Lo ustedes guardo para entregárselos. Sus padres eran mis compañeros después de todo. - Y dicho esto, haciéndose el desinteresado se fue por dónde llegó. Dejando a los chicos con la idea de verlo después.

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- Vaya... - Koga sostenía el libro en su mano. Notando como además de las fotos cada uno venia con cierto mensaje y descripción. Sonriendo al ver a sus 2 padres. Había bastantes fotos de el siendo un debe, cosas que a duras penas permanecían en su memoria, más haya de la imagen de sus padres.

- De esto no me acordaba. - Nicolás, hijo del actual Santo de Leo, señalo una de las fotos donde el estaba junto a Koga y Ryuho con el Santo dorado de Sagitario, Aioros.

El era el mayor de los 3, aún que solo por 2 años. Teniendo 16 y 14 respectivamente.

Señalando a otra parte se veían una foto de los 3 jugando con arcos y flechas de juguetes.

- No recordada lo cercano que éramos a toda la orden dorada de Athena. Prácticamente nos trataban como a sus sobrinos. - Hizo saber, los 2 Menores buscaron en su mente pero apenas tenían recuerdo. Solo reconocían a sus padres, ya que ellos que fueron los santo de oro de Leo y Capricornio.

- Los 2 tuvimos 2 papas, he Koga. Jajaja. - Muchas de las fotos Iban desde antes que nacieran. En muchas fotos del álbum de Ryuho se veía a una mujer parecida a su padre que no era capaz de reconocer.

Muchas fotos la mostraban cercana a ellos 2, hasta que un momento después se percató de que ella lo dió a luz. Habiendo un mensaje agradeciéndole por eso.

- Corrección, Ryuho tiene 3 padres. Jajajaja.

- No te burles. - Nicolás reprendió. - Es solo algo normal. Cómo los tíos Shura y Shiryu no podían tener hijos juntos, ella los ayudo para que Ryuho naciera.

- Shunrei.... Se llama. Me preguntó si estará sana y salva.

- Tus padres si que tenían imaginación para los nombres. Todos suenan similar. - Apoyándose sobre su mano con mucha pereza Koga menciono, buscando en el suyo un recuerdo más cercano de sus padres, Aioria de Leo y Seiya de Sagitario.

Al encontrarlos noto lo felices que se veían juntos. En algunas lo tenían en sus brazos. Notando un mensaje bajo una foto de los 3 juntos.

Agradeciendo el día que lo adoptaron.

- Me pregunto si habrán hecho esto con la intención de entregárselos. - El hijo de Ikki volvió a hablar. Acercándose a los 2. - Tienen mensajes muy lindos, se nota que eran para ustedes.

- Tío Ikki dijo que los empezaron a hacer antes de que naciéramos.

- Supongo entonces que estaban previendo un destino posible. - Sonriendo para si mismo Koga no despegó la mirada de una página, donde de pequeño este estaba sobre la armadura de Leo usando su casco. Debería tener unos 3 años.

- Se preocuparon bastante entonces. - Eran álbumes bastante grandes y llenos. Fotos que iban desde personales, ellos juntos, anécdotas, mensajes, todo hecho para ellos 2.

- Y pensar que mi padre apenas me regaló un teléfono. - Nicolás Ironizo. Los 3 rieron con fuerza al este decir eso. Sin saber que Ikki estaba parado cerca de ellos. - Ahora que lo pienso creo que nunca le pregunté por mi madre. Aprovecharé y le diré  luego.

El resto de la tarde los 3 se quedaron rememorando todo lo allí guardado.