21 ❧ Última vez
Dedicated to yonminkookvhope
Ojalá te guste ;)
Cuando las cosas comienzan a complicarse. Cuando el clímax se asoma, apoya la oreja sobre la puerta para oír el mundo celestial y luego entrometerse en el universo que conocías.
Solo que... Dianna Warner poseía patrimonios que sedientos y codiciosos como JungKook anhelaban. La cuenta regresiva seguía su curso, pues, faltaba una semana para que pudieras heredarlo todo.
Fuiste a su hogar una hora antes de que la embargaran. Querías saber más de ella, después de todo, esa mujer había sido igual que tú. La edad, la contextura física, algunas facciones. Por un momento, temiste que el difunto tutor de JungKook te hubiera escogido por la similitud, y Jeon JungKook hubiese continuado con el dichoso plan.
El lugar era ostentoso, no se podía esperar menos de la familia rica y productora de tecnologías medicinales multinacional. Dianna era muy parecida a ti: no creía en las bodas, ni las cadenas, ni cualquier otra cosa que interviniera con su propia libertad, aún si su padre se lo impidiera.
De la madre no había paradero, solo eran su padre Demetrius y ella, Dianna.
Aún era temprano y cargabas con un deber. No ibas a irte con TaeHyung porque, en primer lugar, te habías encariñado con ser Dianna. Y también estaba JungKook. Y la empresa, y toda una vida que voltearía tu postura de perdedora.
꧁ JungKook ꧂
No recordaba la última vez que había hablado con Penny de un modo tan íntimo. La castaña era tan preciosa como alguna vez Julia fue. Daba mala espina entrometerse en su camino, sin embargo, Penny era de las mejores.
Jeon JungKook era todo una joya bañado en dinero y lustrado en sensualidad. Lo tenía todo, o por lo menos, cuando su noona consiguiera su ambición, lo tendría. Sin embargo, algo en su pecho se oprimía cuando la recordaba.
Encima le debía a Penny y era un mal momento para devolver favores.
__ Huyes como rata a Europa y creíste que no iba a saberlo__ espetó con la ira floreciente en su garganta, al teléfono.
__ No soy estúpido, Jeon. Pero parece que tú lo eres, en efecto__ se oyó del otro lado la voz de TaeHyung.
El golpe de histeria había penetrado el cuerpo de JungKook mucho atrás y sus descargos de nerviosismo se volvían frecuentes.
__ Te están buscando__ murmuró, como si estuviese analizando una gravedad muchísimo mayor a la conocida__. E iniciarán una investigación. Si no dan contigo, probablemente sí conmigo, y para entonces no tendré defensa.
En parte era cierto. No habría sido ninguna ciencia localizarlo al mismísimo Jeon JungKook luego de una revuelta minuciosa sobre los últimos rastros que Kim TaeHyung dejó en América.
Pero por otra parte, aún si existieran las causas, no habían pruebas físicas incriminatorias en su contra. Además, JungKook contaba con un gran respaldo, uno muy grande. Esa era la fiscal Penélope Richter, o Penny, para él.
__ No escupas para arriba__ advirtió TaeHyung, casi divertido.
__ No me digas lo que tengo que hacer. Ya bastante tengo con este asunto__ escupió, con la mano tensa al móvil__. Si hubieras seguido el plan al pie de la letra, ahora no estarías en apuros. Vamos, Kim, puedo salvarte.
La línea se mantuvo en silencio durante varios tortuosos segundos. JungKook comenzaba a escandalizarse furiosamente. Su pierna derecha subía y bajaba frenéticamente y sin detenimiento. No era la persona más paciente y menos en semejante estado.
__ Te trae sin cuidado, ¿no?__ indujo como si lo pusiera a prueba__ Después de todo, no hay razones consistentes que involucren una orden judicial. Tú quieres que me quede por ella.
Lo estaba analizando. Para Jeon fue un golpe de amenaza en el centro de su pecho. Había perdido el aliento por un instante, pues, ni él mismo se creía lo que hacía.
__ Sí... ¿te das cuenta que todo se fue a la mierda por tu estúpida incidencia amorosa? Estás mal de la cabeza__ emitió TaeHyung del otro lado, con la exasperación hirviendo en sus palabras.
__ No__ murmuró JungKook con muchísima dificultad.
Sabía que era cierto. Que había perdido demasiado desde que se metió con ella. Que, sin hablar mal y pronto, había perdido la conciencia. Que había puesto en juego la prevalencia de TaeHyung.
__ ¿Ah, no?__ retó.
__ ¡No!__ afirmó encolerizado, aunque comenzaba a sospechar que era una falacia para convencerse a sí mismo.
Su pierna cabalgaba con mayor rapidez y su mano se aferró con fuerza al brazo del sillón. Se sentía débil y precoz con tan solo pensarla.
No, no podía ser.
__ No quieres que me vaya porque temes que ella acepte fugarse conmigo__ continuó TaeHyung, con una sonrisa que JungKook rastreó.
__ ¡No, joder!
__ Pero si la conocieras, no actuarías como un perro histérico con la preocupación de perder a su dueña__ agregó triunfante.
A Jeon JungKook no le gustaba perder, no obstante, cuando se trataba de su noona, acostumbraba a pegar la oreja en la almohada con un cargo de conciencia infinito e irremediable, padeciendo la incertidumbre de la derrota.
Encendió otro cigarrillo en sus labios y apresuró una calada. El efecto del tabaco remediarle duró muy poco.
__ Te estoy pidiendo un favor y te estoy ofreciendo una recompensa por ello, Kim__ atenuó JungKook, eludiendo lo último dicho por TaeHyung.
Estaba encolerizado y necesitaba una respuesta en aquél instante. O en otras palabras, necesitaba que se cumpliera lo que deseaba. Pero sus esperanzas se verían derrumbándose.
__ No será a tu placer, Jeon__ admitió finalmente del otro lado__. No hoy. Suerte__ dijo, antes de colgar.
No era algo que sucediera a menudo. JungKook solía salirse con la suya, parecía disfrutar la vida de aquél modo, en sus propios términos.
Con la ira carcomiéndole la piel, arrojó con todas sus fuerzas el móvil y observó (casi en cámara lenta) cómo el aparato se resquebrajaba.
«Estás mal de la cabeza.»
¿Lo estaba? En caso de que fuera cierto, ¿se dejaría estar?
Tenía los días contados. Iban a investigarlo y debía contar con Penny Richter. La mayor incógnita sería la retribución que luego le pagaría a ella.
꧁ JungKook ꧂
No esperabas que JungKook se presentara en tu nuevo hogar, sin mencionar palabra sobre lo ocurrido. Kim TaeHyung había adelantado su vuelo para las últimas horas de la tarde y JungKook te llevaría personalmente.
No comprendiste de dónde había nacido tal actitud.
Allí estaban, en un punto lejos del aeropuerto. En un principio desconfiaste, hasta que fuiste capaz de divisar una limusina antigua y sofisticada.
JungKook no dijo palabra alguna. Bajaste del automóvil y caminaste con cautela hacia el lujoso carro, escoltado por dos hombres. Uno de ellos se encargó de abrir la puerta central y cruzaste.
En efecto, TaeHyung descansaba sus músculos sobre la comodidad del asiento. Sonrió al verte y se apresuró a tomarte de la mano.
No aguardaste ni un otro segundo. Tus labios estrechaban los suyos e imaginaste cómo hubiera sido tu vida a su lado.
__ Tae, lo siento__ susurraste, sentada sobre sus muslos, con un par de lágrimas corriendo por las mejillas.
__ Lo sé, no hay nada que lamentar. Solo prométeme que buscarás y encontrarás lo que deseas__ dijo, enrollándote con sus brazos.
Asentiste muchas veces y volviste a besarlo.
Se iba para siempre. Se fugaba de tu propio universo.
__ ¿No podías esperar unos días? Pronto seré quien presida Warner Corporation y no estarás allí.
__ Me temo que mi suerte ha volteado. Pero sé perfectamente que lo harás impecable. Confía en ti... Dianna Warner.
Sus cabellos castaños se deslizaban perfilados sobre su frente. Era terriblemente sexy al igual que cuando se conocieron.
__ Gracias.
__ Gracias a ti__ repuso. Un brillo en sus ojos se asomaba con avidez__. Eres importante. Y el desquiciado de JungKook está demente. La sociedad sigue creyendo esas idioteces del hombre como autor del primer paso. Pero él es una persona que teme y quizás... puedas hacerlo tú.
Era cierto y completamente real. Quizás simplemente debías atreverte. Quizás simplemente él debería dejarse llevar por tu atrevimiento.
__ Eso haré.
Hi peopleeeee (ay, me siento la profe de inglés🤣).
Me tarde una eternidad, ya lo sé y lo lamento en serio. Pero bueno, estoy acá otra vez.
Espero que hayan disfrutado hasta acá porque se viene lo peor. Quedan nueve partes aproximadamente y algún que otro especial. No están escritos, pero esa es mi idea general. Sí... se viene lo peor (música de suspenso). Jajajaj bueno, va a venir de a poco.
Espero que estén bien y recuerden que pueden dejarme mensajes acá o donde quieran si desean alguna dedicación (todavía tengo algunos usuarios en fila).
Besos, gente preciosa.
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