💙Capítulo 4-Boda💙
¡¿En qué jodida cabeza cabía que la boda realizada en el palacio azul de Corea del Sur era íntima, reservada y cero ostentosa?!
Jimin lo veía y no lo creía. Había cerca de doscientos invitados cuando llegó a las puertas, su padre sonreía gustoso al recibirlo con un abrazo antes de entrar a la sala nupcial en donde se tomarían fotografías con los invitados. Namjoon lucía más radiante que nunca porque su único hijo se estaba casando con el hijo heredero de su mejor amigo.
—Estoy tan feliz, Jimin —dijo Namjoon, abrazándolo fuerte—. Jungkook es un joven excelente. Sé que te hará feliz, hijo.
Jimin sonrió, sintiendo una punzada de culpa en su corazón. Su padre no sabía la verdad. No sabía que todo era una farsa, una mentira ante la sociedad para que cada uno de ellos cumpliera con sus objetivos.
—¿Nervioso? —preguntó Namjoon en medio del abrazo a su hijo.
—Poquito... —murmuró Jimin, intentando disimular su ansiedad.
—Jungkook ya está en la sala nupcial. ¿Te acompaño? —preguntó Namjoon.
Jimin asintió con la cabeza, caminando junto con su padre hacia la sala nupcial. Ahí se encontraba Jungkook, vistiendo un hermoso traje color negro. De verdad lucía apuesto, Jimin sonrió imaginando que ese momento fuera real. Si tan solo amara a Jungkook sería un cuento de hadas, pero todo era una mentira.
Jungkook se quedó estático al mirar a Jimin entrar a la sala, su traje blanco impecable y sus ojos preocupados tratando de disimular el shock que estaba teniendo en esos momentos. Él sabía que habían dicho que sería algo íntimo, pero Seokjin no le permitió a Jungkook realizar una ceremonia a puerta cerrada porque era su primogénito y necesitaba tener como mínimo una ceremonia digna.
Se acercó a Jimin y Namjoon, haciéndole una reverencia educada a su suegro falso y estirando la mano para tomar la de Jimin y después llevarla a sus labios.
—Que bien te miras —dijo Jungkook, su voz era distinta a otras ocasiones, era un tono invadido de sensualidad y coqueteo. Namjoon sonrió, apartándose de ellos.
Y Jimin sonrió nervioso, sintiendo un escalofrío recorrer su espalda.
—Tú también... —respondió, intentando disimular su turbación.
Jungkook jaló con suavidad a Jimin hacia el sofá de la sala nupcial. Lugar en el que se tomaron fotografías con algunos invitados. Claro que estaba siendo íntimo porque los invitados eran familiares y amigos cercanos de ambas familias, aunque Jimin esperaba que solo se hiciera algo como firmar y ya.
Pero no fue así. La ceremonia continuó, con palabras de amor y promesas de fidelidad. Jimin se sintió como si estuviera viviendo un sueño, pero se trataba de una farsa de la que ya era muy tarde para escapar. Jungkook, por otro lado, parecía tranquilo, como si realmente estuviera enamorado de él.
Pero Jimin sabía la verdad. Sabía que todo era una mentira, una farsa para satisfacer la ambición de Jeon, por eso aunque parecía ser el novio apuesto y caballeroso ideal le molestaba lo bien que mentía.
Ambos estaban parados frente a todos cuando el juez y sacerdote les hizo colocarse los anillos y decirse los votos.
—No sabía que teníamos que hacer esto —susurró Jimin.
—Imitame. —Jungkook sonrió y tomó el anillo de la caja de oro que le estaba extendiendo una niña hija de algún magnate conocido de su padre.
—Bien...
Le acercaron el micrófono a Jungkook y este comenzó con su discurso.
—Park Jimin. —Tomó la mano de Jimin, deslizando lentamente el anillo a medida que pronunciaba sus votos—. Desde el momento en que te conocí, supe que eras la persona con la que quería pasar el resto de mi vida. Prometo amarte y cuidarte siempre, en las buenas y en las malas, en la salud y en la enfermedad. Prometo ser tu mayor apoyo y tu mejor compañero de vida. Te amo más que a nada en el mundo, en mí puedes confiar porque te prometo que nunca te dejaré enfrentar la soledad, te prometo cuidar de ti, y de nuestro hijo.
Jimin sintió un mariposeo en el vientre, sus ojos se invadieron de lágrimas porque esas palabras eran un sueño, el sueño que todo padre enamorado quisiera escuchar, pero Jungkook no era el padre del bebé, tampoco su amor.
—Es tu turno —susurró al ver que Jimin seguía sin agarrar el anillo, entonces lo tomó.
—Jeon Jungkook, no recuerdo el día que nos conocimos, siempre has estado presente en mi vida de alguna manera porque nuestros padres se conocen, pero en el instituto siempre destacaste entre la multitud y yo no podía evitar mirarte. —Jimin suspiró al colocarle el anillo en el dedo con delicadeza—. Nunca te consideré un amigo, pero desde el día en el que decidiste estar conmigo me prometí ser todo lo que tú quieras que sea. Gracias por amarme y aceptarme. —Jungkook sonrió—. Gracias porque a partir de hoy seremos tú y yo contra el mundo.
Jimin terminó de colocarle el anillo a Jungkook cuando el juez y sacerdote dijo:
—¿Jeon Jungkook aceptas a Park Jimin como tu esposo para amarlo y respetarlo en la salud y enfermedad, en la riqueza y en la pobreza, hasta que la muerte los separe?
—Por supuesto, acepto —dijo Jungkook con seguridad.
—¿Park Jimin, aceptas a Jeon Jungkook como tu esposo para amarlo y respetarlo en la salud y enfermedad, en la riqueza y en la pobreza, hasta que la muerte los separe?
Jimin se quedó en silencio, mirando a Jungkook, mirando a las personas a su alrededor, mirando sus manos y tocando su vientre. Era una promesa bastante fuerte, pero si ambas partes sabían que era falso entonces no habría ningún tipo de castigo por jurar en vano. ¿Cierto?
—Acepto —contestó mirando a Jungkook a los ojos y este sonrió.
—Muy bien, por el poder que me concede la ley y el sacerdocio, yo los declaro esposos. ¡Ahora pueden sellar su promesa con un beso!
Jimin amplió los ojos. ¡¿Un beso?! ¿Jungkook iba a besarlo delante de toda esa gente? ¡Diablos! Había cámaras apuntándolos y con los flashes listos para capturar el momento. Nunca había besado a Jungkook y tampoco era como si quisiera hacerlo, aunque era bastante atractivo y codiciado por muchos hombres y mujeres. Aún así no estaba preparado para hacerlo en público, frente a sus familiares y amigos, además la fotografía saldría en la prensa.
¿En qué estaba pensando cuando acepté este trato?, se preguntó Jimin, sintiendo ansiedad y pánico. No había pensado en la posibilidad de un beso público. No había pensado en la intimidad que requeriría ese matrimonio.
Jungkook se acercó a Jimin, tomó su cintura con suavidad, acercándolo a su cuerpo. Jimin parecía sorprendido y se quedó bastante quieto mirando a su ahora esposo a los ojos mientras sus mejillas se ruborizaban. Ambas manos de Jimin estaban puestas en el pecho de Jungkook y este último con la mano libre tomó la mejilla de Jimin con dulzura, acercando sus labios peligrosamente al más bajito, Jimin cerró los ojos suspirando y paró la trompa esperando el beso en los labios que nunca llegó. Jungkook lo besó en la mejilla, un gesto suave y tierno que sorprendió a Jimin.
Jimin abrió los ojos, mirando a Jungkook con sorpresa y alivio. No había esperado que Jungkook fuera tan considerado. No había esperado que se preocupara por sus sentimientos.
—Gracias —susurró Jimin.
—No hay problema —respondió Jungkook de la misma manera—. No quería ponerte en una situación incómoda.
Jimin se sintió conmovido por la consideración de Jungkook. Tal vez, pensó, este matrimonio no será tan malo después de todo. Tal vez podrían encontrar una forma de hacer que en el proceso se convirtieran en amigos y cómplices, sin tener que sacrificar su dignidad y su libertad.
—Oh... Yo esperaba que...
—¿Esperabas un beso en los labios, Park? —cuestionó Jungkook a su oído mientras lo abrazaba.
—Creí que lo harías —murmuró.
—Puedo hacerlo. ¿Quieres que lo haga? La gente lo está esperando, nadie ha aplaudido, tampoco han arrojado arroz y pétalos. —Jimin tragó saliva, separándose un poco del cuerpo de Jungkook.
—Hazlo.
Por la gente.
Jungkook sonrió y en esa ocasión besó los labios de Jimin con lentitud y habilidad, Jimin correspondió el beso de la misma manera. Ninguno de los dos parecía torpe, era como si sus labios estuvieran destinados a bailar juntos. Encajaban a la perfección. Escucharon los aplausos de todos los presentes y un par de chicas les lanzaron arroz y pétalos de rosas blancas alrededor.
Los invitados sí que estaban esperando el beso que sellaba su amor, su falso amor.
La cámara capturó el momento, y los flashes iluminaron la sala. Jimin y Jungkook sonrieron, fingiendo felicidad y amor, mientras en realidad solo estaban jugando un papel.
Durante su primer vals de pareja reían con torpeza, aunque Jungkook tomó las riendas de la situación brindándole seguridad a Jimin al mismo tiempo que le hacía comentarios como:
—Imagina que soy el amor de tu vida, un sueño para muchos, una realidad para Park Jimin.
—Gracias por prestarte a esto, Jeon.
—Encajas con el perfil que mi padre acepta para ser mi esposo. Míralo... —Ambos se giraron para ver a Seokjin, quien estaba riendo en la mesa junto a sus amigos y Namjoon—. Está contento por nuestra boda.
—Yo creo que está contento porque cree que me amas y porque piensa que será abuelo... Me siento mal por nuestros padres.
—¿Ah sí? Yo no, solo piensa en un destino alterno —decía mientras bailaban.
—¿Qué clase de destino?
—Uno en el que tengas que sobrellevar el embarazo solo, siendo blanco de críticas por ser padre soltero. Y un mundo en el que yo soy obligado a casarme con alguien que no amo. —Tomó la mano de Jimin haciéndolo girar en la pista de manera sublime, después lo hizo regresar cerca suyo tomándolo de nuevo por la cintura.
—Pero Jungkook, tú no me amas. ¿No es lo mismo?
Jungkook sonrió.
—¿Sabes Jimin? —cuestionó Jungkook un poco antes de que terminara la canción—. Taehyung también cumple con los requisitos que mi padre aceptaría y también guardaría el secreto de una boda falsa.
—¿Eso qué significa? —preguntó cuando la canción terminó.
Jungkook acarició la mejilla de Jimin con el pulgar, mirándolo a los ojos.
—Significa, que te elegí para ser mi esposo falso, te elegí para casarme contigo.
Jimin se sintió sorprendido por las palabras de Jungkook. No había esperado que él confesara que lo había elegido a propósito. No había esperado que Jungkook mostrara un lado tan... ¿Honesto?
—¿Por qué? —preguntó Jimin confundido.
Jungkook sonrió de nuevo.
—Eso es algo que solo yo sé, por ahora —dijo, inclinándose hacia Jimin—. Pero te prometo que no te arrepentirás de esto.
La música comenzó a sonar de nuevo y Jungkook tomó a Jimin para bailar otra vez. En esa ocasión la atmósfera era diferente porque era una música más movida y algunos invitados ingresaron a la pista de baile para disfrutar. Al poco tiempo Jimin se sintió mareado y fue a sentarse a una mesa, mirando a Jungkook mover las caderas y disfrutando con Taehyung.
Estaba bebiendo agua cuando sintió que alguien lo veía, y ahí, en una esquina lo miró. A su amigo.
Min Yoongi.
Vestido completamente de negro, luciendo elegante, apuesto y mucho más maduro que dos años atrás. Jimin dejó el agua en la mesa y se apresuró para ir con su amigo, reencontrándose en un abrazo cálido.
—¡¿Qué haces aquí?! Creí que estabas en Canadá.
—¿No pensabas invitarme a tu boda? —preguntó indignado al apartarse del abrazo.
—Oh bueno... —Sonrió feliz—. Fue una boda bastante urgente —confesó.
—¿Urgente? ¿Por qué? ¿Por qué no me contaste que eras novio de Jeon?
—Es que todo sucedió demasiado rápido —dijo mordiéndose los labios.
—Además serás padre, tienes algo ahí adentro —Yoongi señaló el vientre de Jimin y este sonrió de oreja a oreja, Jimin asintió ruborizado.
—¿Quién te invitó?
—Tu papá, tuve que tomar un vuelo express para llegar a tiempo. —Suspiró—. Una ceremonia bastante romántica, pero sigo ofendido porque no me llamaste para invitarme personalmente. —Cruzó los brazos y Jimin bajó la cabeza.
Jungkook seguía bailando en la pista de baile y al ver a Jimin con la cabeza agachada y a Yoongi de brazos cruzados dejó de bailar para acercarse a ellos.
—Lo siento... Fui un mal amigo.
—Uno pésimo, pero ya estoy aquí. No me perdería la boda de mi mejor amigo. ¿Lo amas?
—¿Amar a quién? —preguntó Jimin alzando el rostro para ver a Yoongi.
—A Jeon. ¿Lo amas?
—Me acabo de casar. ¿Eso responde tu pregunta?
—No, no la responde.
—Cariño... —dijo Jungkook al llegar a auxiliar a Jimin—. Es hora de las fotografías con el pastel.
—Oh... Sí, vamos.
—Jeon —Saludó Yoongi.
—Min —Jungkook devolvió el saludo—. Gracias por venir.
—Claro, siempre estaré para Park. —Lo miró a los ojos—. Felicidades por la boda y por el futuro nacimiento.
—Gracias. ¿Nos vamos, Jimin? —preguntó Jungkook y Jimin asintió.
Ambos dejaron a Yoongi donde estaba, este último tomó una copa de martini preparado que llevaban los meseros en charolas, bebiéndolo de un solo trago mientras veía a los recién casados alejarse.
Mientras tanto Jimin estaba bastante nervioso, tanto que le dieron muchísimas ganas de vomitar y se fue corriendo al baño. Jungkook detrás suyo.
El rubio se arrodilló frente a la taza de baño, soltando toda la cena y bebidas, Jungkook estaba atrás de él masajeándole la espalda en señal de apoyo. Cuando terminaron el mayor le extendió una toalla para que se limpiara y lo acompañó hasta el lavamanos.
—Ese niño da muchos problemas —dijo Jungkook riendo, pero Jimin estaba llorando.
No lloraba por el vómito, lloraba porque tenía las hormonas alteradas a causa del embarazo y haber hablado con Yoongi, haberle mentido a su mejor amigo lo estaba matando. Además ya le estaba mintiendo a su padre, se sentía una escoria mentirosa.
—Jungkook, no quiero mentir —Comenzó a llorar desconsolado—. Y cuando nazca mi bebé tendré que mentirle acerca de ti...
—No lo harás. —Jungkook abrazó a Jimin acariciando su espalda—. Ya te dije, yo seré su papá falso para siempre.
—Lo siento tanto por meterte en esto...
—No me metiste en esto, oye tus hormonas te hacen sensible. ¿No quieres pastel? Es de chocolate.
—Me dan náuseas de solo pensar en chocolate.
—Entonces. ¿Qué se te antoja?
—Quiero... No quiero estar rodeado de tanta gente, yo quiero ir a casa. —Se sorbió los mocos y Jungkook suspiró.
—Entonces vamos a casa.
HASTA AQUÍ EL CAPÍTULO DE HOOOOooOoOooOoOyyyyyy!!!!!!!
Diosmiojesucristoooooooooooo JIMIN DATE CUENTA QUE NO VES LAS SEÑALES????????!!!!!
Yo en la vida soy el Jimin de esta fanfic captando indirectas🥴🤌🏻🥲
¿Ustedes ya se dieron cuenta? ¿No? Pues vuelvan a leer el capítulo en la parte del baile aldvsksjsnns
NOS VEMOS LA PRÓXIMA SEMANA LOBAS AUUUUUUUUU!🐺
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