Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

54: Secuestrado

Vimos tres carpetas con los nombres de Taeyang, Nirvana y Jin. En las primeras dos carpetas estaban los videos de Tae y lo que me contó Nirvana. Jin y yo compartimos una mirada antes de abrir la tercera carpeta con su nombre. El medio coreano soltó una carcajada y negó como si esto fuera algo increíble.

—Que hija de puta.

Abrí la boca.  ¿Esto es en serio?

—¿Planeaba utilizar esto para chantajearte también? ¿Qué iba a ganar con eso? — le pregunté mientras paseábamos por la carpeta en donde había todo tipo de fotos de Jin actuando como un cachondo sin remedio. 

Había fotos de él con chicas en discotecas, en alguna fiesta y hasta en una cama. También había una foto de él junto a Dawson sacando el dedo del medio a la cámara con la mirada seria. Me sorprendí porque Jin nunca se había visto así, es decir, siempre tenía ese aire de chico relajado, divertido y sonreía todo el tiempo. Pero supongo que las apariencias engañan y lo había aprendido de todos ellos.

—Ahí salí bien — dijo Jin escaneando una imagen sexual. Ajá, yo no quería ver que Jin había dormido con dos chicas a la vez. Me cubrí el rostro.

—¿Por qué esto me sorprende? —pregunté mirando el techo y soltando un resoplido.

—Te falta experimentar Zuli, estas atrás — dijo con algo de diversión —. Y respondiendo a tu pregunta, creo que Kimi pensaba que me iba a importar todo esto, pero se dio cuenta que iba a perder el tiempo —se encogió de hombros.

—¿No le temes a tu padre?

Volvió a negar.

—No me importa si me deshereda o me manda a Corea como castigo. A mí no me puede controlar—confesó con algo de molestia—. ¿Que se cree está loca? ¿Pensaba chantajear a todo el mundo? ¿No tiene algo más creativo?

—No sé cómo te fijaste en ella.

Se restregó la barbilla antes de responder: —Ni yo lo sé, no me gustaba tanto.

Seguimos explorando su cuenta de iCloud. Salimos buscando oro y encontramos diamantes. Kimi al parecer, estaba huyéndole a su responsabilidad de casarse con Aldiemo Martinelli por el simple hecho de que su padre había hecho algo para evitar que la policía se la llevara a la cárcel. En palabras sencillas, descubrimos que Kimi tenía que pagarle a su padre por ese favor. Y entendimos que, si hubiésemos utilizado eso de que la policía la buscaba, íbamos a perder el tiempo. Ya no habia orden de captura en su contra. También, nos enteramos de que Tomas Adrialfi, estaba bajo investigación porque encontraron documentos y cuentas fraudulentas. Sus cuentas habían sido congeladas, por lo que, no tenía dinero.

—¿Y por qué sigue en la compañía? — pregunté a Jin cuando leímos todo aquello. Volteo a verme con el ceño fruncido.

—No sé, pero sospecho que padre le está dando la mano porque son buenos amigos. Pero si ya lo están investigando no faltará mucho para que lo saque a patadas de allí.

Ahí otra razón por la que tenía que casarse con el señor Aldiemo. Su padre estaba desesperado y necesitaba dinero como fuera y qué mejor que su hija se case con un millonario. Encontramos un mensaje con la prueba de embarazo que provenía de otra persona y una transacción por cincuenta dólares a ese número. Kimi no estaba embarazada, había pagado a alguien más por esa prueba. Esto estaba potente.

—¿Qué haremos con toda esta información Jin?

Él me observó con una sonrisa amplia.

—Vamos a utilizarlo para chantajearla a ella, ojo por ojo, ¿no?

—Pero tenemos que dejar fuera todo el asunto de Taeyang y Nirvana. Además, no podemos exponer nada sobre Kevin y Soleimy porque son menores —le dije con nerviosismo —. Necesitamos eliminar todo rastro de esos videos y esa información. Que nadie pueda recuperar nada.

—¿Qué mejor que el mejor hacker de la Deep Web? —dijo. Entonces, la puerta se abrió nuevamente y por ella, entraron Dawson y Janne, ella venia sonriendo y él pues estaba ahí todo serio quizás pensando en la muerte.

Yo volví a tensarme. No me sentía cómoda con Dawson, el puntito rojo aun estaba en su camiseta blanca, tenia una expresión sombría mientras escaneaba la sala.  

—¿Qué descubrieron? —Janne dijo al sentarse a mi lado, la observé con curiosidad. ¿Cómo se conocían? Me di cuenta de que Jin caminó hasta Dawson y de pronto, le propinó un golpe en el área del estómago lo que hizo que el pandillero se doblara a la mitad e hiciera un sonido como de puerco en matadero.

Solté una risita. Janne giró los ojos como si estuviera acostumbrada a esto.

—No vuelvas a asustarla, o esto será poco— lo amenazó.

—Eres un cabrón —soltó el asesino, quejándose.

Jin tenía una mueca de molestia en el rostro, pero de repente, su expresión cambió a una divertida y me lanzó una guiñada.

—Dawson va a disculparse con Zuli, porque Dawson es un chico bueno que ya cambió —dijo con lentitud retando a su amigo. Yo me asusté. ¿Por qué Jin hacia eso? ¿No sabía que su amigo podía matarlo porque tenía un arma? El chico soltó un resoplido y se incorporó.

Lo vi girar los ojos y soltar un sonido nasal.

—Lo siento ardillita —me dijo con resignación mirando de reojo a Jin que tenía los brazos cruzados y una sonrisa traviesa —. No quise asustarte.

Yo me iba a desmayar, no podía creer esta situación. Un criminal disculpándose conmigo. Tal vez no sea un criminal y lo estoy juzgando a base de lo que vi.

Janne me abrazó por los hombros.

—No tomes en serio a Dawson, es un osito enojón porque no ha comido.

Yo levanté una ceja mirando al loco pandillero, él ignoró el comentario para sentarse en el taburete frente al computador.

—¿Dónde está el dragón malhumorado? —preguntó a Jin. ¿Por qué este chico comparaba a todo el mundo con animales?

¿Y quién rayos era el dragón malhumorado?

—Ah, Tae está amarrado en su habitación —soltó Jin con mucha calma.

Abrí los ojos sorprendida y pregunté: —¿Amarrado?

Janne me observó con culpa.

—La verdad es que logró salir de la habitación para ir detrás de ti, pero entre todos lo amarramos.

Me puse de pie temblorosa y sali corriendo en dirección a las escaleras. De tan solo imaginar esa escena me espanté. ¿Por qué amarraban a mi hermoso medio coreano?

Cuando llegué a la habitación, mi mandíbula casi toca el suelo.

Taeyang Kang estaba sentado en la silla giratoria, con una cuerda rodeando sus muñecas las cuales estaban detrás de su espalda. Sus piernas estaban juntas con cinta adhesiva gris y... ¿Por qué sus labios también estaban cubiertos por la cinta? Parecía un chico que había sido secuestrado, la imagen me alteró y entré dando largas zancadas lanzando mi peor mirada a todos los que estaban allí.

El medio coreano tenía las cejas hundidas y se retorcía con dificultad y al verme, su molestia se acentuó. Okey, estaba enojado conmigo y con todos.

—Antes de que digas algo, fue Jin y Ander — soltó Nirvana rápidamente—. Taeyang descubrió a donde te había enviado Jin y se puso como loco. Hasta le propinó un golpe a Ander —volteé a mirar a Ander. El futuro enfermero, tenía una línea de sangre en el labio.

—Soy el saco de boxeo de Tae —se quejó—. Solo quería ayudar, pero me hizo un candado de esos raros y casi muero asfixiado. 

—Y le mostré tus fotos de cuando perdiste un diente porque te caíste de un caballo — murmuró Emily de la nada, intentando esconderse detrás de una almohada.

—También nos mostró fotos de tu ex, el que te dejó porque un día decidió que le gustaban los penes — dijo Tania mirándose las uñas y levantó una ceja —. Eso no me lo habías dicho— me acusó señalándome.

Sacudí el rostro. ¡Ese no era el punto! Me acerque a Taeyang para quitarle todas esas cosas y Tania me lo impidió.

—Tania... — le dije como advertencia—. Hazte a un lado—ella negó.

Taeyang intentaba hablar, pero no se le entendía nada. Él tipo: ¡Hmhh, mmmh, hmm!

¿Ves? No se entendía nada. Ah, pero Tania sí lo entendió.

—Zuli no va a soltarte porque estas castigado. No puedes andar por la vida usando tus destrezas en karate para golpear a tus amigos, me haces sentir vergüenza —lo regañó.

Taeyang volvió a hundir las cejas.

—Hmmm, hmmm, mmhhh —parecía que estaba discutiendo con ella. Se veía tan hermoso con las cejas fruncidas, ojos oscuros y respiración agitada.

—Pues porque así somos, queremos ayudarte, pero no te dejas.

Tania se sentó en el suelo y metió algunas papitas a la boca.

Miré a Taeyang, pero él solo me miró por unos segundos y ladeó el rostro cortando el contacto visual. Estaba muy enojado conmigo.

—Dejen que lo suelte, por favor —les pedí.

—Si lo sueltas va a bajar a matar a Jin y si Dawson esta abajo, también lo va a asesinar.

Miré a Nirvana que había soltado eso de repente.

—¿Por qué?

—Taeyang no soporta a Dawson y no tienes que decirnos para saber que te asustó —me respondió. Taeyang se removió y volvió a mirarme.

—Bueno, pues déjenme a solas con él.

Todos compartieron una mirada.

—Vale, pero si lo sueltas y mata a Dawson será tu culpa — me dijo Tania en un tono duro. Emily me observó con tristeza.

—O puede que Dawson lo mate a él—le respondió Nirvana con miedo. 

Mi hermana me dio un rápido abrazo y después de asegurarme que todo iba a salir bien salió por la puerta. Taeyang y yo quedamos a solas.

Joder, había ocurrido tantas cosas en solo horas. En tan solo unas horas habíamos llegado de un concierto, presenciamos la discusión entre Tania y Taeyang, Kimi apareció con unos videos y una prueba de embarazo, mi hermana la había golpeado, me había enterado del secreto de Taeyang. Además, descubrí las razones que tuvo Nirvana para hacer lo que hizo, los chicos planificaron desaparecer a Kimi, me enteré de su objetivo e hicimos un plan muy loco con Jin. El que a su vez, me había enviado con un matón, y gracias a eso, descubrimos los trapos sucios de Kimi, ese matón se había disculpado conmigo y Taeyang había sido secuestrado por sus propios amigos. Esto era muy loco.

Me acerqué a él y le quité la cinta de los labios. Lo primero que hizo fue lamerse los labios y me miró.

—¿Dónde estabas? —preguntó enojado.

—Fui a Coral Koe a buscar a Dawson —lo vi tensarse —. Pero no me hizo nada, tranquilo. Además, ya tenemos la contraseña de —me interrumpió.

—No tenías que ir allí, aquí podías encontrar lo que estabas buscando. Tal vez no sea el mejor hackeando y puede que hasta haya cometido un error con lo de los videos, pero tú y Jin me subestimaron —me dijo dolido —. Preferiste hacer todo eso a mis espaldas, no sabes lo furioso que estoy justo ahora.

—Lo lamento.

—Suéltame—se intentó liberar de las cuerdas—. ¡Ahora!

—No puedo, Tania dijo —volvió a interrumpirme cabreado. 

—Y vas a hacer lo que ellos digan, ¿no? —me dolió el pecho, porque me lo dijo de mala gana y yo no quería que Taeyang estuviera enojado conmigo.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro