Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

✨ Epílogo ✨

[Editado, 4/06/22]

El parto de Jimin se había adelantado dos semanas, había roto fuente antes de tiempo, por lo que Emilia fue mandada a llamar inmediatamente, para que atendiera al elfo y trajera a su hijo al mundo.

Yoongi caminaba de un lado a otro con los nervios de punta, ya habían pasado más de tres horas desde que no sabía nada del elfo y de su hijo, y empezaba a perder la poca cordura que le quedaba.

─ Voy a entrar, ya no soporto más ─ estaba desesperado y decidido a entrar a la habitación donde estaba siendo atendido su esposo pero su padre lo detuvo.

─ No Yoongi, no hagas eso, si entras ahí sólo distraerás a Jimin, hazme caso, todo estará bien ─ extrañamente Darkho se encontraba relajado, como que tuviera la seguridad de que todo estaría bien y no hubiera peligro.

Cosa que contradecía a lo que se escuchaba, los gritos de dolor de Jimin se podían escuchar del otro lado de la puerta, eso solo lograba poner más inquieto al vampiro, no podía evitar pensar que algo malo ocurría.

Era imposible estar tranquilo en esas circunstancias, no saber nada y tener miles de ideas negativas de porque el retraso, era inevitable no alterarse.

Namjoon, Hoseok, Darkho y Dahyun se encontraban afuera de la habitación, acompañando a Yoongi o mejor cerciorándose de que no cometiera una locura, Emilia había sido clara cuando dijo que Yoongi no tenía que estar en el parto porque eso solo serviría de distracción para el elfo.

Mientras que en la otra habitación se encontraba Jimin junto a Yoonah, Yonhee y Emilia.

Lastima que las palabras de la doctora hayan entrado por un oído de Yoongi y salido por el otro, el vampiro era un terco de primera, nada de lo que los otros vampiros hicieron logró detenerlo.

La puerta se abrió de golpe, lo primero que pudo observar fue a su esposo con sus ojos llorosos y mirada cansada, quien al darse cuenta de su presencia extendió sus brazos llamándolo, cosa que el vampiro no ignoró y llegó hasta la cama donde se encontraba el elfo batallando para dar a luz a su bebé.

─ Yoon, no quiere, n-nuestro bebé no quiere nacer, le está costando y tengo m-miedo ─ mencionó entre llantos y sollozos buscando consuelo en el cuerpo de su amado.

Yoongi tomó su mano ─ tranquilo, ya estoy aquí, todo saldrá bien, estoy contigo ─ fueron sus palabras.

Jimin realmente no se miraba bien su rostro estaba pálido, sus ojos y nariz rojas de tanto llorar, sus labios agrietados y sus manos temblorosas, de verdad se miraba agotado.

─ Yoongi sigo creyendo que fue un error que hayas entrado, pero ya que estas aquí necesito que le des fuerza a Jimin, esto no anda bien, ya tendría que haber nacido, si sigue retrasándose tendré que acudir a la cesárea y viendo la condición en la que se encuentra Jimin no es buena idea ─ mencionó Emilia quien se encontraba colocada bajó sus piernas atendiendo el parto.

Yoongi solo pudo maldecir esto no estaba planeado.

─ Y-yoongi Hyung, te-tengo miedo, no q-quiero que n-nada le pase a nuestro hijo ─ Jimin lo miraba con pánico y miedo en sus ojos.

─ Tranquilo Jimin, hagamos esto Juntos, ¿si? nada le pasará a nuestro bebé ─ afianzó el agarre de la mano de Jimin.

─ ¡Ugh! ─ otra contracción lo hizo apretar su mandíbula, su rostro se puso rojo por la presión en su cuerpo.

─ ¡Puja Jimin! ─ grito Yoonah quien ayudaba a Emilia con su trabajo.

Jimin ya no aguantaba más, había pasado demasiado y se estaba quedando sin fuerza. Dejó caer su cabeza a la almohada, no quería volverse a desmayar ya lo había hecho dos veces y siempre era despertado de nuevo por el dolor de las contracciones.

─ Mirame, Jimin ─ el elfo lo miró con cansancio ─ tienes que ser fuerte, por nuestro bebé, puedes hacerlo, eres más fuerte de lo que piensas, yo confío en ti ─ trato de animarlo.

Mientras el dolor se expandía por toda su cadera logró asentir débilmente ─ S-si, t-tratare ─ mencionó antes de sentir otra contracción y pujar con todas sus fuerzas, sintió como algo abandonaba su interior y seguidamente escuchar un chillido junto a la felicitación de las tres mujeres presentes.

─ Felicidades a los dos, son padres de una hermosa y saludable niña ─ fueron las palabras de Emilia.

Miro hacia donde estaba su bebé y unas grandes ganas de llorar se apoderaron del vampiro al mirarla por primera vez.

Jimin no pudo contener las lágrimas de emoción y felicidad, lo había logrado, había dado a luz una niña, su niña; su pecho se sintió cálido y las primeras lágrimas se hicieron presentes.

Todo era felicidad para el vampiro y el elfo, ahora ambos se sentían completos.

─ ¿Yoongi quieres cortar el cordón umbilical? ─ preguntó Emilia, mientras sostenía a la bebé y en la otra mano unas tijeras.

Yoongi aceptó encantado, Emilia le explicó como debía de hacerlo, y él lo hizo con todo el orgullo y felicidad del mundo.

─ Quiero ver a mi hija,  yoongi tráela conmigo ─ su voz débil y decaída pero más que eso feliz.

Yoongi la llevó hacia su pareja justo como había pedido, con mucho cuidado la tomó entre sus brazos, ni siquiera le importó que su pequeño cuerpecito estuviera cubierto de sangre.

─ Mi bebé, mi luz─ sonrió enternecido y con lágrimas en los ojos, dando un besito en la frente de su bebé, quien sorpresivamente dejó de llorar al estar en los brazos de su padre.

─ Se parece a ti, Jiminie ─ dijo Yoongi mientras sonreía feliz al ver como su hija se chupaba su dedito pulgar.

─ No para nada, creo que es igual a usted ─ respondió

Y en efecto, la bebé tenía una pequeña mata de cabello color negro en la cima de su cabecita, sus orejas eran alargadas igual que las de Jimin, su piel era tan pálida como la de Yoongi y sus ojitos eran de un hermoso color azul claro.

─ Es hermosa ─ mencionaron ambos con admiración y felicidad.



🌸🤍



Se encontraba cargando a su bebita a quien habían llamado Min Tzuyu, ambos estuvieron de acuerdo en el nombre de la pequeña.

Jimin se había dormido después de alimentar a la bebé y jugar un buen rato con ella, había quedado muy cansado con la labor del parto, se tenía bien merecida esa siesta.

Dejó caer su cabecita en el hombro de su padre, era tan pequeña y ligera, Yoongi no quería despegarse de ella, quería protegerla siempre.

La pequeña olía a flores, algo que había heredado de Jimin y amo que así fuera, incluso hacia los mismos pucheros que Jimin; pero su sonrisa era similar a la suya.

pudo sentir como bostezaba, dando a entender que tenía sueño, no tardó mucho para que quedara dormida en los brazos de su padre.

Colocó con sumo cuidado a su hija a un lado de su papi y le sobo la pancita, sus mejillas regordetas, nariz pequeña y sus ojitos que se encontraban cerrados dejando ver sus largas y bonitas pestañas, sin olvidar sus puñitos que estaban cerrados y chupaba uno de ellos.

Observó con dulzura a sus dos amores quienes se encontraban tranquilamente dormidos en su cama, y solo pudo pensar en lo afortunado que era, a su vida no le faltaba nada más, ahora se sentía completo, ahora tenía una familia a la cual cuidar y amar.

El fruto que floreció de su amor es la flor más hermosa de todas.









Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro