12
No fue hasta hace un ratito que por fin se fueron los efectos de la droga, maldita heroína, era de la buena.
Me deprimí mucho porque juré que Boddah venía de regreso de la guerra, sano y salvo, sin embargo él no me escuchaba y terminaba abandonándome. Fue muy triste todo ese tema. En el refrigerador ya no quedaba comida, ni eso podía subirme el ánimo.
Con unas ojeras tremendas, en pijama todavía, salí de casa sólo a comprar comida basura. Me eché al suelo y me puse a comer como condenado. Planeo llamar a Courtney mañana para charlar y que ojalá acepte mis disculpas, no quiero que esa estupidez me aleje de mi preciosa familia.
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