
Capítulo trece
CAPÍTULO TRECE
Taehyung está creando más y más drama respecto a mí saliendo tanto y no estando en casa lo suficiente, yo le permito desahogarse pues ese sermón es solo una señal de que me extraña, está falto de cariño desde que Blue parece trabajar el triple de lo usual y aunque a él le encanta que esté tan dedicada, también le jode no pasar tanto tiempo como le gustaría a su lado.
Creo que discutieron hace unos días por eso y otras cosas, así que están algo tensos, pero lo arreglarán como siempre, su relación está llena de comunicación, por eso funcionan tan bien juntos.
Así que paso todo el día con él para que no tenga de que quejarse. Es un día ocupado para Rox, de todas maneras, los niños están en sus nuevas clases de dibujo, mis hermanas en la universidad, Jungkook seguramente está pegado como un moco a Kerstin y Sasha está en la empresa, filmando el vídeo musical de su single.
Con Yoongi, que a estas alturas no sé si ya es su novio o aún están en proceso, no lo sé, Sasha es buena acelerando las cosas y ese hombre es todo lo contrario, ojalá tengan un intermedio.
—¿Cómo van las cosas con Rox? No la veo hace unos días— Happy le gruñe— grosero, solo te estoy limpiando las patas.
—Yo tampoco he podido verla hace días. Tiene mucho trabajo.
—Y la extrañas, aw.
Sé que lo dice a manera de broma.
—De hecho, sí.
Y se asombra, como si fuese una hazaña que yo diga aquello.
—La amas, te quieres casar con ella.
—Ya te estás pasando... solo me gusta y yo le gusto, eso creo, no lo sé. Nos besamos la última vez que nos vimos y cada vez que tenemos citas solo para la prensa, se sienten como citas reales porque todo se da de manera muy natural, entonces creo que puedo decir que me gusta Pinky.
—Eso es muy bueno, Nam. Que lindo ver qué alguien despierta cosas en tí— asiento, si, es algo nuevo— dime cómo fue que te diste cuenta.
—¿De que me gusta?— asiente— Bueno, creo que fue la manera en la que me miró— intento explicarme— estábamos, bueno, yo estaba hablando sobre los niños tomando clases aparte de la escuela y Rox estaba prestándome extrema atención, me miraba bonito, creo que puedo describirlo de esa manera. Solo sentí que me arrebató el aire y me quedé en pausa, luego le pedí que me besara.
—¿Por qué no sólo lo hiciste tú?
—Mm, no, prefería que ella decidiera si quería o no tener algún tipo de contacto físico— por el tema de su inseguridad e incomodidad con los hombres, lo sentí mejor de esa manera— y me gustó mucho, hace tiempo no disfrutaba un beso, sabes, todo era tan vacío y ese momento fue diferente. Me encantó.
Sacude mis hombros y me felicita un montón de veces antes de regresar a su asiento, Happy no está muy contento con Taehyung moviéndose tan inquieto pues está intentando dormirse en su regazo.
—¿Y ya hablaron? Porque es más allá de solo un beso.
—No, no hemos hablado, tiene mucho trabajo y ya habrá tiempo para eso, por ahora, hay que alegrarse de que su carrera va bien y poco a poco despega.
—Bueno, sí. Igual me alegro mucho por tí, Rox es bonita, es amable y siempre está atenta a todo lo que haces lo que me dice que se preocupa por tí y eso es primordial, Nam. Disfruta mucho y... acompáñame mañana a la agencia, gracias, debo hacer cosas.
••••
—Hola, JaeReon.
—Hola, no te quitaré mucho tiempo, sólo me ví en la necesidad de informarte algo importante.
A las cinco de la tarde, vaya, debe ser urgente si me llama apenas sale de trabajar pues usualmente se olvida del mundo entero luego de eso.
—¿Qué ocurre?
—Tu madre está en la ciudad, la vi hace unos días y estaba con tu padre.
El corazón parece que se me detiene un segundo.
—¿Dónde los viste?
—Mi abuela tiene un restaurante en Itaewon, está muy bien ubicado y mucha gente llega porque les queda más accesible, entonces, como está corta de personal, a veces voy a ayudarla y tuve que atenderlos. Tu papá me reconoció al instante y me preguntó por tí.
—Dime que no les dijiste...
—No lo hice, le dije que habíamos perdido contacto así que no podía darles razón tuya. Tu mamá tenía muy mala cara cuando me preguntó por las gemelas y les dije que tampoco sabía, eso sí, les pregunté que hacían en la ciudad y ella dijo que quería ver a su Namjoonie. Así que, ten cuidado y que no te sorprenda si te encuentra por ahí.
—Bien, gracias, JaeReon.
—No es nada, adiós.
Cuelga, maldigo en voz baja, mientras entro al ascensor— configurado recientemente para que nadie llegue a nuestro piso— le envío un mensaje a mis hermanas, alertándolas de esto para evitar encuentros, las probabilidades son pocas, pero si me encuentra a mi, encuentra a las gemelas y no quiero eso.
Ellos no saben que Moon tiene hijos.
Bajo hasta el piso de Rox, sé que ya ha llegado porque me llamó e introduzco el código— ese que dijo que cambiaría y nunca cambió— entro y salta del sofá para recibirme, se ve contenta y yo voy a arruinarle la felicidad con esta noticia.
—Mis padres están en la ciudad y me están buscando— suelto sin más.
Deja de sonreír.
—¡¿Qué?!
—Eso, me lo acaban de decir.
—¿Y para qué te buscan? Están locos— me jala hasta el mueble, allí caemos ambos y me como una de las galletas que están en el platito, pensando— ¿Y si te van a pedir dinero?
—¿Tú crees? Es lo más lógico, supongo.
—Si es por eso...
—Debe ser por eso.
—No vas a darles ni un solo won ¿Qué se creen?— sirve leche, me da otra galleta ella misma— habla con Harrison, si ellos se acercan, que él se encargue.
Pues, Harrison los odia más que yo, él probablemente se irá a buscar a Kendo y lo obligará a hacer sus cosas legales para solucionarlo.
—Si, eso tengo que hacer— suspiré, echándome hacia atrás en el sillón— no sé porqué entré en un pequeño pánico, supongo que la idea de verla me asustó— me sincero— yo no puedo verla, no sé cómo actuaría.
—Nammie...
—¿Y si enloquezco otra vez?— continúo diciendo— ¿Y si las pesadillas regresan? No lo soportaré.
No quiero sentir que mi cuerpo quema otra vez cuando claramente nadie está apagando sus cigarrillos en mi piel.
—No vas a verla y nada de eso pasará— toma mis manos, ni siquiera me di cuenta de que temblaban por el miedo— vas a seguir igual de bien como hasta el momento y no dejarás que esto arruine todo tu proceso de superación o el de las gemelas. Deja de pensar en eso.
Trago saliva, aceptando esas palabras y esperando que realmente sea de esa manera.
—Sí. No sé qué me pasa.
—Asustarse está bien, no te preocupes.
Besa mi hombro y aplasta su mejilla contra este luego, acaricia brindándome confort y veo la mata de cabello rosa. Sonrío perezoso.
—Gracias. Te extrañé hoy.
No me mira porque seguro se ha puesto roja, la conozco y palabras como esas le ocasionan vergüenza.
—También te extrañé y por eso pensé mucho en tí mientras trabajaba. Entonces lo primero que hice fue llamarte en cuanto me desocupé.
Y algo así me avergonzaría a mí.
—¿Me sigues dando de comer en la boca? Se sintió bien.
—¿Es en serio Kim Namjoon?— pregunta, risueña—Lo haré si me ayudas a aplicarme el tinte más tarde.
—Vale, haré lo que pueda.
—Sabes que... compre dos cajas extras...
—No. No me veré bien con el cabello rosa.
Me susurró algo al oído que me subió los colores a la cabeza.
—¿Al menos lo pensarás después de eso?
—Tal vez.
Wattpad al fin me dejó cambiarle el nombre de usuario a la cuenta secundaria de RedKuin
Pueden ir a seguir a BlacKuin, allí también subo historias y ahora mismo estamos con una historia interactiva donde ustedes deciden y yo escribo según sus elecciones.
Besitos rojos ❤️
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