007: Código de amigos.
Había entrado en una depresión profunda hace una semana. Ann no respondía mis llamadas ni mensajes, hasta fui a su casa los siete días seguidos y jamás abrió la puerta por más que golpeara y suplicara por entrar.
Ella tenía su orgullo.
Eso estaba mas que claro.
Bueno quizás exageraba, pero sabía que algo me hacia falta. Extrañaba a Pinky más de lo que debía hacer y se supone que debería sentir aquello por Elvis, que no había podido verlo estos siete días, 168 horas, 10.080 minutos, 604.800 segundos.
Pero era Ann la que predominaba en mi mente, extrañando cualquier cosa de ella, hasta el más mínimo detalle.
Echaba en falta su sarcasmo. Molestarla hasta que la hiciera voltear sus ojos y golpearse contra algo. Escucharla reír mientras le daban leves taldos a su cuerpo. Hasta extrañaba esa particular forma que tiene de mover su nariz cada vez que se avergüenza de algo.
¿En que clase de monstruo me había convertido? ¿Que clase de fenómeno había creado Ann? ¿Desde cuando me había convertido en un fracasado del amor?
Y la pregunta del millón, ¿Que demonios hacia un día Sábado, viendo "El diario de Noah"?
Definitivamente esto me estaba superando. Estúpidas películas cursis. Mire mi móvil una vez mas, esperando que hayan pasado algunos minutos. Pero seguía en la misma hora. Suspirando fuerte, le puse pausa a la película donde la tipa estaba llorando tragicamente en su auto leyendo las cartas que Noah le había escrito. Cursi y cliché.
Basta de ñoñadas.
Es sábado y mi cuerpo lo sabe.
Busque en mis contactos el número de Ryan y le envíe un mensaje.
Para Ryan✌ :
tas ocupado? :p
Espere unos minutos mientras intentaba ponerme mis zapatillas.
De Ryan✌:
nu m vas a kreer, tngo una sitha
Para Ryan✌:
KHEEEEEEEE
OFKDLFKSLFKS taz de koña
De Ryan✌:
nu pndejo, koncgui una sitha
Para Ryan✌:
cn kien?? thu muñeka inflable odkkjjdhj :D
De Ryan✌:
nu idiotha, kon una xika de vrda
Para Ryan✌:
d tdoz modoz kien acpto salir kon tigo? db zer ciega o algo :s
De Ryan ✌:
d hexo ez bastant atraktiva x la fotho ke me embio se iama ann
¿Ann? ¿No estará hablando de mi Ann? Por que existían miles de Ann en el mundo y no podía ser precisamente Pinky.
Para Ryan✌:
mandanme la fto ahora!
De Ryan✌:
ke? para q? para acrt la paja?
Para Ryan:
Solo mandame la foto.
De Ryan✌:
Ha adjuntado una foto.
El mundo definitivamente estaba en contra mio. ¿Desde cuando mi suerte se había invertido así? Mi mejor amigo, con la chica por la cual estaba colado. Tomar cloro fue lo primero que paso por mi mente. Mucho cloro.
De Ryan✌:
lo ziento, dbo irme, dcame suerte!!!
Jodida mierda.
Tome las llaves de mi moto y maneje a toda la velocidad que me permitía mi querida motocicleta. El departamento de Ann no quedaba muy lejos de mi casa, por lo que quizás la alcanzaría y detendría toda está locura de ella saliendo con mi mejor amigo.
Es decir, ¡son los códigos!
Tu mejor amigo no puede salir con tu novia, con tu ex. Es como comerse tu propio vomito. Es como si te besara a ti mismo, un estudio revelaba que la saliva de tu pareja, queda en tu organismo por tres años.
Y acabo de sonar como un friki de las ciencias.
Al doblar la cuadra, pude divisar a Ann subiéndose a un taxi. Solo alcancé a ver sus piernas en ese diminuto vestido. Tensé mi mandíbula y seguí el auto en donde se encontraba Pinky.
Me sentía como Perry el ornitorrinco en una misión.
Llámenme Agente J.
La música de One Direction en la radio no ayudaba para nada, la canciòn básicamente hablaba de que todos quieren robarte a tu chica. En este caso, Ryan.
¿Desde cuando escuchaba basura popera? Ya era suficiente con ver películas de nenas y haber visto el primer capitulo de Glee solo para ver por que Ann estaba tan obsesionada.
Cuando el taxi se detuvo, frene bruscamente esperando que Ann no se diera cuenta de mi presencia. Una vez que bajo del coche pude apreciarla mejor, iba con un vestido hasta medio muslo con un escote que no era extravagante, pero que la hacia lucir bastante guapa.
Aunque debía admitir que extrañaba sus camisas con estampados graciosos. Acomodo su pequeña cartera y entro al restaurante de comida mexicana. Típico de Ryan.
Podía ser mi mejor amigo, pero era asquerosamente romántico y cursi con algunas cosas. Las chicas adoraban a los chicos malos, que sean fríos y diferentes las volvían locas.
Años de experiencia.
Cuando estuve seguro que no habían mocos, digo monos en la costa, estacione mi motocicleta detrás del local, por si Ryan o Ann miraban por la ventana y la notaban.
Acomode mi capucha negra y espere unos diez minutos en la parte detrás del local para finalmente hacer mi aparición especial. No hay mejor cita que con Justin presente.
Entrando por la cocina, tome prestado un postre de chocolate y con algunos del personal mirándome extrañado, fui hasta los comedores, dirigiendo mis ojos inmediatamente al pequeño cuerpo de Ann que me daba la espalda.
Ryan no tardo en encontrarme, a lo que fingí sorpresa.
—¡Que coincidencia! ¡El mundo es tan pequeño! — Ahora es cuando agradecía haber tomado las clases de teatro a los siete años.
Interpretar a un un árbol no fue un gasto de tiempo.
Oscars, voy por ti.
Mire a Ann quien me miraba con sus ojos abiertos y echando chispas.
— ¿Que haces tu aquí? — Pregunto.
— Solo iba pasando y me dio mucha hambre, por lo que vine a comprar esto. — Levante mi postre y lleve una cucharada a mi boca.
— ¿Se conocen? — Hablo mi amigo.
— Sip.
— ¡No! — Dijimos al mismo tiempo.
— ¿Si o no? — Frunció el ceño confundido Ryan.
— No.
— Ella dice que no para olvidar su pasado tormentoso. — Tomé una silla y me senté en medio de Ryan y Ann. — Ella estaba colada por mi en el jardín de niños. — Sonreí mirando la expresión de Ann.
— ¡Eso no es verdad!
— Ann no tienes de que avergonzarte. — La calmo mi mejor amigo, acariciando su mano con su dedo pulgar. No despegue mi vista de ese gesto, sintiéndome extrañamente celoso.
¿Dije celoso? No, claro que no estaba celoso.
Solo me extrañaba ese gesto.
Si, era eso.
— Eran solo niños.
— Exacto Ann, eramos niños, todo superado. — Los abracé a ambos por los hombros, produciendo que soltaran sus manos. Me sentí mucho mejor. — Ya que estamos aquí los tres, ¿por que no cenar juntos? Nada mejor que un día sábado, con amigos y comida mexicana.
— Por mi no hay problema. — Se encogió de hombros Ryan. ¿Se dan cuenta de por que era mi mejor amigo?
— Uhm, claro. — Hablo Ann mas para ella que para nosotros.
Esta seria una larga velada.
Sexta fase de como conquistar a Ann: Jamas la dejes en los brazos de otro.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro