James no se sintió afectado por lo que el tal Darkan dijo de su banda o de él, como ex-sicario él ya tenía toda la experiencia como para soportar a personas de mal agüero como el tal Darkan, pero algo en su interior de inquietaba. Tom... Tom había escuchado la pelea, ¿pues como no? Él estaba a su lado prácticamente, pero aún así casi ni lo sintió de apoyo. James e preocupaba, pues temía que Tom comenzara a buscar desperfectos en él como el rubio había echo, y que luego le botara por tener cosas que al azabache no le gustaran. James trató de desavilar esas ideas de su cabeza, y solo aceleró su paso hacia la habitación, pasando de largo a Los Mortífagos, quienes iban frente a ellos.

Cuando llegaron a las habitaciones, James se desesperó por abrir la puerta ante el pánico de que Tom le dijera algo negativo sobre su forma de cantar y de un rápido beso en la mejilla al mencionado se adentró a la habitación que compartía con el tal Longbotton, otro chico del grupo del Hufflepuff anteriormente mencionado, y estaba seguro que con un Ravenclaw o un Raxton, pero eso poco le importaba. ¡Él solo quería escapar de las palabras de su pareja!.

Afuera del cuarto ambas bandas se quedaron con una cara de impacto, pues casi hasta parecía haber querido escapar de algo, y sospechaban que ese algo era Tom, por lo tanto todos le dirigieron una mirada de duda al aludido y este solo suspiró y se encogió de hombros antes de marcharse a su cuarto. Dejando al resto de las bandas fuera en el pasillo de los cuartos masculinos.

- ¿Ahora que? - rompió Severus el silencio.

- ¿Nos burlamos por el echo de que Riddle dormirá en un cuarto con cuatro mujeres que se lo quieren violar? - Sirius se encogió de hombros, pero Severus le atinó un golpe en el brazo por la mala broma sobre su amigo.

- solo vamos a dormir, ¿si?- propuso Sev- tengo sueño... Y me duele todo... - gruñó mientras se estiraba.

- ¿todo? - Sirius ladeo su cabeza- Pero si aún no te he tocado... - se burló seductor.

- estúpido pervertido- susurró el azabache molesto.
- Bueno, yo concuerdo con Severus... - se estiró Remus.

- ¡oye! - bramó Sirius ofendido. Pues él también había oído al azabache.

- ¿Qué? - pregunto Remus- Ah si, también pienso que eres estúpido y pervertido- Sirius ahogó un gemidos de indignación- pero aún así te quiero ¿o no? - Sirius cerró la boca a modo de de aceptación- Pero yo me refería a que tengo sueño... - el castaño solo miró a los presentes antes de saludar a todos y cada uno de ellos con un movimiento de mano y una sonrisa, claro que Lucius fue la excepción al ser besado por el castaño antes de que este se retirara... Llevando a rastras a Sirius el indignado, seguido de un vacilante y muy agotado Severus.

- Bueno... No nos queda de otra que irnos a dormir... - dijo Lucius, con la mirada fija en Bill y Regulus, quienes lo miraban un poco cohibido, pues el rubio les intimidaba en algún punto, y estar solos con él no les parecía lindo- ¿Y bien? Comparto cuarto con ustedes... ¿Si que no? - sonrió malévolo al notar porque no le hablaban, pensando en utilizar aquello a su favor. Claro que al llegar al cuarto, y encontrarse con dos bebés llorando en una cuna no supo porque su plan malvado se fue a la porra en el mismo instante en el que cogió la mamadera de una mesa con leche tibia y se la dio al pequeño Fredd, a quien tomó en sus brazos, permitiendo que Regulus hicieron lo mismo con George. Bill solo observó atónito a quien solía ser su amo.

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- Maldito estúpido....-susurró James enfurruñado.

- ¿Oye? Sé que Darkan es frío y.... De pésimo carácter, solo debes ignorarlo y rebasarlo en la eliminatoria y luego puedes conocerle mejor, no es tan malo cuando te acostumbras y le conoces... - le decía un castaño de reflejos pelirrojos de tono vino, al frustrado James, amo sentados al filo de sus respectivas camas.

- Raxton, no puedo llevar nada bien sin que alguien me meta en la cabeza que no es correcto lo que hago y que fracasaré pase lo que pase... Él me lo recordó... Y lo odiaré por eso... - apretó sus puños enfadado.

- Tranquilo, es normal asquearse por su personalidad, con el tiempo espero que al menos aprendas a ignorarlo...será lo mejor.... - propuso sonriente el tal Tonks Longbotton, líder de los Hufflepuff, posando comprensivo una mano amiga en el hombro de James.

- ¿de donde le conocen ustedes...? - preguntó James. El Hufflepuff y el Rexton suspiraron con pesadez, mirándose con algo de pena el uno con el otro.

- Con Darkan solíamos ser una banda... pero él decía que no le gustaba nuestra forma de ser, decía que opacábamos lo que él podía llegar a ser...-susurró Tonks, pues su compañero guitarrista estaba ya dormido, y no quería despertarlo.

- Él decía que le tratábamos como a un novato, que él se sentía menos junto a nosotros...- dijo Ryler Raxton vacilante, la idea de contar su relación con Tonks y Darkan le resultaba traidora- pero con Tonks solo sonreíamos y le dejábamos hacer el berrinche, después de todo, esos nunca pasaban de uno que otro insulto a nosotros y a nuestro talento musical, y al finalizar unas horas él ya estaba como nuevo...-sonrió con pesadez.

- ¿Les pedía perdón?- intuyó James, sorprendido.

- No, nunca lo hacía, sabíamos que quería decirlo, pero él llevaba el orgullo por sobre encima de su lastima, por lo tanto nunca lo dijo...-le explicó Tonks, de tal manera en que no dejara mal a Darkan, pero era imposible, estaban hablando de sus contras, y de pros habían pocos y escasos, casi nada para defenderle.

- Con el tiempo Darkan comenzó a juntarse con la mala gente, entre ella drogadictos y varios tíos que fumaban...se unió a ellos...- Ryler hizo una mueca de desagrado- Veíamos que le hacía daño, pero él no se dejaba ayudar, se negaba y cada vez se puso más agresivo... Con Tonks decidimos sacarlo de la banda, no queríamos a alguien tan quebrado y sin intenciones de mejoras como él, por lo tanto lo excluimos una vez que regresó de una de esas andadas en las que siempre acababa borracho y drogado...- con pena bajó su mirada esmeralda lima al suelo.

- ¿Que pasó?- dijo James, pues Tonks se agarró del cabello y Ryler se cubrió la cara con las manos, ninguno parecía estar bien con lo que dirían, parecían apesadumbrados, atormentados, llenos de una tortura que les partiría el alma al soltarlo.

- Darkan confesó que mató a sus compañeros... - alzó su mirada lima consternada-dijo que mató a aquellos que le vendían droga, a aquellos que le podrían el alma... -sus ojos lagrimaban pero no dejaban caer las lagrimas- necesitaba ayuda para ocultar los cuerpos...-sollozó, James miró a Tonks, notando que este se jalaba del cabello, su espalda tenía varios espasmos, estaba llorando. Se sentía culpable. Y James también, les había obligado a contar aquello...sin querer- y nosotros fuimos... le abrazamos, consolamos, le susurrábamos que todo estaría bien, que nos tenía allí para él...-susurró Ryler sin apartar su mirada de la avellana- realmente no contábamos con lo que iba a pasar...-bajó su mirada de velocidad luz- no lo veíamos de él ni aún por aquello...-susurró consternado.

- ¿Que...?-James vaciló, sentía que no tenía derecho a seguir torturándolos, no merecía saberlo, no, claro que no. ¿Para que seguir?, pero no podía dejarlos a'si, sentía... que los estaba aligerando, que los ayudaba a soltar algo que los había hundido hacía mucho tiempo- ¿Qué pasó?- acabó con la mirada gacha, sintiendo que no quería enterarse.

- Nos emboscaron...-espetó Tonks- nos esperaron... no estaban muertos...fue una treta... ¡una maldita treta para obtener más droga!-masculló entre dientes, sin alzar su cabeza. ¡Que vergüenza sentía!.

- No queríamos relacionarnos más con él... no le acusamos con Madame Olyphe... porque añorábamos con esperanza que cambiara... pero no lo hizo, aún así guardamos el secreto y nos apartamos de él, y sin más remedio nos dividimos con Tonks....-susurró Ryler, con voz temblorosa, piel pálida, y cuerpo lleno de espasmos.

- ¿Porque?- susurró James consternado, no lo comprendía.

- Porque cada vez que nos veíamos... recordábamos la fiel sonrisa de Dark' entre nosotros...-susurró Tonks, apoyando con debilidad su cabeza en el hombro de James, no quería que le abrazara, solo necesitaba saber que tenía a alguien a su lado, ya fuera colega o no.

- lo extraño...-confesó Ryler con la cabeza entre las manos- Extraño cada risa que teníamos con él... lo quiero de vuelta...-susurró hipando- No sabes lo que me cuesta fingir indiferencia cada vez que le veo burlarse de mi o de algún otro estudiante, al verlo jugar bromas agresivas con su parda de idiotas a los inocentes... él antes no era así... era pasivo, tierno e inclusive una buena persona... un solo cigarrillo consiguió arrebatarnos todo en una sola noche...- masculló atormentado, quería gritar. Sentía rabia, no quería llorar, pero sabía que lo haría. No quería, pero de nada sirve decirlo, "no quería..." él no quería que Darkan se cambiara de bando... pero ocurrió, él no quería separarse de Tonks, pero ocurrió, no quería contarle aquello a nadie... pero ocurrió.

- la droga es destrucción... es veneno y una blasfemia que el humano solo creó para huir de sus problemas, sin ser consciente de que había creado otro más... La droga es como la vida... Al principio es buena para ti... luego descubres lo peligroso que puede llegar a ser tratar de salirte con la tuya y acabas igual que estando vivo; muerto...-le susurró Tonks antes de caer dormido sobre su piernas. James no se movió para nada más que cubrir al cuerpo del azabache con una sabana.

- Tonks hacía lo mismo con Darkan...-susurró Ryler con una sonrisa melancólica y los ojos embadurnados de lagrimas.

- mejor duerme... no creo que amanezcas con energías si no...-sonrió James deprimido, él no quería causar dolor. Lo sabía... a donde quiere que fuera siempre causaría dolor. Lo hizo una vez con Remus al conocerle, lo hizo con Tom al provocar el accidente, lo hizo ahora con sus nuevas posiblesamistades. Ryler tendría razón de no se porque estaba envenenado. No le haría caso. No le haría caso a nadie, y se valdría por si mismo. Como todo un mafioso. Como todo un sicario.