//Otra de las premisas remodeladas, aunque casi no le hice mucho contenido como a las otras anteriores//

*Era víspera de noche buena y todos estábamos emocionados por empezar la fiesta, mis padres comenzaron a recibir a sus invitados mientras que yo solo estaba viendo memes en internet para distraerme en lo que llegan mis amigos, los cuales no eran muchos al decir verdad pero cada vez que nos juntamos siempre hacíamos un desastre de lo cual siempre nos salvamos, cuando llegaron guardé mis memes para levantarme e ir a recibirlos.*

Cathe: ¡buenaaaass!

Daniel: buenas Cathe!

Cathe: feliz nochebuena, ¿has estado ocupado?

Daniel: no mucho, eres la primera en llegar.

Cathe: oh que bien, creí que Max ya había llegado.

*Hablábamos mientras paseábamos hasta la sala donde nos quedamos tranquilamente a conversar.*

Cathe: escuché que tu madre invitó a casi toda la calle, incluyendo a los de la manzana.

*Asentí con la cabeza.*

Daniel: oh si, le dije que estaba exagerando pero ella estaba convencida de que no había problemas, además mi padre estaba de acuerdo con ella por lo que quizás no venga de malo.

Cathe: espero que tenga razón.

*Luego volvieron a llamar a la puerta para decirme que Max ya había llegado, a lo que nos dimos nuestro típico saludo de hermanos con las muñecas, codo, talones y finalizando con juntar nuestras frentes antes de echarnos a reír un poco.*

Max: hey bro! ¿Cómo has estado?

Daniel: bien, bien, como siempre ¿y tú?

Max: preparando a mi hermanita para que pueda quedar tranquila para el viaje hasta acá, al parecer estará debutando el próximo concurso donde se inscribirá.

Daniel: ojalá gane esa corona, quizás así deje de presumir.

Max: jajajaja claro... Presumirá más de la cuenta, eso lo aseguro.

*Los dos a pesar de era muy evidente el sarcasmo de donde se trata de hablar de la hermana menor de Max que siempre alude ser la más bonita de la ciudad gracias a la manía de que ganó los concursos anteriores, pero lejos de eso es buena niña a pesar de que su ego es bastante alto.*

Max: pero aparte de eso, es bueno verte para estas fechas amigo.

Daniel: lo mismo digo hermano, hace falta tener a los familiares cerca, ¿no lo crees?

Max: así es hermano, así es.

Cathe: bien ya que estamos, aprovechemos de jugar antes de que nos llamen a sentar.

*Asentí con la cabeza para ir con ellos dos hacia un lugar donde podamos distraernos un rato, la música estaba movible y las actividades en el lugar también estaban preparándose para empezar, y para no dejarle mucha actividad para mi madre decidimos ayudar con llevar aquellas bandejas a la mesa mientras cuidaba que Max no se comiera las galletas que llegaban a sus manos y así pudieran llegar a salvo a la mesa, era cómico el ver cómo reprochaba a cambio ya que a él le encantan las galletas como a su hermana y madre, era por herencia aquel gusto por las galletas así que no le puedo echa la culpa por eso, pero si vigilarlo de cerca para que no cometa ese acto infantil.*

Daniel: bueno, creo que es todo por ahora.

Cathe: despejado por aquí.

Max: despejado por acá.

*Decían los dos cuando estaban en diferentes lugares para asegurarnos de que todo esté en orden y finalmente terminar por ver a los demás que estaban llegando, mi madre estaba preguntándose sobre el resto de los invitados que no había llegado teniendo el celular en el oído mientras caminaba por el lugar, quizás intente conectar con los que falten aunque al parecer ya estábamos abarrotados de gente dentro de la casa que parecía más un club nocturno.*

Daniel: esto parece más un club de noche que casa.

Max: jajajajaja parece que si invitó a toda la calle a tu casa, hasta el Jhonny está aquí.

*Señaló al mencionado que estaba haciendo competencia de quién es el más fuerte contra otro que era de su mismo grado, detrás de ellos estaban alentándolos para saber quién sería el ganador de su apuesta.*

Max: parece que es verdad que cuando se esmera en algo, lo hace a lo grande.

Daniel: lo sé, pero a veces me preocupa su estado de salud.

Max: por su hiperactividad?

Daniel: más que todo por su adicción al trabajo.

Max: oh si, es un asunto serio.

*Y mientras nos quedamos hablando sobre un plan para hacer que mi madre no tenga que ser tan trabajangolica por un tiempo y pueda atenderse un poco, tocaron la puerta y ella fue la primera en abrir para saludar a quien está detrás de la puerta.*

Max: si, quizás de esa forma considere darse un tiempo libre.

Daniel: debe hacerlo si o si, a ver si este fin de semana hablo con ella.

Madre: ¡Dani! Mira quién llego.

*Se apartó de la puerta para dejar pasar a la otra mujer.*

Tía: ¡buenas, buenas!

*Y de pronto escuché una voz que no creí que podría haber escuchado en lo que me puede quedar de vida, mi vista inmediatamente se concentró en la puerta observando detenidamente con mi ojo de cyborg a quien sería mi perdición... Mi tía la interrogadora de criminales estaba justamente a un paso de saludar a todos desde la puerta lejos de mi mamá... ¿ahora que voy a hacer? Seguramente me preguntará muchas cosas... Y realmente no quiero que me siga preguntando lo mismo*

Cathe: ¿esa no es...?

Daniel: Si, si es.

Max: orales bro, prepárate jejeje

Daniel: Gracias por el apoyo...

*De hecho comenzaba a tener un plan mental para evitar tener que pasar de nuevo por todo, pero fuimos llamados a la mesa y justamente me tocó alado de ella, no quería verla, solo deseaba morir ahora mismo, por dentro me imaginaba las miles de ideas de escapar de aquella situación como derrumbar la pared e irme por la ventana, hacer creer a todo el mundo que hay un incendio y salir corriendo como si no hubiese un mañana a pesar de que no tenemos alarmas de incendios pero si podría fingir que hubiese uno por el humo que empezaría a crear de alguna forma, también podría hacer pasar a mi amiga como mi novia ¿y si pregunta si pienso tener hijos? ¡No! ¡Si se me había muerto una patata apenas la tocaba menos puedo cuidar un feto! ¿qué puedo hacer ahora?*

Madre: dentro de poco el pollo estará listo, por mientras, pueden esperar con lo que tenemos en la mesa por mientras.

*Mal momento para que pudiese iniciar con la improvisación, mis amigos estaban a la distancia con sus familias deseándome suerte en señales corporales y de manos en el cual asentí con la cabeza.*

Tía: estás más grande que antes muchacho ¿has estado comiendo bien?

Daniel: eh, si tía, así es.

Tía: oow que bueno, estás muy guapo ahora.

Daniel: eeeh... Gracias tía.

Tía: ¿sabes? Cuando tu padre era joven, el lucía igual que tu....

*Y así es como empezó a contar la historia de mi padre de cuando joven, él mismo me la había contado ya, y varias veces, cuando le daba la gana de contarme sus cosas en cada momento que teníamos que compartir nosotros mismos por lo que solo me quedaba pensando en las estrategias a usar para evitar que me siga preguntando aunque el tiempo no estaba siendo mi amigo esta noche, por lo tanto estaba haciendo que mi mente tuviese miles de ideas sobre el cómo reaccionar, aunque no duró mucho cuando una voz altanera cerca de mi oído me sacó de los pensamientos.*

Tía: mijo, ¿estas escuchandome?

Daniel: ¿hum?

*Ay no...*

Daniel: Oh, si, estoy bien tía.

Tía: que bueno, ¿y cómo te ha ido esta semana?

Daniel: Bien jej

Tía: ¿y la novia?

Daniel: Ehh....

Tía: ¿ya conseguiste novia?

Daniel: pues...

Tía: por favor, dime que no es una de esas personas que gusta de ver esas caricaturas de monas chinas del demonio y escucha esa música rara.

*Y sabía perfectamente a qué se refería con eso, lo cual no es para sorprender después de todo.*

Tía: quizás esas personas no sean tan normales, puede que sean sádicas al final de cuentas, si tu novia es de esas mejor cortala sin importar qué, no sería bueno que ella prefiera tener esos gustos raros de eso del anime que pueda ser tan dañino a la mente de los niños.

*Yo solo rodé los ojos mientras tomaba unas cuantas galletas para ver si de esa forma intentar de opacar su voz por unos segundos.*

Tía: escuché que no salen, no quieren ir saliendo mucho, que prefieren estar en casa ¿puedes creerlo? Deberían de darle vergüenza a sus padres el dejar que hagan tal barbaridad.

*Yo solo trataba de hacer de la vista gorda.*

Tía: ¿le has preguntado a tu novia si ve eso? ¿En dónde vive? ¿Qué estudia?

*Poco a poco sentía un tic nervioso en el ojo.*

Tía: ¿si quiera se hablan?

Daniel: Tía, no preguntes tanto porfavor...

*Tierra ya trágame por lo que más quieras...*

Tía: ¿entonces? ¿Qué me quieres decir? Hace mucho que no los visito y es solo casi como 4 veces al año, como hermana de tu padre debo saber lo que ha ocurrido en el día a día por si acaso necesitan de mi ayuda.

*Bien, mi plan de buscar escaparme se fue al caño, mire a todas partes y suspire... Realmente estaba entre la espada y la pared, nadie podría meterse a ayudarme en este momento, solamente era entre ella y yo.*

Madre: bueno, aquí está.

*Dijo mi madre que estaba trayendo el último plato para luego sentarse delante de mí, al menos era un pequeño alivio porque ambas estarían chismoseando entre ellas mismas y me dejaran en paz por un tiempo.*

Madre: que bueno que has podido llegar, me había preguntado qué había pasado después del viaje.

Tía: oh nada serio, solo que el auto se descompuso y terminamos por ir a pie hasta la carretera.

Madre: que feo, espero que no les haya pasado algo.

Tía: oh no, claro que no jejeje.

*Y así ellas empezaron a platicar entre ellas mismas mientras que yo solo las escuchaba.*

Tía: hablando de familias, tu hijo está bastante grande desde la última vez, dentro de poco te podrá superar en altura.

Madre: puedo ver que si.

*Por favor dejen de hablar de mi...*

Tía: además, pude escuchar un rumor de que los jóvenes actualmente no quieren ser como los de antes, ahora no se enfocan en las series de antes sino en esas monas chinas, andar encerrados, jugar videojuegos, y sin tener muchas ganas de seguir viviendo.

Madre: bueno, en parte lo sé pero los tiempos cambian.

Tía: mi hijo a su edad ya había montado dos terrenos, con un doctorado, aparte de que su próximo matrimonio será en esta primavera.

*Parece que a mi madre tampoco podría gustarle esas palabras de parte de ella, tampoco a mi aunque me daba la espina de que podría ser así de igual forma no estaba interesado en tener que responderle, por ahora.*

Tía: aparte ¿consideraste en mandar a tu hijo a cortarse el cabello?

*La miré de reojo.*

Madre: ¿por qué? Me gusta como se ve.

Tía: si bueno... La forma en que se ve lo hace ser un poco raro, a no ser que sea como ese movimiento giratorio de pies y cadera sin despegarse del suelo, ¿tu hijo hace sigue haciendo eso?

Madre: eemn si.

Tía: espero que no muestre ese baile cuando tenga hijos.

Madre: por favor, no adelantemos los hechos.

Tía: solo digo, no quiero imaginar como se sentiría tu nieto si lo ve bailar

*Bueno, esto poco a poco comenzaba a colmarme la paciencia.*

Tía: espero que el año que venga pueda venir a la bodega si no logra el trabajo, mis hijos menores podrían darle buena compañía si trabajan juntos.

Daniel: tía!

Tía: ¿Qué?

*Bueno, ya me cansé, me levante frente a ella y después sobre la mesa.*

Daniel: ¿quieres saber todo? Pues bien... ¡te responderé!

*Ya me importaba poco si todos escuchaban.*

Daniel: 1-No me he graduado todavía, ya casi estoy por culminar
2-Tener cabello metalero no me hace ser gay
3-Todavía tengo mis posters y figuras anime porque son valiosas para mí
4-No son chinas ¡son japonesas!
5-No tengo novia todavía
6-Soy virgen ¿algún problema?
7-No pienso tener hijos porque seguro se me van a morir apenas nazcan.
8-¿qué tiene de malo si prefiero bailar el twist en vez de jazz?

*Y en ello comencé a bailar el twist con un rola bastante que mola mientras que todos me miraban, yo solo esperaba morir recordado.*

Daniel: 9-Detesto la rueda de preguntas, sé que es interesante pero ya parezco criminal que tuvo una death note en sus manos.
Y por 10 último: prefiero trabajar de memero que en tu bodega con los primos pequeños... Esos hijos de su ma-

Madre: ¡daniel!

Daniel: Y es así, como prefiero tener la vida, si te molesta tía, es tu problema no mío.

*Obviamente el silencio era claro, mis amigos estaban con ganas de reírse pero se aguantaban, mi madre parecía estar nerviosa pero yo más porque cuando se levantó creí que me golpearía con el zapato o con la olla, pero lo que recibí fue ¿un abrazo?*

Madre: nadie quiere que cambies tu forma de ser, si eres tan bueno como nadie en esta ciudad ¿por qué por solo rumores desconfiaría de ti, si te conozco bien?

*Bueno era cierto, quizás mejor que a mi padre.*

Madre: no hagas caso a lo que tu tía pregunte, solo déjala seguir en su mundo y luego parará, buscará a alguien más para desahogarse, tú mientras no le hagas caso a lo que te pregunte ¿de acuerdo?

Daniel: Esta bien, gracias mamá.

Madre: bien, vayamos todos ahora a continuar con la cena que luego se pondrá fría.

*Asentí con la cabeza para volver a sentarme y disfrutar del banquete escuchando como mis amigos me felicitaban a la distancia, aunque seguramente estaré castigado una semana por haber hecho una escena, me sentía bien a fin de cuentas porque finalmente terminé con un objetivo que estaba marcado por el destino para darme como tarea de eliminar, así mi vida estaría dando un paso muy importante en el proceso del juego de la vida.*