Capítulo 4
YoonGi suspiró, llevo sus manos a sus caderas y relajó sus músculos. Sus ojos volvieron a enfocarse en el bonito omega que ahora descansaba sobre el colchón.
Namjoon había tomado a TaeHyung para llevarlo a su habitación y le pidió que dejará a JiMin en la habitación de invitados, al parecer su amigo planeaba dormir en el sofá, porque no había otra cama en el departamento. Dio un último vistazo a la habitación antes de salir, ya era muy tarde -¿o muy temprano?- y como no le apetecía dormir en uno de los sofás haciéndole compañía a Namjoon, lo mejor sería irse a su casa.
—¿Qué…?
Mirando sobre su hombros se encontró con la mirada verde de JiMin, el omega tenía los ojos entrecerrados y el ceño fruncido. Realmente lucía adorable. YoonGi se acercó unos pasos a la cama.
—Es la casa de Namjoon —informó en voz baja—, deberías quitarte la ropa y tratar de dormir —sonrió ligeramente.
JiMin le sonrió de vuelta haciendo que sus ojos se cerrarán formando dos medias lunas.
—Si, la ropa.
YoonGi asintió, y como la buena acción del día ya se había hecho decidió que lo mejor era salir de ahí y llegar a su hogar. Justo estaba en el umbral de la puerta cuando algo sube lo golpeó en la espalda.
—Pero que… —se giró rápidamente para ver al omega pero su palabras se atoraron en su garganta al ver la imagen delante de él.
La camisa de JiMin estaba a su pies, el resto de la ropa del omega estaba sobre la alfombra que estaba debajo de la cama. El pelirrojo estaba de pie aún lado de la cama en nada más que un pequeño boxer azul oscuro.
—Ya la quite —declaró con una sonrisa coqueta, con palabras arrastradas.
YoonGi se perdió por un segundo en la tentadora imagen del omega semi desnudo. JiMin era hermoso y su piel pálida era una tentación, sólo quería acercarse y besarlo. Sacudió su cabeza alejando el pensamiento, tomando en cuenta lo ebrio que estaba el omega su pensamiento resultaba un poco asqueroso.
—Ehhh… si —eso fue lo único que pudo decir, lo que dejaba en claro que su mente no trabaja bien en ese momento—, ahora debes meterte en la cama.
La sonrisa de JiMin creció y sus ojos parecieron brillar.
—Contigo —respondió el omega.
YoonGi rápidamente sintió como su pantalón se encontraba más apretado, bajo brevemente su mirada, su pene estaba duro, muy animado con la invitación del omega pelirrojo. Bueno, su pene era un traidor.
—Yo no creo que sea una buena idea.
JiMin dio un par de pasos tambaleantes en dirección de YoonGi.
—No —declaró con autoridad, liberando ligeramente sus feromonas.
No podía aprovecharse de JiMin, no cuando estaba tan ebrio y probablemente no recordaría nada de lo que pasó. Eso simplemente no estaba bien. Pero el omega sólo parpadeo un par de veces y después siguió con su avance.
Antes de que él pelirrojo se acercará más, YoonGi lo detuvo colocando sus manos en los hombros del omega. JiMin cerró los ojos ante el contacto.
—Hueles muy bien —JiMin susurró con voz suave—, es delicioso.
YoonGi fruncio las cejas confundido, las feromonas que había liberado se suponía que debían alejar a JiMin, no hacerlo sentir atraído.
—JiMin debes volver a la cama —trato de empujar suavemente al omega pero este no se movió—. Por favor, vuelve a la cama.
Pero como había pasado antes, el omega no lo escucho. En su lugar JiMin volteo ligeramente el rostro y dejó un beso sobre el dorso de la mano de YoonGi. Y fue tras ese gesto que un suave aroma llegó a la nariz del alfa.
—Hueles… —JiMin soltó un gemido bajo.
El cuerpo de YoonGi actuó antes de que su mente se diera cuenta, acercó su rostro al cuello del omega y pego su nariz en la piel cálida. JiMin olía delicioso, pero el aroma era suave, lo había sentir cálido por dentro, como recibir un abrazo reconfortante. Era diferente, jamás se había sentido así por las feromonas de un omega. Cuando los brazos de JiMin lo rodearon y sus labios se pegaron a la piel de su cuello, enviando una ola de calor por su cuerpo, YoonGi abrió sus ojos en grande y rápidamente alejó al omega de su cuerpo.
"Esto no esta bien" gritó su mente. La cual extrañamente sonaba igual a Namjoon.
—A la cama. Ahora —ordenó con fuerza.
JiMin le dedico otra mirada coqueta con los ojos brillando de excitación, sus labios formaron un pequeña sonrisa y se dio la vuelta para caminar hacía la cama, aún se tambaleaba pero pese a eso, agregó más contoneo en sus caderas. Bien. El chico podía ser coqueto, muy coqueto, y precioso y oler delicioso. Pero YoonGi era un hombre decente y no iba a caer en sus provocaciones. Ahora, si sólo su pene se uniera la idea.
JiMin se metió a la cama y lo miró fijamente.
—Tu turno.
Y ahora el pene de YoonGi estaba tan duro que incluso comenzaba a sentirse doloroso.
—Cierra lo ojos —YoonGi comenzó a acercarse a la cama y JiMin inmediatamente cerro sus ojos. El alfa llegó a la orilla de la cama y con suavidad peinó los cabellos rojizos lejos del rostro del omega—, debes dormir.
JiMin gimoteo suavemente pero sus ojos se mantuvieron cerrados. YoonGi acarició el hermoso rostro, su dedo índice tocó suavemente por encima de algunas pecas, una sonrisa tímida en sus labios.
—Descansa JiMin.
Tomando la manta que descansaba sobre un sofá, cubrió el pequeño cuerpo del omega, apago la luz y salió de la habitación.
—¡Buenos días!
JiMin se tapó los oídos ante el estridente grito de TaeHyung. La resaca era horrible.
—Son cerca de las tres de la tarde —respondió Namjoon, su semblante lucía fresco y alegre mientras bebía de su taza de café.
—¿Por qué soy el único que se ve y se siente como porquería? —JiMin se quejó con un puchero en sus labios.
TaeHyung comenzó a reír por lo bajo antes acercarse al pelirrojo y abrazarlo por la espalda con sumo cuidado, con una de sus manos acarició el cabello despeinado de JiMin.
—Awww, mi adorable Mochi —beso la cima de la cabeza pelirroja—, puedes verte como la mierda pero sigues siendo el omega más lindo que conozco.
Namjoon comenzó a reír. —Eso es cierto, sólo tu podrías hacer que el estilo de vagabundo luzca adorable.
—¡Soy sexy! —gritó indignado, pero se arrepintió un segundo después al sentir el punzante dolor en su cabeza—. No quiero ser lindo o adorable, yo soy sexy, eso es lo que deberían decir mi —acusó de mal humor.
—Eres adorablemente sexy —anunció TaeHyung.
—¿Eres un lindo chico sexy? —propuso Namjoon.
—¡Ugh! ¿Por qué sigo hablando con ustedes? —preguntó con la frente recargada en la mesa—, son personas realmente despreciables.
—Que pena por ti, sólo eres capaz de entablar amistad con personas despreciables como nosotros —respondió TaeHyung, se alejó de JiMin y camino hacía la cocina—. Podrías tener otros amigos pero eres un asco para las interacciones sociales —gritó desde la cocina—, deberías estar agradecido de que Namjoon y yo estamos dispuesto a soportarte.
—Él tiene razón —respondió el alfa mientras revisaba su teléfono—. Eres un asco para hacer amigos.
JiMin le fruncio el ceño a Namjoon. —Perdón por ser una mierda en socializar.
Namjoon le dio in par de palmaditas en la cabeza a JiMin. —Esta bien porque sigues siendo adorablemente sexy.
—Eres un idiota —murmuró con fastidio—, ¿qué diablos vio en ti SeokJin Hyung?
Namjoon borró la sonrisa condescendiente de sus labios, sus ojos entrecerrados por la traición de su mejor amigo.
—Sabes, siempre me he preguntado como es que lograste conocer a JungKook cuando eres tan malo para relacionarte con las personas —TaeHyung regreso con un vaso de jugo y unas galletas. Miro a JiMin con sus brillantes ojos grises—, sobre todo me gustaría saber como es que ambos terminaron durmiendo juntos.
JiMin sonrió en grande. —Eso fue porque JungKook pensó que era muy sexy —recalcó la última palabra.
TaeHyung sonrió con brula y saco su teléfono e hizo una llamada colocando el altavoz.
—¿Qué haces? —preguntó confundido el omega pelirrojo.
Cuando la llamada fue atendida la sonrisa de TaeHyung creció.
—¡Ey, bebé! —saludo alegre la voz de JungKook—, ¿dónde dormiste?
—Con Nam. Él, JiMin y yo tuvimos un trío anoche, realmente alucinante —respondió TaeHyung.
JiMin fruncio el ceño y Namjoon se ahogó con su café.
—Vaya…—la voz relajada de JungKook se escucho con claridad—, una oportunidad como esa no podía dejarse pasar, cuando vuelvas a casa debes decirnos todos los detalles a Hobi y a mi.
Namjoon abrió en grande sus ojos. —¿Pero qué clase de relación tienen? —preguntó un poco escandalizado.
TaeHyung comenzó a reírse con fuerza.
—Ehhh… supongo que no habrá historia sobre un trío —murmuró JungKook—, que lastima —suspiró con verdadera lastima.
—Si, me temo que no hubo ningún trío anoche —respondió TaeHyung—. Pregunta rápida —cambió rápidamente de tema.
JungKook dio una suave risita. —Dispara.
—Cuando conociste a JiMin ¿qué fue lo primero que pensaste de él?
—Un tema al azar, me gusta —contestó divertido—. Por su puesto que pensé que era malditammete adorable.
TaeHyung comenzó a reírse de forma histérica. JiMin tomó el teléfono.
—Pudrete Kook —sin decir más colgó la llamada.
TaeHyung lo miró con lágrimas en los ojos, algunas risitas continuaban saliendo de sus labios.
—Conozco a mi hombre.
JiMin rodo los ojos, Namjoon decidió que lo mejor sería ya no decir nada.
—Entonces pregúntale a él —murmuró enfuruñado el pelirrojo.
—Lo intente pero nunca responde y tu jamás hablaste de eso.
JiMin suspiro de forma dramática. —Fue en un evento de promoción para la empresa, JungKook acaba de firmar con nosotros así que era la primera vez que lo veía —se encogió de hombros—, derrame mi copa sobre su traje y trate de disculparme pero sólo podía balbucear y el me dijo que era lindo así que me di vuelta y salí corriendo.
Namjoon comenzó a reír. —Puedo imaginarme todo sin problemas. Es tan tu.
JiMin torció los labios y le dio una mirada furiosa a TaeHyung, quien intentaba con todas sus fuerzas no reírse.
—Luego de eso no lo vi, pero como trabajamos en el mismo lugar sabía que iba a topármelo una que otra vez.
—Así que tu lo evitabas —adivinó TaeHyung.
—¿De verdad soy tan predecible?
—Si —respondieron Namjoon y TaeHyung.
—Como sea —murmuró el pelirrojo—. Un día me encontré con Kook en el ascensor, ambos íbamos solos y cuando me di cuenta que él estaba ahí las puertas se cerraron dejándome atrapado —guardo silencio por unos segundos haciendo memoria—, entonces el elevador se lleno de sus feromonas, ni siquiera intento liberarlas, era una carga normal pero como soy sensible a los alfas dominantes, pues…
—¿Llego tu rut? —Namjoon preguntó de forma suave.
JiMin asintió. —Así que básicamente se repitió lo del día del colegio, yo me lancé a los brazos de Kook, él me cuido, me llevo a mi oficina y llamó a SeokJin Hyung —relató rápidamente—, mientras esperábamos lo bese, me regreso el beso y tuvimos está cosa platónica y secreta por meses.
TaeHyung parpadeo un par de veces. —¿El día del colegio?
—Cuando me enrolle con Nam en mi primer rut —respondió JiMin sin mucho interés.
—¡Qué! —gritó el omega castaño, JiMin se tapó las orejas e hizo una mueca de dolor—, eso tiene años ¿por qué apenas me entero de esto?
Namjoon alejó la mirada, sus mejillas sonrojadas. —No es algo de lo que nos guste hablar. Fue algo de una sola vez.
—¿Nunca se repitió? —cuestionó no muy convencido.
—Nunca —respondieron alfa y omega.
TaeHyung asintió conforme y se dedicó a mirar su vaso de jugo, hasta que otro trozo de información fue procesada en su cerebro.
—Si Kook y tu tuvieron algo en secreto ¿eso fue antes del tratamiento de SeokJin Hyung?
Las mejillas de JiMin se sonrojaron. —La idea del tratamiento tuvo que salir de algún lado —se encogió de hombros—. Los niveles hormonales de mi cuerpo comenzaron a cambiar desde ese día que bese a Kook y SeokJin Hyung quería entender porque era eso así que le conté, después de eso me propuso exponerme a una mayor cantidad de feromonas dominantes y funcionó.
—¿Hyung te propuso que tuvieras sexo con un alfa dominante? —preguntó con asombro, TaeHyung.
—Claro que no tonto —respondió divertido—, Jin Hyung sólo me dijo que hablará con Kook para convencerlo de liberar más feromonas cuando estuviéramos juntos —sonrió de medio lado—. La idea del sexo fue de tu novio fetichista.
TaeHyung sonrió. —¿Una fantasía de jefe y empleado? —preguntó con alegría antes de asentir—. Sí, definitivamente suena a algo que Kook haría.
Namjoon fijo su vista en TaeHyung.
—Tu relación es sin duda, algo que jamás podré entender —negó con la cabeza—. Cambiando de tema. ¿Vienen a la cena está noche?
Ambos omegas sonrieron.
—Claro.
Actualización
¿Qué les parece?
¿Y que opinan de la relación de Tae, Kook y Hobi?
Nos leemos en unos días
Besos x.
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