The Last Dance

Quizás el último baile estaba más cerca de lo que él pensaba, y todo porque él, estaba cansado de merodear sólo.

Género: (desconocido)
Directora: Hyo_Byung
Reparto: JiKook
Clasificación: B
Función: 9

ー911, ¿Cuál es su emergencia?

La voz desde el otro lado de la línea le hizo sobresaltar. Su mirada nerviosa viajaba por todos lados a pesar de la oscuridad que reinaba y llenaba cada rincón de su casa. Sus latidos parecían aumentar la velocidad, y el cantar de los grillos parecía ser el mismo canto del delirio.

ーA-Ayuda... é-él...ーintentó hablar, mas falló en el intento tras escuchar algo caer a los lejos haciéndole gritar.ーVengan rápido, necesito su ayuda. Él... él está aquí y...

ーSeñor, necesito que se calme y me expliqué la situación para poder ayudarle.ーexplicó y pidió la voz femenina desde el otro lado de la línea.

Miró su mano temblorosa, cubierta de sangre antes de empezar a escuchar nuevamente a esas voces que le recordaban a él.

"Él está aquí esta noche..."
"Él viene a jugar..."
"Él viene a acabar el baile..."
"No puedes escapar..."

ーÉ-él está aquí...

[†]

Limpió el sudor que yacía en su frente y sonrió orgulloso de sí mismo cuando escuchó a HoSeok aplaudir emocionado al darse cuenta de que terminaron la coreografía para la primera etapa del concurso de baile que habría entre varios Institutos. NamJoon silbaba de fondo y halagaba el esfuerzo que ambos chicos habían puesto.

ー¡Les ha salido de muerte, chicos! Si con eso no se ganan la primera parte del concurso, ¡le voy a regalar lentes a lo jueces!ーexclamó el moreno mientras pasaba su brazo por los hombros del peli naranja, sonriendo.

JiMin negó divertido y emocionado ante la idea de poder pasar la primera fase eliminatoria del concurso anual en el que concursaban, como mínimo, unos diez Institutos de la zona.

ーEspero que sea suficiente para quedar, hemos trabajado demasiado en estoーsuspiró JiMin sonriendo ladinamente sin poder evitar mirar al suelo.

ー¡Claro que pasarán! Son tremendos bailarines, hay que ser estúpido para no darse cuenta de eso, Jiminieーle abrazó esta vez NamJoon a él.

ーGracias...

ーNo que agradecer, somos amigos y te digo la verdadーNamJoon le guiñó un ojo en su dirección sonriendoー. Ahora... ¿Qué dicen si vamos a comer al restaurante de YoonGi? Según Tae, YoonGi ha creado un plato de puta madre para hoy.ーpropusó NamJoon sonriendo.

Una risa se escapó de los labios de JiMin tras escuchar el -ya común- vocabulario de NamJoon (créditos a Min YoonGi, novio de su mejor amigo), y ver el golpe que su novio le había mandado por "grosero".

Negó.

ーPrimero tengo que ver si puedo, mamá me aviso que saldría de viaje con el tío Jin y... quería que estuviera en casa cuanto antes. Tú sabesーdijo quitando importancia al asunto con un movimiento de mano.

NamJoon sobó su brazo y nuca en una mueca y dirigió su mirada a JiMin.

ー¿Hoy?...ーpreguntó NamJoon asombrado, casi en un tono preocupado y asustado.

Asintió.

ーPero...hoy es...

ーHoy es día de comida en el restaurante de Yoon, ¿no puedes ir?ーinterrimpió HoSeok en un tono perceptiblemente brusco a NamJoon.

"ーÉl es grosero conmigo, ChimChim. Estoy seguro de que me odia."

Alzó una ceja mirando a NamJoon desviar la mirada mientras sobaba a aún su brazo, y miró nuevamente a HoSeok.

ーYo...

ーIntenta ir, Jimin. Sabes que este día y fecha, son importantes para todos y nos gusta estar reunidos...

"ーA él no le gusta que esté con ustedes, no me quiere cerca. Estoy seguro de que aborrece mi prescencia."

ーDe acuerdo...ーasintió poco seguro.

HoSeok asintió justo a la par que escuchaban la puerta del salón de baile abrirse de par en par dejando ver a un emocionado JiSung entrar al salón.

ー¡LA COCINERA HEANG PREPARÓ CHEESCKAE Y TORTA DE CHOCOLATE, Y PIZZA!ーgritó el pequeño castaño emocionado haciendo que NamJoon no tardara en correr como alma que lleva el diablo a la salida.

ー¡Los veo en el comedor!ーfue lo único que gritó antes desaparecer.

JiMin rió confundido y miró a HoSeok estar algo serio.

ーIré con NamJoon, te esperamos alláーavisó el peli naranja tomando su mochila. JiMin asintió extrañado viendo a Jung salir de la cocina.

En ese cortó momento, Park se dio cuenta del cambio de ánimo que Jung se cargó ante lo que NamJoon iba a decir con respecto a algo x de ese día,  que no tenía nada que ver con el baile.

Jung muy pocas veces estaba serio.

"ーY-Yo... conmigo siempre se comporta así, me mira con odio..."

Sacudió su cabeza cansado y soltó aire antes de dirigirse a la esquina en la que estaban sus cosas. Revisó que todo estuviese junto y que nada le faltara, y tomó su mochila sacando su celular de uno de los bolsillos. Prendió la pantalla y miró la hora.

| 2:37pm |
27. Febrero. 2020

<■>
Marque la contraseña
para desbloquear.
1 2 3
4 5 6
7 8 9
# 0 *

Miró la fecha de aquel día y...

"ーLo sentimos..."

"ー ¡Ayuda!"

"ーMe quiere matar, te lo juro... "

"ー¡Lo pudiste salvar, y no lo hiciste, Park!"

"ー¡Mataste a mi hijo, asesino!"

"ー...no sobrevivió la noche..."

"ー¿Quién fue?"

"ーEl criminal es alguien de su circulo cercano..."

"ーTienes que creerme, JiMin... él..."

"ー¡Deja de mentir, por el amor de Dios! ¡deja de culparlo!"

"ーTú... ¿Alguna vez me amaste de verdad?"

"ーLo siento..."

Parpadeo varias veces sintiendo las lágrimas gruesas mojar sus mejillas cada mes más. Los recuerdos del veintisiete de febrero de hace tres años, venían a su mente como lienzos frescos que parecían dañar su corazón y mente ante las imagénes de 'él y yo' (como JiMin decidió llamar a la carpeta mental de recuerdos de ambos).

Hoy... hoy era la fecha.

La culpa, la ira y la impotencia que llenaba su pecho cada año en esa misma fecha, no tardó en llenarle haciendo su conciencia cargar como cada año.

 «Es hoy... maldición» pensó tragando saliva, sintiendo cómo cada latido que su corazón parecía dar, empezaba a doler.

Alzó la vista del celular, y miró su reflejo en el espejo. Y fue en ese momento, en el que pudo haber jurado volver a haces años atrás, a cada uno de los momentos en los cuales con él solían bailar en ese lugar...

[†]

ー...creo que es hora de irme. Lo siento tanto, en serio espero que me perdonesーsollozó acariciando la placa de metal con la llema de sus dedos, antes de levantarse desganado.

Miró la flores que había dejado junto a la lápida, y tragó saliva apretando sus manos, queriendo evitar que estas temblaran.

| Jeon Jung Kook |
01/09/1997 - 27/02/2017
"Dᴇsᴄᴀɴsᴀ ᴇɴ ᴘᴀᴢ, Nᴏᴄʜᴜ"

"¿Ya estás feliz con el resultado?"
"Mira lo que lograste al no hacerle caso..."
"Él te lo dijo..."
"Lo ignoraste, maldición."

«No, no, no» ahogó un nuevo sollozo.

"-No me ayudaste, ¿Por qué no me ayudaste?"
"-¡Te odio!"

Tapó sus oídos con sus propias manos susurrando en torpes balbuceos que aquellas voces pararan. Que se detuvieran y dejaran de hacerle daño.

Él sólo había querido ir a dejar flores y decirle cuánto lo extrañaba.

"Mira lo que hiciste."
"-No me ayudaste."
"Él te advirtió."
"-Te pedí ayuda."
"No lo salvaste.
"-¿Por qué no me salvaste?"

"ー¿Dónde fue el último lugar en el que el joven Jeon estuvo?

ーEn el salón baile, practicando."

"ーTal parece que este fue el último baile de Jeon JungKook..."

ー¡Basta! ¡Deténganse!ーsuplicó a nadie, cerrando sus ojos con fuerzas  lastimando sin querer sus orejas.

Tal vez... tal vez no había sido buena idea ir a visitarle.

[†]

Las gotas de sudor se resbalaban por todo su cuerpo con total facilidad y tranquilidad, la ropa se pegaba a su delgado cuerpo, y sentía a sus músculos implorar por parar. Estaba cansado, quería dormir, y aseguraba sentir todo su cuerpo ser preso del dolor que generaba el mismo cansancio. Sin embargo, no quería detener aquella pequeña práctica que había decidido hacer dado que, de seguro, en el primer segundo en el que su mente se desocupase y tuviese un momento libre; las voces lo volverían atacar haciéndolo preso de sus miedos y recuerdos. Prefería el dolor físico, al emocional.

«No, no, no, no, ¡no! ¡Lo estoy haciendo mal, maldición!» gruñó por lo bajo al darse cuenta de que se había equivocado en donde mencionaban unas voces.

"Swear to God I'm not insane
The voices only say his name when I'm starting to think that they're real..."

Frunció el ceño.

No es que el fuese experto en inglés o si quiera lo supiese hablar, a duras penas lograba defenderse en el idioma sin mandarse una, y eran pocas las veces que lograba recibir un premio o halago por su pronunciación en la lengua extranjera. No obstante, JiMin pudo entender  -a duras penas- gran parte de lo que la cantante dijo en esa parte de la canción (que, por cierto, no la habían ellos sino que se les fue dada al azar, al igual que a los otros Institutos).

«Eso... Como sea, tengo que concentrarme» se regañó sacudiendo su cabeza.

Miró la botella de agua a un lado junto a su escritorio, y bufó molesto (y cansado) al notar que no había no una gota de agua en su interior. Quería tomar agua y... tenía que rellenar la botella, claramente.

No podía seguir prácticando por más que quisiese, cuando sentía que se estaba muriendo de sed.

Agarró casi que con rabia la botella, y entre maldiciones se dispusó a bajar a la primera planta de la casa para poder rellenarla con agua y así poder volver a prácticar.

"Posó sus manos en la cintura del castaño, y se permitió acercarse más añ mismo profundizando el beso que ambos habían iniciado. Los labios de menor parecían ser cada vez más adictivos para JiMin, eran como aquel postre que nunca se cansaba de probar..."

Llegó a la cocina y prendió la luz de la misma tras notar que la noche ya había hecho de las suyas, haciendo que la oscuridad llenase poco a poco cada rincón.

Se dirigió al lavamanos, destapó la botella, y se dispusó a llenarla lo más rápido que podía.

"ー¡D-Detente!ーgritó y suplicó riendo el castaño bajo de él ante las cosquillas.

JiMin rió, y sonrió cual bobo enamorado al sentir la reacción que causaba escuchar la hermosa risa del menor."

Cerró la llave y se apresuró en cerrar la botella antes de dirigirse a la salida de la cocina para volver a subir. No obstante a ello, se detuvo en seco al ver la puerta que daba al patio trasero, estar abierta.

Frunció el ceño.

«¿La dejé abierta? Maldición» se quejó Park rogando que nada ni nadie hubiese entrado a la casa en el tiempo que hubiese estado abierta esa puerta.

Se acercó a la misma, y se encargó de cerrarla como correspondía, asegurándose de que nadie ni nada pudiese entrar.

Una vez verifico que estaba cerrada, se dispusó a dar media vuelta sobre su lugar para final mente salir.

"ー¡Vamos a comer brochetas de cordero~!ーcanturreo un emocionado Jeon cual niño pequeño.

El rubio negó riendo y agradeció la existencia de aquel alimento por hacer que JungKook se pusiese así, al saber que JiMin le invitaría a comerlas."

Pero paró en seco al ver que la luz de la cocina pareció irse de golpe justo cuando pareció escuchar algo romperse a los lejos.

«¿Pero qué...? Tiene que ser una broma» maldijo entre dientes.

Buscó su celular entre sus ropas, no evitando maldecir a los cuatro vientos al darse cuenta de que, seguramente, lo había dejado arriba en su habitación. Dejó la botella a un lado  y tanteo todo a su paso intentando buscar una de la gavetas donde de seguro su madre tendría unas velas. Para su suerte, no fue muy difícil encontrarlas, por lo que no tardó en encenderlas.

Una vez la pequeña flama iluminó todo a su paso, se dispusó a caminar hacía la puerta que daba al patio trasero para ir a ver las bragetas de la caja de luz, y que todo estuviese en orden. Abrió la puerta y salió, notando que, al parecer, había sido al único al que se le había ido la luz.

«Perfecto, genial. Jodánse» volvió a gruñir.

Se acercó la caja de interruptores, u verificó que todo estuviese en orden.

Para su sorpresa, no había nada fuera  de lo normal.

Entonces, ¿Por qué se le había ido la luz?

Su madre y su tío se encargaban de mantener todas la cuentas al día, era imposible que les hubiesen cortado la luz.

Entró de nuevo a su hogar cerrando la puerta a sus espaldas, sintiendo algo espeso bajo sus pies.

Bajó la mirada a si como también lo hizo con la vela, dándose cuenta de un desconocido líquido de tonalidad -aparentenemente- negra en el suelo. Alejó su rostro en una mueca, e intentó buscar el lugar de procedencia de la desconocida sustancia.

No obstante...

Se percató de un extraño olor a putrefacción justo en ese mismo lugar, en la cocina. El olor era insoportable, y pareció llegar de golpe a sus fosas nasales (pues, anteriormente no estaba ese olor).

Dio un paso al frente escuchando el chaspotear al pisar e hizo otra al dar otro paso y obtener el mismo resultado.

Era desagradable. Iugh.

Dio una mueca y subió la mirada tapando su nariz al sentir el aroma a muerto incrementar.

Su mente pareció darle una mala jugada ante al aroma, y el líquido bajo sus pies justo en ese momento; miles de teorías e hipótesis se cruzaban por mente intentando buscar un responsable de aquellas dos importantes cosas (el olor y el líquido). Sin embargo, no se le ocurría nada con respecto a eso.

¿De dónde provenían el olor y el líquido?

Se agachó nuevamente tocando con la llema de sus dedos la horrible sustancia dándose cuenta de su verdadera identidad, justo cuando sentía a alguien posarse justo detrás de él soltando una maliciosa sonrisa.

Y con ello había un problema, o puede que más.

JiMin creía estar solo, o quizás no era así.

Y aquella risa, no era de cualquier persona, JiMin la conocía a la perfección.

[†]

Su cuerpo dolía y la herida en su costado le hacía delirar sin darse cuenta. Las risas y diferentes susurros que llegaban a sus oídos le aturdían cada cinco segundos, y el sudor frío junto con la corriente tensa que le recorría cada que sentía las manos ajenas acariciar su cabeza; le hacían querer llorar más.

Ver aquellos ojos castaños estar sumidos en una oscuridad total que les otorgaba un horrible brillo mientras su piel lucía grisácea, y su tacto frío; le hacía sentirse totalmente pérdido, dolido y espantando.

Él estaba ahí, pero no como él quería.

Él le estaba tocando, pero no como él quería.

Él le estaba susurrando cosas al oído, pero no como él quería.

Apretó sus manos y maldijo por lo bajo haber dejado su celular tirado en el piso de arriba en su habitación, quería llamar a alguien y que le fuese a ayudar.

ーPrometo que estaremos juntos, Minnie...

Había estado susurrando aquel chico que tanto había amado mientras sus manos poco a poco se iban manchando de su propia sangre.

Los labios pálidos y sin señales de vida del castaño en frente suyo se acercaron a los suyos juntándolos en cuestión de segundos.

Una especie de canción lenta se empezó a escuchar por toda la habitación justo cuando los labios de ambos se separaron, y un gemido de dolor se escapó de sus labios apenas sintió cómo JungKook le hacía levantarse a duras penas, tomando sus manos y poniéndolas en su cintura, mientras el castaño ponía las suyas en sus hombros.

Y JiMin se aferró a la cintura del contrario, pero sólo por el simple hecho de que no quería caer al suelo como un saco de papas.

Su cuerpo dolía cada vez más, y la canción lenta junto con los pasos suaves y torturosos que le hacía dar Jeon; parecían ser lo peor para él en esos momentos.

No obstante, una pregunta llegó a su mente tras escuchar decir a JungKook: "Te perdono, te perdono por detenerlo a él..."

¿Quién era él?, ¿Acaso él había matado a JungKook?

Una nueva punzada de dolor llegó a su cuerpo sintiendo esta vez el dolor llegar su pecho. Bajó la mirada de manera temblorosa, y tragó saliva viendo el filo de un arma blanca enterrarse cada vez más en su pecho con total lentitud y tortura.

Un gemido mezclado con un sollozo abandonó sus labios justo cuando su cuerpo cayó al suelo sin cuidado.

ーLamento que este sea tu último baile, pero ya no lo sorpoto, JiMin... estoy cansado de merodear solo.

▬▬▬▬▬│┣•.¸¸.•*'¨'*•.¸¸.•*'¨'*•.¸¸.•

© FlyKingSquad
18032020