Lina: Cai enamorada pérdidamente de ti, desde el primer momento en que te conocí, como quisiera que tú también sientas lo mismo...

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Iba a ser muy difícil, y Balto lo sabia muy bien, tendría que avanzar poco a poco, con cada una de las chicas, y si bien, el estaba mas que consciente de que esto no iba a ser, para nada algo fácil de tratar, si iba convencido de dar lo mejor de si mismo, para encontrar una solución, aun por mas difícil o mal, que la situación se pudiera poner.

Sabia también, que tendría que avanzar con cuidado, si lo que quería, era que todo, se pusiera mucho mejor, a como comenzó, pero eso claramente implicaba que el tendría que proceder, con mucha, pero mucha cautela, el pronostico le decía a Balto, que esto iba a dar, para mucho tiempo, en serio, mucho tiempo, y que durante todo el mismo, Balto debía de buscar siempre, mantener el orden y la calma, en el mismo lugar, con todas ellas.

Lo único que el no esperaba, era también comenzar a desarrollar sentimientos por todas ellas.

Poco a poco, el perro lobo comenzó a despertarse, después de unas horas, finalmente se sentía lleno de energía otra vez, por un momento se sintió tranquilo, pero esta tranquilidad rápidamente murió dentro de si, una vez que recordó que aun tenia cosas que resolver, al momento de despertarse, casi por un momento, Balto llego a creer que todo había sido solo un sueño, y no porque Balto quisiera escapar de su situación, sino porque de cierta forma, los últimos eventos que se desarrollaron a su alrededor, aun seguían pareciéndole tan increíbles, como para pensar que de verdad pasaron, pero al final, Balto cayo en la cuenta de que si habían sucedido, y que aun tenia que buscar la manera de solucionar, algo que de alguna u otra manera, lo hacia sentir a el, como el culpable.

Se sentó con delicadeza en su cama, una vez que despertó, y se puso a pensar durante un buen rato en todo cuanto había pasado anoche. Su hermana Nitti, a quien miro por un momento, aun dormía plácidamente a su lado. Y Balto no planeaba despertarla, sino que la dejaría dormir, durante todo el tiempo que ella quisiera. Así que tendría que ser cuidadoso para no despertarla.

Pero mientras ella dormía, Balto solo se mantuvo pensando en ellas, sumergiéndose cada vez mas, en sus nuevos pensamientos, todavía tratando de procesar las palabras de cada una de ellas. Ahora sabia porque todas estaban ahí, en el pueblo, porque lo estaban buscando a el, y si lo buscaban a el, fue solo para declararle el gran amor que ahora sentían por Balto.

¿Entonces el despertó sentimientos en ellas sin darse cuenta?

Durante mucho tiempo, Balto pensó, que las relaciones que tuvo con cada una de ellas, iban a quedarse tan solo en amistad, y esto iba para todas, incluso con Perdita, con quien de echo había creído que al no funcionar la cita de aquella ocasión, si se quedarían solo como amigos, pero no fue así. Resulto, que de el, todas ellas estaban enamoradas, incluso aquellas de las que Balto no creía que fuera posible. Y se entre mas pensaba, mas y mas nervioso y confundido quedaba Balto, por lo que no quiso que su hermana lo viera así, de modo que con cuidado se levanto de la cama, y se fue rápidamente para la sala, pero al ver que en los sofás de la misma, aun dormían las sirvientas de Nitti, Bella y Lina, se asusto por un momento, y con el mismo cuidado que con Nitti, hizo todo lo posible, para llegar a la cocina, sin que lo vieran.

Por lo visto, todos a excepción de Balto, aun seguían profundamente dormidos, y el esperaba que se mantuvieran así por otro rato mas, y lo mismo deseaba para las otras chicas, para todas por igual, aunque sobre todo para Jenna.

Las chicas por su parte, aun no salían de donde se estaban quedando, lo que quería decir que ya no estaban dormidas, o al menos no todas, algunas ya se habían levantado, pero en esos momentos, las que ya estaban despiertas, solo yacían recuperándose de sus heridas, y algunas incluso se habían metido a bañar, ya no importándoles el frío, sino solo quitarse de si mismas, hasta el mas pequeño rastro de aquella pelea, que solo las hacia sentir vergüenza cada vez que pensaban en ello.

Aunque claro, eso no quitaba el echo de que aun seguían pensando, en que una vez que se sintieran nuevamente listas, planeaban volver otra vez hacia la casa de Balto, para buscarlo y esperar a que las cosas se resolvieran de mejor manera, algo para lo que Balto, también esperaba estar listo para afrontarlo.

Sin embargo, no eran los únicos con problemas en ese momento, pues cierto alaska malamute, ahora yacía lidiando en ese momento, con algo que el no vio venir, y no se esperaba en lo absoluto.

Steele de pronto se despertó en un cuarto oscuro, atado de patas tanto delanteras como traseras, a la vez, que se encontraba amordazado, y con los ojos vendados. Para ese punto al menos la borrachera que tenia, ya se había pasado casi por completo, y esos ya era un gran alivio, puesto que al estar tan ebrio, Steele no podía recordar como rayos fue que termino así. Solo podía recordar querer volver a su casa, y luego algo lo golpeo en la cabeza, haciendo perder el conocimiento.

Antes de que Steele pudiera hundirse mas en sus pensamientos en sus pensamientos, sintió como alguien le quitaba luego la venda que tenia en los ojos, cosa con la que incluso así, siguió sin poder ver, debido a lo oscuro que era el cuarto en el que estaba. Trato de hablar, pero no podía debido a que aun no le habían quitado la mordaza del hocico, tampoco pudo sentir la presencia de nadie, por mas que lo intento, ni mucho menos, podía moverse debido a las ataduras que ahora tenia.

Duro así, al menos cinco minutos, mismos que al menos le sirvieron a Steele, para que su vista poco a poco comenzara a adaptarse a la oscuridad del cuarto, y que para cuando su vista por fin se acostumbro a la oscuridad, Steele se dio cuenta, de que estaba bóveda de su casa, pues reconoció las cajas de herramientas, los estantes con distintas cosas de arquitectura o para arreglar otras cosas, así entre otros utensilios. Steele empezó otra vez a tratar de luchar con sus ataduras, pero era imposible, de verdad había sido inmovilizado y no tenia otra opción mas que esperar a que apareciera la persona responsable de dejarlo así.

Y como si alguien lo hubiera escuchado, eso fue justamente lo que paso. Mientras Steele miraba sus pies, y trataba en vano de liberarlos, en ese momento, la puerta de aquel cuarto se abrió de golpe, y los ojos de Steele se encogieron bastante, ante el fuerte golpe de luz. Cosa que le impidió ver a la persona que había entrado. La luz en serio lo había mareado un poco, y para colmo, la persona que entro cerro rápidamente la puerta tras de si, dejándolos nuevamente en la oscuridad. Steele empezó otra vez a tratar de hablar, sin importarle que no le entendía casi nada, ni tampoco se le escuchaba bien, debido a la mordaza que tenia. Se preguntaba quien fue el que le quito la venda de los ojos, si por lo visto, hasta antes de que esta persona a la que aun no podía reconocer porque no la veía entrara. Pero su duda fue despejada, cuando escucho un leve susurro en su oreja derecha, que definitivamente, no era de la persona que había entrado, sino que la voz se oía ronca y cavernosa, y hasta algo espeluznante, cosa que en efecto a Steele le produjo un gran escalofrío en la espalda.

Pero su temor no pudo ir mas allá, cuando escucho que la persona que había entrado comenzó a hablar, algo que solo lo hizo temblar aun mas de miedo, porque eso le sirvió para comprobar que la persona que estaba frente a el, no era la que le había susurrado en la oreja, y que todavía peor, hizo que al voltear hacia atrás en busca de quien sea que le había susurrado, viera que no había nadie mas aparte de el, y la persona que acababa de entrar, la cual ahora era imposible que fuera ella, porque aun estaba junto a la puerta, y Steele había escuchado claramente el susurro como si estuvieran detrás de el.

La voz que le susurro, se escuchaba similar a la de un hombre, osea que era masculina. Y por lo que le llego a entender, las palabras que esta misma voz le dijo, fue algo que al final lo hizo prepararse para lo que esta persona que acababa de entrar al cuarto con el hablara. Misma persona, que por lo que el susurro le dijo, ahora sabia que era una mujer.

"Escucha con atención, y haz todo lo que ella te diga...y te aseguro que entonces, tendrás una de las cosas que mas has anhelado en tu vida."

Varios segundos después de haber escuchado a la voz. Steele miro fijamente a la silueta que seguía siendo incapaz de reconocer por la oscuridad que estaba parada frente a el. Momento en el que la misma, comenzó a caminar frente a el.

La vista de Steele, que para este punto ahora si estaba ya completamente acostumbrada a la oscuridad, pudo sentir como esta persona, lo rodeaba como un depredador que tenia acorralada a su presa.

La persona de pronto se puso detrás de el de la nada, y le desato la mordaza del hocico para después quitársela, dejando que Steele comenzara a acelerar mas que nunca su corazón, pues el realmente, contrario a lo que muchos siempre habían creído de el, Steele si que llegaba a sentir miedo en muchas ocasiones, algo que por supuesto en esta ocasión definitivamente no iba a ser diferente.

Steele rápidamente supo que en efecto, y como la voz lo había dicho, la persona que estaba con el en la oscuridad, y que aun no se había revelado, era una mujer, o mas bien, una hembra, cosa que supo rápidamente una vez que la escucho hablar.

??: Escucha cariño, hagamos un trato, prometo dejarte ir sin hacerte daño, si me dices todo lo que necesito saber.

Steele trago saliva, con mucho miedo de contestar a la petición de la hembra.

??: ¿Si piensas contestarme?

El alaska malamute dudo varios segundo mientras pensaba en que si hacerlo seria una buena idea.

Continuara...

Fin del Capitulo 74.