Dixie: Te amo Balto, te amo y siempre lo haré, aun cuando no lo parezca que vaya a ser asi.

•••

Balto quedo completamente rojo debajo de su pelaje, debido a la confesión de Dixie, una confesión que el nunca se habría esperado de ella, por lo que recordaba, Dixie siempre había estado detrás de perros que no fueran como el, sino todo lo contrario. Es decir, por poner un ejemplo, Balto siempre había creído que Dixie estaba enamorada de Steele, pero ahora sabia que se había equivocado enormemente, de echo, esto no fue algo que el se imaginaria, ni siquiera en un millón de años, Balto no pensó nunca que una chica como ella, podría llegar a enamorarse de un chico como el, y sin embargo, lo cierto era que en realidad, Dixie no lo culpaba por pensar, pues ella misma fue la que lo llevo a el, a pensar de la forma en que lo hacia, con su comportamiento, y ahora Dixie había caído en la cuenta, de que en serio, la podría entristecer mucho, el echo de que Balto, no llegara a corresponder sus sentimientos, pero ahora, ella no quería pensar en eso, sino que en su lugar, estaba mas que dispuesta, a luchar por el, aun cuando sus posibilidades de ganar, fueran mínimas.

Después de lo que en serio pareció mucho, pero mucho tiempo, los demás que solo se habían quedado viendo, por fin pudieron reaccionar, para gran alivio y suerte de Balto, que solo se puso nervioso, al ver que no decían nada, pero ahora, la siguiente en hablar, fue la amiga de Dixie, la larguirucha afgana, Sylvie, siendo ahora ella, la que le confesaría y dejaría en claro, sus sentimientos por Balto, y le mostraría, lo muy valioso e importante que el era ahora para ella, algo que Sylvie nunca antes pensó que diría.

Sylvie, también estaba algo mas que solo nerviosa, pues Balto había escuchado atentamente cuando ella misma fue la que dijo, que había sido idea suya, robarse las cartas, por lo que ahora, decirle que lo amaba, justo después de confesarle lo malo que había echo, no fue precisamente, lo mas cómodo del mundo para ella, pero no pensaba irse para atrás, ella lo tenia que hacer, en serio necesitaba decirle a Balto lo que sentía, lo que ella siempre había sentido por el, y que sino fuera así, entonces no habría echo nunca lo que hizo, es por esto mismo, que Sylvie se tuvo que armar con todo el valor necesario que podía, para poder hacer su declaración de amor.

Balto: Y supongo entonces...que tu también vas a decirme lo mismo, ¿o no Sylvie?

Dijo una vez que vio a la perrita nombrada pararse delante de el, de la misma manera en que ya lo había echo su amiga Dixie.

Sylvie: Así es Balto, yo también me he enamorado de ti, yo también tengo sentimientos por ti, y necesito que tu lo sepas, Balto, yo...te amo, en serio te pido perdón por no habértelo dicho antes.

Balto: Bueno Sylvie, yo...no se que decir.

Sylvie: No te preocupes por eso Balto, de la misma forma en que Dixie hizo contigo, no tienes que decirme nada aun si no quieres, yo también quiero darte un momento para que pienses en esto que te he dicho, sino te sientes a gusto con mis palabras, eres libre de decírmelo, pero por favor, en serio me gustaría mucho, que pienses en lo que te he dicho.

Dijo para luego tomar con sus dos patas, una de las de Balto, y respirar hondo antes de continuar.

Sylvie. Y sin embargo, también quiero que sepas, que en serio estoy arrepentida, muy arrepentida por haber sugerido y alentado a todos, a llevarnos tus cartas, no teníamos derecho, y sin embargo, eso a mi no me importo, quiero que sepas, que en verdad estoy muy arrepentida por lo que hice, y de verdad te doy mis mas sinceras disculpas, por mis tan malos, e incorrectos problemas, que he cometido hacia ti, quiero que sepas, que si entiendo la gravedad de mis actos.

Balto la miro a los ojos, y pudo ver a través de estos, que Sylvie estaba diciendo la verdad, tanto que incluso pudo ver como de estos también comenzaban a salir lágrimas, o al menos, pudo ver que en ellos, las mismas habían comenzado a formarse, la mirada de Sylvie se había puesto completamente vidriosa, y esto llevo a Balto, a que en vez de sentirse enojado con ella, sintiera todo lo contrario, en otras palabras, Balto se sentía muy mal por ella de pronto, y como ya se dijo, pudo ver en ella, que en serio, Sylvie estaba arrepentida de haber echo lo que hizo, en ese momento, a Balto se le olvidaron por ese par de minutos, que afuera de su habitación, había otras chicas mas aparte, que también estaban esperando, ya que había sido a partir de este punto, que Balto pudo ver, lo mucho que el en serio debía de significar para todas, y que en serio, ahora tenia en cuenta, de que Nitti no era la única hembra a la que el le importaba mucho, y que se sentía feliz de por fin volverlo a encontrar, ahora había muchas mas, no solo Nitti.

Fue justo en ese momento, que Balto nuevamente sorprendió a todos, ya que, apiadándose de Sylvie, hizo algo, que llevaría a la larguirucha afgana a respirar aliviada, aunque aun quedaría sintiéndose con algo de culpa y vergüenza, y completos deseos de compensar a Balto por lo echo.

Balto: Esta bien Sylvie, no te preocupes, yo no te guardo rencor, de echo, no le guardo rencor a ninguno.

Ante esa respuesta, el resto de los que estaban escuchando, palidecieron notoriamente, por lo que acababan de oír.

Kaltag: ¿Lo dices en serio Balto?

Balto: Claro que lo digo en serio Kaltag, no se preocupen, en realidad no los culpo a ustedes por lo que esta pasando ahora.

Kaltag: Pero Balto, nosotros...

Balto: Si Kaltag, no negare, que ahora las chicas, están bastante molestas por que nunca leí sus cartas, y tampoco ustedes han de negar, que estuvo mal lo que hicieron, pero vamos, yo tampoco tenia idea de que algo así podría pasar, yo también por mi parte, decidí dejar todas esas cartas para leerlas mas tarde, pensando que podrían tratarse de otra cosa, menos de unas cartas de amor, y sin embargo, me equivoque enormemente.

Star: Bueno Balto, pero lo que nosotros hicimos, tampoco estuvo bien.

Balto: Y es bueno que lo reconozcan, después de todo, yo no los culpo por sentirse así, pero si diré que es bueno, que muestren culpa y remordimiento por lo que hicieron.

Kaltag: Desde luego que sentimos culpa, remordimiento y arrepentimiento por lo que hicimos Balto, en aquel momento, tan solo estábamos pensando de una manera muy egoísta, y sin detenernos a pensar, en que nuestras acciones podrían tener graves consecuencias.

Balto: Pero es por eso mismo, que yo te digo, que tampoco debes sentirte tan así Kaltag, después de todo, yo tampoco vi esas cartas, yo tampoco me tome el tiempo de leerlas para prever que algo como esto podría pasar, y mirame ahora, resulta que no solo esto esta pasando aquí, sino que ahora también han venido desde diferentes partes, para poder verme.

Star: ¿Y tu como te sientes al respecto Balto?

Balto: Pues no lo se Star, ¿Ustedes como creen que me siento?

Star: Ah...pues sorprendido.

Kaltag: Confundido.

Dixie: Sin palabras.

Sylvie: Conmocionado.

Balto solo sonrió por primera vez después de un largo rato, al darse cuenta de que quizá, no todo era tan malo en realidad después de todo.

Balto: Pues en realidad, todos están en lo correcto, por lo visto, en estos últimos días, no han dejado de sucederme muchas cosas, que yo nunca antes me habría imaginado que me podrían suceder. Un día como cualquier otro, me entero de que mi padre, antes de morir, me escribió y mando una cartas, pidiéndome que vaya al encuentro con mi hermana, a quien yo creía que nunca iba a encontrar, pero que por fortuna siempre estuvo bien, y no solo eso, sino que estaba también junto a mi padre, si eso de por si ya me había alegrado mucho, el echo de por fin volver a verla en persona, me produjo una gran felicidad, que simplemente no me alcanzarían las palabras para describirla, mi padre lamentablemente ya había muerto, pero al menos, Nitti y yo podríamos volver a estar juntos después de tantos años separados, eso en serio fue una de las mas grandes alegrías de mi vida, y no solo eso, sino que allá, en donde Nitti y mi padre habían vivido juntos por un breve espacio de tiempo, también pude conocer a mucha gente en verdad maravillosa, esa Tierra completamente desconocida para mi, resulto ser un lugar muy hermoso en serio, y del que no me arrepiento para nada de haber ido al mismo, pues ahí conocí a mucha gente maravillosa, como lo fueron de entrada, las dos sirvientas de mi hermana, que por cierto se llaman Bella y Lina, y que a ustedes estoy muy seguro que les caeran muy bien, si las conocen a fondo, pero no solo a ellos, sino también a un par de chicos, que resultaron ser los responsables de hacer posible la reunión de mi padre y hermana, y con quienes pude convivir, luego de que Nitti me pidiera quedarme ahí por un tiempo, mientras me enseñaba mas sobre ese lugar tan hermoso.

Dixie: Vaya Balto, por lo visto en serio debiste de disfrutar mucho de tu estadía en ese lugar.

Balto: Así es Dixie, por supuesto que lo hice.

Sylvie: Entonces esa chica que estaba contigo, ¿de verdad es tu hermana?

Balto: Así es Sylvie, ella es mi hermana perdida, y a quien yo estuve buscando por mucho tiempo, y aguardando también por el día en que pudiéramos volver a encontrarnos después del día en que nos separamos.

Kaltag: Pues nuevamente te digo, que en serio quiero que sepas, que estamos muy felices, porque por fin volvieras a encontrarte con tu familia.

Balto: Y agradezco mucho tus palabras amigo.

Kaltag: Y es por eso, ¿que estabas así de conmocionado?

Balto: No solo por eso Kaltag, como iba diciendo, pase un tiempo allá, en donde vivía actualmente mi hermana, hasta que llego el momento de volver a casa, pero claro, era algo en lo que no había pensado, ni que tampoco quería hacer ahora que ya había encontrado de nuevo a mi hermana.

Sylvie: ¿Y entonces que hiciste?

Balto: Pues fue entonces cuando ella...me propuso mudarme a vivir con ella.

Continuara...

Fin del Capitulo 62.