Pasaron 1 mes y fui dada de alta, Eli se le ocurrió la brillante idea de ir a un bar a festejar mi supuesto regreso, así que ni modo tocará ir al bar con esa loca.

-Se mira al espejo -¿no crees que esto es muy descotado?

-Para nada, de paso esto está a la moda.

-Segura.

-Segurisima.

Así estaba vestida yo

Así estaba vestida Elizabeth

- Hora de divertirnos.

-Suspira- siento que estoy va a terminar mal.

Ambas nos fuimos al bar, había muchos hombres borrachos, mujeres bailando como si fuera el fin del mundo y otros conversando, la música era alta y mucho ruido.

Llegamos a sentarnos en una mesa VIP, nos trajeron las bebidas y Elizabeth empezó a beber como una despechada.

-Eli no bebas mucho, recuerda que tenemos que ir caminando.

-Shhhhhh- se ríe como loca - pedimos un Uber y listo.

-Ya con tres copas y estás borracha.

-No lo estoy.

Ambas nos reímos, a decir la verdad estábamos pasándola bien.

-Señalo a un chico en la barra acompañado de sus amigos - mira ese chico sexy.

-Voltero a ver - que dices, son unos chicos nada más.

-Por dios Andrea estás más ciega, que Glenn cuando mira una chica sexy.

Ruedo los ojos y sigo bebiendo, a la hora Elizabeth se levanta y fue a bailar sola en la pista, en el cual veo el mismo chico de hace un rato detrás de ella bailando.

-Susurra- no pierde el tiempo.

Dejo la copa de la mesa, y me dirijo hacia el baño cuando siento que alguien me acorrala hacia la esquina.

-Susurra-¿Que carajos haces aquí?

-Volteo los ojos- lo mismo digo yo.

-Si es para recuperarme ya es tarde.

-Se rie - quien va a querer casarse con un narcisista como tú.

-Se rie- te da tanta envidia mi belleza gatita.

-Ruedo los ojos- yo envidia a ti -se rie- por algo te deje plantada Narciso.

-Susurra en el oído - sere nardizo pero te recuerdo que conozco cada centímetro de tu cuerpo- le muerde la oreja-.

Le doy una patada entre sus bolas, y veo caer al piso.

-Cruza los brazos - ups lo siento cariño, espero dejarte sin herederos-me volteo y me fui de allí-.

-Cruzo los brazos- aish ese maldito loco bastardo- aunque debo admitirlo, se a vuelto más galán todavía-.

Me fui a buscar a Elizabeth para irnos, cuando de repente la veo besuqueandose con el extraño.

-Susurra- maldita traicionera.

Regrese a la mesa, agarre mi bolso y me fui del lugar, mientras caminaba en la calle siento que alguien me jala y caigo en su pecho.

-Trato de safarme - que carajo estás haciendo.

-Me presiona el brazo izquierdo - vas a pagar todo el daño que me has causado.

-Maldito infeliz de mierda.

Sin pensarlo dos veces el hombre extraño besa apasionada a nuestra protagonista, haciendo que ella le siga su beso apasionado.

Poco a poco el hombre extraño la arrastra a un carro y ambos se fueron del lugar.

Fin.