https://youtu.be/5hDEd0h9KYQ

Quiero ver tu sonrisa volver

(Se ve a Wolfurio, Lirian y Boulderon, quienes parecen ser los que están cantando. La imagen se ve de blanco y negro).

Ya no veré hacía atrás

(Aun blanco y negro, se ve a Camilo con la expresión agachada, sentado en un trono de piedra).

Quiero caminar de frente pero tu cansado estas.

(Se ve a los Peleadores reunidos en una sala de estar, cansados y derrotados).

De tanto sonreír.

(Se muestra el collar de Pegaso que Claire le regalo a Camilo en navidad tirado en el suelo)

No tienes que fingir.

(Se ve la sala del Orbe Sagrado, y al Orbe, aun en blanco y negro, brillar intensamente)

Es buenos ser feliz de vez en cuando para ti.

(Se ve a los Peleadores, Claire y Ginebra levantarse, con expresiones decididas en sus rostros).

(La música suena mientras se ve a Marduk mirando al horizonte desde lejos, para hacer un acercamiento más de cerca rápidamente. La imagen cambia de golpe para mostrar un casco con un yelmo que cubre el rostro de quien lo usa).

(Seguidamente, se muestra el titulo del fic en un espacio parecido a un cielo despejado, siendo la primera imagen a color).

Tu tierna voz no siempre trajo sufrimiento y no quiero arrancarlo desde adentro

(Se muestra desde la perspectiva dos escenas: a Camilo, acercándose a un Marduk llorando después de que ambos perdieran a sus compañeros y a Camilo conociendo a Claire).

Quiero que vuelvas, pero si lo fuerzo puedo lastimarte más que ahora.

(La escena cambia de golpe, con una Claire en medio de una calle en una ciudad a oscuras. Se muestra en imagen muy brillante el momento en que Camilo y Claire estrechan sus manos la primera vez, haciendo énfasis en ese momento).

Ya no existen las palabras, pero todo lo que haces me revela la verdad...

(Camilo y Marduk pasan uno frente al otro, como si fueran fantasmas atravesándose. La imagen muestra a Camilo de pie en una calle).

Y no se haya nada más.

(Al mismo tiempo que Camilo se da la vuelta, el fondo se quema y muestra a Goodwin en un espacio oscuro, extendiéndole la mano a Camilo, invitándolo).

Guárdalo en lo más profundo si.

(Se muestran rápidamente y uno a uno a todos los amigos que los Peleadores hicieron: a los Vexos, la Resistencia, Daku, Fabia, Serah, Linus, Ren, Mason, Zenet, Lena, Relena, Alfredo, Serena, John, Ashoka, Felipe, Sabine, Rafe, Page, terminando con mostrar a los miembros de los equipos Anubias y Sellon).

Si somos libres para amar, será bueno dejar de soñar.

(Se muestra la imagen de un hombre moreno que parpadea hasta transformarse en el Caballero Esqueleto. Después, se muestra la imagen de un Goodwin en sus veinte que parpadea hasta mostrarse al Goodwin de la actualidad, el empresario).

Y si no quieres volverlo a hablar.

(Con un movimiento de capa, se muestra a Goodwin y la imagen retrocede, mostrando a Anubias, Sellon, Caligula, Kazarina y Dukhan mientras la imagen se alejaba más, mostrando ahora una vista completa del castillo).

Yo nunca te abandonaré.

(Se ve a Camilo sentado en un trono de piedra, con una sombra oscura envolviéndolo lentamente).

¡Contigo estaré!

(Se ve a Marduk levantarse).

Quiero ver tu sonrisa volver.

(Se muestra a los Vexos juntos y la imagen asciende para mostrar sus Bakugan juntos y alineados).

Ya no veré hacía atrás.

(Los Bakugan lanza sus ataques al unísono contra una figura oscura que repele sus ataques fácilmente).

Quiero caminar de frente pero tu cansado estas.

(Drago lanza un rayo de energía contra Némesis, que lo esquiva en el aire y lanza su propio rayo que Drago esquiva y ambos chocan sus garras, mirándose con odio desmedido).

De tanto sonreír, no tienes que fingir.

(Lionel atrapa su espada, mirando adelante suyo a Inhar Lumagrow Haos que carga un ataque en su boca. La imagen muestra a Vladitor blandiendo su espada de doble hoja, liberando energía purpura hacía el frente).

Es bueno ser feliz de ves en cuando para ti.

(Se muestra la imagen de Camilo de espaldas caminando hacía adelante. Una sombra lo cubre por completo, y al girarse, se lo ve con la armadura oscura de sus visiones y sus ojos eran dorados de un tono oscuro).
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John y Sellon se observaron fijamente, como si estuvieran en un concurso de miradas y el primero en pestañear perdería. El aire gélido del planeta muerto se había filtrado por la puerta abierta del estudio, tocando sus cuerpos, pero a ninguno le importo.

John intento usar su telepatía. para meterse a la mente de la Neathiana para, al menos, saber su identidad. Aunque en el fondo no lo necesitaba, ya que al ver a Anubias, le quedaba claro quien era esta mujer. Lo único que pudo ver en su mente era una especie de muro invisible que le impedía entrar. No era una defensa mental preparada por ella, sino algo que alguien más hizo. Seguramente fue Goodwin con Mythos. Debió adivinar que lo encontraría a él en algún momento y creo defensas mentales para sus subordinados.

John podía romper esas defensas con un ataque psíquico y entrar, pero sería forzar el subconsciente de a quien atacaba, lo que sería una violación a su mente. Una de las leyes sagradas de su pueblo era el nunca entrar a la fuerza a la mente de otro individuo con riesgo de dañarlo permanentemente. Aunque era el último marciano, John mantendría viva las tradiciones y leyes de su pueblo.

-El libro, por favor- hablo Sellon con voz suave y con falsa amabilidad. -No quisiera una pelea innecesaria-.

-Si, claro- se mofó John. -¿Para eso trajiste a los Bakugan Caos?-.

-Son un seguro. Gente de mi nivel no puede salir sin escolta-.

-Ya terminemos con el juego de mascaras. Se que eres tu, Sellon. También se que tienen a Camilo y Leonidas y que quieren al Necroshade para prepararlos como receptáculos para el poder de Logos-.

Sellon no se sorprendió por que John conociera su identidad o supiera que tienen a Camilo Navas y su Bakugan. Lo que si la sorprendió, fue que conociera el verdadero nombre del Dragón Carmesí. No deberían conocer ese nombre.

-¿Cómo sabes ese nombre?-.

-No solo se el nombre, sino que sabemos todo de esa criatura: que es en realidad, su relación con el Orbe Sagrado y su objetivo- revelo John con voz profunda y porte firme.

Sellon se mordió el labio inferior suavemente. No sabe como, pero los Peleadores ya sabían todo de Mythos. El señor Goodwin esperaba mantener el misterio como una ventaja un poco más y revelarlo cuando los planes ya estuvieran bien avanzados, pero ahora ya no era posible.

-Es imposible que ellos lo averiguaran en tan poco tiempo. Alguien tuvo que decirles. Esa misma persona debió hablarles del Necroshade. ¿Pero quien? Nadie sabe tanto del dragón aparte del señor Goodwin-.

John no debía usar sus poderes para saber lo que pensaba la chica. Se estaba debatiendo mentalmente como sabían tanto y quien les ayudo. Al parecer, ellos no estaban al tanto de la presencia de Merlín, o al menos Sellon no lo estaba.

-¿Cuál es tu deseo para seguir a un ser como el que quieren liberar?- Pregunto John. .Se que eres lista, Sellon. Estoy seguro que puedes ver que Logos solo los esta usando para liberarse, y cuando sea libre, ya no los verá necesario y los eliminará. Lo que sea que te prometió, no vale la pena-.

-¿Qué sabes tu de mi o de lo que quiero, marciano?- Contesto Sellon con aire sombrío. De algún modo, aunque sus ojos no tenían pupilas, se rasgaban y adquirían una expresión más y más amenazadora con cada palabra. -Ustedes, la gente que hace cosas buenas de manera desinteresada, creyendo ser héroes, son el tipo de gente que más odio. Quiero ver sufrir a esas personas. Quiero ver a los Peleadores sufrir y caer en la desesperación ante el peso de su fracaso. No porque alguna entidad superior me lo haya ordenado, sino porque el señor Goodwin así lo quiere, y su palabra es mi ley-.

-Entonces, no haces esto por Logos, sino por Goodwin- observo John con interés, descubriendo más de su enemiga con cada palabra. -¿Qué fue lo que hizo ese hombre para que merezca tanta lealtad como para que estés dispuesta a condenar a todo el universo?-.

-Él me salvo. Cuando mi familia murió, cuando me quitaron todo e intentaron acabar conmigo solo por existir, él me salvo y me dio una vida. Jure usar la vida que salvo para perseguir sus objetivos y eliminar a sus enemigos-.

De repente, Sellon abrió los ojos y sonrió sin gracia. Los cerró un momento y sacudió la cabeza.

-Hacerme hablar para sacar información. Buena estrategia. Los últimos sucesos me han dejado algo agotada y están sacando el peor lado de mi- murmuro para si al final, abriendo los ojos, teniendo una mirada más templada. -Ya basta de charlas; dame el Necroshade. Se bien que no puedes cambiar la densidad de objetos o de otras personas, así que tu truco de pasar por las paredes no funcionara-.

Si que sabían bastante de él. ¿Goodwin pudo adquirir la información de sus poderes cuando ingreso a su mente? Era una posibilidad; pero fuera como fuera, lo que Sellon decía tenía razón. Podía intentar doblegarla a la fuerza, estaba seguro que podría hacerlo sin problemas, pero había al menos un Iroh Dragonoid afuera, seguramente con ordenes de atacarlo si hacía alguna acción que amenazara la seguridad de Sellon.

No solo eso, sino que también estaba el problema del maldito libro, cuyos susurros John comenzaba a escuchar en su mente. Bloqueaba esas voces con sus poderes, pero sabía que mientras más sujetara el libro, más peligroso sería para él.

-¿Quieres el libro? ¡Ve por él!- Con un fuerte movimiento de brazo, lanzo el libro hacía adelante, pasando de largo a Sellon, saliendo volando hacía fuera.

-¡No!- Exclamo Sellon con pánico, girando la cabeza hacía la puerta donde salió el libro. Rápidamente volvió la mirada hacía adelante, viendo al marciano atravesar el suelo como un fantasma. -¡Atrapa el libro!- Le ordeno al Bakugan Caos.

El Iroh Dragonoid voló en dirección al libro e intento tomarlo con sus garras traseras, pero al ser muy grandes y el libro muy pequeño en comparación, le resultaba más difícil de lo pensado.

John reapareció en el aire, atrapado el libro en el aire y alejándose del Bakugan Caos, que rugió y empezó a perseguirlo.

-¡Tengo el libro! ¿Qué hago con él?- Pregunto John a todos a través de un enlace psíquico.
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-¡Mantengo lejos hasta que Merlín llegue!- Respondió Shun, ocupado en su batalla con Caligula y Fury. -¡Doble poder activado: Enchio Rojo - Ataque de Espadas + Enchio Rojo - Tokakewaru!-.

Taylean lanzo kunais hechos de energía que se generaban automáticamente en sus manos. Lanzaba cuatro por mano. Fury se cubría con sus alas de las dagas ninja que explotaban al hacer contacto. No hacían daño al Nonet, pero las explosiones comenzaban a cubrir su vista.

Con un grito, Taylean creo un kunai de la mitad de su tamaño que lanzo como proyectil hacía Fury. La explosión del impacto genero una gran cantidad de humo que tapo al Bakugan Darkus.

Taylean dudaba que hubiera hecho un gran daño a su enemigo. Así lo comprobó cuando vio una sombra notarse bajo sus pies. Sin mirar arriba, se hizo a un lado, evitando un rayo de energía que golpeo el punto donde antes estaba parado.

Fury, que no había recibido daño por los ataques de Taylean gracias a sus alas, había aprovechado la cortina de humo para posicionarse arriba y atacar, pero no le funciono. Su enemigo es del tipo con astucia y habilidad. Un tipo molesto que no morirá fácilmente.

-Poder activado: Destructor Huesal-.

Aprovechando la ventaja del vuelo, Fury disparo dardos hechos de huesos de su muñeca a una velocidad que cortaba el viento y hacía un sonido agudo al volar.

Taylean comenzó a moverse por el campo. Esquivar los proyectiles era difícil, ya que eran muy pequeños y eran disparados muy rápidos como para esquivarlos, haciendo que no pudiera evadirlos todos. Uno se clavo en su muslo izquierdo, el otro se enterró en su hombrera derecha, sin tocar la piel y un tercero en su antebrazo. Taylean siseo de dolor por las que se enterraron en su piel, pero las ignoro. No era un daño grave, a lo mucho molesto, pero que no le impediría luchar.

Shun sabía que debía equilibrar la balanza ante la ventaja áerea de su enemigo. Por suerte, tenía la herramienta adecuada.

-Bakunano Hammermor, ¡destruye!-.

Los discos brillaron como acto de aparición, manifestándose en los antebrazos de Taylean. No perdió tiempo y saco las cuchillas que tenían ocultas y lanzo el primero hacía Fury, que no hizo gesto para esquivarlo, ya que pensaba que aunque lo golpeara, las cuchillas no lo cortarían.

Pero se equivoco. Un grito sorpresa de dolor escapo de él cuando la cuchilla golpeo y corto el pecho, dejando una marca de corte en la armadura de huesos de esa parte. Esa sorpresa fue aprovechada por Taylean, que saltando entre montículos de tierra, se elevo y tomo el pie de Fury desde el tobillo.

-¿Qué? ¡Suéltame!- Demando Fury, agitando la pierna.

-Como quieras- dijo Taylean tranquilamente. -Shun-.

El pelinegro asintió. -Poder activado: Estilo Kazami: Tornado Fénix-.

Rugiendo de poder, el cuerpo de Taylean emana rápidamente energía de su atributo con una aura que lo envuelve como si fuera una llama de poder puro. Taylean tomo el pie de Fury con su otra mano y con pura fuerza física potenciada por el poder, lanzo a Fury hacía abajo.

El Bakugan Darkus extendió sus alas, evitando impactarse contra el suelo, pero rápidamente giro para ver al cielo. Taylean con su puño levantado, y la energía de su atributo cubriéndolo con una capa con la forma de un fénix, fue lo último que vio antes que el puño cubierto de energía lo golpeara en la cara y lo estrellara, rompiendo el suelo donde se impacto, quebrando todo a su alrededor y levantando rocas.

Con su puño incrustado en su enemigo, Taylean lo uso para apoyarse y saltar, guardando las distancias para cuando Fury se recuperara. Aunque ese ataque hubiera sido suficiente para dejar fuera de combate a cualquier Bakugan del nivel de Taylean o menor Fury tenía más poder que él. Shun y Taylean lo sabían, así que por eso, en vez de enfrentarlo directamente, usaban su velocidad, agilidad y pensamiento rápido para atacar.

Las rocas alrededor del área donde estaba Fury se elevaron y explotaron mientras el Bakugan Darkus se ponía de pie, emanando un aura oscura e intensa. Por la energía que liberaba y su lenguaje corporal, estaba claro que estaba molesto.

-¿Cómo te atreves a golpearme? Maldito ser inferior. ¡Soy el líder de los Nonets! ¡Una basura como tú no tiene derecho de golpearme!- Ladro Fury con ira.

-Ahorrémonos el discurso ególatra para después. Tengo un trabajo que hacer- dijo Taylean, descartando las palabras de Fury como absurdas.

-¡Desgraciado...!-.

-No pierdas la calma, Fury, que eso fue lo que provoco que Vladitor te derrotara la última vez- dijo Caligula a su Bakugan. -Para ser tan poderoso, eres bastante tonto, ¿no? Se nota que te falta experiencia contra tipos de tu nivel-.

-No existe gente de mi nivel. Yo estoy por encima de los Bakugan corrientes- se jacto Fury. Se tomo un segundo de silencio, en donde respiro y suspiro. -Pero tienes razón en que debo calmarme- fijo su vista en Taylean. -Esta plaga es molesta, pero hasta yo reconozco la habilidad cuando la tengo enfrente. Supongo que merece que lo aplaste con mi poder-.

-Esto es malo- pensó Shun. Por lo que Vladitor les conto de Fury, había esperado poder usar la furia sin control de Fury en su ventaja, pero parece que al haber obtenido un compañero, este lo ayudo a calmar sus impulsos violentos. -Supongo que habrá que esforzarnos al máximo, Taylean-.

-Muy bien- respondió Taylean, recibiendo en su antebrazo el disco con cuchillas que lanzo anteriormente.

-Espero que los demás estén bien- pensó Shun en sus camaradas.
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(Con Ginebra)

La batalla entre el ángel del viento y la quimera de fuego, agua y oscuridad estaba equilibrada, pero apenas.

La fuerza de Quimera Horridian había aumentado a niveles que abrumaba a AmirGoul, quien apenas podía igualar la batalla. La ventaja de volar no existía, ya que Horridian también podía hacerlo aun sin tener alas.

-Poder activado: Lanza de los Cielos-.

Con su confiable lanza manifestándose, AmirGoul lanzo estocadas y mantuvo la distancia entre los dos. Los nuevos poderes de Horridian eran un misterio del que necesitaba tener cuidado y no dejar que se acercara mucho.

Horridian ladeaba la cabeza, esquivando la punta de la lanza y desviándola con sus garras mientras intentaba cerrar la distancia para lanzar un golpe, pero AmirGoul lo mantenía lejos con una patada o retrocediendo para dar un nuevo golpe.

Poco a poco, gracias a la maestría de la lanza sobre los ataques salvajes y brutos de su enemigo, AmirGoul parecía tener la ventaja, ya que la lanza golpeo el pecho de Horridian, la armadura protegiendo el cuerpo de que la punta.

-Suficiente de juegos- dijo Anubias. -¡Poder activado: Trampa de Altamar!- La carta brilla de color celeste.

Lo que anteriormente fueron los tentáculos de Krakenoid, se estiraron y se envolvieron alrededor de las muñecas de AmirGoul. El agarre era tan fuerte que el Bakugan Ventus sentía un ardor y dolor, pero se negó a mostrarlo.

Tirando de esos tentáculos, Horridian lo atrajo a él y levanto sus garras que estaban listas para destripar a su enemigo.

-¡Poder activado: Liberación del Cielo!-.

Antes que Horridian conecte su golpe, AmirGoul brilla de un intenso tono esmeralda por unos segundos. Los tentáculos atados a sus muñecas cayeron como si no sujetaran nada. Eso le permitió al Bakugan bloquear la garra con su lanza.

-¿Pero que hiciste?- Pregunto Anubias confundido.

-Liberación del Cielo cancela el poder activo del enemigo- explico Ginebra.

Con un pequeño grito, AmirGoul aparto la garra de Horridian y giro su lanza, lanzando una fuerte estocada que golpeo el pecho de Horridian, que para su suerte, su armadura protegió su cuerpo de la punta filosa, pero igual lo empujo unos metros.

-¡Horridian!- Grito Anubias, viendo a su Bakugan perder la ventaja. -Horridian es más fuerte que tu patético Bakugan. ¿Cómo puedo estar perdiendo?-.

-Lo que sea que le hiciste, fue recién, ¿no?- Pregunto AmirGoul. Anubias no respondió con palabras, solo gruño. -Supongo que si. Él no ha tenido el tiempo para adaptarse a sus nuevos poderes y los cambios que adquirió su cuerpo. Solo míralo-.

A pesar no haber recibido casi nada de daño y que la batalla no ha sido tan larga ni tan intensa, Horridian comenzaba a mostrar signos de cansancio. Su postura estaba encorvada hacía adelante, a diferencia de cuando surgió erguido y empoderado. Su boca estaba abierta y se escuchaba un poco que respiraba por el hocico. Su pelaje negro estaba algo brilloso por el sudor.

Como dijo AmirGoul, al haber evolucionado recientemente, Horridian no había tenido el tiempo para acostumbrarse a los cambios tan drásticos que sufrió, haciendo que gaste más energía en sus movimientos de lo necesario. Sumado a que durante toda la pelea, AmirGoul, con sus movimientos lentos y estratégicos, ha hecho que su enemigo gaste energía, han puesto al Bakugan fusionado en un rincón.

Anubias apretó los dientes con rabia. No quería admitirlo, pero su oponente tenía razón y él había sido un idiota por no darse cuenta. Pero no dejaría que eso fuera un obstáculo. Claro que no. No se permitiría volver a perder.

-¡Poder activado: Aullido de Licántropo!-.

Horridian dio un fuerte aullido de lobo con la cabeza apuntando al cielo. AmirGoul se preparo para lo que sea que trajera eso, pero rápidamente noto algo que lo asusto en su cuerpo.

-¡¿Qué le pasa a mi cuerpo?!- Su cuerpo entero comenzó a temblar como si hubiera salido de bañarse del agua más fría del mundo al aire libre. Intento mover sus músculos, pero su cuerpo no reaccionaba. Tan así, que la lanza que sostenía cayo de sus manos. -No puedo moverme...- Ni la lengua podía mover.

-Aullido de Licántropo libera unas vibraciones que resuenan con los impulsos eléctricos de los músculos de cualquier Bakugan que lo oiga, haciendo que su cuerpo sea incapaz de moverse- explico Anubias, recuperando la sonrisa arrogante que había perdido antes cuando AmirGoul explico el fallo en Horridian. -Creo que ya me gusta. ¡Acábalo, Horridian!-.

Con un rugido, el Bakugan de tres atributos se acerco hasta estar al frente de su enemigo, propinándole una serie de zarpazos en la cabeza y el torso a tal velocidad, que el Bakugan Ventus apenas podía verlos, pero no podía defenderse de ellos por las vibraciones que aun afectaban a sus músculos.

Ginebra solo podía ver impotente como su compañero era acribillado por los golpes de su enemigo sin poder hacer nada. No podía quedarse quieta y ver como sufría.

-¡Poder activado...!- Pero la carta no surgió. -¿Qué pasa?-.

-Mientras Aullido de Licántropo siga funcionando, no podrás activar ningún poder. ¿Acaso se me olvido mencionarlo?- Explico Anubias con sorna y una sonrisa que le daban ganas a Ginebra de quitársela de un golpe.

Con una fuerte patada en el estomago, Horridian lanzo a AmirGoul descendente a una roca, estrellándolo y ocasionando que la roca cayera en pedazos encima suyo.

Sabiendo que no tenía de otra, a menos que deseara acabar en pedazos, Ginebra cerró sus ojos, yendó a lo más profundo del núcleo de su ser, lo que componía su existencia. Lo encontró como una especie de cofre cerrado con llave. Ese cofre constataba del máximo secreto de las Dollianas, la razón por la que, seres creados artificialmente como ella existían.

Y en este momento de necesidad, abrió el cofre.

Anubias observo con una ceja alzada como un aura blanca rodeaba el cuerpo de Ginebra. Había escuchado que la chica tenía alguna clase de poder, pero nunca le prestó atención ya que no la veía como una oponente digna de su interés. Vaya giro de la cosa.

Cuando Horridian descendía para empalar con sus filosas garras a su enemigo enterrado en las rocas, estas salieron volando de un estallido desde el interior. Horridian se detuvo en el aire, apartando las rocas que se dirigián a él. Abrió los ojos sorprendido cuando AmirGoul apareció delante suyo.

El ángel de viento golpeo a Horridian en la cara con una cachetada, seguido de un rodillazo en la ingle que hizo chillar de dolor al Bakugan, que no tuvo tiempo de atacar porque su enemigo lo tomo de los hombros para elevarlo con él al aire.

-¡Triple poder activado: Raisa Hall + Sky Down + Martillo de Tormentas!-.

Elevándose más y más en el aire, al punto que era difícil verlos desde el suelo, ráfagas de viento comenzaron a envolver a ambos Bakugan. AmirGoul se aseguraba de mantener bien sujetado los hombros de Horridian para impedirle subir sus garras y atacarlo como había hecho antes, como se evidenciaba los cortes en su cara y en su armadura dorada que cubría su pecho y que estaba cubierta de cortes. También mantenía su cabeza lo suficientemente lejos del alcance de la de Horridian para evitar sus grandes mandíbulas. En este caso, era una suerte que ahora su enemigo solo tuviera una cabeza.

AmirGoul dejo de ascender para dar medio giro y comenzar a descender, dejando que la gravedad haga lo suyo y los arrastre hacía el suelo. Horridian, viendo lo que planeaba hacer su rival, lucho con más fuerza para soltarse, pero AmirGoul los soltó de los hombros para rodear el cuerpo de su enemigo con sus brazos, en un "abrazo de oso", como lo llaman los terrícolas.

Mientras descendían, las ráfagas de viento que lo cubrieron comenzaron a a cubrirlos cada vez más, al mismo tiempo que AmirGoul los hacía girar a los dos a la velocidad de un tornado, atrayendo el viento aun más a ellos.

Las fuertes corrientes de aire que generaba y atraía terminaron por formar un tornado con él como centro, era tan grande como la torre misma en la que se escondía lo que vinieron a buscar. Las corrientes de aire agitaban las rocas y montañas cercanas.

El tornado y el mismo AmirGoul brillaron de poder con la energía de su atributo, haciendo que el fenómeno natural que era el tornado verde parecía un fenómeno antinatural.

Un poderoso grito de batalla salió desde lo más profundo del tranquilo AmirGoul, quien al notar que tenía el nivel del suelo cerca, desplego las alas en su espalda que normalmente usaba como arma.

-¡Poder activado: Escudo Quimera!-.

Y cuando la victoria parecía estar a su alcance, el cuerpo de Horridian brillo, siendo cubierto por una capa de color violeta. AmirGoul sintió como su enemigo se hacía más pesado, al punto de no poder soportarlo mucho más en sus brazos sin que se le cayera.

Entonces tendría que soltarlo. Ese era el objetivo, después de todo.

AmirGoul lanzo a Horridian contra el suelo mientras desplegaba sus alas para frenar e impedir que él mismo se estrellara. Al mismo tiempo, el tornado despegaba del suelo y se elevaba a los cielos oscuros del planeta, creando poderosas corrientes de aire que cayeron con dureza sobre el suelo, creando una serie de cráteres alrededor del campo en donde luchaban.

-¡¿Con que esta atacando?!- Se pregunto Anubias, al no poder ver ningún ataque visible que ocasionara la destrucción alrededor. -Acaso...- abrió los ojos al darse cuenta del arma que usaba. -¡¿Esta usando la presión del viento como arma?!-.

-¡Así es!- Respondió Ginebra, aun emanando el aura blanca. -Cuando mi poder y el de AmirGoul se unen, podemos controlar el viento fácilmente. Nadie nos gana en ese lado-.

Anubias abrió los ojos de sorpresa. Los Bakugan podían usar usar los elementos generándolos ellos mismos como ataques y controlarlos en los entornos, pero nunca a al nivel que estos dos muestran. ¿De donde sacaron tanto poder? ¿El brillo que generaba esa mujer era el responsable?

El Gundaliano se dio cuenta que el ataque no había terminado, ya que el gran tornado aun estaba manifestado, más pequeño que cuando se creo, pero aun de un tamaño considerable.

Anubias no permitiría que esto terminara así. Aun tenía muchas cartas bajo la manga.

-¡Doble poder activado: Rugido Quimera + Castigo del Ocaso!-.

Aun con la presión del viento, Horridian pudo ponerse de pie. La capa de energía se esfumo, reemplazado por energía Darkus. De pie, resistiendo la presión y desafiando al fenómeno climático que su enemigo había generado, Horridian libero un poderoso rugido desde el centro de su ser que se escucho por todos los campos de batalla.

El rugido libero ondas de energía naranja y violeta que alcanzaron el tornado, y para sorpresa de Ginebra, lo hicieron reducir su tamaño. Pero no solo eso, sino que Horridian salto, y al igual que cuando enfrento al primer tornado que les lanzo, a este también lo corto con sus garras.

La fuerza y energías que mostraba Horridian eran absurdas. ¿Qué le hicieron para hacerlo tan fuerte? Ella creía que incluso podría darle batalla a Leonidas. Tal vez eso es lo que buscaban, enfrentar a Camilo y Leonidas y derrotarlos. Aunque Ginebra sabe que su señor y su compañero nunca perderían ante seres como ellos, ni siquiera ellos podrían obtener una victoria limpia de llegado el caso.

Tras que el fenómeno climático fuera cortado, literalmente, ambos Bakugan aterrizaron en tierra frente a sus peleadores.

AmirGoul respiraba fuertemente por la nariz, tanto que era muy audible. Tenía marcas de corte en la protección dorada del pecho y en todo el cuerpo, pero la marca más prominente era el triple corte en la mejilla izquierda de AmirGoul y que seguramente dejaría cicatriz. Su cuerpo tenía rastros de sangre seca cuyas heridas se habían cerrado pero que eran sensibles a abrirse.

Horridian tenía algunas abolladuras en su armadura, pero aparte de eso, parecía casi ileso, ya que no tenía ninguna herida física en su cuerpo, a diferencia de su oponente, pero se le notaba más cansado y agitado. Aun no se acostumbraba a sus nuevos poderes y había gastado más energía de la necesaria.

Anubias odiaba admitirlo, pero la chica ha sido una oponente más difícil de lo que pensó. Creyó que sería una victoria sin muchos problemas, pero se equivoco. Esta mujer podría haberlo derrotado en el pasado.

Por un momento, considero invocar a los Mechtogan, pero descarto el pensamiento casi de inmediato. Esta lucha era de Horridian, no podía usar los Mechtogan para salvarlo. Era como decir que Horridian no era tan fuerte y necesitaba ayuda.

-Ya me canse. Es hora de terminar con esto- declaro el Gundaliano. -Poder activado: Ragnarok-.

Energía comenzó acumularse en el cuerpo de Horridian. Destellos rojos, azules y morados salieron de su cuerpo como descargas. Pero pronto, Anubias comenzó a darse cuenta que algo andaba mal al ver como Horridian se agitaba y gruñía de dolor.

-Oh...- por primera vez, Anubias reconocía que tal vez, no haya tomado la mejor idea.
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Selen fue estrellada contra la torre, pero tuvo que hacerse a un lado rápidamente, justo a tiempo para esquivar los rayos dirigidos a ella por Lumagrow.

Kazarina miraba aburrida a su nueva oponente. Después de que Lumagrow le hiciera un agujero al Bakugan que es compañera de la amiga de la princesa, apareció esta chica y su Bakugan Haos para tomar el relevo. Se mantuvo bien en un inicio, pero la velocidad y ferocidad de Lumagrow las abrumo fácilmente. Ahora las veía luchar patéticamente en un intento de sobrevivir.

La ex-jefa del cuerpo científico de Gundalia observo a las otras inútiles. La Bakugan Aquos intentaba sanar sus heridas mientras la amiga de la princesa se encontraba llorando, al parecer dándole ánimos.

Era inútil. El agujero que le hizo era mortal. Solo prolongaba su sufrimiento.

Oh, bueno. Si quería sufrir más, cosa suya.

-¡Lirian!-.

Mientras Kazarina luchaba, Serah estaba de rodillas encima de una cornisa de roca, viendo a su compañera, su amiga, su hermana, desangrarse. A pesar de los esfuerzos de Lirian, el agujero en su estomago era fatal.

-Lo siento, Serah...- Lirian tenía sangre manchando su mandíbula.

-¡Cállate, Lirian!- Le riño Serah al borde de las lágrimas. -¡Tenemos que sacarte de aquí! Merlín ya vendrá, solo resiste. Vuelve a tu forma esfera, tal vez detenga la hemorragia. Te pondrás bien-.

-Siempre fuiste terca, Serah, pero no seas necia. Ambas sabemos que no voy a sobrevivir-.

Serah negó con la cabeza. Ya perdió a Snow, a su hermana y sus padres. No podía perder a alguien más.

-Por favor, por favor... Orbe Sagrado... por favor sálvala- rogo Serah con desesperación, las lágrimas cayendo por sus mejillas.

Un fuerte impacto la saco de su tristeza un momento. Vio a John caer y golpear el suelo. Había estado volando para esquivar a Sellon y su Bakugan Caos, pero al final uno de los ataques lo había golpeado, haciendo que se estrellara. Por suerte no tuvo heridas graves.

-El Necroshade...- Serah miro el Libro del Vacío que se le cayo a John justo frente a ella.

-¡Es mío!- Grito Sellon, aterrizando con el Iroh Dragonoid detrás de ella. Corrió hacía el libro a toda prisa. Ahora que lo tenía en mano no podía perderlo.

Pero antes que llegara, un brillo rosa surgió delante del brillo y un círculo del mismo color se formo. Del círculo, apareció Merlín.

-Bueno, bueno. Las cosas están feas, ¿no?- Dijo el mago con algo de humor.

-Tú...- Sellon miro al recién llegado. No sabía quien era, pero era claro que era aliado de los Peleadores.

Pero antes que algo más pudiera ser, todos vieron un pilar de energía surgir cerca de ellos. La zona era donde peleaban Anubias y Ginebra. Vieron que el pilar aumentaba su tamaño antes de desaparecer y convertirse en una explosión.

Una explosión realmente grande que se acercaba a ellos.

-¿Qué hiciste ahora, Anubias?- Pregunto entre dientes la Neathiana.

-Bueno... eso si se ve mal- dijo Merlín, viendo la explosión. En el cielo, vio a AmirGoul alejarse del radio, llevando a Ginebra en su mano. -Yo digo que es buen momento para irse-.

Agito su cetro que libero un brillo rosa.
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Taylean pateo a Fury, quien no se vio perturbado y lanzo otro golpe que empujo al Bakugan Ventus arrastrar por el suelo.

-Es un tipo duro- gruño Taylean, que tenía varios rasguños y moretones en su cuerpo por la batalla transcurrida.

Pero antes que Shun activara un poder, vio como empezaba a brillar de un tono rosado. No solo él, sino también Taylean.

-¿Y ahora que les pasa?- Pregunto Fury, extrañado por el brillo que liberaban.

Shun rápidamente giro la cabeza y busco con la vista, hasta encontrar a Merlín, un poco lejos de donde estaba. Con él estaban John y Serah.

-Parece que es momento de retirarnos- dijo Shun.

-Así parece- asintió Taylean, antes de alzar la mirada al cielo. -¡Silent Strike! ¡Gracias por todo!-.

El Mechtogan, que tras acabar con el ejercito de Bakugan Caos y se había mantenido al margen por orden de sus amos, asintió.

-Cuando me necesiten, solo deben llamarme, amos- dijo el Mechtogan, antes de desaparecer en una estela verde que ascendió al cielo y se desvaneció.

Caligula miro en la dirección que Shun vio y se encontró con Merlín.

-El mago, ¿eh?- Murmuro el hombre, rascándose la barbilla.

-¡No escaparan!- Grito Fury, lanzándose hacía su enemigo a gran velocidad.

Pero antes de impactar su puño, Taylean y Shun desaparecieron en un destello rosa, dejando atrás un grupo de flores.
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-¿Pero que fue lo que provoco Anubias?- Se pregunto Ginebra confundida por la gran explosión de la que se estaban alejando.

-Debo suponer que ese poder que activo libera una gran cantidad de energía de forma ofensiva, pero al estar agotado y aun no aprender a controlar su poder, Horridian libero toda esa energía sin control. Tendrá suerte si no se mata a si mismo por eso- dijo AmirGoul, viendo como la explosión se hacía más grande.

-Debemos llegar rápido y con los otros y alejarnos-.

-Si...-.

AmirGoul y Ginebra notaron de inmediato el brillo rosa que los cubrió a los dos. Cuando se estaban preguntando que estaba pasando, desaparecieron del lugar, del planeta, en un destello rosa, dejando atrás un grupo de flores en el aire que fueron quemadas por la explosión que lo alcanzo poco después.
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El mismo brillo cubrió a Luna y Selen, que fueron teletransportados justo antes de que Lumagrow clavara sus garras en el segundo.

-¿Eh?- El Bakugan Haos miro confundido el grupo de flores que quedo en lugar de su enemigo. -¿A donde se fue?-.

Mientras miraba extrañado, Kazarina vio la explosión que se avecinaba. -Creo que es momento de irnos, Lumagrow-.

Sellon pensaba igual; pero no dejaría que sus enemigos tuvieran el Libro del Vacío. Goodwin le había dado ordenes explicitas de que, si no podía tomar el libro, que lo destruyera para que nadie más lo tuviera.

Con un grito, disparo un rayo de sus manos al Necroshade. Serah se interpuso entre el rayo y el libro, recibiendo el primero mientras tomaba el segundo en sus brazos. Grito de dolor.

-Este no es el momento- dijo Merlín, viendo como la explosión estaba casi encima de ellos.

-¡Serah!- Grito John, antes de desaparecer en un brillo rosado.

Sellon chasqueo la lengua, antes de mirar a su Bakugan Caos. -¡Atácala!-.

El dragón lanzo una llamarada de energía. Merlín tuvo que hacerse a un lado para evitarlo, pero Lirian, con lo poco de sus fuerzas, se puso encima de Serah, usando su cuerpo como escudo.

-¡Lirian, no!- Grito Serah, viendo con horror y miedo como el cuerpo de su compañera comenzaba a volverse motas de energía.

-Serah...- Lirian miro fijamente a Serah, queriendo que la imagen de ella sea lo último que viera. -No te preocupes. Te cuidaré junto a tu hermana y Snow. Hazme un favor, ¿quieres?- Sus palabras se estaban convirtiendo en cenizas en su boca mientras su cuerpo desaparecía. -Vive por mi...-.

Merlín intento volver usar sus poderes para sacar a Serah, pero se encontró que no podía. Eso lo confundió, pero rápidamente encontró la respuesta.

-¡El Necroshade! Ella tiene el libro, y este emite un aura que me impide usar mis poderes en ella-.

Con la explosión ya encima de ellos, Sellon se subió rápidamente al Iroh Dragonoid y se alejo lo más que pudo. Merlín sabe que tenía que tomar una decisión rápida. En este momento, donde la batalla no era tan importante para el conflicto que se avecinaba, aun si el libro no era destruido, la posibilidad de que Goodwin volviera a buscarlo era muy baja.

En el gran calculo del universo, una vida no se compara a la de millones.

Y antes que la explosión lo alcanzara, Merlín se teletransporto del planeta, dejando a Lirian y Serah solas en la explosión.
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(En la Tierra)

Merlín y todos los demás aparecieron al mismo tiempo en un destello rosa en la sala de control. Los Bakugan habían vuelto a su forma. A todos se les notaba cansado y cada uno tenía cierta cantidad de rasguños en su cuerpo.

-¡Volvieron!-.

Dan, Marucho, Page y Rafe fueron los primeros en acercarse.

-Me alegro que estén bien- dijo Dan aliviado, estirando la mano hacía Shun, quien la tomo para levantarse. -¿Cómo les fue bien?-.

-Eso... es difícil de decir- dijo Shun.

Todos escucharon un golpe y vieron a John caer de rodillas. Su postura era una de derrota y un aura de tristeza parecía formarse alrededor.

Page fue el primero en notar que algo andaba mal al ver que faltaba un par.

-¿Dónde está la Comandante Serah y Lirian?-.

Shun, Luna y Ginebra se dieron cuenta que faltaba la pelirosa y su compañera. Todas las miradas se pusieron en Merlín, que por primera vez desde que lo conocieron, no estaba sonriendo. La tensión en su rostro y la mirada sombría en sus ojos era indicativo de que...

-¿Qué fue lo que paso?- Pregunto Dan con voz seria, pero tratando de mantener la calma.
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(Más tarde)

Tras escapar con éxito e ilesos, Sellon estaba reportando su fracaso en obtener el libro ante Goodwin. Ella se sentía apenada y humillada por este fracaso.

-No tienes que sentirte mal, Sellon- dijo Goodwin con voz tranquila. -El libro hubiera hecho avanzar nuestros planes, pero al final no es algo importante para los planes. De hecho, podemos sacar varias cosas de esta lucha, como el que ahora Shun Kazami controla a su Mechtogan, haciendo que los Peleadores ahora tienen a tres de los suyos con la capacidad de usar y controlar Mechtogan. El que sepan tu identidad tampoco es de preocuparse, ya que no tiene sentido ocultarlo en este punto-.

-Y que también matamos a la amiga de la princesa de Neathia- señalo Kazarina con orgullo perverso.

-Un golpe devastador en más de un sentido. Ahora los Peleadores han perdido a otro de los suyos en menos de una semana- agrego Lumagrow.

-Y el que hayan sido ustedes en especifico es un golpe más emocional, ya que es la segunda persona importante que le quitan a la princesa- destaco Goodwin. -Lo que nos puede jugar en contra-.

-¿A que te refieres?- Pregunto Lumagrow.

-Ahora con la muerte de un miembro importante del castillo, los Neathianos ya no se quedaran de brazos cruzados. Enviaran toda la ayuda que puedan a los Peleadores, lo que podría complicarnos las cosas un poco-.

Kazarina se mostró indiferente. -Que vengan si quieren. Con Némesis, sus fuerzas serán aplastadas, y yo personalmente me encargaré de la princesa de una vez por todas-.

Aunque era bueno ver a Kazarina confiada, Goodwin sabe que esa confianza vuelta arrogancia será la perdición de la científica. No le importa lo que le pase a la mujer, pero si llega a interferir en sus planes, tendrá que eliminarlo él mismo.

-Por ahora, me gustaría que fueras a revisar a Horridian. Quiero saber como libero tanta energía como para compararse a una bomba nuclear-.

-Las capacidades y potencial que tiene ahora son desconocidas- menciono Kazarina, también asombrada por toda la energía que ese Bakugan libero. -Con gusto le haré análisis mientras se recupera. Si quieres, puedo colocarle unos implantes de control-.

-No creo que a Anubias le guste eso, así que déjalo por ahora-.

-Yo estoy más sorprendida de que ese tipo haya sobrevivido- comento Isis.

Aunque estuvo en el epicentro de la explosión, Anubias logro sobrevivir. Un verdadero milagro. Todo se debe a que Horridian, a pesar de la explosión que libero, lo protegió con su cuerpo. Pero aunque sobrevivió, al estar expuesto a tanta energía igual lo dejo con graves heridas que están siendo atendidas por un equipo médico privado que Goodwin tiene. Pasara un rato antes que el Gundaliano y su Bakugan vuelvan a luchar.

-Anubias es difícil de matar. No hay más que decir- dijo Rex. -Ahora tenemos...-.

Las puertas del salón en donde todos estaban se abrieron, interrumpiendo las palabras de Goodwin. Pasos metálicos resonaron y la figura de un individuo entro. A diferencia de Goodwin, que se mantuvo estoico, el rostro de las dos mujeres mostró una mezcla de asombro y sorpresa.

Entrando a la sala como si fuera dueño del lugar, estaba una figura sombría que viste una armadura medieval similar a la de un caballero antiguo, de color negro y oro con seis picos, dos que sobresalen en la parte superior de la armadura y cuatro que sobresalen de los hombros, un cuello alto y una capa roja como la sangre tan larga que casi llega al suelo. Usa un casco negro cuyo diseño también emula a una corona. El rostro del individuo estaba cubierto por una mascara desplegable que estaba equipada al casco y tenía dos rendijas en la zona de los ojos para permitirle a quien usa la armadura ver.

Sellon se puso de pie y se aparto de la figura acorazada. El aura que emanaba su sola presencia era intimidante, por decirlo menos. La figura se detuvo en medio de Rex, Sellon y Kazarina, moviendo suavemente el cuello para que su cabeza le diera una corta mirada a los tres.

-Ahora...- la voz se escucho oscura y metálica, pero indudablemente masculina. -Es mi turno-.

-¿El proceso ya termino? Fue más pronto de lo esperado- pensó Goodwin, viendo a la figura con una mirada de profunda intriga. -Y si es tu turno, ¿cuál será tu movimiento?- Pregunto.

Detrás de la mascara, unos ojos amarillos metálicos miraron a Rex con una intensidad silenciosa que hubiera asustado a cualquier otro.

-Eliminar a los mosquitos que puedan venir a molestar...- elevo la mano derecha a la altura de la cara. -Y aplastarlos- cerró la mano en un puño. -Y seguir con el resto que se meta en mi camino-.

-Bueno, bueno...- Rex resistió el impulso de sonreír. -Las cosas se pondrán interesantes. Estoy seguro que a los Peleadores les gustara esta sorpresa-.

Sin que Goodwin lo supiera, el Caballero Esqueleto, montado en su caballo huesudo, estaba observando el castillo, sus cuencas sin vida observando el piso donde se desarrolla actualmente la situación.

-Les espera un conflicto muy duro, herederos del Génesis. ¿Cuál será tu siguiente movimiento, Mago de las Flores?- Se pregunto en su mente el Caballero Esqueleto, antes de ordenarle a su corcel que se alejara y retirara del lugar.
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N/A: Hasta aquí el capitulo. No fue mi mejor capítulo. Lo admito, se sintió apresurado casi al final. Creo que he perdido un poco el toque en escribir batallas Bakugan. O puede que sea que se me dificulta escribir varias batallas a la vez.

Haou ha llegado y será el principal protagonista del siguiente capítulo, donde pondrá en práctica sus palabras. Esperen una lucha de batallas. De paso, el equipo tendrá que afrontar otra perdida más.

¿Cuál creen que será el siguiente personaje que mate?

Sin nada más que decir me despido. Visiten y comenten el resto de mis historias por favor. CHAO.