(Cuando la música comenzó a sonar, los símbolos de los elementos Bakugan pasaron como guiados por el viento hasta aparecer el símbolo de los seis atributos juntos, y adelante apareció el titulo)

Tal como gotas de lluvia que caen sin rumbo, sin fijar dirección.

(De noche, Dan ve la luna con algunas hojas llevadas por el viento pasando. Las hojas pasan cerca de su rostro, que se alzo al frente con ojos llenos de determinación. En una toma diferente, se ve a Camilo de espaldas a Dan, quien bajo la mirada con algo de tristeza. Se ve por unos instantes el domo de acceso al Interespacio de día)

¡Nuestros sentimientos siguen el camino que eligen!

(Luna mira a la luna con tristeza, para ver a Marduk ponerse a su lado y sonrió. De manera consecutiva se ve al resto de peleadores: Shun sentado en la rama de un árbol, Snow chocando sus puños con una sonrisa, Marucho tecleando en su computadora, Felipe de pie en una arena de combate, Page, Rafe y Serah hablando hasta ver hacía adelante).

Un negro amanecer, verás que pronto llega. Pronto vendrá...

(Goodwin, usando una armadura de plata encima de su traje camina por los pasillos del castillo, su capa blanca ondeo. Paso al lado de Kazarina, quien sonrió cruelmente al verlo. Se ve desde abajo y subiendo rápidamente el oscuro castillo, hasta la punta, donde Goodwin estaba de pie, a su izquierda estaban Kazarina y Sellon, y a su derecha, Anubias y Caligula. Los cuatro con sus Bakugan).

(Se ve una imagen dividida de la Puerta y la Llave que tienen Dan y Drago).

Los pedazos de este sueño solo pueden causar dolor. Incluso llegar a tener miedo a creer.

Selen lanzo un rayo de luz que Fury aparto fácilmente retrocediendo en el aire. Vladitor se acerco a Fury y choco su espada con las cuchillas de su enemigo, soltando chispas. Caligula tenía una mirada de oscura excitación al ver la batalla).

¿Qué marca, yo dejaré en este mundo junto con mi decisión? Yo quiero saber...

(H y Abbott miran al cielo azul con una mirada preocupada. Abbott y H se miran, asintiendo y el segundo se retira. El escenario cambia al Interespacio, donde Lumagrow salta en el aire y el cielo es rojizo).

Superándome a mi mismo se que yo volveré a nacer. ¡La fe es lo único que me podrá fortalecer!

(Xerxes choca sus armas con las garras de Lumagrow en un combate intenso donde ambos caen en el aire. Al mismo tiempo, Horridian esquivo una flecha, e Artemis cargaba en su arco otra flecha que disparo al mismo tiempo que Horridian lanzaba rayos de energía de sus bocas, creando una explosión al chocar. Entre las llamas de la explosión, Lirian desvía los ataques de Isis mientras ambas pelean en el aire).

¿Qué marca, yo dejaré en este mundo junto con mi decisión?

(Drago hace a un lado las llamas mientras ve como un ejercito de Bakugan Caos se acerca a él. Onix, Wolfuro y Boulderon se alzaron con su armamento y Bakunanos respectivamente. Secuencialmente, se ve el ojo de Leonidas cambiar de su color normal a un tono rojizo, a Ginebra viendo el amanecer, a alguien usando una armadura oscura, un cuerpo en el suelo con un agujero en el pecho y sangrando y a Morgan con las manos juntas como si estuviera rezando).

¡La oportunidad llegara!

(En un destello, se ve a Camilo abriendo los ojos y la imagen lo rodea para ver que estaba de pie frente a Goodwin. En su espacio oscuro, el Dragón Carmesí extiendo sus alas para que en otra toma, se vea a un individuo de armadura negra de espaldas viendo al horizonte desde el castillo negro de Goodwin con su capa roja ondeando).
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Mientras los Peleadores estaban luchando en el Gran Torneo, Camilo y Leonidas seguían con su entrenamiento.

Esta vez estaban en una zona desértica cerca de las montañas. Era una zona perfecta para entrenar sin correr el riesgo de lastimar a alguien o que la destrucción que causen no afecte mucho.

Camilo estaba en la cima de una gran roca y Leonidas estaba detrás de él, ambos con los ojos cerrados. Como si lo hubieran planeado, abrieron los ojos al mismo tiempo y Leonidas dio un puñetazo a la roca en donde estaba Camilo al mismo tiempo que este saltaba a una roca continua. La roca en donde estaba parado anteriormente cayo hecha pedazos por el golpe del dragón de luz.

-Esa fue una perfecta sincronización, Leo- dijo Camilo.

-Si, finalmente siento que el entrenamiento da frutos; mis poderes están en mejor control que antes, tal vez debamos probar unas sesiones de entrenamiento con Zangetsu- dijo Leonidas.

Desde la batalla contra ese Gundaliano, Camilo y Leonidas han podido invocar a Zangetsu y controlarlo por así decirlo, aunque la mejor manera de decirlo es que ahora les hacía caso y no gritaba como una bestia. La manera de invocar a un Mechtogan era más sencilla de lo esperado: solo debían concentrarse y lanzar energía al aire encima de ellos, donde se abriría un portal creado de su propia energía del cual saldría Zangetsu.

Y desde esa batalla, han estado teniendo combates de practica con Zangetsu para ver cuanto avanzan en el entrenamiento, y también para aprender como luchar contra un Mechtogan por si vuelven a enfrentarse a uno.

-Este mes aquí ha dado sus frutos- Camilo sonrió por sus palabras, al final, el progreso siempre se demuestra.

Ya ha pasado un mes desde que llegaron a Nueva Vestroia a entrenar. En solo dos semanas, la comida que Kazuto trajo para el viaje se acabo, pero para su suerte, la comida que crecía en Nueva Vestroia, como frutas y vegetales eran comestibles para él, y al ser de un tamaño gigantesco le duraría mucho.

Literal, aun no termina la manzana que Leonidas saco de un árbol cuando la comida se le acabo, y fue hace dos semanas.

Aparte de entrenar, también le ha dado la oportunidad a Camilo de conocer la fauna de Nueva Vestroia, su medio ambiente y como los Bakugan de ahora viven en paz en su planeta. El solo hecho de estar en un planeta y observarlo era fascinante. Si, estuvo en Neathia, pero como estuvo ocupado con la guerra no pudo disfrutar mucho de su naturaleza y cultura, y después de que una planta carnívora casi lo come en una misión, no estaba interesado en aprender de la primera.

Mucho de los Bakugan que ha visto cuando llegaron al planeta se parecen mucho a los dinosaurios de su planeta, y ha visto pocos Bakugan que eran del tipo que conoció cuando llegaron a la Tierra por primera vez hace seis años. De hecho, ha visto más Bakugan que conoció en la guerra de Neathia y Gundalia aquí en el planeta, lo cuál, aunque era curioso, no debería extrañarlo tanto, ya los Bakugan que viven en los planetas gemelos son descendientes de Bakugan que llegaron a esos planetas cuando Vestroia se separo en los seis mundos de atributos hace ya siglos.

-¿Me pregunto como estarán los demás? A esta fecha, el Gran Torneo debe de haber comenzado...- se permitió pensar en sus amigos en la Tierra. A pesar de los problemas, estaba seguro que los Peleadores superarían sus problemas y ganarían, aunque le entristece no poder estar ahí con ellos. -Pero era necesario, solo espero que no estén muy molestos cuando regrese-.

-¿Qué tanto piensas?- Pregunto Leonidas al notar a su compañero perdido en su mente.

-Solo en los Peleadores. Confío en que ganaran el Gran Torneo, aun sin nosotros ahí- respondió Camilo.

-Aun tienen a Drago y Vladitor, y Taylean y Tristar no son débiles. De hecho, creo que son los compañeros de Marucho y Shun más fuertes hasta ahora- aunque solo ha sido por pocos meses, Leonidas ha aprendido que tan fuertes son esos dos. Taylean es rápido y ágil, como era de esperar de un compañero de Shun, pero también sabía improvisar cuando era necesario y atacaba sin piedad. Y Tristar, aunque tenía el carácter bromista y despreocupado de todos los compañeros de Marucho que le molestaba, era más serio que los anteriores y sabía aprovechar una oportunidad. -Estarán bien, preocupémonos más en nosotros. No quiero arriesgarme a perder el control de la nada al volver al Interespacio-.

-Tienes razón-.

Pero cuando Leonidas menciono lo de volver, hizo que Camilo se diera cuenta de algo... de un detalle, detallito, de algo que no pensó cuando le pidió a Marduk el favor de traerlos aquí.

Y era el que no sabía como volverían a la Tierra.

-Leonidas...-.

-¿Si?- El dragón ladeo la cabeza al ver la expresión de preocupación de su compañero.

-...¿Cómo volveremos a la Tierra?-.

-...-.

-...-.

-...Creí que tu lo tenías cubierto-.

-¡Se me olvido!- Grito. -Estaba tan concentrado en ir a un lugar para entrenar, que se me olvido como volveremos- ahora si estaba preocupado.

-¡¿Dices que estamos varados en Nueva Vestroia?!- Exclamo Leonidas. -Hubiera esperado esa estupidez de Dan, pero no de ti Camilo-.

-¡Cállate, que tu tampoco te diste cuenta de eso!- Grito el humano. Se llevo las manos al rostro, avergonzado por lo estúpido que fue al olvidarse de un detalle tan importante. -¿No puedes abrir un portal a la Tierra?-.

Leonidas negó con la cabeza. -La capacidad de abrir portales interdimensionales no es común entre los Bakugan. No es un poder que se obtiene al hacerse más fuerte como pasa normalmente, un poder que no poseo-.

Era cierto. La capacidad de abrir esos portales era rara, él había escapado de la Dimensión de la Perdición cuando "nació" porque ya había un portal en el cielo por el que escapo. Drago podía hacerlo por haber sido el Núcleo Perfecto antes, y solo puede abrir portales hacía la Tierra o Nueva Vestroia, y Aranaut, aunque tenía un poco más expandida esa habilidad, tenía un rango limitado desde Neathia. El único Bakugan que conocían que podía abrir esos portales a donde sea era Vladitor, y es porque Código Eve le dio esa habilidad, y también tiene limitantes: no puede abrir un portal a un destino demasiado lejano de su posición en el Universo y a lugares en el que no ha estado antes.

Aun con tecnología era difícil abrir uno. Al Doctor Michael le tomo muchos años, estudiar un poco la tecnología Vestal y el financiamiento de parte de Klaus para finalmente completar su portal, y aunque los Vestals tenían mejor tecnología, tampoco tenían muchos portales, por eso se movían por el espacio a través de naves y los Gundalianos y Neathianos solo podían abrir portales interdimensionales hacía su planeta vecino.

Leonidas se cubrió los ojos con una garra... su compañero podía ser el segundo más inteligente de los Peleadores y muy astuto, pero a veces era un estúpido. Aunque por esta vez no se enojaría, ya que a él también se le olvido.

-Solo espero que Vladitor se acuerde de que nos envío aquí-.

(...)

-Siento que estoy olvidando algo importante- menciono Vladitor de la nada.

-¿Qué cosa?- Pregunto Marduk.

-No lo se-.

-Si no lo recuerdas, entonces no debe ser importante-.

-Creo que tienes razón-.

(...)

-...¿A quien engaño? El maldito solo vendrá a buscarnos cuando este aburrido de las batallas- termino su línea de pensamiento.
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(Con Sellon)

-¿Nueva Vestroia, señor?-.

La Neathiana disfrazada como humana estaba en la oficina de Goodwin en la compañía. Hoy era el segundo día del Gran Torneo, y la ronda no comenzaría dentro de poco, pero como fue llamada por su señor para una misión no dudo en venir de inmediato.

-Si. Quiero que vayas a Nueva Vestroia y lidies con Camilo y Leonidas. Quiero ver que tanto han controlado sus poderes y lo peligroso que sería- Goodwin le lanzo a Sellon nueve esferas Bakugan. -Esos son de los nuevos Bakugan Caos que han nacido. Gracias a la energía liberada en el Interespacio, estamos cerca de romper otro sello del Dragón Carmesí, probablemente antes de la final. Cuando ese sello se rompa, haremos inmediatamente nuestro movimiento-.

-Como usted diga, señor Goodwin- Sellon hizo una reverencia.

-Quiero que tengas claro que una vez comience el plan, ya no podrás mantenerte oculta, lo más probable es que reveles quien eres ante esas chicas-.

-Cris y Soon no son nada para mi, señor. Solo personas insignificantes que han servido para no levantar sospechas a mi persona. No me importa separarme de ellas-.

Goodwin asintió complacido. -¿Como ha estado Isis? He notado que últimamente tiene un comportamiento irregular-.

-Sabe que ella solo lo sigue por miedo y no por devoción, pero no es tan tonta como para traicionarlo. Seguirá obedientemente cada orden que diga- respondió Sellon segura.

Goodwin asintió, lo último que necesitaba ahora era problemas internos.

Del brazalete de Sellon salió un rayo hacía el espacio frente de ella, abriendo un portal interdimensional. El cuerpo de la chica brillo un segundo, mostrándose ahora con una apariencia Neathiana de ropas oscuras y agresivas.

Ya cambiada, salto al interior del portal interdimensional. Tenía un trabajo que hacer y no perdería el tiempo.
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(Con Camilo y Leonidas)

-Ok, sigamos con el entrenamiento- declaró el pelinegro. -Es hora de invocar a Zangetsu-.

-Entendido, Camilo- asintió Leonidas.

Ambos cerraron los ojos para concentrarse, Leonidas empezó a reunir energía que se mostró como una capa alrededor de su cuerpo. Camilo podía sentir la energía que reunía Leonidas. Era el vínculo de Peleador y Bakugan que tenían. No tenía otra explicación para eso.

Cuando ya estaban listos para invocar a su Mechtogan... una golpeó a Camilo.

En esa visión, vio el Interespacio Bakugan de una manera oscura, con enredaderas cubriendo las calles y los edificios virtuales, que varios de ellos estaban destruidos.

Y delante, se imponía el Dragón Carmesí con un muro de fuego a sus espaldas, rugiendo. A su lado estaban otros Bakugan que no reconocían.

El dragón lanzo un rayo de su boca al cielo virtual, abriendo un portal interdimensional, que mostro al otro lado la ciudad de Beyview.

El Dragón Carmesí lanzo un rayo que atravesó el portal y golpeo la ciudad, que se ilumino por una explosión de energía.

-¡NOOOOO!- El grito del humano sorprendió a Leonidas, que lo vio tambalearse y puso su garra delante de él para evitar que cayera.

-Camilo, ¿estas bien?- Pregunto Leo, pero no recibió respuesta. -¡Camilo!-.

El peleador Haos se apoyo en la garra de Leonidas un segundo mientras respiraba entrecortadamente y el sudor rodeaba su rostro.

-Tuve... tuve otra visión...-.

-¿Otra?- Leonidas no lo creía, pensaba que ya se habían acabado. -¿Que viste?-.

-Beyview estaba siendo atacada-.

-¡¿Qué?!-.

-El Dragón Carmesí estaba en el Interespacio, el lugar parecía una ciudad fantasma. Había mucho caos. El calor... se sentía tan real-.

-Es porque fue real-.

Al escuchar una tercera voz, peleador y Bakugan vieron que encima de un pilar de roca estaba una mujer, que por su aspecto era sin duda Neathiana, pero muy diferente a cualquier Neathiano que hayan visto.

-Lo que experimentaste fue una premonición de las cosas por venir. Una gloriosa visión oscura de lo que mi amo y mi Dios tienen reservado para ti una vez que alcancen el poder máximo- declaro Sellon.

-¿Qué amo?-.

-¿Un Dios?-.

Fueron las preguntas de Camilo y Leonidas a la enigmática Neathiana, que solo sonrió malignamente.
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(En el Interespacio)

-"Hoy es un nuevo día para los Bakufanaticos. La segunda ronda del Gran Torneo comenzara. Para quienes no recuerden de que se tratara, aquí estoy yo; la segunda ronda será de combates uno vs uno de una sola ronda, en donde los participantes serán elegidos al azar. El equipo que logre obtener dos de tres victorias avanzaran a la siguiente ronda"-.

-Dónde esta la señorita Sellon?- Pregunto Soon nerviosa. La señorita Sellon tuvo que salir temprano del Interespacio por trabajo y no ha vuelto, y ya va a empezar la segunda ronda.

-No lo se, pero si no llega, será nuestro deber ganar esta ronda para no avergonzar a la señorita Sellon- dijo Cris. Que aunque intentaba mantener una actitud relajada y seria, también estaba nerviosa por dentro por la ausencia de su líder y mentora.

La segunda ronda no se hizo de esperar. Luego de que Inteligencia del Interespacio repasara los equipos que quedan y señalar cual lleva la ventaja (los Peleadores), empezó a elegir al azar que equipos participarán primero.

-"¡Y los primeros equipos en luchar son el Equipo Sellon vs el Equipo super Aquos!"-.

-¿Super Aquos?- Repitió Soon.

-Por lo que escuche, sus miembros son puramente de peleadores Aquos- dijo Cris, que había escuchado un poco de los otros equipos rivales.

La arena que se eligió fue el Desierto, una arena en donde ningún lado tendrá ventaja.

Cris sonrió al ver que su imagen apareció como participaste. -Supongo que seré la primera en pelear-.

-¡Buena suerte, Cris!- Le deseo Soon.
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(En Nueva Vestroia)

-Bueno caballeros, no quiero ser grosera, pero tengo asuntos que atender, así que esta señorita quisiera proceder a la batalla- dijo Sellon.

-¡¿Quién eres?!- Pregunto Camilo.

-Podría decirles... ¡pero arruinaría la sorpresa!- Un aura oscura rodeo a Sellon, levantando su "cabello" mientras sonría malignamente.

-Eso no es nada amistoso- comento Leo.

-El momento de hablar se termino, Camilo. Tal vez venciste al que vino antes que yo, pero no era un peleador de mi nivel-.

Camilo recordó al Gundaliano que los ataco un día después de llegar a Nueva Vestroia.

-¿Ese tipo también trabaja para el Dragón Carmesí y ese encapuchado?-.

Sellon escucho como Camilo llamo a su "Dios". -Dragón Carmesí... si. Me sorprende que un ignorante como tú lo nombre de la misma forma que nosotros-.

-¿Sabes que es ese dragón y porque tenemos visiones de él?- Pregunto Leonidas.

-Si, pero como dije; decirles arruinaría la sorpresa- Sellon chasqueo los dedos, y detrás de ella emergieron tres Iron Dragonoid; uno Subterra, uno Haos y uno Ventus.

Leonidas se puso en posición de combate estirando sus alas.

-Antes nos costo derrotar a uno y ahora son tres- murmuro Camilo.

-¡Pero ahora estamos en mejor control, más fuertes que nunca!- Declaro Leonidas.

-Tienes razón. ¡Vamos, Leo!-.

-Veamos que tal les va contra la triada perfecta de poderes Ventus, Haos y Subterra. ¡Poder activado: Extensión Marte!-.

Sellon ataco primero. El Iron Dragonoid Subterra libero ondas de energía, sus versiones Haos y Ventus dispararon rayos de energía de sus respectivos atributos. Los tres ataques se alinearon y avanzaron como uno.

-¡Poder activado: Escudo Fugaz!-.

Leonidas creo su escudo de energía que bloqueaba el ataque, pero la potencia de los tres ataques combinados era tan fuerte que empujaba a Leonidas de a poco, hasta que el ataque supero su escudo y lo impacto. Pudo detener gran parte del poder, haciendo que solo lo bote al suelo sin daño.

-¡Leo!- Grito Camilo.

-Eso me hizo enojar...- murmuro Leonidas, volviendo a levantarse.

-Me impresiona que de verdad quieran más- comento Sellon.

-¡Necesitas más que eso para vencerme!- Grito Leo.

-¡Si! ¡Nuestro turno de atacar!- Dijo Camilo. -¡Doble poder activado: Perdición de Esperanza + Bengala Luminosa!-.

El cuerpo de Leonidas brilla de un tono amarillo algo oscuro y extiende sus alas, creando y disparando pequeñas espadas de energía que impactan en los tres Dragonoid, explotando al contacto. Con la combinación de poderes, es más que suficiente para derrotarlos a los tres.

Sellon jadeo de sorpresa. -¿Venció a mis tres mascotas? ¡Es increíble!-.

-Ese fue un gran control de poder y de liberación, Leo- felicito Camilo.

-Y ni siquiera sude- se jacto el Haos arrogantemente.

-Ya veremos- Sellon aun no estaba acabada. Levanto su mano derecha, de su brazalete abrió un portal interdimensional. -¡Vamos, Bakugan Caos: Flash Ingram!-.

Seis rayos salieron del portal, apareciendo nuevos Bakugan: estos tenían cuerpos humanoides con alas y un aspecto demoniaco. Eran seis en total, uno por cada atributo.

-¡Y eso no es todo! ¡Bakunano, Coin Blaster, destruye!-.

El Bakunano era una pistola de una mano con una antena equipada al lado. El mismo Bakunano se equipo en los seis Bakugan Caos.

-¿Bakunano? ¿Qué es eso?- Pregunto Camilo. Él se había ido de la Tierra antes de que aparecieran los Bakunano, por lo que no los conocía.

-Escuche que Leonidas puede usar cinco de seis atributos, excepto Darkus. Con los Bakunano y los seis Flash Ingram, yo cubro los seis atributos- señalo Sellon. -Veamos como te va con eso-.

Los seis Flash Ingram se pusieron delante de Leonidas, superándolo por completo en número.
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(En el Interespacio)

Shun entrecerró la mirada cuando Soon gano su combate, siendo el pase para el equipo Sellon a la semifinal. No había visto a Sellon durante la ronda, y aunque no participo, sabe que ella se hubiera quedado a ver el combate. Algo no estaba bien, así lo sentía.

Cuando la segunda ronda del torneo comenzó y a los Peleadores no les toco luchar, aprovecho para alejarse de sus compañeros, que estaban distraídos viendo los combate. Noto que Marduk lo vio salir pero no lo detuvo ni dijo nada.

-¿Qué vas a hacer, Shun?- Pregunto Taylean en su hombro.

-Sellon no estuvo con su equipo en la ronda, tengo un mal presentimiento respecto a eso- respondió el pelinegro.

Camino por los pasillos hasta que vio a las chicas. Se acerco a ellas, que notaron de inmediato su acercamiento.

-¿Qué quieres, Peleador?- Pregunto Cris, cruzándose de brazos.

-¿Dónde esta Sellon?- Shun decidió ir al punto.

-¿Por que crees que te diríamos donde esta la señorita Sellon?- Devolvió la pregunta la peliroja.

Shun la vio atentamente. -...Ya veo, no sabes donde esta-.

Soon abrió los ojos sorprendida. -¿Cómo lo supiste?-.

-El responder una pregunta con otra es señal de estar a la defensiva, y como ella no estuvo presente cuando les toco luchar, es fácil adivinar que ella no esta en el Interespacio, y al parecer ustedes no saben ni en donde esta- explico el ninja.

-¿Y a ti que te importa? Aunque la señorita Sellon no este, de todos modos somos más que suficiente para enfrentarlos- exclamo Cris.

-¿Por que son tal leales a Sellon? Entiendo que sea su líder y, prácticamente dueña de los Bakugan que usa. ¿Pero a que se debe tanta lealtad?- Shun ha tenido esa duda por mucho tiempo, y ahora tiene la oportunidad de hacerla.

-Tú no lo entenderías. Siempre fuiste un gran luchador con los Bakugan- dijo Soon.

-¿A que te refieres?- Pregunto Taylean.

-Si tanto quieren saber, se los diré, pero solo para que dejen de molestarnos- dijo Cris, ya molesta. -Cuando se reabrió el Interespacio hace un año, Soon y yo nos inscribimos como peleadoras, fue para probar a los Bakugan y disfrutar de ellos. Al inicio fue divertido, pero luego los combates se hicieron más intenso y empezamos a perder el ritmo, comenzando a perder más seguido hasta que cada vez que entrabamos, siempre perdíamos contra alguien con un Bakugan superior-.

-Llegamos al punto de no querer entrar más al Interespacio, porque ya no era divertido si siempre perdíamos- siguió Soon. -Hasta que un día que decidimos entrar, conocimos a la maestra Sellon. Ella nos enseño y nos dio la oportunidad de hacernos más fuertes, hasta nos dejo usar a sus Bakugan para combatir-.

-Gracias a la señorita Sellon, dejamos de ser unas don nadie que siempre perdían a ser Peleadoras respetadas dentro del Interespacio. Puede que ustedes sean los Peleadores Bakugan, pero no por eso vamos a dejar que nos subestimen y derroten-.

Con esas palabras, Cris se retiro, seguido de Soon. Shun las vio irse hasta cruzar la esquina y perderlas de vista.

-Creo que las molestamos- comento Taylean.

-Si... aunque ahora las entiendo más. Sus motivos pueden ser correctos, pero esa lealtad ciega que tienen hacía Sellon les impide ver como ella las usa-.

-¿Estas seguro de que las usa y simplemente no las ve como sus amigas? Tal vez te estas dejando llevar por tu amargura hacía ella-.

-Se de lo que hablo, esa mujer no es confiable, aunque puede que tengas algo de razón- Shun negó con la cabeza. -Aunque eso no importa, aunque intente hablar con ellas no me escucharan, así que no gastaré saliva. Ellas son las que tienen que averiguar la verdadera cara de Sellon por su cuenta-.

Dicho eso, se dio la vuelta para volver con sus amigos.
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(Con Camilo y Leo)

Los seis Flash Ingram dispararon sus Bakunano. Leonidas esquivo los disparos elevándose, pero los Ingram Pyrus y Darkus también tomaron vuelo y dispararon, logrando golpear a Leo, que los ataques crearon una cortina de humo que aparto de inmediato, viendo al Flash Ingram Subterra frente suyo y dispararle, esquivando el disparo apenas por sus reflejos super rápidos y alejarlo con un movimiento de su cola.

Los otros tres restantes lo atacaron desde el suelo mientras los otros le disparaban desde el aire. Leonidas se movió aerodinámicamente en el aire para esquivar los disparos que eran más lentos que su velocidad más rápida.

Sellon admitía que el Bakugan dragón era rápido, más rápido de lo que lo ha visto moverse en cualquier combate del Interespacio. Le costaba mucho seguirlo con la mirada, y tenía sentidos aumentados por ser una Neathiana.

-Es irritante cuando la presa no se queda quieta. ¡Poder activado: Yugulo Nebia!-.

Los Flash Ingram Subterra y Darkus lanzaron látigos de energía de los colores de sus atributos con sus manos libres que atraparon las alas de Leonidas, inmovilizándolo en el aire. El dragón lucho por liberarse, pero el Pyrus no perdió tiempo y lo ataco con el Bakunano.

Los otros tres Flash Ingram se elevaron en el aire y también lo bombardearon con disparos. Leonidas gruñía de dolor. No gritaba, no da ese placer.

-¡Aguarda, Leo!- Grito Camilo. -¡Poder activado: Luz de Dragón!-.

Leonidas grito de furia y su armadura brillo con una intensa luz que cegó a sus seis oponentes, obligándolos a detener sus ataques. También cancelo el poder de los dos Flash Ingram, liberando sus alas.

Ahora libre, se acerco al Flash Ingram Subterra y lo tomo del cuello, para después acercarse al Darkus y tomarlo de la misma manera con su otra garra. Descendió a gran velocidad y antes de tocar el suelo, lanzo a ambos Bakugan, estrellándolos violentamente contra el suelo.

Los dos Bakugan Caos se desvanecieron en un brillo tras el impacto.

-Dos pestes menos, quedan cuatro- murmuro Leonidas.

-No por mucho- dijo Camilo. -¡Poder activado: Blazar Omega!-.

El cuerpo de Leonidas brillo de un intenso color blanco, y a una velocidad que Sellon ya no pudo seguir, se puso frente al Flash Ingram Aquos y lo golpeo tan fuerte en la cara que se escucho el hueso de su cuello romperse, y desvanecerse en un brillo.

Leonidas no se contendría con estas abominaciones, ya que no eran Bakugan vivos y reales, sino eran más parecidos a los Bakugan Corruptos: Bakuganes creados por energía oscura. Por lo tanto, no tenía que contenerse al lastimarlos.

Los Flash Ingram restantes dispararon, pero él se movió más rápido que los disparos y ataco a los tres. Clavando sus garras en el pecho del Pyrus, golpeando con su cola y tirando desde su ala hacía el suelo al Ventus y ahorcando al Haos para ser un saco de boxeo.

Los tres Bakugan Caos se desvanecieron.

-¡Imposible!- Exclamo Sellon. -Es poderoso, demasiado, pero sobre todo violento. No hay duda que Camilo y Leonidas al fin tienen control de sus poderes- pensó. Con solo fuerza pura, Leonidas derroto a sus Bakugan Caos. -A este paso perderé, no puedo fallar- en su mente, el fracaso a Goodwin era algo que no existía.

-Si. Quiero que vayas a Nueva Vestroia y lidies con Camilo y Leonidas. Quiero ver que tanto han controlado sus poderes y lo peligroso que sería- esa fue la misión que le dio.

Al recordar las palabras, no puedo evitar cuestionarse ahora. ¿Solo quería probar su poder? ¿Eso significaba que sabía que perdería y solo la estaba usando como sujeto de prueba? Sabía que el señor Goodwin tenía algún plan para Camilo y Leonidas, pero pensar que la estaba usando solo para probarlos la hacía sentir que valía poco.

Negó con la cabeza. -Lo que yo piense no importa. Le debo mi vida al señor Goodwin y prometí servirle, sin importar si para él soy una pieza desechable- se dijo a si misma en su interior. -En ese caso, los probaré al limite- levanto su brazo derecho, su brazalete brillo. -¡Vengan, Mechtogan! ¡Rockfist, Miserak y Deezal!-.

Tres Mechtogan aparecieron detrás de Sellon a sus ordenes. El primero era de color anaranjado con partes café en hombros y la zona de las costillas, al lado de sus hombros tenía colgando dos grandes pinzas. El segundo era el más alto de los tres por poco. Era un Mechtogan gris con las extremidades plateadas y encima de sus ojos había un casco dorado parecido a una corona. El tercero era un Mechtogan rojo con cañones pequeños en sus hombros de color gris que la punta eran gemas verdes.

-¡Guau! ¡Tiene tres Mechtogan!- Señalo Camilo, sorprendido y preocupado.

-Ahora es cosa seria- comento Leonidas.

-¿Por que no saludan a los tres Mechtogans más poderosos que existen?- Con las palabras de Sellon, sus tres Mechtogan comenzaron avanzar.

-¡Poder activado: Trueno Estelar!- Leonidas disparo un trueno blanco desde su boca, pero Rockfist se puso de frente, recibiendo el trueno con los brazos cruzados, siendo empujado por el ataque, pero sin recibir daño. -Mierda, se nota que ese es de atributo Subterra-.

Deezal levanto su puño y lanzo un golpe que Leonidas esquivo elevándose en el aire, pero Miserak salto y lo golpeo, lanzándolo contra un montículo de rocas que atravesó y cayo al suelo.

-¡Leonidas!- Grito Camilo.

-Estoy bien...- Leonidas medio reincorporo. -Pero pegan fuerte-.

-¡Tenemos que llamar a Zangetsu para nivelar las cosas!- Grito Camilo.

-Estoy de acuerdo contigo- Leonidas no dio peros y se levanto y se elevo hasta aterrizar detrás de Camilo. -¡Hagámoslo!-.

Leonidas reunió energía y Camilo sintió esa energía como si fuera suya. Ambos gritaron y el dragón libero un rayo amarillo al cielo, creando nubes de tormenta, donde se creo un portal de luz del cual salió Zangetsu, que aterrizo detrás de ellos.

-Respondo a la llamada de mis amos y eliminaré cualquier ser que se interponga ante ellos- declaro Zangetsu.

-Así que también controlan a su Mechtogan, a este punto no me sorprende- murmuro Sellon con los ojos entrecerrados. -¡Pero no será suficiente! ¡Ataquen!-.

Los tres Mechtogan abrieron sus cañones y dispararon contra ellos. Zangetsu también abrió todos sus cañones ocultos en su cuerpo y hombros y disparo en respuesta. El choque de poder hizo temblar la tierra cercana a ellos, pero por ser tres Mechtogan contra uno, el resultado era obvio: los cañones de Rockfist, Miserak y Deezal superaron a los de Zangetsu y golpearon al Mechtogan negro, derribándolo al suelo.

-¡Zangetsu!- Grito Camilo.

-Él solo no puede contra los tres a la vez, debemos atacar también- dijo Leonidas, elevándose al aire.

-¡Si!- Camilo estuvo de acuerdo. -¡Triple poder activado: Blazar Omega + Trueno Estelar + Voltaje Veloz!-.

-¡¿Un triple poder?!- Exclamo Sellon sorprendida.

El cuerpo de Leonidas brillo de energía Haos y disparo bolas de electricidad de un tamaño superior a lo normal. Tres de ellas golpearon a cada Mechtogan, sobrepasando sus escudos y dañándolos, no para hacer un gran daño, pero si para al menos tambalearlos y demostrar que los ataques le afectan.

Esa era una combinación de poderes que Camilo y Leonidas han trabajo recientemente. Con el poder de Blazar Omega la fuerza de Leonidas aumenta y el Trueno Estelar potencia el poder y electricidad de Voltaje Veloz y viceversa. Con eso, Leonidas podía disparar esferas de electricidad más grandes y poderosas o truenos más rápidos y potentes. En esta ocasión, usaban el primer método.

Leonidas siguió disparando bolas de electricidad contra los Mechtogan, que retrocedían ante la incapacidad de sus escudos generacionales de protegerlos.

-Aunque una triple combinación es algo sorprendente, están locos al querer enfrentar a tres Mechtogans- dijo Sellon, para de la nada, sentir una gran presión en su cuerpo y mente. Se hinco, con una rodilla tocando el suelo y se llevo una mano a la cabeza, gimiendo de dolor por la presión. -Tal vez controlar a tres Mechtogan sea demasiado para mi- pensó viendo el brazalete que tenía. -Pero si tome el poder que se me permite usar del Dragón Carmesí solo para invocarlos... tendré que esforzarme al limite y pelear. Soy mejor que Anubias, puedo hacerlo. ¡No perderé como él lo hizo!- Pensó con gran determinación, poniéndose de pie. -¡Voy a pelear por la gloria de mi maestro!-.

Los tres Mechtogan volvieron a sacar sus cañones, esta vez apuntando a Leonidas.

-Rayos...- murmuro Camilo. Ahora si tenían toda su atención.

-No tengo miedo. ¡Haré lo que sea para ganar!- Declaro Sellon.

-¡No eres la única que esta dispuesta a ganar aquí, amiga- refuto Camilo.

Zangetsu se puso de pie y gruño.

-¡Poder activado: Resplandor Cósmico!-.

Rockfist, Deezel y Miserak dispararon todos sus cañones, y Zangetsu hizo lo mismo, acompañado del ataque de Leonidas. Los ataques se encontraron a mitad de camino y se produjo un nuevo choque de poder, esta vez más equilibrado.

El choque de poder era tanto que creaba ondas de poder que fracturaban la tierra debajo de ellos. Camilo no lo soporto y fue mandado a volar por tanta intensidad.

-¡Camilo!- Leonidas se distrajo y paro su ataque, ocasionando la ruptura en el choque de poder, ocasionando una explosión que ilumino el campo y atrapo a los Mechtogan.
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(Con Goodwin)

El hombre veía como el Dragón Carmesí brillaba de energía, energía que recibía, no solo de las batallas que ocurren en el Interespacio, sino también por la que generaba Leonidas.

-Cuan maravillosa y densa energía. Es increíble. No se que haces exactamente en Nueva Vestroia, pero sigue así, Sellon. ¡Quiero más!-.
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Después de que la luz se apago, Camilo se levanto con algo de esfuerzo. Tenía algunos rasguños en mano y rostro y su ropa, que lentamente se había desgastado por todo el mes entrenando, comenzaba a tener agujeros al no soportar más.

Intento levantarse, pero cayo inconsciente al suelo.

Zangetsu emanaba humo y no se movía, tal vez por la desconexión entre Leo y Camilo al quedar este último inconsciente o por la explosión. Rockfist y Deezel lo derribaron y empezaron a patearlo mientras Miserak se acercaba a Leonidas.

-¡Zangetsu! ¡Camilo!- Leonidas vio a su Mechtogan y compañero en el suelo, despertando aun más su furia. -¡Pagarán por eso!-.

Sellon veía con una sonrisa pretensiosa como Camilo estaba en el suelo y su Mechtogan era pateado como basura y Leonidas era el único de pie.

-¿Aun te crees valiente? Este es el final para...- pero no termino de hablar al sentir de nuevo un dolor en su cabeza, pero más fuerte, lo que la hizo gritar y caer de rodillas. -Oh no...- sabía que estaba llegando a su límite. -¡Debo acabar con ellos antes...!-.

-¡Ahora te mostraré cuan violento puedo ser, amiga!- Rugió Leonidas, abriendo las palmas de sus garras para mostrar sus garras. Estaba dispuesto a despedazar al Mechtogan pieza por pieza con sus propias garras.

-Espera... Leo...- Camilo, que pudo despertarse por suerte, se levanto con esfuerzo del suelo. -No te enfades... recuerda el entrenamiento... debemos seguir en sincronía-.

El dragón Haos gruño molesto, pero dándole la razón. Habían hecho un gran avance en el control de sus poderes como para que todo fuera a la borda por su furia, un rasgo distintivo y a veces, problemático de su personalidad.

-Como quieras- miro a Zangetsu, que seguía siendo pateado por los otros dos Mechtogan. -¡Zangetsu! Si queremos ganar esto, necesitamos de tu ayuda y combinar nuestras fuerzas- aunque le dolía un poco en el orgullo admitir que necesitaba ayuda, Leonidas había aprendido a reconocer y pedir ayuda con el tiempo.

-Necesitamos tener mente y corazón trabajando en sincronía. ¡Debemos trabajar juntos, como compañeros! ¡Juntos podemos acabar con ellos!- Grito Camilo para que Zangetsu lo escuchara.

-Después de todo, tu naciste de mi energía, ¿no?- Hablo Leonidas. -¡Entonces eres una parte de mi, de nosotros!-.

-Y porque eres una parte de nosotros...-.

-¡Es que tu hogar somos nosotros!- Terminaron los dos al unísono.

Zangetsu atrapo los pies de Rockfist y Deezel.

Los dos Mechtogan intentaron sacarlos, pero el agarre en sus pies era fuerte, hasta que Zangetsu las soltó cuando noto que tiraban con mucha fuerza, ocasionando que los dos Mechtogan se fueran de espaldas hacía el suelo.

-¡Mi creador y su peleador mi dieron vida! ¡Mi lugar es con ellos!- Grito Zangetsu, poniéndose de pie.

Sellon apretó los dientes al notar el cambio que estaba tomando la batalla. -¡Termina con Leonidas, Miserak!-.

El tercer Mechtogan ya estaba de pie frente a Leonidas, pero Zangetsu se interpuso entre él y su creador. Miserak era una cabeza más baja que Zangetsu, pero el tamaño no parecía importarle.

Cuando vio la espalda de Zangetsu, una extraña calma lleno a peleador y Bakugan. Dejándose llevar, cerraron sus ojos y se concentraron.

No sabían lo que estaban haciendo, solo sentían en sus corazones que debían dejarse llevar por este sentimiento.

Por un momento, todos los momentos de crisis pasaron por la mente de Camilo, pero en cada momento en que su vida corría peligro, siempre confío en Leonidas, apoyándose en su fuerza y la confianza que le tenía.

Y para Leonidas era igual. De ser una bestia que quería luchar, a un Bakugan que en el camino para ser fuerte, obtuvo amigos, alguien en quien confiar como un igual. Una familia. Algo que no busco en un inicio, pero que ahora agradece tener.

Ese mismo sentimiento de confianza que ambos se tenían, era transmitido hacía Zangetsu, quien empezó a irradiar una capa de energía amarilla...

Sellon dio un paso atrás, sorprendida. -¡¿Pero que están haciendo?!-.

La Neathiana alzo la mirada al cielo, notando como se formaban nubes de tormenta encima de ellos, algo que solo pasaba cuando...

-¿Es posible que este siendo causada por ellos, cuando pelean los dos juntos?-.

Y en ese momento, los corazones de Leonidas y Camilo se sincronizaron perfectamente con Zangetsu, siendo uno espiritualmente.

-Es raro, esta sensación nunca la había sentido...- pensó Leonidas.

-Pero se siente tan bien, es como si...- pensó Camilo.

-¡Algo se aproximara!- Terminaron al mismo tiempo.

La capa de energía que rodeaba a Zangetsu se disparo al cielo, creando un portal de energía gigante en las nubes de tormenta, del cual empezó a salir una figura mécanica.

-¿Eso es...?-.

-¡Es un Mechtogan masivo!- Termino Leonidas por Camilo.

-No puede ser...- Sellon veía incrédula y con algo de temor, como la figura del Mechtogan masivo salía más y más del portal. -Con la combinación de sus poderes pudieron invocar... ¡a un Titán Mechtogan!-.

-¿Un Titán Mechtogan?- Repitió Camilo.

El Titán Mechtogan salió por completo del portal y aterrizo cerca de ellos. El Titán tenía la forma e imagen de Zangetsu pero más grande, con una gran armadura plateada en vez de negra con toques amarillos en los hombros y antebrazos y ocho hélices en la espalda que colgaban como capa. Su rostro parecía una mascara de Zangetsu, pero de color dorado con una gema en la frente.

Titán Zangetsu rugió y lanzo un rayo de energía amarillo desde la gema de su frente a Miserak, quien se desvaneció al recibir el golpe.

-¡¿De solo un golpe?!- Sellon retrocedió asustada. -¡Sus poderes son increíbles!-.

Deezel y Rockfist corrieron hacía el Titán y lo tomaron de los pies para intentar derribarlo, pero eran como niños queriendo botar a un adulto. Titán Zangetsu los alejo moviendo sus piernas.

-Que increíble...- murmuro Camilo, fascinado por el Titán.

El Titán Mechtogan rugió y abrió la zona de su pecho y su cabeza se estiro hacía arriba, revelando cuatro grandes cañones como los dos que Zangetsu normal tenía en los hombros y disparo a Rockfist y Deezel, que se desvanecieron al recibirlos de lleno.

-No... ¡No!- Sellon cayo de rodillas con las manos en el suelo.

-Parece que ganamos- dijo Camilo con una sonrisa.

-Por supuesto- dijo Leonidas. -Aunque si no fuera por Zangetsu que vino cuando lo invocamos, reconozco que la batalla hubiera sido más difícil- admitió.

-Lo se-.

-Aquí estaré cuando me llamen. Es una promesa- prometió Zangetsu.

Titán Zangetsu se giro para verlos y asintió. Parecía no ser de muchas palabras, pero también era alguien en quien se podía confiar.

Camilo sonrió ampliamente. -Ya somos un equipo, Zangetsu. Tu también, amigo grandote-.

-Hasta la próxima batalla, amigos- se despidió Leonidas.

Zangetsu y Titán Zangetsu brillaron y se desvanecieron al cielo.

-Debo admitir que pelearon muy bien. Felicitaciones- elogió Sellon levantándose. Debe ser digna aun en la derrota, y que perdiera aquí no se considera un fracaso para la misión. -Ahora se porque mi amigo los desea tanto en sus planes, su fuerza y vínculo son únicos, pero aun con esa fuerza, el fin del mundo se acerca-.

Esas palabras alarmaron a Camilo. -¡¿Qué quieres decir con eso?!-.

Sellon sonrió enigmáticamente. Les dejaría con la duda carcomiendo. -Oh~, lo averiguaran antes de lo que piensan. Hasta entonces- su cuerpo empezó a brillar.

-¡Espera!- Leonidas voló hacía ella para atraparla, pero se desvaneció antes que su garra la tomara. -¡Mierda! ¡La maldita bruja escapo!-.

-"El fin del mundo se acerca"- Camilo repitió las palabras de la Neathiana, que sonaban más como una profecía. -Temo que esto sea la antesala de algo más grande...-.
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(Con Sellon)

La Neathiana reapareció en la oficina de Goodwin con su forma humana. Se desplomo al suelo apenas llego, la carga de controlar a tres Mechtogan y su derrota la agotaron por completo, respirando de manera cansada, no podía ni levantarse.

Un brillo más se hizo presente, del cual apareció Goodwin.

-Bien, bien. Hiciste un trabajo más que excelente Sellon. No se como lo hiciste, pero la energía que libero Leonidas fue muy grande, más de la que creí-.

-Sus palabras me hacen feliz, señor...- respondió Sellon. -Pero hay un problema... ahora Camilo y Leonidas no solo controlan sus poderes, sino que también controlar a su Mechtogan... y para empeorar las cosas, también tienen un Titán Mechtogan de su lado- informo con voz cansada.

-Bien- Sellon se sorprendió al ver la sonrisa de triunfo en Goodwin. -Cumpliste con creces tu misión, Sellon. Retírate por ahora y descansa, te necesito en optimas condiciones cuando el momento llegue. Nada de batallas por ahora- le extendió la mano a su sierva, quien la acepto y la ayudo a levantarse, para luego caminar hacía la ventaja.

-Perdone mi impertinencia al preguntar... ¿pero cuál era en verdad el propósito de enviarme? Acaso... ¿acaso quería hacer más fuerte a Camilo y Leonidas?-.

A Goodwin le sorprendió un poco que Sellon cuestionara. Normalmente ella nunca cuestionaba sus intenciones, pero en esta ocasión la debió confundir con sus palabras.

-Supongo que te ganaste el derecho: si. Quiero que Camilo y Leonidas sean los más fuertes que puedan ser-.

-¿Pero porque? Son nuestros enemigos, no le veo el sentido de hacerlos más fuertes, eso perjudicaría nuestros planes- la confusión se notaba en la voz de Sellon.

-Dime Sellon, ¿te acuerdas de la primera pregunta que te hice cuando comenzaste a trabajar para mi?-.

Sellon se extraño que le preguntara eso ahora, pero decidió responder. -Si. "¿Cuál es la mejor manera de derrotar a un enemigo?", ¿no?-.

-Exacto. En ese momento no tuviste una respuesta a esa pregunta. ¿Ahora la tienes?-.

La chica asintió. -: Hacer que el enemigo se destruya a si mismo-.

-La respuesta que recibí a esa pregunta de Anubias fue "aplastar al enemigo hasta acabarlo", y la de Caligula fue "esperar a que el enemigo baje la guardia y matarlo". Las respuestas de ustedes son correctas, pero yo tengo una diferente-.

-¿Cuál es esa respuesta?-.

Ella jadeo.

Los ojos de Goodwin parecían oscurecerse cuando el fondo de su globo ocular se volvió negro.

-Hacer de tu enemigo un aliado-.
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N/A: Hasta aquí el capitulo, que mayormente fue de la batalla de Sellon contra Camilo y Leonidas.

En este capitulo, no solo aparece Titán Zangetsu, sino que también decidí dar un poco de profundidad a Cris y Soon, darles una razón de porque son tan leales a Sellon y acercándonos un poco más al momento donde todo explotara.

El siguiente capitulo será la semifinal del torneo, donde aprovecharé de mostrar otras cosas, como lo que hace Kazarina y como avanza su propio experimento, así como lo que sucedió con Dukhan ahora que es prisionero en Neathia, entre otras cositas.

Una pregunta, de todos mis OCs hasta ahora, sin contar al protagonista, ¿cuál es su favorito?

Sin nada más que decir me despido. Visiten y comenten el resto de mis historias por favor. CHAO.