Lloyd's POV.

Escuchar aquello era extraño. DEMASIADO. Kai nunca le haría éso a Ninjago.

-Eso es absurdo -comenté, poniéndome de pie de un salto-. Kai es nuestro amigo, él jamás le haría éso a su hogar.

-Bueno, es probable, hijo.

"¿¡Probable!?".

-Pero, si es cierto lo que dicen... y Kai está dispuesto a hacer lo que sea por saber qué le pasó a su padre...

Entendí su punto. Cuando estamos desesperados por encontrar respuestas hacemos lo que sea... yo sabía de éso.

Aún así, me rehusaba a aceptar lo ocurrido. Kai no podía volverse del lado del enemigo, aunque, claro, una cosa era segura, él no lo sabía.

Mi papá tomó un pedazo de papel y comenzó a escribir algo en él, lego lo dobló perfectamente y me lo entregó.

-Búsquenla, ella los ayudará -nos dijo.

Sonreí.

-Descuida, papá, encontraremos la brújula antes que ellos.

La sonrisa de mi padre se desvaneció y fue reemplazada por una mueca que ensombreció su rostro.

-Yo me preocuparía más porque fuese Kai quien la encontrara.

Cole's POV.

Nya estaba esperándonos afuera del monasterio. Ya sé veía más tranquila, al menos a comparación a como se encontraba antes. Entendí lo difícil que debió ser para ella recibir una noticia así. En definitiva ella y Kai necesitarían todo nuestro apoyo.

Nos dispusimos a continuar nuestro camino hacia la ciudad, a través del bosque que rodeaba el monasterio de Garmadon. Conforme avanzábamos entre la línea de árboles comencé a sentirme extraño. Empecé a respirar aceleradamente. Algo andaba muy mal. Mis dedos buscaron en la oscuridad. Mis piernas se movieron sin querer. Todos mi interior intentaba gritarme que huyera lo más rápido posible. Podía percibir un malicioso olor en el aire.

Un olor brillante, ácido, asqueroso, que me irritaba la nariz. Era como un ácido que me comía por dentro y me provocaba inseguridad. Un olor que ya había olido antes.

Noté que los demás estaban muy alertas, tensos y erguidos. A excepción de Lloyd, él no sabía todo éso. ¿No lo olía? ¿No lo percibía? Algo se aproximaba. Yo podía percibirlo.

Saqué mi Oz de la espalda y me la vuelta hacia el lugar del que provenía el olor. Detrás de donde se encontraba Lloyd.

Todo pasó muy rápido.

Los ojos desorbitados por la confusión del chico.

Aquella figura negra descomunal detrás de él.

El centelleo de un arma con filo.

Y después... un grito ahogado.

Kai's POV.

Tenía tanto tiempo con la mano apoyada en el cerrojo que ésta se había tornado ligeramente roja de la palma. Aún no me decidía. Una parte de mí quería llevarse la brújula y obtener todas las respuestas, pero otra más se rehusaba. Mei había sido muy amable conmigo, me había dado asilo y me había salvado la vida. Llegué a pensar en explicarle el por qué necesitaba aquella brújula, pero deseché ésa idea casi al instante.

Se escucharon pasos. Corrí de regreso a la cama y fingí que no me había movido. Al cabo de unos segundos, Mei subió con una taza de té. El té me recordó al sensei Wu, y me hizo sentir cierta nostalgia al recordar que me había perdido la navidad con mi familia.

—Gracias —le dije, con un guiño. Mei rodó los ojos.

—Está caliente —me recordó.

Se sorprendió al verme tomármelo de un modo u otro. El calor del líquido recorriendo mi cuerpo era muy agradable y me llenó de energía. Estaba delicioso.

—Sabes, Kai —levanté la mirada hacia la de ojos azules—. No es que me moleste tenerte aquí, pero ¿no quieres llamar a tus amigos?

Un estrépito respondió por mí. Un fuerte ventanal había terminado rompiendo el cristal de una de las ventanas. Me quedé contemplando los cristales rotos en el piso. ¿Que clase de fuerza sobrenatural sería capaz de causar algo así? Mei se puso de pie.

—Mareas, ¿Qué pasa con el clima? —noté un brillo tenue en su bolsillo.

Me puse de pie, con una idea.

—Déjame ayudarte —quizá soné más insistente de lo que quería.

—Okay, como quieras. Sólo ten cuidado, no quiero tener que volver a vendar tus manos.

Me agaché con ella y recogí con cuidado el vidrio, evitando los bordes afilados.

Una segunda corriente de aire arrasó el lugar.

El marco de la ventana que aún quedaba completa golpeó contra la pared, rompiendo el cristal en mil pedazos.

—¡Cuidado! —me puse sobre Mei para protegerla de los vidrios. La brújula se deslizó levemente de su bolsillo y aproveché para tomarla. Nos reincorporamos.

—Gracias, pero sé cuidarme de un montón de vidrios —sonrió.

Yo también sonreí, pero por una razón distinta.

Llevé mis dedos al fondo de mi bolsillo y tanteé los bordes redondeados de la brújula. Era mía, la brújula celestial. Ahora solo necesitaba descubrir qué hacer con ella.

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Hola! Dividí ésto en dos partes por que soy mala :3, pero la segunda ya estoy trabajando en ella por lo que no me tardaré tanto como la última vez 😂 perdonen el retraso. 

En fin, la segunda parte tendrá algo de sangre, so, va a estar con algo de acción (no les diré de quien es la sangre).

En fin mis spinners, ¡No pierdan la máscara!

(Extrañaba decir éso) 😅