Holaaa, vengo a agradecerles a todos por haberme acompañado hasta aquí, estoy super feliz del apoyo que están recibiendo mis historias. Solo era eso, agradecerles por todo. Ahora si ¡A leer a mis nenes Emma y Aidan!

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-¡Aidan, eso no va ahí!

-¡Pero es lo mismo!

-¡No es lo mismo!

-¿Qué mas da que este a la derecha y la izquierda?

-Que si lo pones a la derecha la habitación pierde la paleta y orden de los colores.

Aidan suspira antes de mirarme y negar con la cabeza saliendo de la habitación.

Si, estos somos Aidan y yo teniendo una pequeña diferencia respecto a los colores y orden de los cojines de la cama y los adornos de la habitación.

-¡Aidan! venga, no te enojes.

-No estoy enojado -dice cuando llego a la cocina y lo veo sirviéndose una rebanada de pizza.

-Aidan...

-Cariño lo lamento pero eres muy difícil de seguir, ayer me dijiste que eso iba a la derecha y hoy me dices que va a la izquierda. 

-Lo se, lo lamento mucho -murmuro mirando para otro lado.

-No lo lamentes solo debemos de ponernos deacuerdo con como será esto ¿Bien?, si tu quieres mantener el orden y la paleta de colores, está bien, pero dímelo porque no se exactamente como quieres que se vea nuestra habitación.

-Bien -asiento acercándome y abrazándolo por la cintura.

Si, Aidan y yo hemos conseguido vivir en un apartamento, solo nosotros dos, cada uno paga una mitad y esta muy cerca a donde estudiamos la universidad.

Hace unas semanas que nos mudamos aquí y  recién ayer hemos comenzado a desempacar. Si, lo se, un poquito tarde.

-¿Quieres ver alguna película? -dice sin dejar de abrazarme.

-Si -asiento alzando mi rostro para mirarlo.

-Pues bien, venga vamos a la habitación.

Ambos caminamos hacia nuestra habitación y me acuesto a el lado derecho de la cama, del cual me he adueñado desde que llegamos.

-Hoy la elijo yo -dice Aidan distraídamente mientras enciendo el televisor.

-Está bien -asiento acercándome a el, pasando mi brazo por su cintura y recostando mi cabeza en su pecho.

La película comienza a reproducirse y los dos miramos la pantalla atentos, es algo sobre misterio y terror, no sabría como clasificar la película, se ve interesante pero mis ojos no pueden mas y pesan, se van cerrando poco a poco hasta que me quedo dormida.

Aidan

Noto a Emma muy tranquila por lo que quiero verificar que siga despierta.

-Emma... -no responde- Cariño... -tampoco responde por lo que supongo que se ha quedado dormida, hoy hemos estado todo el día arreglando el apartamento por lo que supongo que es por eso que esta muy cansada, aunque supongo que por otras cosas -mucho mas interesantes a decir verdad- es que también está cansada.

La dejo seguir descansando por lo que apago el televisor ya que la película me ha aburrido y apago la luz de la habitación para que no moleste su comodidad. Me acomodo en la cama, a su lado mientras la siento rodear nuevamente mi cintura con su brazo y poner su cabeza en mi torso. Dejo suaves caricias en su mejilla sonrojada por la presión anterior de la cama y su rostro hasta que yo también me quedo dormido.

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Noto un pequeño movimiento a mi lado y un suave beso en mi mejilla.

-Me tengo que ir a la universidad -claro, los horarios de Emma comienzan mucho mas temprano que los míos, mi novia tiene la fuerza de voluntad para levantarse a las 7 de la mañana y comenzar su día, ya quisiera yo tener esa fuerza de voluntad.

-Vale -abro mis ojos lentamente encontrándome con sus lindos ojos azules- ¿Quieres que te lleve? -pregunto depositando un beso en su labios y sentándome en la cama.

-No te preocupes iré en un taxi -sonríe abrazándome por lo cual imito su acto sonriendo y devolviendo el abrazo dejándonos caer en la cama.

-Quédate un ratito mas -pido depositando besos en sus mejillas y ella ríe.

-Me tengo que ir Aidansito nos vemos mas tarde ¿almorzaremos juntos? -pregunta levantándose de la cama.

-Para la hora de almuerzo ambos estaremos en hora libre así que si, nos encontramos en la entrada de el campus ¿Te parece? 

-Si, está bien -asiente, se acerca nuevamente a mi y deposita un ultimo beso en mis labios antes de salir por la puerta de la habitación no sin antes hacerme sonreír con sus palabras- Te amo, Aidansito.

-¡Yo también te amo! -grito y logro escuchar su suave risa antes que la puerta principal se cierre.

Suspiro con pereza levantándome de la cama y caminando hacia el cuarto de baño con una toalla colgando en mi hombro.

Se me quito el sueño.

Después de ducharme desayuno lo que Emma hizo, hoy le toco a ella preparar el desayuno así que hoy si comeré saludablemente y algo no quemado.

Salgo de el apartamento y subo a mi auto para dirigirme a la universidad. 

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-¿Lista? 

-Sip -responde Emma colgándose su bolso en su hombro y caminando junto a mi hacia mi auto.

Conduzco hasta llegar a el restaurante al que hemos estado yendo desde que llegamos a vivir aquí, ambos pedimos nuestra comida y conversamos sobre como nos ha ido. 

-Mis padres me llamaron -comenta Emma mirándome y sonriendo.

-¿Ah si? -pregunto concentrándome en lo que me cuenta.

Comienza hablando sobre sus padres pero su conversación se termina derivando a hablarme de Andrea, su universidad y otras cosas.

-¿De qué te estaba hablando? -pregunta frunciendo el ceño haciendo que ría un poco.

-Comenzaste hablándome sobre tus padres -le recuerdo mientras tomo su mano por arriba de la mesa.

-Ah cierto... -dice asintiendo y continuando con lo que me contaba-, también mi madre me dijo que tu madre quería hablar contigo.

-Ah si, ya hable con ella hace unas horas.

-Ah vale, lo lamento siento que estoy hablando mucho y no te dejo hablar a ti -dice mientras sus mejillas se tiñen de un ligero color rojo.

-A mi me encanta escucharte, por mi puedes seguir hablando y contándome de todo lo que quieras hablar -y lo digo honestamente, amo escuchar a Emma, amo escuchar su voz y todo lo que tiene para decir.

Se niega a seguir hablando así que le cuento sobre mi día mientras comemos.

A Emma se le ha ocurrido ir a la playa así que apoyo su idea mientras avanzamos por la carretera que dirige a la playa mas cercana de la zona, está a una hora así que no es taaan lejos, ni taaan cerca.

El sol es intenso pero el clima es fresco y se que Emma ama eso, saco las mantas que siempre llevamos en la parte trasera de mi auto y las extendemos en la arena, Emma apoya su cabeza en mi hombro y ninguno dice nada.

Ahora que pienso detenidamente me siento feliz, feliz de haber logrado muchas cosas de las que me propuse, feliz de mantener una relación estable con la persona que amo, buena relación con mi familia y mucho mas.

Giro mi rostro para ver a la hermosa chica que tengo al lado y estoy completamente convencido de que la adoro cada día mas, su sonrisa y todo de ella. Emma tiene ese poder, no se como explicarlo. Tiene el poder de hacer que mis días comiencen alegres y con energía con solo darme una de sus hermosas sonrisas, un simple beso y listo, yo simplemente estoy a sus pies.

El atardecer llega y sigo junto a Emma mirando el mar, el cielo y conversando sobre temas triviales, sonrío al verla acercarse a mi y apoderarse de mis labios, mientras me deja caer en la arena y me abraza por la cintura apoyando su cabeza en mi pecho.

-¿Ya te dije que eres lo mejor que me ha pasado? -pregunto sonriendo.

-No me cansare de escucharlo y también eres los mejor que me ha pasado.

Fin.