Hoy íremos a la playa. Andrea le pedirá a uno de sus amigos que la cubra en el trabajo, aunque su turno es de noche, ella dice que sabe que regresa de la playa con demasiado sueño y no piensa ir cansada a su trabajo ya que una sola falta más y su jefa la echara.

-Bueno ¡Andando! -grita Ethan mientras entramos al auto de Aidan.

- ¿No olvidas nada, Ethan? -pregunta Andrea enarcando una ceja.

-No -responde Ethan mirando hacia sus lados y encogiéndose de hombros.

-Pues yo creo que sí, yo no subiré tu mochila a el auto -dice Andrea subiendo al auto.

-Pero... -se ve interrumpido por el sonido de la radio que acabo de encender, me da una mala mirada mientras baja por su mochila.

Aidan me mira sonriendo y le respondo con una sonrisa llena de entusiasmo.

-Ahora sí, vamos -dice Aidan cuando Ethan sube al auto con la mochila colgando de su hombro.

Mis padres no saben que vamos junto a Aidan, Ethan estuvo a punto de decírselos ya que Andrea y yo olvidamos contárselo antes, luego de haberlo sacado de la conversación con mis padres en la cual con suerte no mencionó nada sobre Aidan, yo se lo conté y pues le dije que no podía decir nada hasta que yo sepa como decírselos.

El camino hacia la playa es un poco largo. Ethan y Andrea van detrás, uno durmiendo y la otra cantando la música que suena en la radio, la canción es realmente pegadiza que me encuentro varias veces tarareándola.

—¿Ya llegamos? —pregunta Ethan con voz adormilada.

—Ya estamos por llegar —le avisa Aidan.

Cuando al fin llegamos a la playa, despertamos a Ethan que lanza un "Estoy harto de vivir" solo porque dice seguir teniendo sueño.

Extendemos una manta en la arena para dejar nuestras cosas ahí y sentarnos.

—Iré al mar —dice Andrea parándose y quitándose su blusa y short para quedar en un lindo traje de baño blanco.

—Yo también voy —concuerda Ethan levantándose de su lugar y sacándose su camiseta y corriendo junto a Andrea hacia el mar.

—¿Quieres ir? -pregunta Aidan mirándome.

—Está bien —digo mientras me deshago de mi camiseta y short para quedar en mi bikini negro y correr junto a Aidan hacia el mar.

Antes de llegar, Aidan me carga en su hombro como un saco de papas y nos deja caer al mar mientras reímos.

Andrea está en la espalda de Ethan tratando de hundirlo mientras él hace grandes esfuerzos para quitársela de encima.

Después de tontear por un rato en el mar decidimos salir a comer algo. Hemos traído algunos snacks para merendar.

La tarde se pasa en risas, relatos y juegos.

Cuando llegamos a su casa, Andrea y Ethan bajan del auto y me dejan sola junto a Aidan, ya se les está haciendo costumbre dejarme en situaciones donde normalmente me pongo nerviosa, muchas de las veces en las que he estado a solas con Aidan termino sonrojada y nerviosa, trato de disimularlo, pero muchas veces no funciona.

—Bueno, eso fue divertido —lo escucho decir mientras suelta una risita.

—Sí, la pasé genial —sonrió — Me tengo que ir, gracias, todo fue muy divertido —digo acercándome para depositar un beso en sus labios.

—Está bien, nos vemos luego, Emma —sonríe.

—Nos vemos Aidansito —me despido bajando del auto.

Han pasado ya una semana desde que Ethan está aquí. Hemos podido balancear los tiempos, entre el instituto, avanzar el trabajo junto a Aidan, salir los cuatro juntos y estar en casa, ha sido un poco difícil, pero se ha logrado.

Andrea me ha pedido que trabaje la noche del sábado junto a ella en la cafetería ya que una de sus compañeras faltara y necesitan que alguien la reemplace solo por ese día, me pagarán y pues no está mal distraerme y salirme de la rutina por un día.

Hemos decidido ir a la feria ya que Ethan tendrá que regresar antes por algunos problemas y no se quiere ir sin antes haber ido.

Nos encontramos en la camioneta de Aidan, lo invitamos y se ofreció a manejar.

Andrea y Ethan están en los asientos de atrás peleando por no sé qué, mientras yo los miro con una sonrisa divertida y Aidan ríe abiertamente.

Al llegar Andrea y Ethan son los primeros en bajar mientras Aidan y yo nos encargamos de asegurar bien las puertas ya que hay demasiadas personas y no queremos ningún incidente.

Al entrar busco con la mirada a Andrea, Ethan o mejor los dos juntos.

—¡Ahí están! —giro mi rostro a la dirección en la Aidan señala.

Nos dirigimos hacia ellos que están comprando tickets para entrar a la montaña rusa.

—Oh no, yo no subiré ahí —digo cuando llegamos a su lado.

—Tarde —responde Ethan sin mirarme —Ya compré los cuatro tickets.

—¿Eh? No, no, no... —no tengo tiempo de seguir protestando ya que Andrea me toma de la mano y me hala hacia la fila para entrar al juego.

Aidan y Ethan se ríen de mí y mi miedo por subirme al juego.

—Vamos, linda —susurra Aidan cuando está cerca mío.

—Ni loca me subo ahí —mascullo dándome la vuelta para salir del lugar, Aidan me detiene y me regresa a la fila con una sonrisa divertida surcando sus labios.

Al subir no está tan mal, solo que me mareo un poco y... mi garganta duele demasiado por haber gritado tanto, creo que a todos estamos igual ya que cuando bajamos de la atracción, Ethan corre rápidamente a por agua, al igual que Andrea, Aidan y yo.